El demonio de nombre extraño (41)

SOLUCIÓN A LO DE JORGE - CHARLA PRIVADA.

En la mañana no hubo oportunidades de cumplir ni con Kande ni con Gisela , el alboroto de Cielo por las noticias nos sacó rápido de la cama.  Mi mujer y yo nos cambiamos sin bañarnos y Gisela se fue a su habitación para hacer lo mismo, en poco tiempo, la mesa del desayuno con el televisor de la cocina prendido estuvo muy concurrida.  La noticia hablaba de una masacre en una empresa en un Polígono Industrial en el que estarían involucrados efectivos policiales de la Provincia y de la Federal que cumplían servicios adicionales en una conocida Agencia de Seguridad.

Hablaban del secuestro en el lugar de un camión que trasladaba mercaderías y que habría sido robado en horas de la noche cuando se dirigía al interior del país.  El conductor habría identificado a dos de los muertos en el galpón como los autores del robo.  Al salir después de la identificación, a pesar de la custodia policial, los cronistas le preguntaban al conductor el por qué de la falta de custodia y respondió, sin ningún tipo de asesoramiento, que la empresa pagaba la custodia hasta el segundo peaje para abaratar costos y que desde allí se volvían dejándolos solos.

Según los canales que daban la noticia los escenarios eran distintos, unos movileros estaban en el lugar del hecho, otros frente a la Agencia de Seguridad reclamando por sus dueños, otros pretendían hablar con el Fiscal interviniente y algunos otros hablaban sobre el hermetismo de los Jefes Policiales pero todos opinaban que la masacre habría sido perpetrada por comandos especializados, aparentemente extranjeros y todo apuntaba a un ajuste de cuentas de mafias que operaban con la Piratería del Asfalto, esto es el robo de camiones con mercaderías.

Al mediodía salió un comunicado para la Prensa de parte de la Agencia de Seguridad, en él se hacía saber que la Agencia reconocía que los efectivos fallecidos trabajaban cumpliendo funciones en esa empresa pero se desligaban de toda responsabilidad en el presunto robo de camiones con mercaderías.  Finalmente habían logrado las declaraciones del Fiscal de la causa y aunque no quiso dar demasiada información por el Secreto de Sumario, dejó deslizar que habían recibido una denuncia anónima al igual que la notificación al Jefe de los Bomberos que acudieron al lugar y estaban tratando de hacer pericias aunque la documentación posiblemente existente y los camiones del lugar habían sido quemados totalmente.

Respecto del personal policial fallecido expresó que eran nueve efectivos de distintos grados y estaban tratando de establecer que hacían en ese lugar portando armas largas que no eran de la dotación regular.  Ante la pregunta de uno de los cronistas orientada a saber si formaban parte de una organización dedicada a la Piratería del Asfalto y qué papel jugaba esa Agencia de Seguridad en esto porque aparentaba no ser casualidad el hecho de que todos los fallecidos, aun en distintos estamentos, formaban parte del personal de esa empresa.  Contestó que eso estaba en proceso de investigación y no podía dar información.

Nos habíamos trasladado a mi despacho para desmenuzar toda la información de la papelería que nos habíamos llevado, de allí surgieron facturas apócrifas de empresas inexistentes por mercaderías entregadas a distintos comercios de la zona e información que vinculaba a los comercios con estas empresas no registradas.  Entre estos papeles surgieron cuatro facturas originales a nombre del comercio de Jorge y remitos con el conforme de recibido firmados por él, lógicamente luego de revisar minuciosamente todo, ésta documentación fue apartada y me la quedé yo.  Pensamos en hacer llegar la documentación con las facturas falsas pero las unía el hilo de la dependencia con la Agencia de Seguridad y no había que ser una lumbrera para darse cuenta que estaban relacionados, por ello me urgía hablar con Jorge .

Las chicas procedieron a intervenir los teléfonos que figuraban en las agendas obtenidas, esto implicaba obtener las conversaciones mantenidas y los mensajes de texto o de whatsapp efectuados desde y para ellos, yo me fui a mi habitación para tratar de hablar con Jorge , me contestó luego de dos timbrazos…

--Hola Gonzalo , llamás justo en un momento completamente despelotado pero a vos jamás puedo dejar de atenderte, ¿qué se te ofrece?

--  Hola Jorge, tengo un problema que me tenés que solucionar, tengo que hablarlo personalmente con vos porque necesito adquirir mercaderías a buen precio, tengo una reunión en casa y pienso abrir con una picada de quesos y fiambres…

--Y…  ¿Cuál es el problema?, mandá a alguien o vení vos a retirar lo que te haga falta.

--No, no y no, tengo que ponerme de acuerdo con el precio, pagar y luego retirar la mercadería para eso tengo que hablarlo personalmente, vos no vas a querer cobrarme.

No me la dejaba fácil porque no quería decirle el motivo real por teléfono y no se abría para decirme que problema tenía y seguramente los habría porque no hablaba de forma normal conmigo.

--Lo que sucede es que hoy me es imposible alejarme del negocio, el local está lleno de gente y sólo vinieron dos efectivos de Seguridad a los que hice quedar, me dicen que la empresa tiene problemas y se cagaron en el Contrato que tengo firmado con ellos, además hay otros problemas que no vienen al caso.

--  Vi algo en las noticias pero vamos a ver si te puedo ayudar, no dejés entrar a nadie de esa empresa y dame dos horas, voy a ir con mis Abogados para anular el Contrato y te soluciono el problema.

