El derecho a equivocarse y el deber de corregirse
Una epifanía: el amor lo vence todo
Ser un “rompecorazones” siempre fue mi mejor pasatiempo. El hecho de venir de una familia con un buen estatus económico me daba una libertad infinita, me permitía seducir a quien yo quería (me daba igual si era una mujer o un hombre) para llevarme a quien quisiera a la cama. Cuando tenía unas buenas copas sacaba mi mejor “arsenal” para conquistar, eso me garantizaba noches enteras de deseo, placer y lujuria infinita; en su más grotesca e indescriptible expresión.
Hace algún tiempo, estaba tratando de ligarme a Lorena, una vieja con unos buenos atributos de pecho y cuando le iba a tocar una parte de sus atributos teniendo unas buenas copas en la cabeza, apreció un tipo quien dijo ser su novio y me rompió “de lo lindo” la cara. Si no hubiera sido por Marc, no hubiera pasado de ese día. Soy Gerardo, y esta es mi historia. Al recordarla no puedo evitar llorar por mis errores, y no dejo de torturarme pensando en quien sería yo si hubiese tenido un buen ejemplo de respeto, amor, afecto y cariño.
Regresando al 27 de marzo de 2005 siendo las 23 horas, Marc actuó como intermediario frente a ese gorila (luego me comento que se llama Leonardo) y me sacó rápidamente de ese asqueroso bar de borrachos antes que se acrecentara el problema generado por mi lujuria descontrolada. Cuando desaparecieron los efectos del alcohol, supe que Marc me había llevado a su casa. Me comento que era enfermero, lo cual me tranquilizó cuando vi que me había colocado una aguja en mi brazo para pasarme líquidos por una manguera. Me explico que lo hacía para que el cuerpo metabolizara más rápido el alcohol y lo expulsara rápidamente del cuerpo a través de la orina.
Al verlo cuando me retiraba esas cosas tuve la oportunidad de verlo por la espalda. Era un tipo agraciado, su cara era de niño bueno y su culo tenía una forma muy excitante. En serio que yo era un puto pervertido y caliente sin remedio. Después que me preparó una sopa para echarle algo de sal al estómago, decidí darle las gracias y lo invité a comer como agradecimiento por haberme salvado el pellejo. Le pedí su número y yo le di el mío.
Abril 3 de 2005: Ese día lo lleve a un restaurante que quedaba en la parte alta de Armenia, me agrado ver sus bellos ojos azules brillando de la felicidad, me irradió un poco de su alegría y no pude evitar como se veía mi bella ciudad. Recuerdo cuando era niño, solíamos viajar por todo Caldas y me maravillaba la hermosura de mi tierra. Mi vida se empezó a ir al caño cuando mis padres decidieron administrar varias empresas en todo el Departamento, me dejaban solo con las empleadas del servicio y eso dio pie para los consejos de las malas influencias.
Me comentó que había nacido en Viterbo y que viajo para hacer su carrera universitaria aquí, que apenas tenía 2 años de egresado y que se sentía muy feliz con su profesión. Yo por mi parte le comente que estaba terminando la carrera de Ingeniería Mecánica, que pronto terminaría la tesis y que vivía solo y sin compromisos. Ese día lo lleve a su casa, y no pude evitar querer alcohol y sexo. Esta asquerosa manía la tuve a los 14 años, por lo que mi presupuesto siempre era para los condones, lubricantes, alcohol, gasolina y moteles. Hoy por hoy me he preguntado cómo demonios no terminé muerto en algún accidente.
Ese día conocí a Salomé y a Edward, un par de pervertidos que se le median a todo en la sexualidad. Conseguimos una pieza de hotel y la pagamos entre los 3, y ya ustedes se imaginaran lo que les hice a ese par. Al otro día, Marc me saludó y hablamos gran parte del día. Tenía el día libre, y no tenía nada mejor que hacer y pues entre clases y libros decidí dedicarle tiempo, pero había algo que no me dejaba tranquilo. Este príncipe me traía mucha calma, lo cual no podía entender muy bien, eso me ponía mucho a pensar.
