El demonio de nombre extraño. (19)

PREPARATIVOS - REUNIÓN - DONACIÓN.

De inmediato lo llamé a Chao , quería que me averiguara en qué lugar de Colombia estaba la familia que había que visitar, quería estudiar la posibilidad de aprovechar el viaje porque recordaba que en la lista que me dieron, había alguna familia en Colombia pero no sabía dónde (ese primer día, entre todas las sorpresas recibidas, debo aceptar que no le di mucha bola a la lista) . Chao me contestó rápido, la familia afincada desde siempre en ese país estaba en Cartagena de Indias , allí tenían una empresa de turismo que les brindaba a los turistas salidas de pesca y recorridos por las islas embarcados en lanchas de categoría.

Me aclaró también que en Colombia había dos familias, la otra se encontraba en la capital de Colombia , en Bogotá y era la familia oriunda de Venezuela pero habían emigrado hacía unos seis años porque la situación desde ese entonces era insostenible en ese país.  Según me contó muy por encima, el “Portador” anterior no se preocupó mucho por ellos pero, los ocho integrantes de esa familia fueron ayudados en conjunto por las otras familias y la empresa radicada en esa capital para montar una empresa de restaurant y transportes similar a la que tenían en Venezuela , le di las gracias al Abogado y le recordé que tenía que estar en la reunión del sábado.  Me lo confirmó y nos despedimos.

Cielo y Gisela me miraban y le pedí a la “colo” que pusiera en la pantalla grande el mapa de las islas que nos interesaban.  Hicimos los cálculos y no era para solucionar todo en dos o tres días.  Hasta la isla Antigua teníamos un viaje de 16 horas hasta el Aeropuerto Internacional V.C.Bird en Saint John , la capital de Antigua y Barbuda y luego tomar un catamarán rápido que nos llevara hasta la isla de Barbuda que estaba situada a unos 340 kilómetros y esperar al día siguiente para regresar, otra opción era alquilar un yate turístico para que nos trasladara y nos esperara, hacer lo que teníamos que hacer, rescatar la documentación que tuvieran y volver hasta Antigua con ese yate y subirnos al avión para largarnos de allí.

No era muy aconsejable, en una supuesta investigación, la tripulación del yate nos recordaría y reconocería.  Tenía otra idea en mente pero antes lo quise consultar con las chicas y los muchachos, sabiendo lo que quería me ocupé de preguntar si Cielo o Gisela podrían monitorear los movimientos de los fulanos en Barbuda cómodamente sentadas en una reposera ubicada en la isla principal (Antigua) y comunicarse con nosotros con el celular satelital o sentada en un yate en pleno mar y me dijeron que no habría inconvenientes para hacerlo.

Al exponerles la temática del catamarán público para trasladarnos hasta Barbuda y hacer el trabajo, ni Kaila ni Siara ni ninguno de los muchachos vieron esto como factible, quedaríamos supeditados a horarios y muy expuestos con la tripulación y otros pasajeros, yendo en un yate alquilado, la exposición sería con la tripulación del mismo, Andrey , la “cantó” más clara, “ni eliminando a la tripulación serviría, sabrían enseguida que fuimos nosotros, además el avión sería muy identificable, de bandera argentina y con todos nuestros datos” .

Entonces les expliqué el otro plan que se me había ocurrido, “tenemos que visitar a una de las familias que está ubicada en Cartagena de Indias en Colombia, son casi dos mil kilómetros por mar, la familia tiene yates turísticos para la pesca o para el recorrido entre islas y la tripulación me merecería absoluta confianza, Tai sabe bien que no abrirían la boca por nada.  Dejamos el avión en Colombia nos pasamos dos o tres días en el yate recorriendo islas, llegamos al caer la noche, conociendo por el satélite adónde van a estar y antes de que amanezca volvemos a Colombia en el mismo yate.  Ni siquiera hay que presentar pasaportes en ninguna isla” . La idea prendió enseguida y, según opinaban ellos, si era un catamarán rápido, la distancia podría ser recorrida en menos de un día y medio, repostar en alguna isla y seguir implicaba efectivamente que el cálculo de tres días estaba bien.

Necesitaba que dos se quedaran para tratar de ubicar a la madre y a la hermana del tal Luis María .  El YAOGUAI me había hecho saber que, sin que ellas lo supieran, mucha información estaba guardada en la casa materna, en la habitación que él solía ocupar, no supo darme el nombre del pueblo pero sí que estaba cerca del límite con la provincia de Córdoba y, por allí teníamos a Coronel Charlone , Santa Regina y Villa Sauze entre otros.  Con eso bastaba, había sólo dos o tres pueblitos de muy pocos habitantes que reunían esas características y/o se buscarían más en la zona.

