El demonio de nombre extraño (6)

CASA NUEVA - EQUIPO DE INVESTIGACIONES - CORRECTIVO. (6).

Que me despertaran a las nueve de la mañana fue un suplicio pero me obligué a sobreponerme y el agua caliente del baño hizo lo suyo. Luego de esto, cambiado y bien vestido aparecí en el loft, ya me estaban esperando, la africana Siara vestida con un impecable traje sastre gris de chaqueta y pollera a media pierna con unos finos zapatos de tacos altos que rondarían los diez centímetros, tomaba un café junto a la barra del bar, me dio los buenos días con un perfecto Español y sus ojos de pantera recorrieron todo mi cuerpo, sus pensamientos me dieron una aprobación general.

También estaba Andrey, el ruso, Iker el vasco y Blago, el croata. El Doctor Chao, recién llegado, me alcanzó una agenda que había confeccionado para visitar las instalaciones de dos empresas, la ya conocida el primer día y otra que funcionaba en el otro extremo de la ciudad. No dudaba de él y tampoco me daba motivos pero la agenda la habían confeccionado en su oficina con los detalles de todo lo que íbamos a recorrer.

Estudié lo que nos habían agendado para hacer y le pregunté quien había confeccionado ese itinerario. Me contestó que lo había hecho la secretaría conjuntamente con uno de los Abogados del Estudio, lo miré y sintió un ramalazo de temor, entonces le hablé:

*-Mire Doctor, yo sé de su buena voluntad y que ayudándome le estoy restando tiempo para su trabajo específico, pues bien, yo lo voy a liberar de eso, los movimientos que tengamos desde ahora en adelante surgirán exclusivamente desde nuestro grupo y serán Carlos y Patricia quienes se ocupen de ello.

*-Como guste Gonzalo pero le aclaro que la gente que lo hizo es de extrema confianza, -me lo dijo no muy convencido-.

*-Si usted lo dice… pero le voy a proponer algo… Ya sabe que yo pretendo hacer limpieza de directivos en cada una de las empresas que visitaré, con el Estudio Jurídico que usted dirige inclusive y no me importan las “pataletas” que puedan surgir, pues bien, voy a obviar el paso por su Estudio en deferencia hacia su persona y porque ya sé muy bien como es. Para ello le aviso que no voy a cumplir esta agenda, yo no la voy a cumplir, en parte la va a cumplir usted por mí, diríjase a estas empresas de las cuales conoce el movimiento y si surge que me estaban esperando con florituras para “dorarme la píldora” regrese a su Estudio y haga la limpieza pertinente por mí porque eso indicaría que se ha filtrado información y hay gente allí que no merece su confianza. Haga la limpieza necesaria sin titubear y si con algunos tiene dudas, el equipo de Investigaciones se ocupará de dilucidarlas. No me falle Doctor porque su cabeza también está en juego.

*-No tenga dudas, ya me voy a poner a eso.

El Abogado estaba pálido, sabía que yo no jugaba con esto, de todas maneras, lo que él no sabía es que yo me reuniría con los que quedaban para “escuchar” lo que pensaban. Le pregunté si me había averiguado lo de la casa y me contestó que había dos propiedades que podrían ser consideradas como posibles aunque yo tenía que dar el visto bueno, me dejó las direcciones y se retiró diciéndome que no hablaría con nadie del Estudio y se movería sólo hasta las empresas que tenía en agenda. Estaba preocupado porque si yo tenía razón debería desprenderse de personas de su confianza y eso nunca es agradable por el engaño que conlleva.

Carlos lo miró a Chao cuando se iba y pensó, “pobre Doctor, a Gonzalo no se le escapa una y si se lo dijo es por algo”. Yo giré la cabeza para mirarlo a Carlos y éste bajo los ojos como pidiendo disculpas. Mientras tomaba el café que me había servido una muy feliz Zulma, conversé con quienes me acompañarían. Primero iríamos a ver las casas para ver si podíamos encontrar alguna que cumpliera con nuestras expectativas y después iríamos a la empresa de Seguridad donde estaba seguro que nos encontraríamos con problemas… “Veremos allí que solución le encontramos” opinó Siara y era lo más lógico, no se podía actuar hasta saber cómo era el problema.

En las intimidantes camionetas negras (igualitas a las de las películas, aunque éstas verdaderamente brindadas) viajaba Siara en el asiento delantero, Andrey conducía y en la que nos seguía lo hacía Iker conduciendo y Blago de acompañante, para salir del paso las comunicaciones las hacíamos con Handy porque no habían llegado los equipos inalámbricos.

La primera de las casas que fuimos a ver era un “chiche” a escasos diez kilómetros de la capital, estaba ubicada en un terreno de cinco mil metros cuadrados, es decir media manzana pero no tenía muro perimetral y la casa no parecía tan grande, la recorrimos observándola desde la calle porque nadie salió a atendernos, la descarté de inmediato porque no me pareció adecuada.

Distinto fue con la otra que vimos, estaba ubicada en una localidad a unos veinte kilómetros de la capital y a diez kilómetros de un pequeño aeropuerto que tenía denominación de internacional, lo que nos podía venir de parabienes para cuando tuviésemos que viajar. El terreno ocupaba dos manzanas cortando calles que se continuaban después de los doscientos metros y tenía un muro perimetral de tres metros de altura con un portón de rejas alto como la pared que lo sostenía, una casita de dos habitaciones y baño para la custodia y un asfalto que te llevaba hasta la casa, otro para salir y una pequeña rotonda en el interior.

La casa en sí tenía dos plantas y doce habitaciones grandes repartidas en planta baja y planta alta, sólo cuatro de ellas no tenían baño incorporado pero había dos baños más para el personal de servicio, balcón terraza rodeando todo el inmueble y un mirador que era una habitación más, las demás dependencias estaban todas en la planta baja, la cocina al costado y un living-comedor muy amplio con varias columnas de un grosos mediano, el garaje era enorme y podían entrar seis camionetas en él, cuatro muy cómodas. El sótano perfectamente ventilado y mantenido abarcaba casi la mitad de la casa y se accedía a él por medio de una escalera protegida por una puerta desde el interior del garaje y otra escalera similar desde el living. Este lugar tenía un gran sitio, amplio, como para ser usado como bodega y luego de un pasillo había ocho habitaciones chicas de 3 x 3 metros que parecían haber sido celdas.