A los muchos meses, no existía ni un solo día que no habláramos. Siempre manteníamos muy pendientes, siempre nos acompañábamos y el me aconsejaba siempre que dejara el licor, pero siempre que lo intentaba me daba el llamado Síndrome de Abstinencia. Después de eso, me recomendó que fuera a una clínica de desintoxicación. La verdad, estaba harto de todo el desastre de mi vida, así que decidí tomar el consejo de Marc y comencé el proceso de desintoxicación y empezaron a darme mucha terapia psicológica, lo cual me ayudo bastante y me aleje de todo ese mundo perverso. Marc y yo nos veíamos una vez por semana, veíamos películas, cocinábamos, salíamos a algunos lugares juntos.
Era un sueño hermoso para mí, pero cuando me pellizcaba para recordar que era el mundo real, la alegría se me subía aún más al corazón y a la cabeza. Al poco tiempo logré graduarme, y como “cosa rara” mis padres no habían ido a la ceremonia. Solo Marc estuvo allí, me hizo sentir muy feliz y eso era suficiente para mí. Cuando llegamos al carro, Marc me felicitó y me dio un beso. Su cara era la de un niño travieso y yo no pude ocultar mi alegría por más tiempo. Correspondí el beso, y así estuvimos bastante rato hasta que nos fuimos a nuestros hogares, y debo decir que esa noche solo soñé con él.
Teníamos 6 meses de estar hablando, siempre que podíamos nos besábamos, pero ninguno de los 2 se atrevía a ir más allá. No sabía si era amor o simples ganas. Quería verlo y comentarle esa incertidumbre, así que le marque a su celular y me contesto alguien más. Ese día sentí que el mundo se caía a mis pies cuando me dijeron que se había resbalado en el suelo mientras tenia turno en el hospital donde trabajaba. Afortunadamente pude conseguir que me dijeran donde estaba, y allí el personal de urgencias me entrego sus pertenencias para que se las cuidara, y pues como nadie estaba a su cargo, decidí estar al pendiente suyo.
No había día que no fuera a ver como seguía, lastimosamente había caído en un coma como producto de su caída, los médicos estaban sorprendidos, pues según les entendí, un trauma como él lo tuvo era para quedar muerto al instante y no haber sobrevivido. Era un milagro por lo que los médicos lo dieron todo por salvarle la vida. Yo por mi parte recaí en la depresión, las cantinas volvieron a ser mis madrigueras. En el día mantenía pendiente de Marc y de noche me emborrachaba y me cogía todo lo que pasaba cerca de mí.
Mi desesperación era infinita, ningún trago ahogaba mis penas y ninguna persona me llenaba tal como Marc lo hacía. El sexo y el licor volvieron a dominar mi alma. Besaba miles y miles de personas, pero nunca dejaba de pensar en mi príncipe. Muchos y muchas pasaron por mi entrepierna, pero el alcohol engañaba mi mente, pues me hacía ver a Marc en cada vez que tenía sexo como loco, muchas veces gritaba su nombre mientras gemía. Cuando lo hacía, mis amantes se retiraban o me echaban, lo único que hacía era llorar como un niño.
Un año después de que Marc había quedado en coma, un angelito se me apareció en un sueño. Fue algo hermoso, pero doloroso para mí: me mostró a Marc junto a mí, nos mostró juntos como una pareja, me mostro cuando lo hacía mío, pude ver que hacíamos una vida juntos, podía verlo como el dueño de mis besos, mis abrazos y de mi vida entera. El angelito me hizo entender que lo amaba como a nadie más en mi vida, pero aún recuerdo sus palabras, más que palabras era una bendición: “ Gerardo, Marc y tú aún tienen una misión que cumplir, el no morirá y regresara a este mundo para estar contigo, y tu saldrás de la maldición que te tiene preso, serás alguien grande en este mundo y motivo de orgullo para tu amor ”.