Dado que el viaje al Caribe era una cosa y buscar a unas personas en una Localidad de la Provincia de Buenos Aires era otra, propuse que se sortearan los lugares entre siete para esa posibilidad menor, el hecho de tratar con una familia china eximía a Tai de esto.  No hubo necesidad de sorteo, Blago resultó no ser muy amigo de viajar en barco, prefería evitarlo si se podía y Andrey , iría si era necesario pero no le gustaba el Caribe , se llevaba mejor con la nieve y las montañas.

Solucionado ese inconveniente lo llamé a Chao para avisarle que viajaríamos a Colombia en las últimas horas del domingo, él se ocuparía de avisarle a la tripulación, hacer las reservaciones en el hotel Hilton de Cartagena para todos, alquilar las camionetas y hacerme llegar la dirección y el nombre del Jefe de Familia de la zona.

Las llamé a las Informáticas para que se enteraran de los planes, apenas entraron al despacho y cerraron la puerta les pedí que esperaran paradas frente a nosotros, se extrañaron todos y seguí hablándoles a los custodios…

-  Como ustedes ya saben vamos a parar en Cartagena de Indias en el Caribe colombiano y desde allí trasladarnos por mar hasta las islas pertinentes, disfrutando en ese trayecto de otras hermosas islas que encontremos, ahora bien, van a tener que elegir que es lo que hacemos con estas dos chicas, si eligen que vaya una sola, saldrá por votación secreta anotando el nombre en un papel, sino van las dos.

Lo hice muy explicativos para que las dos supieran que era un viaje para no perderse pues aparte del trabajo en sí, eran lugares hermosos para conocerlos y disfrutarlos.  Todos entendieron que era una especie de “castigo” para Gisela aunque ninguno pensó en marginarla, así y todo, mentalmente divertidos por hacerle pasar un mal rato a la “colo” , se mostraron exteriormente serios a la hora de hablar para decidir. Cielo pensaba en que “cagada” se había mandado por la que pudiera quedar afuera pero Gisela daba por descontado que quedaría eliminada de la elección, según ella pensaba, llevaba varias en contra y para colmo de males ya había ligado un buen reto de parte de todos.

Las miraban y no decían nada, sólo Andrey me pidió los papelitos para votar e hizo mención al tema de hablar menos de todo lo que pasaba.  La pelirroja estaba pálida y uno por uno me fueron entregando los papeles doblados.  Los leí tomándome mi tiempo y luego los junté encimándolos uno arriba del otro. “Les guste o no, la decisión está tomada, salimos para el aeropuerto el domingo a las 22,30 ó 23.00 horas, TODOS” .

La risa fue general y Gisela respiró como si le hubieran sacado una montaña de encima, todos habían escrito un “2” en el papel y eso me hizo sentir bien.  Les di los papeles a las chicas y les dije:

-  Vamos a estar aproximadamente una semana en Cartagena y luego tenemos que ir a Bogotá, tengo que cumplir allí aunque sólo sea por unas horas y, si está todo bien, nos volvemos enseguida”.

Salimos todos del despacho y Carlos nos estaba esperando para avisarme que estaba la cena lista y que, salvo el hielo, las masas y los números en vivo, ya no faltaba nada para la reunión de mañana.  Le di las gracias y nos lanzamos a devorar las exquisiteces que nos había preparado Zulma.

En el momento de los cafés lo llamé a Carlos a un aparte y le conté que viajaríamos por una semana o diez días a Colombia , que me la iba a llevar a Zulma y quedaba solo con Patricia , Blago y Andrey realizarían un trabajo en otro lado pero regresarían antes, también le recomendé que averiguara o se llegara hasta la casa de Virginia para averiguar cómo se encontraban ella y la madre, me contestó que me quedara tranquilo y me pidió que disfrutara.

Cuando volvimos a la mesa noté que Gisela me miraba, yo no la quise mirar, me hice el desentendido pero “escuché” lo que pensaba, “no sé como pedirle que me perdone, tengo ganas de que me rompa el culito en mil pedazos o que me lo llene de “chirlos” pero ni loca se lo voy a decir, ya me mandé una “cagada” atrás de la otra y no quiero terminar de “embarrarla”, encima debe estar enojado porque ni me mira” .

Y sí, ¿para qué discutirlo? , los pensamientos de Gisela alababan mi ego y me calentaban pero no dejé de pensar en que le había dicho a Zulma que la ataría a la cama y la haría gozar, la sumisión manifiesta de la chef, aunque leve, que era como me gustaba más, me ponía a mil, de hecho dije que me retiraría a descansar porque la erección se haría muy notoria.