Afuera, al costado de la casa había una pileta de natación rectangular de unos 12 x 7 metros con solárium y equipos de llenado y extracción ubicados bajo tierra al que se accedía al trasponer una puerta de rejas de una construcción chica y descender unos cinco escalones. “Parece prostíbulo de la ex zona rusa con sótano para Sado y otras cosas” dijo Siara, Andrey estuvo de acuerdo y dijo en ruso, “bien expresado Siara, eso parece”… El empleado de la inmobiliaria que nos mostró la casa me lo confirmó, no dijo nada pero pensó, “me recomendaron no decirles que alguna vez funcionó como prostíbulo porque se puede echar a perder la venta”, entonces le hablé en voz alta…

*-La propiedad me interesa pero esto funcionó como prostíbulo y me parece muy caro el precio, tengo que gastar mucho en refaccionar varias cosas, habría que llegar a un arreglo que me sea conveniente y no me diga que no lo era porque si lo busco en Internet seguro que lo encuentro.

*-Es verdad señor, antiguamente funcionó como prostíbulo que regenteaba una señora extranjera, luego lo tuvieron un tiempo los hijos, el negocio ya no estuvo permitido por la prohibición y para dos familias sin hijos era todo muy grande y difícil de mantener.

*-Se lo voy a decir clarito me interesa y le ofrezco algo, no insisto con la rebaja y pago de contado en Euros con transferencia bancaria pero la quiero ocupar de inmediato, consulte para hacer un boleto de compra venta con autorización para ocuparla, luego ustedes se ocupan con mis Abogados por el tema de la escrituración.

Llamó por teléfono a la inmobiliaria, le planteó las exigencias y me pasó el celular para que hablara directamente con el Martillero dueño de la inmobiliaria, llegamos a un arreglo y al preguntar como pagaría le pasé los datos de mi tarjeta de crédito, mi nombre completo y el número de mi documento de identidad, además le dije que cobrara el precio fijado más los gastos que me tocaban abonar a mí y lo detallara en el boleto de compra venta. Seguramente en ese período de conversación cargó los datos de la tarjeta y me preguntó:

*-Señor, ¿usted me está dando los datos de una tarjeta de color fucsia?, porque si es así, para esta cantidad voy a necesitar su clave personal.

*-Efectivamente, es una tarjeta fucsia, ya se habrá dado cuenta que no hay problemas de fondos, ni es “lavado” porque es una transacción bancaria, si usted se llega hasta aquí con los papeles pertinentes, firmamos, me quedo con las llaves y le habilito el código para que ustedes cobren el importe solicitado.

*-Fantástico, deme veinte minutos y estoy allí con todos los papeles y las autorizaciones.

Mientras esperábamos al Martillero, yo me quedé un rato en el solárium bromeando con el vendedor porque no me habían ofrecido ni una gaseosa y los muchachos y Siara hicieron un relevamiento de seguridad y anotaban posibles modificaciones y lo que se necesitaba adquirir y colocar en equipos de cámaras de seguridad, monitores, sensores de movimientos, cerraduras automáticas, etc. La lista era larga pero no dejaron nada librado al azar, después se vería lo que querían instalar Cielo y Gisela.

Media hora después llegó el Martillero con toda la papelería y otro tipo que se presentó como Abogado de los vendedores, firmamos de conformidad y le activé el código para hacer la transferencia. No pensaron ninguna trapisonda y se despidieron la mar de contentos. Ya teníamos la casa y había que trabajar contra reloj para ponerla en condiciones y mudarnos a la brevedad. Me quedaba claro que las empresas y las familias tendrían que esperar unos días más, ahora me era imperioso poner todo en condiciones para poder operar con comodidad.

Mientras volvíamos al loft, conversábamos en la camioneta con Siara y Andrey sobre la importancia de tener un lugar dónde nadie podía meter las narices y todos se sintieran más que seguros. Yo pensaba en decirle a Carlos que contratara a una empresa de servicios para que, a todo trapo ordenaran y asearan toda la propiedad y la mantuvieran limpia viniendo cada tres o cuatros días, además del personal de limpieza necesitaríamos, pintores, electricistas, cerrajeros, plomeros y hasta dos jardineros, sin olvidarme de veinte hombres fijos para la seguridad con dos o tres encargados, más todo lo que se me escapaba.

No era tan sencilla la cosa, no era tener dinero y sentarse a soplar y hacer botellas, ¿se podría?, claro que se podría pero a los treinta y pico, cargado de Poder y dinero o con el Poder que te da el dinero, sin sueños, sin ganas de ser productivo para uno mismo y para los demás, sin rebelarse ante lo que se hace mal y hace mal a otros, convierte al tipo “rico” en un pobre idiota cargado de taras, en un infeliz que quiere mostrarse y demostrarse ante los demás y sólo demuestra que su existencia no tiene razón de ser.

Yo no quería eso para mí, al único al que le quería demostrar que podía estar bien consigo mismo era al tipo que encontraba todas las mañanas delante del espejo, aunque en ese momento me sentía un poco superado por todo… “Gonzalo, no desesperes, lo estás haciendo muy bien, prepararse para que todo funciones bien es lo más engorroso, luego se hace todo más fácil. Después de mucho tiempo puedo decir que estoy orgulloso del portador”…

Me sentí mucho mejor al escuchar al YAOGUAI, sólo me quedó mover la cabeza asintiendo y sonreírme, no podía ponerme a hablar sólo como los locos delante de los dos custodias. Al regresar, en el loft nos esperaban todos, Zulma había preparado un almuerzo exquisito para todos los presentes, éramos quince y cada uno de ellos me entregó firmado su respectivo acuerdo de confidencialidad, le pregunté a Cielo si había novedades respecto a los equipos…

Me contestó que ya había contactado al vendedor y que incluyendo a los equipos celulares con sistema satelital, cinco de los más modernos ordenadores con capacidad ultra y monitores, más tres ordenadores portátiles, similares a los usados por el F.B.I. y el Mossad, mesa-monitor táctil de 2 x 1, equipos de micrófonos, intercomunicadores inalámbricos, conexiones satelitales y accesorios implicaba un gasto que oscilaba en los trescientos cincuenta mil Euros que había que satisfacer en efectivo en el acto de la compra (Cielo no lo decía pero sentía una excitación tremenda cargada de adrenalina por todo lo que me contaba, excedía incluso lo sexual, Gisela estaba igual).

Pregunté cuando se podría retirar todo ese material y que tanto bulto implicaba, contestó que la totalidad de ellos se podría trasladar en una de las camionetas pues todo venía en cajas que había que ensamblar. Le mostré la lista que habían confeccionado Siara y Andrey con los equipos de cámaras, sensores y monitoreo necesarios para la casa. Ella estaba segura de poder conseguir todo con el mismo proveedor, sólo hacía falta avisarle telefónicamente pero el efectivo era esencial.