Reinicié el proceso de desintoxicación, con más fuerzas que nunca. Comencé una fuerte e intensiva terapia psicológica y psiquiátrica para reforzarme como persona, para ser más fuerte ante las adversidades y no dejarme vencer por nadie. También me hice tomar las pruebas infecciosas para verificar si estaba bien, y para mi fortuna salí negativo en hepatitis y VIH, lo cual me tranquilizo bastante y me impulso a seguir adelante con mi rehabilitación. Siempre visitaba a Marc cada semana, su belleza se veía marchita por esos meses en esa fría cama, cada vez que iba le llevaba flores a su habitación, perfumaban muy bien el lugar y la trabajadora social del hospital me acompaño mucho en esa difícil situación. Un día, fui al hospital y me senté un rato a su lado, sujetando su hermosa mano. Lo que le dije aquel día, fue algo mágico:
“ He cometido muchos errores mi príncipe, la vida fue injusta desde que nací, el dinero y la apatía gobernaron mi alma hasta que te conocí. Bello Ángel del Amanecer y del Atardecer, me has regalado la oportunidad de ver el mundo con el corazón y con el alma. Nadie más que tú me enseñó a sentir, a amar, a desear de verdad y a tener un motivo para luchar. No tuve el valor de reconocer mis sentimientos, y me duele pensar que te puedo perder en cualquier momento. Perdóname por no serte sincero, perdóname por traicionar este bello sentimiento, y perdóname por haberte abandonado tanto tiempo. Fue mi dolor el que me hizo escapar, pero es mi amor por ti el que me hizo regresar. Regresa pronto mi príncipe, por favor ”
Manolo Otero – Vuelvo a ti: https://www.youtube.com/watch?v=fAjCweJwnhk
♫♪ Vuelvo a ti
Después de tanto tiempo
De tantos desengaños
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Vuelvo a ti
En busca de un consuelo
Que me trae tu recuerdo
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Vuelvo a ti
Vencido y derrotado
Casi desesperado
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Vuelvo a ti
Creyendo ser gigante
Yo estúpido, ignorante
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Vuelvo a ti
Después que he comprendido
Que fui como un chiquillo
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Vuelvo a ti
Lo tengo decidido
Si es que aún no te he perdido
Vuelvo a ti ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
♫♪ Otros caminos quise andar
Y otros besos pude dar
Pero nunca los besos tuyos me hicieron olvidar ♫♪
Ese día, por fin comprendí que los milagros existían. Marc fue empezando a reaccionar poco a poco, sentí como sus fríos dedos apretaban mi mano y sentía su respiración mientras sus bellos y brillantes ojos le daban la armonía a su bello rostro de niño. Ambos lloramos por la alegría de vernos, no había espacio para las palabras, nuestras bocas danzaban al compás de nuestros besos. Inmediatamente eso ocurrió, llame al médico de turno quien ordenó que se iniciara inmediatamente un tratamiento de rehabilitación integral para que el pudiera comenzar a valerse por sí mismo. Fueron 6 largos meses, por la caída había quedado lesionado en muchas partes, poco a poco pudo caminar por sí mismo y ya no necesitaba ayuda de nadie.
Al séptimo mes, a mi bello príncipe le dieron salida. Lo llevé a mi casa para que terminara de recuperarse, lo cuide como a mi propia vida. Me volví su luz y su sombra, me volví todo para él. En una noche, le confesé todo lo que pasé y todo lo que sentía por él. Para mi grata sorpresa, él ya me había perdonado y mi amor era bien correspondido. Él me amaba tal como yo a él, ambos reímos y lloramos, nos besamos, nos acariciamos y nos unimos en uno solo. Llevaba mucho tiempo en abstinencia, y yo era su primera vez. Fue delicioso, nunca antes había gozado tanto en la intimidad, parecía que leía mis deseos, y yo le daba lo que él quisiera. Lo repetimos 7 veces más esa misma noche, quedamos exhaustos pero con la satisfacción de amarnos hasta el límite y más allá.