Eran ya las once de la noche y sabiendo que el siguiente sería un día agitado todos se iban a retirar a descansar más temprano, puse la alarma del celular a las 00,30 para no tener que seguir de largo y me acosté un rato.  A las 00,35, después de avisarle con un mensaje, salí para la habitación de Zulma , me estaba esperando, sentada en la cama, apoyaba su espalda en el respaldo, bien peinada, un leve toque de maquillaje en los ojos, los brazos extendidos hacia los costados y las piernas estiradas con los tobillos cruzados, su única vestimenta era un camisón de color morado que apenas cubría su pubis y resaltaba sus hermosas tetas.

Sólo me miraba con ojos de deseo y no hizo ningún gesto, se mostraba entregada esperando que todo lo hiciera yo, lo que si noté es que sobre una silla cercana a la cama había varios pañuelos largos tipo chalina e imaginé para que los había sacado.  Subí a la cama ya desnudo y con el miembro más que endurecido, puse las piernas al costado de mi cuerpo y me acerqué a su cara, ella no se movía, solamente abría la boca esperando que entrara por allí y no la hice esperar.  Entré hasta la mitad y ella esperaba más porque se aferró a mis glúteos y empujó hasta que pegó su nariz a mi pubis.

Los ojos le lagrimeaban y la saliva le corría por la comisura de los labios, otro pequeño empujón, buscando lo imposible de penetrar más, le produjo una arcada que aguantó sin sacarla de la boca.  Los movimientos de entrada y salida se hicieron más rápidos hasta que me clavó las uñas en las nalgas y se quedó quieta con el miembro incrustado en la garganta, los temblores de su cuerpo denunciaban su orgasmo.  Fui yo quien se salió y la miré con seriedad, “disculpame Gonza, no me pude aguantar, seguí, por favor seguí que quiero saborear tu leche” .  No seguí allí pero la respuesta se la di apretando fuerte sus tetas y luego sus pezones erguidos, se aguantó el dolor y se estremeció toda.

“Ahora vas a ver lo que te sucede por haber terminado sin esperarme” , la puse boca abajo y tomando uno de los pañuelos se lo até a la muñeca de una mano y el otro extremo al respaldo de la cama, hice lo mismo con la otro mano diciéndole al oído, “ahora le toca a tus piernas y te va a quedar el culo ardiendo por los chirlos y a mi disposición para hacer con él lo que quiera” .

Se estremeció toda con esto que le dije, la piel se le erizó y ella pensaba, “sí, sí, lo quiero a él y quiero que me provoque dolor pero que no sea demasiado, que no se convierta en el ser despreciable que una vez conocí” , tal como yo pensaba, lo de Zulma no llegaba al extremo del masoquismo y yo sabía que lo que haría con ella sólo le provocaría placer.

Una vez atada, le coloqué dos almohadas debajo del vientre y quedó con su culo elevado, abierto y con sus dos agujeros expuestos.  Colocándome a un costado metí la mano para tocar y jugar con uno de sus pechos acariciando y apretando con un poco de dureza su pezón y la otra mano golpeó una nalga, el suspiro y gemido de placer no se hizo esperar, luego, con esa misma mano acaricié su espalda descendiendo hasta llegar nuevamente a esa zanja deliciosa que dividía esas dos mitades hermosas y endurecidas.

Sin avisarle, tres dedos ingresaron a su vagina anegada, el mayor, el índice y el pulgar y éste sólo para lubricarlo porque pronto se “perdió” en el agujero de su culo.  Le pedí que no hiciera ruido y comencé a mover la mano con velocidad, el placer la hacía moverse para todos lados y mojaba la almohada con los jugos que destilaba.

El orgasmo se manifestó de improviso y no pudo evitar el grito que muy rápidamente sofrenó, “te pedí que no gritaras y no me das ni cinco de pelota, ya lo voy a solucionar” , abrí un cajón y saqué una tanga, la hice un bollo y se la metí en la boca, después le até un pañuelo sobre la boca para que no pudiera gritar, cada cosa que le hacía generaba un estremecimiento aunque jamás un gesto de rebeldía o disconformidad. “Ya está, ahora acaba las veces que quieras” , volví a los dedos y a una velocidad que se incrementaba, no tardó en tener orgasmos cortos y repetitivos y trataba de girar la cabeza mirándome con los ojos enormes y pensando, “me está matando a polvos, no lo aguanto, es una tortura, ¡por Dios!  ¿Qué es esto?” , el pellizco en el clítoris la completó y se estremeció quedando luego como laxa.

“No te duermas, yo todavía no termino con vos” , -le dije- y abriendo sus cantos penetré su culo con firmeza para detenerme sólo cuando choqué mi pelvis contra sus nalgas, se movió como loca y no pudo gritar por la mordaza pero de haber podido hubiesen venido hasta los de Seguridad para ver qué pasaba.  No me detuve, entré y salí con ganas y fuerzas hasta que a la quinta o sexta vez con estos movimientos comenzó a mover el culo tratando de acoplarse al ritmo y noté que el dolor de la penetración brusca había dado paso al placer.  Volvió a tratar de mirarme y saliendo de ella, tomé otro pañuelo para taparle los ojos.