--Es que también hay otra cosa… bueno vení y lo charlamos.

De inmediato llamé al Estudio Jurídico y pedí que los tres mejores Abogados se llegaran en el término previsto al negocio de Jorge , yo me encontraría con ellos allí, luego le dije a Kande que se cambiara porque íbamos a ir a lo de Jorge para arreglar su problema.  Nos bañamos, nos cambiamos y junto con Tai nos fuimos para mi antiguo barrio.  Al llegar al lugar, ya desde la entrada al estacionamiento se notaba la ausencia de efectivos de Seguridad, lo mismo pasó cuando estuvimos dentro de las instalaciones, aún a pesar de la gente que entraba y salía.

Parados frente a la escalera que nos llevaba a la oficina que tenía Jorge , nos encontramos y nos presentamos con los tres Abogados que esperaban allí, uno de ellos era de los miembros más importantes de la Directiva del Estudio y sabía perfectamente con quien trataba y los otros también a instancias de él.  El que llevaba la voz cantante del trío me preguntó cuál era el problema que tenían que atender, le contesté que lo sabríamos apenas habláramos con el dueño del lugar.

La secretaria me preguntó si yo era el señor Gonzalo y ante mi respuesta afirmativa nos hizo pasar a la oficina de Jorge .  Estaba revisando papeles y se notó de inmediato la alegría que le dio vernos, “primero saludo a la “mona” y después te doy pelota a vos” , fue lo primero que dijo antes de darse un abrazo sentido con Kande , luego lo hizo conmigo, después con Tai y finalmente con los tres Abogados.

El chino me pidió autorización para recorrer las instalaciones alegando que tenía pedidos de Carlos y Virginia y nos dejó solos.

--  Jorge, amigo, contame cuál es el problema y no te guardes nada pues yo estuve hace unos días acá y me di cuenta de todo.  Primero dame el Contrato que los Abogados lo van a ir viendo para tratar de anularlo.

--Tuve que firmar este Contrato con la Agencia que ahora está en todas las noticias, me obligaron porque recibí un camión con mercaderías, firmé el remito, puse las mercaderías a la venta y resultó que la empresa que me las vendió era falsa y la mercadería era robada, me amenazaron con denunciarme y con eso me tenían de las pelotas, también obligado tuve que recibir otros envíos más, pusieron un tipo constantemente en mi oficina que me seguía a todos lados y me dijeron que tenían intervenido el teléfono, prácticamente viví unos diez días secuestrado.

--  ¿Cuántos remitos firmaste y que facturas recibiste.

--Por acá tengo los originales de las facturas y las copias de los remitos con mi firma, no hay otros registros porque el pago siempre fue en efectivo, no me aceptaban cheques.

Mal que me pesara tuve que “escuchar” si todo lo que me contaba Jorge era verdad y agraciadamente era todo tal como me lo contaba en voz alta, con excepción de un tal José Luis que estaba encargado de los efectivos y la tal Greta que se presentó el primer día con los papeles que lo involucraban que en principio no me nombró.

--  ¿Sabés quiénes eran los que mandaban?

--Hubo una tal Greta que dijo que era la dueña de la Agencia de Seguridad, esa fue quién me “cantó las cuarenta” y se identificó como Oficial de la Policía, fue con la que tuve que “arreglar” todo y después quedó a cargo un tal José Luis que mandaba y determinó los efectivos, ese pasaba todos los días una o dos veces.

--  Bueno, ahora el tema es hacerte zafar de esto que te incrimina, Doctor, ¿cómo se puede anular ese Contrato?

--Prácticamente se auto anula con dos testigos que declaren que los servicios no se están cumpliendo con normalidad ni eficiencia, refrendado por Escribano Público.

--  Bueno, no perdamos más tiempo, mande a llamar a algún Escribano que trabaje con el Estudio y procedan con eso.  Jorge conseguí dos o tres testigos de confianza y un lugar donde se les pueda tomar declaración mientras llega el Escribano.

Los testigos serían la Jefa de cajeras, el Jefe de depósito y la Secretaria a los que Jorge llamó de inmediato a sus oficinas, luego les dio a los Abogados un lugar aparte para que trabajaran en el escrito a firmar y nos quedamos los tres solos, allí me explayé…

--  Lo primero que te voy a decir es que sos un pelotudo, tendrías que haberme llamado el primer día, mis recursos son ilimitados para solucionarte el problema y no tenías porque haberte comido toda esa angustia.  Si la investigación se acentúa y es probable que así sea, vas a tener a la Fiscalía investigando las remesas de compras, no mostrás nada sin una orden pero si traen la orden les decís que te patrocina este Estudio -le di la tarjeta- y vas a mostrar estas facturas y estas copias de remitos, -le entregué remitos y facturas nuevos de una empresa subsidiaria de reparto de comestibles-, firmá nuevamente y dame las copias de los viejos.

--Yo te los doy pero ellos tienen los cuatro remitos originales.

--  ¿A cuáles te referís, a estas cuatro facturas y cuatro remitos que se salvaron del incendio?, -tiré sobre su escritorio los ocho papeles que lo comprometían-.

--¿Cómo conseguiste esto, qué hiciste?

--  “Menos pregunta Dios y perdona”, además recordá que, “en boca cerrada no entran moscas”.   ¿Pensabas que Kande, mis muchachos y yo nos íbamos a quedar tranquilos sabiendo que estaban jodiendo a mi amigo?  Este es el pago por los quesos y los fiambres que nos diste el día de la inauguración, ahora cuando regrese Tai me va a decir cuántos efectivos de Seguridad necesitás y mañana vas a tener gente de la Agencia “Seguridad Mundial” para cubrir los puestos.