Me levanté y fui hasta mi habitación, saqué de la caja fuerte un total de seiscientos cincuenta mil Euros que coloqué en un bolso de mano y guardé las carpetas con los contratos firmados. La previsión de Chao haciéndome sacar cinco millones para eventuales gastos fue fundamental. Cuando regresé al loft le entregué el bolso a Cielo diciendo…

*-Allí hay seiscientos cincuenta mil, terminamos de almorzar y te vas con Gisela, Siara y Kaila a adquirir todo el material necesario, Roberto y Danny van en otra camioneta de apoyo y por si hace falta lugar para cargar, no intervendrán en la transacción. Siara, Kaila, esto es como una compra venta de drogas, Cielo y Gisela controlan la mercadería, no hagan ostentaciones pero si ven algo raro se “cargan” al que sea con limpieza total, ¿de acuerdo? Es mucho dinero sobre la mesa y nunca falta algún idiota que se cree más “vivo” que los compradores. Cielo, Gisela, si algo sale mal obedezcan a pie juntillas con los que les pidan u ordenen las chicas, si todo sale bien fíjense de adquirir cualquier otra cosa que necesiten y dejamos esa puerta abierta para lo sucesivo.

No pude menos que sonreírme para mis adentros, Cielo tuvo un sobresalto tremendo ante mis palabras aunque trató de sobreponerse rápido y pensó, “esto es como jugar en un club de barrio y de la noche a la mañana te toca tener que salir a jugar para un equipo de las grandes Ligas”, Gisela en cambio, ni se mosqueó, el “no hablar de más” pesaba en su razonamiento pero apretó fuerte la mesa con una de sus manos y tuvo una especie de orgasmo que se podría catalogar de “adrenalítico”. Salvado ese tema, las dejé que siguieran comiendo y me dirigí a Carlos y a todos los que no sabían.

*-Vayan sabiendo que adquirí una casa que nos servirá de vivienda y centro de operaciones. Carlos, hay que contratar con urgencia a una empresa de servicio, de la mejor que haya en plaza para que se ocupen de la limpieza, pintores y pintura donde sea necesario, albañiles para adaptar algunas habitaciones, cerrajeros para colocar cerramientos nuevos, jardineros, plomeros para que todo funciones a la perfección, incluso para cambiar los sanitarios y armar un sauna, electricistas para que el servicio no tenga problemas y pasarlo a la alimentación trifásica, además hay que comprar un equipo generador grande para que actúe ante cualquier falla del sistema eléctrico comunitario, todo esto para “ayer” y sin explicaciones a nadie.

*-Zulma, tendrás que armarte la cocina de tus sueños con todos los accesorios que quieras, tenés carta blanca para ello, Patricia y Virginia, se encargarán de la compra de todos los muebles necesarios para las dependencias y las habitaciones, ¡por favor!, camas grandes y cómodas, quiero que los cinco, porque van a ir con Iker para que les brinde movilidad y seguridad, conformen un equipo que en ocho o diez días tenga todo listo. Zulma y Carlos, les hago entrega de una extensión de mi tarjeta de crédito para que hagan el gasto que sea necesario y para que puedan retirar efectivo de cualquier cajero automático, no escatimen gastos y no me pregunten en que pueden y/o deben gastar, si es posible, pónganse en movimiento no bien terminemos de almorzar.

Cuando dábamos los últimos bocados yo notaba las urgencias de todos para cumplir rápidamente con sus cometidos. Le pedí a Gisela que antes de irse me alcanzara las carpetas con los datos de los posibles integrantes del Equipo de Investigaciones y con todo en mi poder me reuní en el despacho con Andrey y Blago para evaluar a los candidatos.

Me encontré con el problema del tema del idioma para que pudieran leer y eso me lo solucionó Raúl alcanzándome un par de ordenadores portátiles donde cargó los mismos datos que los que tenía en las carpetas pero ahora con la posibilidad de las traducciones al croata y al ruso o directamente al Inglés porque ambos hablaban ese idioma. Andrey leyó y lo primero que preguntó fue, para qué trabajo se necesitaría a estos hombres y mujeres.

*-Es muy simple, ellos tendrán que efectuar las averiguaciones pertinentes y desmenuzadas de todo aquel que se le requiera, familiares, amistades, amantes, gustos sexuales, ingresos, egresos, testaferros, escuchas telefónicas, etc. todo quedará registrado y nosotros procederíamos a actuar luego con toda esa información, creo que con esto nos evitamos estar en la misa y en la procesión y no distraer recursos.

*-Bien, nos alivia muchísimo pero, ¿cómo actuarían en el plano internacional?

*-Se puede averiguar muchísimo, más de lo que se cree por medio de una base de datos adquirida o hackeada y cuando falten algunos datos se contratarán agencias de detectives o gente de Organismos de Seguridad de otros países, los nuestros funcionarán con una cobertura de Agencia de Detectives privada y nada los relacionará con nosotros, hasta la información que nos pasen será encriptada y desfigurada con nombres de distintas empresas-clientes.

Con ese panorama explicativo era más fácil abocarse a lo que se pretendía y luego de un par de horas elegimos a nueve integrantes o posibles integrantes porque yo quería “escucharlos” y daría la última palabra al respecto. Eran cuatro hombres y tres mujeres un Jefe-Encargado al frente y un segundo al mando. Los cité personalmente y por teléfono a cada uno para las ocho de la noche, estaban esperando mi llamado y los atendería en uno de los departamentos del octavo piso.

De paso llamé por teléfono a Chao para pedirle que activara el tema de la Agencia de Detectives haciendo que funcionara como una empresa de Sociedad Anónima independiente. Me puso muy contento saber que el Abogado ya tenía esa empresa activada como tal ante los Organismos pertinentes y con domicilio en un semipiso céntrico que pertenecía al Estudio Jurídico. Le agradecí la celeridad para actuar y me contestó con voz apesadumbrada…

*-Ojalá fuera tan fácil todo, necesitaría una ayuda suya y de aquel que lo “acompaña” en su interior para solucionar varios problemas aquí.

*-¿Qué es lo que sucedió?, lo noto un tanto apesadumbrado, tanto que incluso está hablando de algo que no se puede ventilar telefónicamente.

*-Tiene razón, por favor, por favor, le ruego me disculpe, estoy un tanto desfasado, sucede que usted no estaba para nada equivocado en sus apreciaciones y he sido un soberbio porque llegué a dudar de lo que me decía.

*-No se preocupe por eso, ya me había dado cuenta, sólo quería que lo experimentara por usted mismo. ¿Qué pasó en las empresas?