Cuando entré nuevamente lo volvió a sentir pero los movimientos de su cuerpo fueron distintos, se emborrachó de placer y gritaba mentalmente enloquecida mientras yo machacaba a gusto y sin ganas de terminar en el culo complaciente de Zulma , “¡por Dios, por Dios!, otra pija, una lengua, algo más mis tetas van a reventar, no me aguanto tanto placer” .  Me dio una idea con esto y mataba dos pájaros de un tiro, las consecuencias se podrían “manejar” y tomando el teléfono le mandé un mensaje a Gisela pidiéndole que viniera sola y en secreto hasta la habitación de Zulma .

No bien entró abrió los ojos grandes por la sorpresa pero rápidamente se sacó el camisolín y la tanga y subió a la cama, “ayudame con esto, seguí vos” , -le dije- y le dejé el culo abierto a disposición.  No preguntó nada, se arrodilló y la lengua se perdió en el culo mientras una mano casi que se metía por completo en la vagina mojada.  Ella estaba igual y colocándome detrás la penetré por la vagina, el ¡Síííííí! sonó clarito y Zulma que ya se había dado cuenta que una mujer estaba “metiendo mano” en sus intimidades y, aún sin saber quién era, se dedicó a seguir gozando.

La pelirroja tampoco aguantó mucho, me la cogía con todas las ganas y a un ritmo acelerado y comenzó un orgasmo con convulsiones, la frené absorbiendo parte de su energía y se lo corté ingresando en ese culito poco usado pero ahora utilicé una mano para taparle la boca e impedir el grito que mi palma absorbió.  Ésta se la debía a la “colo” y le dije al oído que no pararía hasta que estuviera terminando y contenta de tener el culo abierto.

Cinco o seis penetraciones más y la abandonó a Zulma para dejarse caer encima de ella, morderla en el omóplato y terminar con temblores y convulsiones que casi me despiden. Zulma también se movió y acusó el mordisco pero fue todo lo que pudo hacer, además de aguantar.

Mi acabada, bastante copiosa, en el fondo de sus tripas potenció su orgasmo y no podía parar de temblar, cuando salí de allí no tenía fuerzas ni para cerrar el boquete que había quedado pero pocos segundos después se giró para comerme la boca y darme las gracias porque necesitaba que la cogiera de ese modo.

Le pedí que se ocupara de desatarla y lo hizo bromeando con ella y acariciando partes de su cuerpo, tanto que cuando estuvo completamente desatada la “sumisa” se arrojó sobre la más joven para comerle la boca, bueno, en realidad, se la comieron las dos y se apretaban las tetas y cuando no que una mano u otra bajaba a perderse en la entrepierna contraria.

Me levanté y fui al baño, estuve unos instantes allí y cuando regresé, el 69 que realizaban repercutió de inmediato en mi miembro entredormido.  El suculento trasero que tenía a mi disposición era el de la cocinera y penetré su vagina mientras la lengua de la Informática jugaba con mis testículos y con el pistón que entraba y salía.

El chirlo en la cadera de Zulma y el grito para que no la abandonara, sirvió para que su boca se volviera a fundir con la vagina depilada de Gisela que gritaba con la cara incrustada en la más veterana.  Parecieron absorberse el clítoris a la vez porque mientras se agitaban presas del orgasmo yo terminé dentro de lo más profundo de la chef “robando” un poco más de energía con las manos aferradas a su cadera.  Quedaron las dos como para pedir una tregua.

Yo no quería más, energías me sobraban pero… ya estaba, no daba para más, el sexo había sido genial y estaba satisfecho, era como que ya había “cumplido” .  Ellas, tampoco querían más y quedaron desparramadas boca arriba, cansadas y maltrechas, las pocas energías que les quedaban apenas si servían para sonreírse y mostrarse feliz. “Chicas, me voy a ir, ya saben, sin preguntas ni comentarios posteriores, estuvo genial pero hay que madrugar” .  Las dos se incorporaron, me besaron con ganas y se fueron para el baño, yo no las esperé, me puse el short que traía y me fui a mi habitación.

A las ocho y media de la mañana ya estábamos todos desayunados y listos esperando a los invitados, desde temprano estaban los asadores con las parrillas y el fuego, había cinco costillares clavados a los hierros y listos para que se les fuera arrimando el fuego, habían arribado las camareras (tres) y los camareros (2), además de los dos muchachos y una joven que trabajarían con los chicos.  Los de la casa estaban todos de jeans, en el caso de las chicas elastizados, atractivos, atrapantes y, “mirables” , remeras y zapatillas, salvo Carlos que vestía pantalón y saco sport calzando mocasines náuticos, la calidad de las ropas era indiscutible y seguramente las mujeres invitadas lo notarían.