--Esos me van a salir un montón de dinero, son los más caros del mercado pero, si vos lo decís, pago con gusto.

--  Son caros y buenos pero vos tenés una ventaja enorme, sos el mejor amigo desde la infancia del dueño de la empresa, así como soy dueño de la empresa de transportes de comestibles.

--¡No jodás, en serio!, ¿por qué no me dijiste?

--  Porque este es tu negocio y sos vos quien tiene las decisiones, si te decía era como ejercer una especie de “nepotismo”.

Jorge comenzó a pestañear y yo conocía eso, se levantó, dio la vuelta al escritorio y se abrazó a mí llorando a lágrima tendida.  Los ojos se me llenaron de lágrimas y otro tanto le ocurrió a Kande .  Aparte del agradecimiento creo que era por la descarga de la tensión de todos estos días porque en él no cabía el actuar como delincuente, había sufrido mucho porque en su familia hubo alguien así y se juró nunca permitirse ninguna trastada.

--No sé cómo voy a pagarte esto y por lo que escuché en las noticias, la cosa fue subida de tono.

--  Te voy a decir algo descontando desde ya que serás sordo, ciego y mudo, hay dos cosas que no tolero y voy a combatir a como dé lugar, no aguanto que jodan a la gente que quiero, es como si lo hicieran conmigo y me dan asco los corruptos amparados por un supuesto Poder, si me tocan los castigos del Dios en que vos creés tendré que hacerme responsable, mientras tanto que se cuiden de meterse conmigo o con mis afectos, hoy por hoy no soy tipo de perdonar.

--Que Dios me perdone pero no puedo reprocharte nada, no lo voy a hacer ahora como no lo hice nunca antes, quedate tranquilo que aquí sólo hablamos de quesos, fiambres y de la “mona” a la que ahora le tengo un poco de miedo.

Kande lo abrazó diciendo que siempre podían contar con ellos.  En ese momento regresó Tai y nos dijo cuanta gente de Seguridad se necesitaba y desde allí la llamé a Kaila para que se hiciera cargo de mandarlos a primera hora de mañana…

--  Kaila, necesito un Jefe que no se deje llevar por delante y efectivos que cumplan cien por cien, Tai estima unos diez hombres, disponé trece o quince por los relevos, sueldos y obras sociales corren por cuenta del interesado, los otros gastos son míos .

Me contestó que contara con ello pero además me pidió hablar en privado conmigo porque tenían muchos pedidos de empresas y particulares que habían desistido de los servicios de la Empresa involucrada en las noticias y había que hacer algo con ello.  Quedé en que luego la llamaba desde casa aunque le dije que no me parecía mal que, previo consentimiento de los futuros clientes, absorbieran los objetivos y al personal competente, ni hablar de comprar la empresa o la firma porque todavía habría novedades con ellos, lo mismo que con algunos clientes que tenían custodios.  Me contestó que esperaba mi llamada.

Corté la comunicación cuando entraban los Abogados con el Escribano y las actas firmadas por los testigos.  Luego de eso y de volver a invitar a Jorge a que nos visitara en la casa, nos despedimos con un fuerte abrazo.  Me quedaba tranquilo con él, tendrían que matarlo para que dijera algo de mí y no sé si alcanzaría a revelar nada.

Cuando regresábamos Kande se puso a mirar las noticias por Internet, la Fiscalía había allanado las oficinas centrales de la Agencia de Seguridad investigada y se habían levantado todos los objetivos, el tema iba para largo, asimismo desde la Jefatura de la Policía Federal existían un comunicado refrendado también por el Jefe de la Policía Provincial en que se daba intervención a un grupo especial de Asuntos Internos para proceder a las investigaciones de todos los efectivos que prestaban o habían prestado servicios en esa Agencia.

Yo sabía lo que pasaría con esto, los Jefes policiales y la plana mayor de las Jefaturas “abrían el paraguas” o como se decía en la jerga, “se abrirían de patas” , pues, ni por asomo tratarían de defender a ninguno de los involucrados, estuvieran en actividad o no, porque eso podría costarles el puesto, de hecho, estaba seguro que ya habría recibido un tremendo “tirón de huevos” por haber quedado tan expuestos.  El Gobierno mismo quedaba expuesto porque los Policías tenían que buscar un trabajo extra debido a que los sueldos estaban bastante degradados.

Al llegar a casa el primero que se arrimó a la camioneta fue Carlos , detrás lo hizo Virginia y lo ayudaron a Tai a bajar la mercadería que les había comprado, yo no hice ni dije nada por esto, nunca me metía en las compras de la casa, eso era territorio exclusivo de Carlos y Virginia , lo único que yo hacía, junto con todos los demás, era disfrutar de las comidas que me daban. Kande se quedó con ellos y yo bajé a ver si Cielo y Gisela tenían novedades.

Había novedades para repartir.  Era lógico que toda la documentación de los repartos de mercaderías no la guardaran en la central de la Agencia, lo que nunca se nos ocurrió era que la guardaban en el lugar en que irrumpimos.  Estaba todo allí y eso, indudablemente, era porque se sentían seguros de que nadie metería las narices ahí, dado que, en caso de que se quisiera investigar legalmente, serían avisados de antemano.