*-Pasó que estaban muy atentos con todo “aceitadito” y cada Director con su área inmaculada y esperándonos tal cual estaba explicitado en el informe que debería ser sólo para usted. Les dije que no sabía cuando realizaría esas visitas y volví al Estudio, allí despedí a mis dos secretarias y le hice correr la renuncia a uno de mis colaboradores más cercanos porque “vendieron” esa información detallada. Ahora tengo una crisis de confianza, no creo en nadie de los que me rodean.

*-Relájese y vuelva tranquilo a su casa, en el Estudio debe estar todo alborotado y van a cuidarse bien como para hacer algo mal. Mañana no aparezca y véngase para acá, lo voy a llevar a ver la casa nueva que compré y le prometo que pasado mañana me aparezco en el Estudio, estoy seguro que “mi interior” me sabrá decir quiénes son de confiar o no.

*-Gracias por escucharme señor Gonzalo, mañana estaré por allí.

Corté la comunicación con el Doctor Chao justo en el momento en que salían los que se irían a la casa nueva e ingresaban, Kaila y Siara con su seriedad habitual, Cielo con una cierta palidez evidente y Gisela totalmente alborotada detrás de ellas lo hicieron Danny y Roberto preguntando si bajaban las cajas, les contesté que sólo había que bajar las cajas de los celulares y las Tablet u ordenadores portátiles. Después me giré hacia Kaila y le pregunté:

*-¿Qué pasó con el tema del muerto?, todo lo demás es evidente que salió bien. -La cara de sorpresa de las chicas fue evidente-.

*-Uno de los pandilleros, que estaba bastante drogado, se confundió conmigo y tuve que llamarlo al orden, nos pusimos con Siara delante de las chicas y le dije al jefe que si no ponía en su lugar a sus “empleados” nos retirábamos y no se realizaría ningún negocio, el tipo que tenía toda la mercadería preparada, no lo dudó, sacó una pistola y le pegó un tiro en la frente al pandillero que estaba quejándose en el suelo. Luego, cuando Cielo se calmó compramos todo lo necesario y otras cosas más que estimamos convenientes, anteojos y colgantes con cámaras diminutas, un par de visores de largo alcance. Cielo y Gisela le dejaron dicho que le pediría otras cosas más adelante.

La explicación fue concisa y concreta, casi seca, después me dirigí a una Cielo que aparte de preguntarse, “como sabía lo del muerto”, algo que se preguntaron todos, le dije:

*-Cielo, vos sos demasiado buena y confiada y cuando se juega en las grandes Ligas hay que ser muy precavido, a todos los demás les digo que no necesito ningún micrófono para enterarme de las cosas. Ahora bien, visto que ya están todos los equipos, vayan los seis hasta la casa nueva y descarguen todo allí. Cielo, Gisela fíjense cuál va a ser el mejor lugar para poner los equipos, decidan si es preferible el sótano o la planta alta, se hará acorde a la comodidad de ambas y a la seguridad del equipamiento. Por ahora van a dormir en los departamentos que tienen acá, tómense su tiempo para decidir lo de la casa y luego vayan a cenar afuera.

Se me presentaba un problema con Cielo y Gisela. Había elegido a una para que, eventualmente, pudiera trabajar con nosotros en alguna misión de campo y a otra para que hiciera de soporte en un control central pero, el modo de pensar y actuar de las dos me llevaba a pensar que había equivocado sus roles. El interrogante me lo había planteado al “escuchar” pensar a Gisela mientras Kaila me contaba lo del pandillero muerto…

*-¡Pufff!, dice que se confundió con ella, claro que se confundió y feo porque le tocó el culo y le pasó el brazo por la cintura, no sé como hizo creo que nadie vio el movimiento pero el ruido de sus dedos al quebrarse y la rotura del brazo del tipo no me lo olvidó más. Después creo que la frialdad y la determinación que le demostró al Jefe diciéndole que no se haría el negocio, lo decidió a matarlo al estúpido para congraciarse o por temor a ella. ¡Mierdaaaa!, le dió un tiro sin decir agua va, ¡qué “nenes”, otra que película!, creí que Cielo iba a vomitar y aunque me temblaban hasta las pestañas creo que aguanté bien.

Lo que pensaba me demostraba que tenía otra “pasta”. Como fuere, decidí esperar a ver como se desarrollaban los acontecimientos. Luego de un rato en que me tomé unos mates, me avisaron desde la Seguridad en el hall que ya habían llegado las personas que esperaba, les pedí que los acompañaran hasta el departamento acordado y me fui con Andrey y Blago para reunirme con ellos. Me presenté con todos ellos como el dueño de la Empresa de Seguridad que los agrupaba, las del país y las subsidiarias internacionales y dije que los señores que me acompañaban eran de mi custodia personal y que no hablaban español, después les expliqué...

*-Ustedes fueron elegidos después de un relevamiento efectuado en el listado que me hizo llegar el señor XXX, Director General de la Empresa. La elección es debido a todos tienen experiencia policial anterior en lo que se refiere a Investigaciones, Homicidios, Defraudaciones y Estafas e Inteligencia, según los datos en mi poder tengo por sabido el por qué de su alejamiento de la fuerza que los agrupaba en su momento pero eso no es lo que busco ni hago evaluaciones por ello. Pretendo otra cosa de todos ustedes, un trabajo distinto al que realizan ahora.

A medida que hablaba, observaba sus reacciones según pasaba la vista por cada uno de ellos, el interés que demostraban por un posible cambio era genuino y sólo dos pensaron, “espero que no sea algo sin sentido y nos usen de “forro” como otras veces”. Uno de ellos un tipo de estatura mediana, de apariencia común que ahondaba hasta lo más profundo en el trabajo de Investigación y que no se “casaba” con nadie para llegar a la verdad, debido a esto y a los “palos en la rueda” de los compañeros y jefes había decidido renunciar a la Fuerza Policial.

La otra era una mujer, no llegaba al metro setenta de estatura pero con un rostro y un cuerpo muy llamativo, tenía estudios de Perito Forense pero había dejado el trabajo porque le “tiraban” los peores casos debido a su renuencia para hacer “migas” con sus superiores, los miré a los dos con cara de póker.

*-Por los gestos estoy notando que alguno piensa que esto es una “forrada”, yo estoy convencido que no lo es y esperen a que termine de explicar para opinar de lo que les pienso ofrecer, además, nadie va a ponerle trabas para llegar al fondo de lo que se quiere averiguar, los trabajos los tendrán que realizar todos sin distinción de sexo o condición porque ninguno es más o menos que otro, los Encargados del Grupo trabajaran doble porque saldrán igual que el resto pero se ocuparán también de los informes que me harán llegar, a mí o a quien les indique.