Las mesas, con sus manteles correspondientes, se habían armado debajo de la sombra de unos seis árboles que había cercanos a la casa y se estaba muy bien allí.  A las nueve y media de la mañana comenzaron a aparecer, parecía que habían estado en las inmediaciones para juntarse y llegar todos juntos pues los autos entraron en fila india, era mejor así pues las presentaciones se harían prácticamente de una sola vez.  Los esperamos en la puerta de la casa y fue el Intendente el primero que se arrimó a saludar, les di la bienvenida a mi casa y los presenté uno por uno con los nombres y las funciones a que se dedicaban pero dejé muy claro que en realidad éramos una familia.

Los chicos se desparramaron apenas salieron de los coches para arrimarse a los juegos o correr por el parque, las madres los quisieron parar y les dije riendo que de ellos se ocuparían Superman, El Hombre Araña y la Mujer Maravilla, lo entendieron enseguida cuando se acercaron los dos muchachos y la chica con los trajes y fueron acaparados por los chicos, eran bastante más de doce porque se plegó algún sobrino o amiguito pero no hacía a la diferencia.  Algo no habíamos tenido en cuenta, aparecieron cinco adolescentes de unos quince o dieciséis años y eso lo solventaron enseguida Cielo y Gisela acercándose a ellos para ponerse a conversar muy animadamente.

Las mujeres eran todas jóvenes que no llegaban a los treinta y cinco años, salvo la esposa del Jefe de calle que rondaba los cuarenta y pico, la diferencia notoria de físico y trato estaban marcadas en la esposa del Intendente y del Secretario de Gobierno junto a las esposas del Comisario y el Sub., ya me ocuparía yo de “escucharlas” y saber cómo eran realmente.  En el caso de los hombres, no me gustaron para nada el Secretario de Gobierno y el Subsecretario, el Primer Concejal me pareció un tipo “manejable” y en el caso de los policías, no me agradó el Primer Oficial, el Jefe de Calle me pareció un “cumple órdenes” , no sólo en su trabajo sino también en la casa.

Cuando tomábamos una copa en las instalaciones cercanas a la pileta y después de que Carlos les enseñó las habitaciones que podrían usar, fue precisamente la esposa del Jefe de Calle, la más veterana de todas, quien preguntó si era cierto que la casa había funcionado como prostíbulo de muy alto nivel.  Hubo caras de disconformidad por la pregunta pero me sonreí y la contesté como algo muy natural…

-  Sí, es verdad y según parece de muy alto nivel, incluso hay habitaciones en el sótano que ahora están acondicionadas pero seguramente se utilizaban para prácticas no tan normales, sólo espero que no haya quedado ningún fantasma erotizado dando vueltas” , todos rieron con la respuesta y ninguno dejó de entender lo que quería decir, trascartón los invité a todos a recorrerla.

Una de las señoras le preguntó algo a Andrey y éste la miró sin contestarle, por ello les aclaré a todos que había tres custodios que no hablaban el Español ni lo entendían, si querían preguntarle algo, que por favor lo hicieran lentamente porque tenían traductores de alta generación para comunicarse o que lo hicieran en Inglés porque todos hablaban ese idioma.  A la casa ingresamos todos y a mí me acompañaron Kaila y Siara. Estaban admirando la disposición del living con las columnas e imaginando a las chicas “trabajadoras” bajando las escaleras e hizo su entrada un apurado Chao.

Pidió disculpas por la demora alegando que estaba enfrascado en solucionar unos problemas para el alojamiento en Cartagena .  Lo presenté a Chao como mi Abogado personal y a la vez dije que era el Director para toda América del Estudio Jurídico en el que también era el socio mayoritario.  El Secretario de Gobierno dio su opinión al respecto…

-  Eso debe implicar un ejército de Abogados en todo el Mundo, lo convierte a usted en casi intocable , -le contesté al toque-…

-  Efectivamente, soy intocable pero todo obedece a que nunca hago nada que se salga de la Leyes de cada país al que me dirijo, es una ecuación simple” .  -El Comisario sólo se sonrió, daba por descontado que yo nunca figuraría en nada ilegal que apareciera-.

Cuando bajamos al sótano, las “películas” que se hicieron fueron distintas, fundamentalmente las mujeres.  Las dos oficinas en que se manejaban las Informáticas estaban cerradas y se notaba que la cerradura era de lectura de huellas dactilares y ocular, les hice referencia a que allí adentro estaban todos los equipos tecnológicos de última generación para todo lo que era informaciones, “empresariales, lógicamente” , esto lo dije con un poco de sorna que sólo el Comisario entendió.