Esto de creerse que uno tiene una impunidad absoluta es bastante relativo, nunca se sabe por dónde “saltará la liebre” , el caso es que además de toda la documentación en papeles, las chicas también habían logrado obtener conversaciones de los teléfonos celulares, mensajes de texto y escritos de whatsapp eran muy comprometedoras e hicieron un archivo bastante extenso de todas ellas.

Atento a las fechas de los repartos de las mercaderías se podría hacer un relevamiento entre las empresas de camiones que habían sufrido robos, saber que mercaderías les robaron, cuando denunciaron, si las denuncias siguieron los pasos correspondientes, si cobraron los seguros, que mercaderías recibieron los comercios por medio de estas empresas falsas y etc, etc, etc.

Daba para revolver un inmenso tacho de mierda y como a mí no me llegaba ni el olor, le dije a las chicas que prepararan toda esa documentación junto a los archivos de audio y las enviaran a la Fiscalía y a los medios de Prensa oral y escrito. Cielo se puso contenta porque pondría otra vez en movimiento el intrincado sistema de “paseo de información” por varias ciudades del Mundo hasta que quedara como surgida en un baldío de Polonia .  Se pusieron a eso y en poco tiempo todos tenían la información que enviaría a la cárcel a varios.

Después de la cena la llamé a Kaila , me dio un “reto cariñoso” porque no la había llamado para estar en el lío, “¿de qué lío me estás hablando hermosa?” , -le contesté riendo-…

--Listoooo, entendidoooo…  Me llamaste justo, ya te estaba por llamar yo, con todo este despelote dejaron a un montón de gente en la calle, perdieron objetivos porque no pudieron cumplir y hay muchos que no quieren saber nada de ellos, ergo: tenemos pedidos por todos lados, hay objetivos de los más diversos.

--  Era lógico, todo el mundo quiere sacarse el sayo de encima pero… hay que tomarlos con pinzas, por ahora no tomes objetivos que sean de comerciantes, salvo el de mi amigo.  Cielo estuvo enviando información rescatada del incendio y son muchos los que van a caer en desgracia.

--Ufff, ya me imagino como viene la mano, ¿y con los otros?

--  Sabés que yo nunca me meto en las decisiones de ustedes aunque estimo que les va a faltar personal y acá no quiero que cometan el error de meter a cualquiera por el mero hecho de haber pertenecido al personal de esa Agencia.  Vos sabés como opino al respecto, primero van a tener que demostrar que son aptos, lo mismo espero que piense Matías.

--Según parece ya lo tantearon algunos ex Policías que trabajaban allí, me dijo que existía una posibilidad para comprar esa Agencia.  Yo le contesté que si quería conservar el trabajo que no hiciera nada y que ni lo consultara con vos.

--  Espero que lo tome en cuenta, no tengo ganas de aguantar pelotudeces, ni pelotudos.

Le dije también que vos creías que este tipo de empresas crece por la responsabilidad y seriedad de su trabajo y no por absorber a otras empresas comprándolas.  Además, como el personal lo manejo yo, le avisé que no podríamos cubrir las necesidades de esos objetivos hasta ver cómo responden los efectivos dejados cesantes, que no era cuestión de tomar gente por tomar.  No sé si le gustó pero no me dijo nada.

--  Le haya gustado o no que no se le ocurra venir a plantearme algo con esa empresa porque lo echo sin más vueltas, vos sabés como actúo al respecto, ya tenés la experiencia de Nueva York y otros lados, andá poniéndolo al tanto.

--Dejalo por mi cuenta, es buen tipo y muy capaz en lo suyo, voy a hablar con él para que no se fije tanto en los Policías en desgracia.

--  Yo entiendo que haya gente que necesite trabajar pero entre ellos hay delincuentes o cercanos a delincuentes, decile que vas a evaluarlos y ver para que son aptos, si se pone en idiota o no entiende te vas a tener que hacer cargo de la empresa porque no acepto problemas, sólo soluciones.

--Listo Gonzalo , tranqui que  la sangre no va a llegar al río, mandale un beso a Kande .

--Vos otro a “Pato”.

El tema de la Agencia quedó solucionado, Cielo y Gisela ya habían mandado todo lo que había que mandar y luego de terminar el trago que todos estábamos tomando en el living, los muchachos se retiraron, Virginia y Carlos también, sólo quedamos las dos chicas, mi mujer y yo, por las miradas de Cielo estaba enterada de lo pasado en la noche con Gisela y seguramente deseaba tener su parte.

--  No sé que estarán esperando ustedes tres pero estoy notando algunas miradas pecaminosas, ¿me equivoco?

--No te equivocás, lo que sucede es que no cumpliste conmigo esta mañana , -dijo Gisela haciendo trompitas-.

--A mí me pasa que después de lo que contó Gisela del altercado de anoche me entró miedo y es difícil que pueda dormir , -dijo Cielo con cara de pícara-.

--A mí no me mires, ya sabés que con vos siempre soy materia dispuesta , -acotó Kande -.

--  Siendo así, terminamos las copas y vamos a ver qué pasa.

Era al pedo hacerme rogar, sus aromas a hembras parecían taladrarme las fosas nasales y el recorrido era claro, nariz, cerebro y miembro.  Hasta ahí tuve tiempo de pensar porque no bien me senté en el sofá, la rubia y la pelirroja se me tiraron encima para comenzar a comerme a besos, la morocha subida de tono tampoco se quedó quieta y comenzó a aflojar el cinturón de los pantalones.  Levanté la pelvis para ayudarla y hasta los zapatos salieron cuando culminó el descenso de las prendas. Cielo parecía muy apurada y no esperó.