Aparte de pensar que gestos habían hecho para delatarse, la atención se redobló en todos y eso me gustó, además no había habido ningún pensamiento de los típicos que podían esperarse tratando de “sacar tajada” de algo de lo que se conversaba. Luego del “toquecito” seguí…

*-A efectos de los aportes jubilatorios, de la obra social y salario familiar seguirán afectados a la empresa de Seguridad pero como esto se deposita mensualmente y se retira de los Cajeros Automáticos, olvídense de dar la cara por esos lugares o tener algún contacto con el personal que trabaja allí, salvo para efectuar alguna averiguación. Figurarán como afectados a la Seguridad de un inmueble bajo mi dependencia absoluta. El trabajo que le ofrezco implica un aumento salarial del orden de los cuatro mil Euros mensuales que cobrarán en “negro” y en efectivo.

La mención a los Euros derivó en un murmullo de aprobación, habida cuenta que su sueldo actual oscilaba más o menos en los quinientos y/o setecientos Euros pero siguieron atentos a lo que restaba por decirles…

*-Serán, a modo de cobertura, una Agencia de Investigaciones Privadas o de Detectives anotada legalmente como una empresa y funcionará en un semi piso ubicado en tal dirección, -les dije la dirección que correspondía a un edificio en pleno centro de la ciudad capital-. Los Encargados administrarán una Caja Chica del orden de los cincuenta mil Euros para Gastos de Representación, dispositivos necesarios y/o gastos imprevistos que me rendirán mensualmente a mí.

*-Tendrán y que esto quede claro, para uso de los trabajos determinados, una flota de cuatro camionetas que quedarán estacionadas en el propio edificio, armamento no se proveerá, salvo el suyo propio que ustedes están autorizados a portar, ustedes estarán para investigar no para andar metiéndose en balaceras. El trabajo de Investigación, eventualmente, podría trasladarse al exterior, en ese caso viajarían hasta tres personas y quienes los Encargados determinen, ante dificultades en lugares desconocidos podrán hacer los trabajos con Agencias de la zona y/o Fuerzas de Seguridad de confianza. Contarán además con un personal que se encargará de toda la parte informática con equipos de alta performance, esto es escuchas telefónicas, seguimientos por GPS, control de cámaras de tránsito, etc.

De inmediato al decir esto pensé en Raúl, si desarmaba lo de este edificio quedaría sin trabajo o desperdiciado en cualquier cuartucho y vaya a saber lo que pasaría con los equipos, bueno, ahora si sabría qué pasaría. Al margen de esto yo notaba que los “investigadores” se “salían de la vaina” para comenzar a trabajar pero también noté ciertas dudas en algunos, fundamentalmente en quien sería el Encargado General, un subcomisario retirado que, conociendo a todos los demás, daba por hecho su nombramiento.

*-Efectivamente, como seguro alguno piensa, el Encargado será el señor XXX y su segundo al mando el señor XXX, -alguien que se había ido de la Fuerza Policial cuando estaba a punto de ascender a Subcomisario- espero que ninguno tenga ninguna objeción al respecto, -nadie objetó ni pensó en hacerlo, se lo respetaba y habíamos elegido bien-. ¿Qué dudas hay respecto a todo lo que planteé?

*-Usted nos habla de hacer cosas que muchas se salen de lo legal, ¿cómo deberíamos proceder? ¿Cuáles serían los objetivos a investigar? y ¿qué es lo que hay que investigar de ellos? -preguntó el futuro Encargado-.

*-Trataré de contestarlas en orden… En principio ¿cuántos Detectives Privados conocen ustedes que trabajen haciendo todo legal?, siempre están obligados a saltearse algunas reglas para hacer su trabajo. Para sacar fotos privadas, averiguar amoríos o saldos de cuentas bancarias, ingresar a domicilios o efectuar seguimientos no necesitan autorizaciones judiciales, ustedes tampoco, además, no utilizaremos esas pruebas para presentar en ningún Juzgado, ergo: ustedes procederían igual que ellos y si alguno es descubierto o se dan cuenta de su presencia, la posta la toma otro u otro u otro pero el objetivo no se abandona.

*-Los objetivos serán empresarios, directivos de empresas, empleados jerárquicos y por lógica todo su entorno, se les entregarán los datos necesarios en una carpeta con los nombres y se procederá a la investigación exhaustiva y pormenorizada de todos ellos. Se “revolverá” todo lo económico, lo social, lo familiar, los bienes, los gastos, los ingresos. Serán como un ente fiscal pero sin posibilidades de ser comprado con dádivas y para mejor, con acceso a información más profunda y modernizada. Cuando hablo de exhaustiva y pormenorizada creo que no es necesario decirles hasta dónde deben averiguar, los que conocen bien el trabajo son ustedes, después me entregarán la información a mí y cuando la tenga en mi poder y les dé el visto bueno, la empresa de Detectives destruirá esa información. Ahh, otra cosa más, todos tendrán que firmar un Contrato de Confidencialidad.

No bien terminé de decirles esto, extraje de cada una de las carpetas personales el Contrato de Confidencialidad que deberían firmar y se los fui entregando, lo leyeron y lo fueron firmando uno a uno, conformes y sin pensar nada en contrario. Después que tuve en mi poder todos los Contratos, le entregué al Encargado una carpeta con los datos de los primeros objetivos que investigarían, esto es, los directivos de la empresa que había visitado la primera vez para firmar la toma de posesión de mis bienes. Di por terminada la reunión diciendo:

*-Por mi parte terminé, les toca a ustedes poner en marcha todo y les diría que mañana en la mañana se apersonen en la Agencia y vea lo que van a necesitar de mobiliario, papelería, computadoras, monitores, en fin, quiero que, de la noche a la mañana estén trabajando en lo requerido y bien instalados. Cuando sepan que comprar me llaman desde el comercio y yo realizaré las transferencias por el pago de lo gastado.

Se marcharon todos contentos, asombrados por lo que cobrarían y con perspectivas nuevas para explotar. Andrey que había seguido toda la reunión con el traductor en su oído me dijo que seguramente no me defraudarían, que se notaba que había potencial y experiencia en ese grupo. Recordé a Raúl y lo llamé por teléfono a la casa porque ya se había retirado. Le dije que en la mañana comenzara a preparar todo para realizar una mudanza con todos los equipos porque pasaría a trabajar en otras dependencias pero que antes de hacer nada me viera al mediodía.