Luego pasamos por la cocina y la que se sintió orgullosa con los comentarios de las mujeres fue Zulma quien, con un par de ellas, se comprometió a darles unas recetas de su invención.  Al volver al exterior me di cuenta que ningún vaso estaba vacío, Carlos con los camareros se ocupaba de que no les faltara.  Varios de los chicos estaban en la pileta deslizándose por el enorme tobogán inflable y se habían unido los adolescentes junto con Cielo y Gisela , que lucían biquinis y aunque no eran tangas, denunciaban el hermoso cuerpo de ambas.

De inmediato las demás mujeres quisieron cambiarse para darse un chapuzón antes de almorzar y se fueron a ello, al rato salieron todas con distintos trajes de baño y se notaba que las esposas de los Políticos querían mostrar sus atributos porque sus trajes de baño eran mínimos, no estaban mal pero yo sabía que los físicos de las custodios las opacarían y ni hablar de Siara que apareció con un biquini amarillo que atrajo de inmediato las miradas de todos.

El que se mostraba “entrador y mujeriego” era el Secretario de Gobierno e hizo un comentario sobre el físico de la africana y lo que le haría, el Intendente de inmediato entre risas le acotó, “por lo que me dijo Gonzalo de ella, hay que tratarla con mano de seda porque es mortal” … “Se nota que es mortal y espectacular” -dijo el tonto y cornudo- y esto no era peyorativo, la había “escuchado” pensar a la mujer y no hubiese tenido problemas en “pasarse por la piedra” a cualquiera de los muchachos, sin contar que me miraba con “cariño” .

-  Lo que sucede es que lo de “mortal” es literal, como todos mis custodios tiene cinturón negro en cinco o seis de las más letales Artes Marciales por eso, como todo conocedor de estas Artes, sabe lo que puede hacer y trata de no exponerlas” .  El tipo no dijo nada más pero tragó saliva.

Los hombres nos sentamos en una esquina de la mesa y le pregunté a Chao que había pasado con el encargo, “tengo que viajar mañana y necesito algunas respuestas” les comenté a los demás. Chao me dijo que las reservaciones en el Hilton Cartagena ya estaban todas aunque tuvo que poner a la tripulación en otro cuerpo o ala del hotel y ya estaban alquiladas las camionetas.  Aprovechando que estaba el Comisario escuchando, le pregunté cómo había arreglado lo de la Seguridad en la mansión…

-  Eso es para hablarlo más tranquilo, tengo algunas divergencias con el Director General …

-  No te hagas problemas con eso, creo que ya tengo el hombre para un reemplazo, lo arreglamos luego de que regrese .

El Subcomisario se metió en la conversación, “imagino que habla del Director General para Argentina de la empresa de Seguridad Mundial, me dijo el Comisario que usted era el dueño y era muy estricto en sus exigencias” , enseguida “escuché” que le había confiado eso sólo y que no había llegado a más y me alegró porque se había demostrado discreto.  Le contesté:

-  Para mí es un dos más dos, si tengo al frente a un hombre que supuestamente entiende de Seguridad y de trato con subalternos, tiene un puesto de primerísimo nivel, se codea con personalidades, gastos de representación enormes y otras varias ventajas pero no sabe tomar decisiones rápidas o se “duerme en los laureles”, no me sirve a nivel empresarial ni personal y casi que me obliga a buscar un reemplazante” .

Chao asentía y opinó, “algo similar nos pasó la vez pasada en Nueva York y no es agradable pero es lo que corresponde” .  El Intendente lo cortó dirigiéndose a mí para opinar que ya había hablado con el Secretario de Gobierno y el de Desarrollo Social respecto de las ayudas que podría darle a la comunidad, “es verdad ya Chao está abocado a la creación de una Fundación para ese fin y ya hablé con el Comisario para ayudar a la policía de la localidad y creo que ya quedó claro que las donaciones serán sólo en elementos” .

No quise “escuchar” a nadie porque la claridad de mis palabras seguramente le arruinaba, a alguno de ellos, la posibilidad de “manotear” algo y yo sabía que ante un pensamiento de conveniencia para el bolsillo propio yo reaccionaba mal, -para algo servían los consejos del YAOGUAI -.

Hablando de las donaciones, el Intendente comentó que había conversado la semana pasada con el Secretario de Salud y con el Director del Hospital público zonal, los cuales le manifestaron la necesidad de dotar al nosocomio de un tomógrafo computarizado y los presupuestos estaban excedidos para esto pero era muy importante y necesario contar con eso.  Como para dar un golpe de efecto le pregunté, “tiene usted idea del modelo, marca o empresa que lo vende” , me contestó que no, que eso lo tenía el Secretario de Salud y/o el Director del Hospital pero lo podría consultar para que cuando estuviera la Fundación solicitar la ayuda en este aspecto.