Se sentó rápido sobre mis muslos y buscó de acomodar el miembro en el agujero lubricado, enseguida lo logró y comenzó a descender penetrándose despacio.  Las otras dos no se quedaron quietas y pasando las cabezas por debajo de los brazos de la rubia se prendieron a sus tetas y a sus pezones como mamones hambrientos, con esto se descontroló y se dejó caer, el gemido fue entremezclado y los ojos lagrimearon cuando el glande chocó en su interior pero apenas si tardó segundos en recuperarse y comenzar a subir y bajar por el ariete.  Al alcance de mis manos tenía un culo renegrido y uno, otrora rosado aunque en ese momento oscurecido por el sol y a ellos me dediqué.

La rubia se procuró su placer sin esperar mucho, el gemido fue largo acompañado de un suspiro profundo y las otras, con dos dedos hurgando en sus anos no tardaron demasiado en seguirla, el concierto de gemidos y las contracciones fueron más que notorios, quedaron las tres temblando por el placer recibido pero quietas, una abrazada a mí y la morocha y la pelirroja abrazadas a la cintura de la rubia continuaban con las cabezas en su pecho. Cielo salió despacio del miembro entumecido y cuando Gisela se iba a sentar Kande la detuvo y nos dijo que era mejor que nos fuéramos a la cama, recogió mi ropa y nos apuramos para llegar.

Una vez en la habitación quedó más que claro que, estando de a tres o de a cuatro, eso de “hacer el amor” no cuadra, queda bastante de lado, hay que follar, coger, fornicar, curtir, embocar, denle los nombres que quieran y en ese momento, los cuatro estamos enfrascados en eso.  Parecía que se habían puesto de acuerdo porque lo que recibió Cielo lo quiso recibir Gisela que se sentó apurada sobre lo deseado y recibió las mamadas en las tetas tal como lo hicieron antes con la rubia.  Aquí el tema fue más escandaloso por parte de Cielo pues al comenzar a hurgar en su culito, como pasaba siempre la “dio vuelta” y orgasmó gritando y moviéndose como electrizada al grito de “el culo noooo” .

No quise “escuchar” pero estaba seguro que tanto Kande como Gisela esperaban e incluso buscaban esa explosión de placer de la Informática rubia y, para que negarlo, a mí me encantaba verla terminar así.  Luego fue el turno de Kande en la misma posición y las dos más chicas poco menos que la enloquecieron.  La “negra” manejaba sus músculos vaginales apretando el miembro a medida que avanzaba lentamente en el descenso, gozaba horrores con eso y me hacía gozar hasta casi elevarme a un punto de no retorno.  Me llevaba a donde ella quería hasta que se prendieron de sus tetas anexando dedos a su vagina y a su soberano culo, allí se olvidó un poco de mí.

Comenzó a moverse desencajada y al grito de “hijas de sus buenas madres” no pudo retener el orgasmo, no se privó de gritar su placer con ganas, hasta dejarse caer como una bolsa amorfa encima de mí pecho.  Recuperaron rápido las ganas y repartieron besos a granel y sí, algunos me tocaron a mí que las miraba extasiado por su entrega.  Cuando parecía que el miembro se amorcillaba y me deleitaba acariciando sus nalgas tersas Cielo se percató y lo engulló hasta que llegó a su garganta haciéndolo reaccionar de inmediato.

“La promesa, la promesa” , -dijo la “colo” - y se puso en cuatro para que maltratara un poco su culito y ya no con dedos, las otras dos las imitaron poniendo las tres sus cabezas en las almohadas, me di cuenta que así me iba a costar porque no podría afirmarme bien para entrar y salir de una y otra, entonces hice que se colocaran en el borde de la cama, lo hicieron y el espectáculo de sus caderas y culos expectantes se tornó inexplicable con palabras.  Creo que el oso y yo nos enloquecimos porque al acercarme al de Cielo y pasar la lengua por su vagina el aroma nos enardeció.

Fue la lengua taladrando el agujerito marrón y los dedos jugando con su vagina y clítoris hasta llevarla al punto del orgasmo, allí en ese punto encaré el glande y no me detuve hasta chocar con sus nalgas, ella y yo sabíamos lo que sucedería, indefectiblemente sentiría la intromisión y se descargaría gritando y vaya que sonó fuerte su exclamación pero enseguida comenzó a moverse para acompasar mis entradas y salidas, no fueron muchas, su calentura le impedía esperar y se dejó ir en un grito como de agonía, temblaba y sollozaba cuando salí de ella y me ocupé de las ancas de Gisela .

“Me encanta Gonzalo, quedate a vivir ahí” , eso fue lo que dijo cuando mi cara se incrustó entre sus cachetes y ensalivé toda la zona jugando también con su clítoris diminuto.  La pelirroja, aunque lo esperaba, sabía lo que se venía y mientras estuve ocupado con Cielo dilató el orificio con sus dedos.  Así y todo no pudo evitar gritar y exclamar, “¡por Dios, esto no es lo mismo que el plástico, seguí, seguí!” .  Su culito era el más chico de los tres pero lo movía como si estuviera encantado y tampoco aguantó demasiado, su orgasmo fue sin gritos pero muy intenso y a ella le extraje un poco de energía, no lo había pensado pero fue como si me lo hubieran pedido.