Me di cuenta que ya rozaban las once de la noche y estaba con hambre y un tanto cansado, le pregunté a los muchachos si andaban con hambre, ambos me contestaron que sí y les dije que nos fuéramos a cenar al primer lugar que encontráramos abierto porque no pensaba andar dando vueltas en la camioneta, que estaba famélico. Hicimos apenas un poco más de dos cuadras y la parrilla abierta y toda iluminada pareció llamarnos, estacionaron la camioneta casi al frente y bajé rápido sin siquiera esperé a que se pusieran a la par.

Nos acomodamos con espacio en una mesa para cuatro y le terminamos de vaciar la parrilla al dueño, comenzamos con una rodaja o feta gruesa de queso parrillero rociado con queso parmesano, orégano y un chorrito de aceite de oliva, después fueron unos pocos chinchulines, mollejas y riñones, luego el vacío, asado de tira y algo de centro de entraña todo adobado con un regio vino tinto, yo no pude con el postre pero los dos “roperos” no se privaron de sendas porciones de flan casero con crema chantilly y dulce de leche, una “bomba” que degustaron con deleite.

Ya bien comidos y bebidos hicimos un rato de sobremesa, estábamos en eso cuando ingresó a la parrilla una pareja, él ni recuerdo como era pero ella era alta, de cabello rubio cortito, enormes ojos azules, con sandalias de taco alto, de piernas largas y una minifalda que “paraba el tránsito” giró la cabeza y nos miró con desparpajo sin que le importara el tipo que iba al lado. Éste se percató que le miramos a la pareja y se detuvo mirándonos desafiante, seguramente con ganas de suicidarse o tarado total porque si yo veo a dos tipos enorme de traje negro y sin trazas de ser oficinistas que me miran para ver como reacciono, agacharía la cabeza y daría un rodeo enorme.

Lo llamé al camarero para abonar la cuenta y evitar un suicidio, la chica tomó del brazo al tonto y lo arrastró a una mesa al final del local. Saciado el hambre, esas piernas me dieron ganas de algo más y dije que nos iríamos a tomar una copa a uno de los boliches bailables de moda en que se juntaba gente de la farándula y estaba plagado de... “gatos”, no nos vendría mal terminar la noche acompañados de bellas mujeres.

En el estacionamiento del boliche nos dieron una tarjeta para ingresar, en la puerta la seguridad del lugar vio a un tipo más o menos alto y muy bien vestido que tenía pegado a sus espaldas a dos enormidades de hombres que les llevaban a ellos más de una cabeza de altura y varios centímetros más de espaldas y ni siquiera nos pidieron la tarjeta de ingreso. El lugar estaba ¾ partes lleno y se veían escotes, piernas y minifaldas a granel, nos acercamos a la barra y pedí una botella de champan importado, el barman preparó la botella en un balde con hielo y se lo dio a la camarera diciéndole algo al oído.

Ésta nos preguntó si no queríamos ocupar una de las mesas VIP, le contesté que sí y la seguimos hasta que nos acomodó en una mesa relativamente cerca de la pista. Se retiró después de abrir la botella y nos pusimos a mirar el ambiente, había mujeres para donde miraras y una mejor que la otra, por lógica también nos empezaron a mirar a nosotros. En otras mesas algunas parejas se estaban “matando” inclusive parejas femeninas y no vi hombres con hombres en el mismo estado de fogosidad.

Algo similar pasaba en la pista, las parejas se prodigaban con manos y bocas y una de esas mujeres me llamó la atención, era una hermosa morocha de cabello largo, mediría un metro con setenta centímetros que con las sandalias la llevaban a un metro ochenta aproximadamente, la minifalda era escueta y denotaba unas hermosas piernas que sostenían un cuerpo y un culo espectacular, parado, duro y como para que se desbandaran miles de ratones en la cabeza de quien la mirara. Estaba con un flaco rubio y alto que le comía la boca con desesperación y aferraba con ambas manos los cachetes de ese culo apetecible.

Ver eso me generó una bronca tremenda, como si la mujer de mi vida estuviera “corneándome” abiertamente ante mis narices. Sucedía que yo conocía a esa morocha espectacular, su nombre era Gimena y la última vez que la había visto era cuando, después de comer un asado, se iba de mi casa anterior a pasear y a pasar la noche en un hotel en El Tigre, junto a su novio Jorge que resultaba ser mi mejor amigo. Iba a saltar pero lo pensé dos veces, no fuera que hubiese roto con Jorge y yo hiciera el papel de boludo.

Era la una de la mañana y lo llamé a Jorge, me jugaba a que estaba durmiendo porque se levantaba temprano por los negocios, cuando vió que era yo atendió enseguida.

*-¿Qué hacés perdido?, ¿vendiste la empresita y te fuiste de vacaciones?

*-No, nada que ver, en otro momento te cuento, estoy de joda en un boliche buenísimo y pensé en pedirte que te vinieras a tomar unas copas y que aprovecharas a venirte con Gimena.

*- Estás en pedo o drogado, estoy acostado y solo porque mañana temprano me llega un pedido y porque Gimena fue a pasarla con la madre que anda un poco jodida.

*-¡Huuuy, qué cagada!, espero que se mejore, no le digas que llamé seguro se va a enojar porque te invité a una joda.

*-No, no pasa nada, estamos mejor que nunca. Seguí divirtiéndote, yo voy a tratar de seguir durmiendo.

Cuando corté la comunicación, me pregunté, ¿cuánto hacía que lo engañaba y con cuántos? La bronca era como para que me saliera el oso e hice bastante fuerza para controlarme porque de lo contrario estaba obligado a hacer una masacre.

*-“Gonzalo, tenés que aprender a dominarte, aprovechá y practicás un poco el drenado de energía o mejor aún puedo hacer algo que otros portadores nunca practicaron pero lo puedo hacer sólo con tu autorización expresa. Me tenés que autorizar a salir y entrar de vos y de aquí a tres noches, mientras dormís, yo salgo, la secó bastante mientras duerme, sin matarla y me vuelvo dejándola hecha una “pasa”. Sin pómulos, tetas, culo y piernas que mostrar y sin medicina que la pueda ayudar, tardará años para recuperarse y se le van a pasar las ganas de engañar a tu amigo, además vos no vas a sentir nada por mi ausencia”.

Lo que el YAOGUAI me estaba proponiendo era… no sabía cómo denominarlo pero era tanta mi bronca que si me pedía que la desollara con una navaja de afeitar lo hubiera hecho sin dudar. Mi amigo era distinto, podría decirse que hasta más que mi hermano porque no éramos familia, nos habíamos elegido como hermanos de vida, era incapaz de engañar, él no se merecía que lo “cagaran” y lo usaran en su buena fe.