Lo miré fijo y le dije, “voy a hacer un trato con usted, hable por teléfono consígame ya esos datos y le aseguro que voy a hacer algo al respecto, soy un convencido que las palabras se las lleva el viento y las cosas hay que activarlas cuando se puede” .  Sonriendo, aunque pensaba que no entendía a que quería llegar yo, llamó al Secretario de Salud y le pidió los datos que fue anotando en un papel.

Una vez con los datos me entregó el papel y la llamé a Cielo , “Cielo, necesito que, desde tu oficina, te comuniques con alguien de esta empresa, si es posible en forma visual y luego me llames para hablar con él, Chao, por favor, andá con Cielo y fijate si esa empresa tiene relación con nosotros” .  Salió a cumplir con la diligencia, ella, con el nombre de la empresa se podría comunicar con quien quisiera y Chao sabía cómo proceder.

Seguimos hablando y yo le expliqué que aunque no había nada en concreto, yo prefería tener determinadas seguridades antes para, que si esto se daba, no estar esperando por el tema de la existencia o la entrega o el tipo de excusas que siempre aparecen y ellos asentían, aunque el Secretario de Gobierno pensó que yo estaba “faroleando” el tema.

Yo me hacía mi propia “bandera” aunque no quería parecer un pedante y soberbio, tampoco me importaba demasiado pero aparecer como el “bueno” no estaba de más. Chao regresó y me dijo que la comunicación ya estaba lista, les pedí a los presentes que cruzaran los dedos y me fui con el Abogado, en el camino hacia el sótano me comentó que era una empresa subsidiaria de la empresa central, mejor que mejor.

Ante la gran pantalla aparecía la imagen de un señor alto y calvo que resultó ser el Director General de la empresa de marras, me presenté y las molestias que experimentó al ser interrumpido un día sábado se le pasaron en el acto.  Preguntó muy deferentemente que era lo que necesitaba e hice mención al tomógrafo, me explicó entonces que ese era un modelo obsoleto y estaba tres escalones por debajo del último modelo, del cual había en ese momento uno en existencia.  Le expuse entonces lo que quería…

-  El tomógrafo va a ser una donación mía para el Hospital de tal Municipio pero no quiero figurar, usted tendrá que cargar los gastos a mi cuenta de la empresa madre a quienes ya les estoy avisando para que no tenga inconvenientes y manda el lunes ese tomógrafo como donación de su empresa”, ¿le quedó claro esto?

-  Clarísimo señor Gonzalo , ¿podemos publicitar esto como algo emanado de nuestra empresa?

-  Usted no da puntada sin hilo, está bien, no hay inconvenientes pero me gustaría que se aclarara que esto fue gestionado por el Intendente y debido a su gestión ustedes bla, bla, bla.  Además, necesitaría que me haga llegar un comprobante, especificando que tal y cual modelo, es donado a “tal” Intendencia para ser colocado en “tal” Hospital público pero, esto lo necesito para ayer porque tengo a la gente esperando.

-  Deme un par de minutos y se lo hago llegar por vía mail.

-  Bien, le agradezco y perdone las molestias, lo dejo con el Doctor Chao para que le de los datos que necesita.  Buenos días señor.

Volví a la mini reunión y les dije mirando al Intendente…

-  Aunque alguno pueda pensar que soy un “fantasma” con algunas cosas, le puedo asegurar que el lunes usted tendrá su tomógrafo y no el modelo viejo que querían, le van a hacer llegar el último modelo, va a figurar como donado por la empresa porque yo no quiero figurar aunque logrado por su gestión, espero que verdaderamente lo usen gratuitamente para la gente que lo necesita” .

El Intendente y los demás se quedaron con la boca abierta, el primero que reaccionó fue el Primer Concejal diciendo, “pero, pero, ¿es verdad lo que nos está diciendo?, eso es carísimo” .  En ese momento nos llamaban a comer y no le contesté nada pues nos acomodábamos para eso.  Los últimos en llegar a la mesa fueron Chao y Cielo , la informática se sonreía y Chao , circunspecto como siempre, me entregó un papel, yo lo leí y se lo entregué al Intendente…

-  Creo que este papel contesta la pregunta anterior respecto a si era verdad, llamen a ese número y pónganse de acuerdo para la hora de la entrega y el acto que quieran hacer” .

El papel hacía mención a la entrega de un tomógrafo “tal” como donativo de la empresa “tal” a instancias de las gestiones del Intendente “fulano de tal” , decía incluso a la hora de entrega el día lunes. “Apúntese los porotos que quiera por eso, ahora vamos a comer que ese costillar debe estar riquísimo” .

Estaba para chuparse los dedos y comimos como hambrientos, Carlos y Zulma tenían prohibido atender a nadie y al momento de los postres, los llamé aparte a los dos, les agradecí porque había salido todo perfecto y aproveché para decirle a Zulma que preparara algo de ropa liviana porque se iba con nosotros a pasar unos diez días en el Caribe colombiano , además agregué: “eso sí, para la ropa de playa sólo se aceptan tangas” , Carlos lanzó la carcajada y comentó que esperaba que le tocara alguna vez a él.  La chef nos miraba sin creerlo y yo me volví para la mesa.