Esperando que Gisela aminorara un poco sus temblores y contracciones apoyé también la mano sobre uno de los cachetes de Cielo y la cansé aún más.  Con Kande fue distinto, con ella me tomé más tiempo y mientras mi lengua entraba unos centímetros en su culo, le hice una especie de “pajita” a su clítoris sobresalido y la hice terminar, parecía que tenía escalofríos y sonaba sollozante, no dejé de jugar en el lugar y cuando noté que se contraía nuevamente penetré su orificio como le gustaba.  El gemido de placer fue contagiante y mis movimientos se aceleraron como para romperlo.

Me daba cuenta que trataba de apretar sus músculos pero era tal el traqueteo y el placer que sentía que no podía lograrlo, ya estaba a punto y aferrando con fuerza sus negras caderas entré hasta lo más que pude y acabé un río en el fondo de sus tripas.  Reaccionó tal como esperaba, al sentir el líquido caliente que la invadía, explotó gritando su placer y trataba de lograr el imposible de sentirse más llena de carne en barra.  Apretaba las sábanas con sus dos manos y empujaba sus caderas contra mi pelvis como si quisiera devorarme por ese lugar, fueron segundos hasta que desistió y se dejó caer de bruces sobre la cama respirando agitada, no quería más y se notaba.

Ninguna de las dos chicas quiso quedarse, se movieron e incorporaron a duras penas, estaban felices y satisfechas, nos saludaron haciéndolo saber y luego, como pudieron, tomaron las ropas y abrazadas se fueron a dormir a su habitación. Kande se movió arrastrándose hasta su lugar de la cama y se giró mirando el techo con las manos por detrás de su nuca, su pecho brillaba por el sudor y, al tirarme a su lado me miró con dulzura, ninguna mujer me había mirado así, me hacía sentir un hombre pleno y más aún cuando se “enroscó” a mí para dormir en su posición preferida.

En la mañana, casi llegando al almuerzo porque eso que decía un militar argentino, “hay que levantarse temprano, al pedo pero temprano” no iba conmigo, no le había dado bola antes siendo un “pelagatos” y ahora, sin compromisos ni términos que me apretaran, menos que menos, nos pusimos a ver las noticias de último momento, a la par que Gisela leía para sí todo lo que aparecía en los medios escritos, Internet de por medio.

Con los datos y las grabaciones que les llegaron estaban todos alterados, los medios gráficos porque tenían material para explotar, los medios televisivos porque podían hablar de las pelotudeces que quisieran respecto a este caso y la Fiscalía y la Policía porque no se podían hacer los boludos ni ocultar nada.  Habíamos “pateado el avispero” y llovían los allanamientos, las órdenes de detención y los procedimientos.  De la Agencia, la única que zafó porque juntó unos billetes y se mandó a mudar, fue la tal Greta , lo dejó al marido y a los otros miembros de la Agencia con todo el bardo encima, comerciantes detenidos había de todos los rubros, Policías que hicieron la “vista gorda” con las denuncias de robo y hasta alguna Compañía de Seguros.

Gisela me preguntó si quería que la buscara a la tal Greta por medio de los satélites y los programas de Reconocimientos Faciales y le dije que no, que ya habíamos logrado lo que queríamos y no nos íbamos a convertir en un cuerpo policial alterno.  Esos programas nos servirían a nosotros sólo para ubicar a quien nos jodiera y escapara de la Justicia local y si bien es cierto que esa mujer entraba dentro de esas características, por el momento, no tenía ganas de “revolver mierda” pues para hacer lo que decía Gisela había que averiguar toda una serie de cosas que nos orientaran y lo que yo quería era dar una “vuelta de página” con este tema.  Ya bastante nos habíamos involucrado.

También le dije a Kande que si conseguía comunicarme con cierta gente, esa noche tenía que encontrarme con ellos a cenar y no era necesario que me esperara despierta, aprovechó para decirme que tenía ganas de ir a cenar a lo de Patricia y Kaila y que iría con Cielo , Gisela, Virginia y Rocío porque querían mostrarle todas las fotos del viaje a Hong Kong y chusmear un rato más ya que la última vez mucho no pudieron mostrarle y les faltó todo lo de Madagascar y Zulma .  En otras palabras, juntarse para hablar de “cosas de mujeres” , lógicamente, le dije que me parecía bien.

Después del almuerzo me encerré en el despacho y la llamé a Sofía , no sabía si podía contar también con María Victoria pero me había quedado “caliente” con el hecho de que no me hubiese avisado que tenía una reunión, es cierto que me había venido bien por el tema de los camiones pero ese “no avisarme a tiempo” se juntaba con la idea de que me había equivocado con la capacidad del marido para el puesto que tenía y alguien iba a “pagar las consecuencias” con su conchita estrecha y su culito.

Le estaba por dar el “SEND” al celular y la “voz interior” me hizo reflexionar, “¿vos la vas a llamar?”... Juro que sentí vergüenza y casi tiro el teléfono…

--  Me alegro que te aparezcas para avisarme cuando voy a cometer una cagada por no pensar, tendrías que aparecer más seguido.

--  “No es necesario Gonzalo , lo que estuviste haciendo lo has hecho bien, sólo apareceré cuando estés por hacer algo que no se condice con tu nivel o te pueda generar algún peligro, de todos modos lo mío es apenas un toque de reflexión, vos podés seguir con tus planes, aunque si algo sale mal el “tirón de huevos” no lo voy a recibir yo, jajaja”.