Habíamos andado juntos desde la escuela primaria y yo sabía cuántas “malas” se tuvo que “comer” porque hasta la familia más íntima lo había defraudado, estafado y usado y no olvidaba que, cuando más de una vez me tocó “perder”, recibió sopapos que no le estaban destinados. Muchas veces discutimos por la entrega incondicional que practicaba aunque en más de una oportunidad lo admiré por esto, “no puedo ser de otra manera” expresaba y más de uno que decía quererlo se aprovechaba de esto, como, sin dudas, lo estaba haciendo la hija de puta que decía ser la novia.

Yo tenía muy claro y defendía mis propios conceptos, cuando las “cosas” de una pareja eran consentidas, no había “tu tía”, los de afuera eran “de palo” y nadie debía llegar ni siquiera a opinar pero cuando había engaños de por medio y uno se aprovechaba del otro no había excusas que lo contemplaran, cuando uno o varios procederes de tu pareja no te satisfacen, lo dialogás, llegás a acuerdos o das un paso al costado pero engañar y aprovechar la buena fe del que tenés al lado no entraba en mis Evangelios.

Divagaba con esto, perdido en mis pensamientos y al levantar la vista y ver que a la pareja que bailaba sólo le quedaba consumar el acto, se me notó la furia en la mirada y Andrey que hacía migas con una rubia casi tan alta como él se percató de esto y me preguntó si necesitaba algo y si me sentía bien. Le conté rápido y sin muchos detalles lo que pasaba y su solución pasaba por “reventarlos” a los dos, le contesté que era muy “barato” para ella, había que hacer más, “comience por filmarlos o pedir la filmación” me dijo y no le entendí bien.

Me explicó que el boliche tenía varias cámaras que aunque parecían apagadas, seguramente se grababa todo en un cuarto de control, me pareció buena idea y le dije que lo arreglara de buenas o de malas maneras con el Encargado, a la vez lo llamé a Blago para decirle que no perdiera de vista al “novio” y le señalé al susodicho para que lo “ablandara” cuando fuera al baño y averiguara quien era, desde cuando conocía a la mujer, por qué estaban allí y finalmente que lo “intimara” a irse sin despedirse, le pedí que, si la conocía de antes, le dijera que su jefe era el amante de Gimena y lo había mandado a él a matarlo pero como le daba pena le ofrecía la oportunidad de irse sin dar explicaciones, lógicamente luego de unos cuantos golpes de aquellos que no dejan marcas. En ese momento la pareja se dirigió a los reservados y luego de algunos minutos le dije a Blago que lo sacara de allí sin hacer lío.

Andrey no volvía y Blago se fue para los reservados con una copa llena de champan en la mano, me dijo después que la morocha se estaba dedicando con pasión a darle una mamada al tipo y, como al descuido, el croata fingió tropezar y lo empapó con el líquido de su copa, el tipo con su cara y el pecho mojados, incluyendo el cabello de Gimena, lanzó un insulto pero cuando levantó la vista y vio la mole parado ante él, amainó su enojo.

Blago se deshizo en disculpas y, en un Español medio “atravesado” le dijo de ir al baño a ayudarlo. Hablando con la chica e insultando al croata accedió a ir al baño a secarse y a lavarse la cara. Gimena quedó esperando. Un par de minutos después se me acercó Andrey y me mostró un pendrive con todo lo filmado, me dijo que no hubo inconvenientes que no se pudieran resolver rápido y hasta había editado lo de la pareja desde el momento en que se pusieron a bailar. Le pedí que fuera a la camioneta y volcara todo el video a mi celular, después esperé…

A los veinte minutos ella estaba desesperada mirando para el baño, Andrey me había devuelto el teléfono con el video y Blago me contó que el tipo se había ido dando la vuelta por detrás de la barra e iba bastante magullado, había recibido una paliza de profesional, muy dolorosa para ciertas partes del cuerpo pero sin marcas que denunciaran los golpes y con la amenaza lógica, “si volvía a ponerse en contacto con Gimena tendría que asesinarlo” -doy fe que el croata diciendo algo así daba terror-.

Lo había acompañado hasta el estacionamiento y una vez que subió al auto, había escapado como “rata por tirante”. Me dijo que se llamaba Horacio, que no trabajaba, que vivía en un departamento alquilado en la capital y que su novia-amante lo mantenía desde hacía tres meses, -hija de mil putas, seguramente con el dinero de mi amigo porque ella no trabajaba-. Con esos datos en mi poder, me fui para el reservado.

Gimena no me vio, por la oscuridad del lugar y porque paseaba la vista hacia el baño de hombres y a su celular, me senté a su lado.

*-Gimena, ¡qué sorpresa!, ¿cómo está tu mamá?, hace un rato lo llamé a Jorge y me dijo que la estabas cuidando porque se sentía mal, seguramente se debe haber mejorado, ¿no?

*-Gonzalo, pe…, pe…, pero, ¿qué estás haciendo acá? No, sí, sí, está mejor, vine con una amiga que se fue al baño. -Se puso muy nerviosa y ni siquiera daba para “escuchar” lo que pensaba-.

*-Hace un rato largo que estoy y vi que tú amiga es un tanto rara y te quiere mucho. Le dijo a uno de mis custodios que se llama Horacio, que vive en la capital, además que Gimena es su novia y lo mantiene desde hace tres meses.

*-No Gonza, todo tiene una explicación, lo que pasa es que…

*-Lo que pasa mi cielo es que sos una reverenda puta, estás engañando a MI amigo y eso no lo puedo contemplar ni perdonar, además, como acá son muy amigos me pasaron un video con lo que hicieron desde que entraron a la pista, ¿querés verlo?, es muy explicativo y seguramente a Jorge le encantará verlo, porque no es lo mismo que escuchar mentiras de “putarracas” arrepentidas.

Me estaba enojando nuevamente porque a ella no le quedó más que agachar la cabeza y tratar de que escuchara sus explicaciones llorando e hipando, ¡qué ilusa!, no podría convencerme y aprovechar ese cuerpo para cogerla y humillarla no me resultaba desagradable, mi conciencia ante las maldades ya no razonaba de la misma manera.

*-Como el sábado se notó que querías que te cogiera y no se pudo, vamos a aprovechar ahora esta oportunidad, en mi departamento podremos hablar de esto y buscar alguna solución, de paso trataremos de pasarlo bien.