Hoy por hoy trabajo en una dependencia de la Gobernación de Caldas y mi bello príncipe fue nombrado enfermero jefe del hospital de Pereira. Ambos iniciamos de cero, pero cada noche, la luna sabe cómo nos entregamos en cuerpo y alma. Ya vivimos en Pereira, estamos en el corazón de Caldas, y este corazón es el guarda de nuestro amor, tan ardiente como el fuego mismo. Mi bebe, te amo como no tienes idea. Te amo más allá de lo que mis palabras pueden expresarte. Tuyo para siempre, Gerardo.
- Pereira, Caldas. Abril 30 de 2015.
Sergio Esquivel - Quiéreme: https://www.youtube.com/watch?v=txT61PS0cV4
♫♪ Quiéreme, bésame, quédate junto a mí
Quiéreme (no dejes que se muera), bésame (el fuego que me quema)
Quédate (tu enciendes esta hoguera), junto a mi (alíviame esta pena) ♫♪
♫♪ Ya no quiero pasar otra noche alejado de ti
Despertar abrazando otro cuerpo, otro amor, otra piel
Ya no quiero beber de otros labios la miel
Ya no quiero querer nada más por querer
Quiero atarte a mi lado y meterme en tu vida y tu ser ♫♪
♫♪ Quiéreme, bésame, quédate junto a mí
Quiéreme (no dejes que se muera), bésame (el fuego que me quema)
Quédate (tu enciendes esta hoguera), junto a mi (alíviame esta pena) ♫♪
♫♪ Ya no puedo vivir solamente pensando en tu amor
Los amigos se extrañan de verme cambiado por ti
Ya no quiero volver a mirarte partir
Ya no habrá despedidas, te quedas aquí
Hoy te voy a robar a pedazos tu amor y tu ser ♫♪
♫♪ (Quiéreme) No dejes que se muera, (bésame) este fuego que me quema
(Quédate) tu enciendes esta hoguera, (junto a mi) alíviame esta pena ♫♪
♫♪ (Quiéreme) No dejes que se muera, (bésame) este fuego que me quema,
(Quédate) tu enciendes esta hoguera, (junto a mi) ooohhh ♫♪
♫♪ (Quiéreme) No dejes que se muera, (bésame) este fuego que me quema
(Quédate) tu enciendes esta hoguera, (junto a mi) alíviame esta pena ♫♪
Hasta aquí esta corta historia. Hare algunas aclaraciones:
Conozco perfectamente la historia del Departamento de Caldas, soy un hijo de Caldas y conozco que desmembraron a mi pueblo en el año 1966. En mi historia, coloque a Caldas como la tierra unida de siempre, eliminando completamente la existencia de lo que hoy Pereira y Armenia bautizaron como Risaralda y Quindío como parte del sueño de la reunificación. Ojala Caldas no sea la Corea colombiana.
Como siempre, este es un proyecto que muestra la vida tal como es. El amor a pesar de las adversidades, es la muestra genuina de amor verdadero. Agarren la felicidad y jamás la dejen ir. A veces la vida no sabe perdonar a quienes se equivocan, por favor no tienten a la suerte.
Como siempre, ya ustedes tienen mis cuentas para contactarse conmigo (Facebook, Hotmail, WhatsApp, etc.). Por favor, califiquen honestamente y a consciencia la historia, y si la van a calificar mal dejen en los comentarios en que me equivoque y en que puedo mejorar. Críticas constructivas, por favor. Yo entiendo que puedo equivocarme, por lo cual les pido sinceridad al calificar y al comentar. Las críticas destructivas serán reportadas a TodoRelatos, puesto que esta es una comunidad donde TODOS tenemos nuestro lugar, y eso es algo que se debe respetar y hacerse respetar. Feliz día a todos, y gracias por llegar hasta aquí.
- Nexus