--  Parece que estás con ganas de bromear y voy a ser el blanco de tus chanzas.

--“No, para nada y ya que estamos aprovecho la oportunidad para decirte que actuaste muy bien en Hong Kong , yo hubiera hecho una “limpieza” inspirada en el miedo y el horror pero vos lograste un respeto mayor, además me regalaste un poquito de esas dos chinitas que fueron deliciosas”.

--  Eso no te lo puedo discutir aunque me quedó un gusto “a poco”.

Me encantaba hablar tranquilo y sin interrupciones con el YAOGUAI , la otra habitación insonorizada de la casa era mi despacho así que podía despacharme a gusto sin parecer un loco hablando solo.

--  Lo que sucedió con la cuñada y la prima de Chao estuvo bien pero me quedó “picando”…

--“A mí no me cuentes, ¿te olvidás que lo sé todo?  Con esa chica Shui vas a tener que ponerte serio. Chao es un buen chico, excelente en su trabajo aunque sin ningún tipo de experiencia en mujeres pues “ir de putas caras” no te asegura conocimientos pero ella, mientras él estuvo distanciado adquirió conocimientos y experiencias, le encantan los “pedazos” occidentales y el novio es muy “oriental” en eso”.

--  Por lo que me decís es candidato a cuernos y de los grandes.

--“La china se sabe muy sutil aunque eso, para nosotros, es una tontería, no tiene opciones para disimular, viene aleccionada por lo que le contaron la hermana y la prima y va a querer su parte, el tema es que no es de “conformarse” y eso lo puede arruinar a Chao” .

--  Es decir que por tener quilombos con la mujer no cumpliría con el trabajo, ¿eso me querés decir?

--“Lo del trabajo es relativo, ella está a la altura de él o más alto pero tendrías que hacerle saber que al primer tropiezo y hacerlo sentir mal a Chao implicará que el YAOGUAI se encargue de ella”.

--  ¡Epaaa!, ¿tan taxativo vas a ser?

--“No, nada que ver, no pienso “hacerla polvo” pero eso ella no lo sabe aunque sabe que el YAOGUAI puede hacerlo si se porta mal, ¿me entendés?”.

--  Está muy claro, va a tener que quedar agotada y muy asustada.

--“Exactamente, hay un par de temas más antes de irme, primero, tu amigo Jorge va a tener que aguantar una revisión de sus papeles tal como se lo dijiste pero no quedará manchado en nada y el segundo tema es con Tai , anda preparando una habitación para él y la novia porque ella ya tiene los pasajes y las valijas armadas, se viene para acá el lunes o martes y con sorpresa, sí o sí Tai pasará a ser parte de las familias”.

--  Vamos Tai todavía, se va a poner recontento cuando lo sepa, si es que todavía no lo sabe.

--“No lo sabe y no le digas nada, es una sorpresa que ella le quiere dar y como él lo va a tomar bien, es mejor que los acontecimientos se desarrollen sin que sepa lo que va a pasar”.

--  Me estás dando una linda alegría.

--“Me alegro que lo tomes bien, sé como pensás con Tai y sé también que Maylín se mira y no se toca aunque está linda la china-colombiana.  Hasta otro momento.  Chau”.

Así como había aparecido de pronto, así se retiró y no valía el intento de llamarlo nuevamente para preguntar tonterías, yo respetaba eso y él sabía que lo hacía.  La charla con mi “voz interior” me hizo olvidar completamente de Sofía , de María Victoria y de las tonteras de Matías , me sentía fantástico con las noticias recibidas y en el único que podía confiar para que mantuviera la boca cerrada y se mostrara imperturbable era en Carlos y lo llamé a mi despacho.  Estaba en la pileta con los demás y vino corriendo poniéndose una camisa sobre el torso desnudo pero con bermuda y en ojotas.

--  ¡Linda facha tiene mi Mayordomo-Secretario!, menos mal que no vienen visitas sin aviso, jajaja.

--Disculpeme Gonzalo , deme un minuto que enseguida me cambio, vine corriendo apenas me llamó y estaba en…

--  Es una broma, está bien como estás.  Te llamaba porque necesito un favor.  Hay que preparar una habitación espectacular para una pareja pero tiene que ser “top secret”, la chica llegaría el lunes o martes y no la pienso mandar a dormir sola.

--Lo que me dice me intriga y mi lado femenino está más que inquieto.  ¿Quién es la chica?, ¿es la novia de alguno de los muchachos?, ¿cómo quiere que le arme la habitación?

--  Te lo voy a contar pero al mínimo gesto o infidencia te cuelgo de las pelotas en el árbol más alto, nadie, ¿entendiste?, NADIE debe saber nada, ni Kande.

--  Gonzalo, por favor, soy y seré una tumba para todo lo que usted me diga.

--  La chica es la novia colombiana de Tai, según me hicieron saber, vendría el lunes o el martes.  Él no sabe nada y no debe saber nada pero necesito un buen lugar para que se “acurruquen”, además parece que ella viene con “sorpresa”.

--Esto es una tortura Gonzalo , me muero de ganas de darle un abrazo de alegría al chino grandote.  El único lugar que se me ocurre es la habitación del altillo, privacidad no le va a faltar, tienen espacio, buena vista y no escucharán a nadie caminar por los pasillos en la madrugada.

--  Sos de lo que no hay, ahora estoy pensando en perforarte los tímpanos para que no escuches más nada.