Vio su oportunidad para tratar de llevar las cosas a su terreno y pensó: “lo cojo bien cogido, le borro el video y no le van a quedar ganas de joder”. Y sí, algunas mujeres piensan que pueden arreglar todo a “conchazos” o poniendo el culo, sin ponerse a pensar que no todos los hombres son iguales. Los llamé a Andrey y a Blago, le dije a éste que fuera a pagar -cuando lo vio a Blago, aún a pesar de la oscuridad podría jurar que se puso blanca-, recogió una campera y salimos acompañados de Andrey y Blago que llegaba por detrás, ingresamos a la camioneta y se sentó temerosa, los dos custodios lo hicieron adelante. Al emprender la marcha no pudo evitar preguntar.

*-¿Desde cuándo te movés con custodios?, me sorprendés, Jorge no me dijo que tenías dinero y posición.

*-Recibí una herencia de muchos millones de Euros y no puedo moverme igual que antes.

No le dije más pero apoyé mi mano en su muslo, muy cerca de su entrepierna, apretando y subiendo aún más la mano hasta llegar a su tanga. Allí quedó la mano, apenas apretando la pierna y rozando la tela diminuta, no decía una palabra pero “escuchaba” como su mente “maquinaba” mil ideas saltando de “película en película” y buscando el modo de sacar algún tipo de provecho de la situación.

La llegada al edificio, los custodios armados con armas largas al entrar, las otras camionetas estacionadas, el código ocular para acceder al ascensor y el acceso directo al Penthouse, la tenían sorprendida y anonadada. No fue menos cuando ingresamos al loft, apenas alcanzó a decir que era una belleza, se acercó al bar, sonriendo en modo “seducción” y preguntó si le iba a dar algo de beber.

*-Te dije que veníamos a coger, no estamos para tertulias, pasa por esa puerta que es mi habitación. Ustedes dos todavía no se vayan porque los voy a necesitar.

Al entrar miró la habitación y me pidió pasar al baño, yo aproveché a sacarme la ropa y ponerme una bata por encima, regresó peinada y sonriente pero cuando se acercó a mí le corté la sonrisa, ni la besé ni permití que lo hiciera, la giré, la tomé de los pechos desde atrás (fantásticos por cierto) y le apoyé la pija en la zanja de su culo, dijo “síííííí” e intentó mover sus nalgas para sentirme un poco más, tampoco la dejé, la empujé sobre el borde de la cama que, por ser alta, dejó su mini levantada y su culo desnudo porque ya se había despojado de la tanga. Apenas un poco de saliva y “de una” entré en su vagina casi seca, el choque de mi pelvis con sus nalgas fue tan instantáneo como el grito desesperado que dio, se le acabó el “puterío conquistador” y llorando a viva voz, me pedía que parara…

*-Por favor Gonzalo, por favor, me duele, es muy grande, es enorme, no te muevas.

Con la bronca que venía acumulando desde el primer momento en que la vi con aquel flaco, cualquier día iba a parar. Ella aguantaba como podía y yo incrementaba mis entradas y salidas respirando acelerado y tratando de perforarla lo más posible, ni siquiera noté si chocaba en su interior o no o si podía dolerle. En un momento dado sentí que mi glande chocaba contra algo que hacía un poco de resistencia y no pudo reprimir sus gritos, se olvidó de aguantar o tratar de colaborar en la violación, el dolor y los gritos no le permitían pensar o tratar de gozar.

En ese ir y venir violento, el agujerito de su culo me “llamó” y comencé a tratar de abrirlo con mis pulgares, apenas si reprimió el primer intento y la calmé con sendos cachetazos en sus nalgas, después, ayudados sólo por saliva, entraron fácil hasta tres dedos de una mano, ni su resistencia ni los músculos del esfínter tenían fuerzas para oponerse, estaba a punto de desfallecer por el dolor de las incursiones violentas y la hice revivir, el grito se volvió a repetir, alto, largo y sostenido, cuando cambié los dedos por mi glande y empujé con fuerza hasta que la pelvis me lo permitió.

La cara apoyada en el cubrecama con lágrimas abundantes que lo mojaban, el cuerpo laxo con los brazos y las manos extendidas hacia atrás y pegadas a su costado, la mente en blanco y sin ningún tipo de movimiento, me hicieron entender que estaba, más que entregada, destruida a merced del ariete que la perforaba y a esta altura yo sólo quería terminar llenándole el culo de leche, lo hice después de dos estocadas profundas y salí de allí dejándole el culo abierto dónde no se veía ningún rastro de la leche depositada en su interior.

Volví a penetrarla nuevamente por el culo y me aferré a sus tetas, naturales y duras al tacto, allí comencé a absorber un poco de su rigidez y energía notando que se aflojaban, salí de ella y lo mismo hice con sus glúteos y sus muslos, no me excedí con ninguna parte, en cuanto aflojaba lo dejaba pero no volvería a tener esa rigidez llamativa lograda con cuidados y ejercicios.

Luego de esto, estaba debilitada y a punto del desmayo pero me esforcé para tratar de recuperarla. Al abrir los ojos la hice sentar en el borde de la cama y le ofrecí un vaso con vodka de una botella que tenía en una repisa cerca de la puerta del vestidor, lo tomó de dos tragos y algo se despabiló, le pregunté si me entendía y me contestó que sí, entonces le dije:

*-Estuve pensando que, en vista del engaño que mi amigo Jorge no se merece, estás condenada a alejarte de él, no le expliques nada pero si me llegó a enterar que te acercás para seguir saliendo con él o ser tan sólo una amiga, te aseguro que tu próximo domicilio será una zanja al costado de un camino, no voy a tener piedad ni contemplaciones con vos, ¿lo entendiste? -contestó llorando que sí, que lo había entendido- Bueno, viendo que sos tan comprensiva y que te gustan las pijas te voy a dejar con mis custodios, tratalos bien, son buenos muchachos.

*-No Gonzalo, por favor, no, no puedo más, no me hagas esto, estoy sin fuerza, destruida y me siento toda irritada o lastimada.

*-No me mientas, ya lo vas a saber, te aseguro que son mejores que tu “amigovio” Horacio.

La dejé sola y fui a verlos a Andrey y a Blago y les pedí que la siguieran atendiendo porque quería más hombres pero… les hice una recomendación, les pedí que no dejaran ninguna marca, después les dije que cuando ya no tuvieran ganas de hacer más nada, la vistieran, la llevaran hasta una parada de taxis, la subieran a un coche y le abonaran al conductor el traslado hasta la plaza de tal localidad,

-era un viaje de casi una hora-.

Cuando abrieron la puerta de la habitación la escuché rogarles entre lágrimas, “por favor, no, por favor, no”. No me importó nada, creía que se lo tenía merecido y al cerrar la puerta me di cuenta que la habitación estaba insonorizada porque ni escuché ni murmullos. Yo me fui a dormir en una habitación para el personal de servicio.

Continuará…

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GUILLEOS1 se los agradece.