--Nooo, sólo se lo decía a usted, soy ciego, sordo y mudo para los demás.

--  Ya lo sé y confió plenamente en vos, ocupate de ese pedido sin que se entere nadie.

Estaba seguro que Carlos armaría una habitación de ensueño, luego habría que ver como se adaptaba Maylín al cambio porque de vivir en contacto con el sol y el mar pasaba al medio del campo y a cambios de clima según las estaciones del año.  De otra cosa también estaba seguro, Tai no se alejaría de mi lado, su compromiso era de por vida y ella iba a tener que entenderlo pero, según el YAOGUAI , no habría problemas con esto.

El día no podía ser mejor y estaba eufórico, me fui a la pileta y me puse a tomar sol, algo que nunca hacía y se me acercó Kande para preguntarme si estaba contento por la cena que tendría, no noté celos ni algo capcioso de por medio, preguntó por preguntar, le contesté que no, que sólo estaba feliz y respecto a la cena, había suspendido todo, “si te quedás en casa, suspendo todo yo también y me quedo con vos” .  Le pedí que no lo hiciera porque tenía pensado darme una vuelta por los lugares que solía frecuentar antes, que andaba nostálgico.

--Vas a andar cerca de la que era tu casa, ¿por qué no te venís con nosotras?

--  Ni loco vida, no tengo ganas de aguantar cotorreos, las “cosas de mujeres” son “cosas de mujeres”, yo me los llevó a Roberto y a Danny para que me saquen a posibles “moscas” de encima y pasearé de boliche en boliche como antes, en una de esas la paso bien.

--Bueno, yo tengo ganas de ir a cenar afuera con las chicas, cualquier cosa me llamás.

Los llamé a Roberto y a Danny y les pedí que se prepararan para tal hora pues iríamos a recorrer boliches que yo conocía de antes, los dos que eran los más “fiesteros” de todos, estuvieron de parabienes, a los otros les dije que quedaban liberados pero que no anduvieran por tal zona, no quería encontrármelos.  Salimos después de Kande , yo iba en mi coche y ellos dos en la camioneta, era temprano para andar por los boliches y les dije por el intercomunicador que cenaríamos en una parrilla de la zona.  No sé que les sucederá a otros, para mí comer en esas parrillas casi al aire libre es una delicia, hasta la carne parece que tuviera otro sabor.

Luego de atiborrarnos de carne y de una buena sobremesa nos fuimos para uno de los boliches bailables al que solía concurrir, iba vestido de excelentísimo sport y la campera que llevaba, aunque era de verano, se denunciaba como de primerísima marca.  La playa de estacionamiento quedaba al otro lado de la calle pero frente a las puertas del antro, el cuidador seguía siendo el mismo, me reconoció y saludó con afecto, ya eso me puso mejor.  Los “patovicas” de la entrada del boliche habían visto el auto y la camioneta, no cualquiera andaba en un Audi de esas características, para más, los dos muchachos se pusieron a mi costado cuando crucé la calle y se percataron de que ya no era el mismo Gonzalo que conocían.

Les pedí a los chicos que no bajaran con armas, no pusieron objeciones aunque yo sabía que, de por sí, ellos eran dos armas letales caminando, vestían de sport y no llevaban las camperas.  El que oficiaba de Jefe de la Seguridad y estaba en la puerta por la aglomeración de chicas y muchachos jóvenes, me reconoció enseguida y me hizo una seña para entrar por la puerta que había a un costado de la puerta principal.  Me abrió desde adentro y me saludó sin saber si darme un apretón de manos o un abrazo, lo saludé estirando la mano pero con un grado más de intimidad porque además me acerqué y apreté su codo con la otra mano, lo llamé por su nombre preguntándole como estaba y me contestó...

--Bien, como siempre pero bien, pensábamos que no ibas a venir más por acá, se corrió la “bola” de que habías echado buenas y te habías olvidado de tus amigos pobres, jajaja.

--  La verdad es que fueron más que buenas pero no es un problema de olvidos, ahora las responsabilidades son distintas, de todas maneras veo que esto no ha cambiado nada.

--Jajaja, no te vayas a creer, hay algunas caras bonitas nuevas.

El “puma” como lo conocían al grandote de la Seguridad, era un hombretón que orillaba el metro noventa y cinco, grandote porque era enorme pero con cara de “tipo bueno” , andaba en los cuarenta años y no tenía el físico trabajado ni atemorizaba con su presencia pero nadie jodía con él, además del tema del boliche no se le escapaba una.  Muchas veces había conversado con él y les hacía una “radiografía” a todos con sólo mirar la fila de quienes estaban por entrar.  Saludó a los muchachos mirándolos a los ojos y me dijo al oído, “veo que no te andás con chiquitas a la hora de cuidar tus espaldas” .

Lo abracé para irnos al interior del lugar y le dije: “Nunca falta alguno que se cree “vivo” pero con ellos dos y los cuatro que quedaron en casa, estoy tranquilo” .  Ya en el interior observé bien el lugar y la gente que concurría, haber ido ahí no era caprichoso, la idea que me rondaba era la de armar un complejo de dos o tres boliches en uno y extenderla a varias ciudades del conurbano y hasta en la misma capital, quedaban pocas Familias y empresas por visitar y yo no comulgaba con los negocios empresariales y para estar detrás de un escritorio.  De todos modos, por lo que veía, había que cambiar todo, hasta el público…

Continuará…

Por favor, valoren y comenten, GUILLEOS1 se los agradece.