Allí todavía seguían con el “papelito” de la donación y la esposa del Secretario de Gobierno que estaba junto a Siara y Zulma , escuchó que ésta le decía a la africana que había sido invitada al viaje al Caribe , vio cuando la “negra” la abrazó diciéndole que la iban a pasar genial, no se pudo aguantar y me preguntó:

-  ¿Entonces es cierto que se van todos al Caribe el domingo? -Yo le contesté como si fuera algo normal-…

-  Sí, tengo que ir a solucionar unos negocios y viajamos todos a Cartagena de Indias, bueno, todos no, algunos no van …

-  ¡Madre de Dios! vas a gastar una fortuna en pasajes .

-  Jajaja, en realidad no lo sé porque no abonamos pasaje, es más cómodo porque viajamos en mi avión privado y Azul, la azafata, nos atiende de maravilla .

Estuvo a un tris de pedir que la lleváramos, pensaba en que “pagaría” con “carne” el viaje y la estadía y no le importaba que fuera en forma individual o en grupo ya que el idiota de su marido no la llevaba a ningún lado gastándose el dinero en reuniones y putas.  Se hacía toda una “película” tomando sol en topless o totalmente desnuda.

Me causaba gracia “escucharla” y Siara me miraba sonriendo porque sabía que yo estaba “escuchándola” .  Me vi tentado a preguntarle delante de todos si se animaría a ir con nosotros pero me frené a tiempo, también estaba seguro que me diría que sí y lo haría quedar como un tarado al “vivaracho” , no contemplaba los “cuernos” pero había algunos personajes que se lo tenían merecido.

Un poco más tarde la “negra” se acercó a mí disimuladamente y me preguntó por qué me sonreía cuando hablaba con la esposa del “baboso” , no tuvo ningún empacho en calificarlo y le contesté en actitud compinche, “ya sabés por qué, ardía en deseos de que la lleváramos y no dudaría en “pagar con carne” el pasaje y la estadía” …  Me contestó con toda picardía, “ a mí no me cuentes prefiero mil veces a Cielo o a Gisela o a Zulma aunque hoy estén caminando “torcidas” . “Jajaja, sos terrible Kande, parecés la “cotilla o chusma” del barrio, no se te escapa una” .  La mención a su verdadero nombre la “derritió” complemente y se le llenaron los ojos de lágrimas y de dulzura.

Había notado que la esposa del Comisario, además de ser una mujer muy bonita, no congeniaba totalmente con las otras, su nivel intelectual estaba muy por encima aunque no lo hacía notar y cuando, en un determinado momento, hablé para todos del tema de la Fundación, fue la que más prestó atención y allí me enteré que era Licenciada en Sociología o algo por el estilo pero relacionado con lo social.

Los vi que paseaban abrazados y apartados de todos y la escuché comentar sobre lo raro de encontrar a una persona tan rica que se diera abiertamente en el llano con los demás, empleados incluidos, él le comentó, “y no sólo los de acá, vi cuando les mandó la comida y bebidas a los efectivos de la Seguridad, sin contarte como decidió rápido el tema de la donación que hizo” .

Como quería “cerrar” de algún modo lo que había hablado con él, me acerqué a la pareja, “¿cómo anda la feliz pareja?, ¿la están pasando bien?” , los dos me contestaron que si y fue ella la que se dirigió a mí para decirme que no tenía ganas de acudir a esta reunión, que lo hizo por su marido pero que ahora estaba más que contenta de haber venido y que no esperaba ni el recibimiento, ni la atención que estaban recibiendo los hijos y todos en general y siguió…

-  Es indudable que hay un mundo de distancia entre lo que es su vida y su desenvolvimiento, es más, también se nota en quienes lo rodean pero a nosotros no nos hizo notar esas diferencias.

-  Sofía era tu nombre, ¿no?, bien Sofía, yo le contaba a Matías que el hecho de tener dinero no implica ser más que nadie aunque el hecho de ser el responsable de todo o el “jefe” hace que me “convierta”, no me pongo verde como Hulk pero paso a ser un tipo muy exigente.  Marco pautas de trabajo respetando los derechos y obligaciones porque entiendo que quien debe cumplirlas está a la altura y me merece la confianza, ahora bien, si no cumple, me falla o no se coloca a la altura que le corresponde, no me interesa tenerlo al lado y ni hablemos cuando resulta que, además de incompetente, es corrupto.

-  Es que dentro de la sociedad en que vivimos debería ser así, hay un determinado orden laboral y social establecido y mientras se respete al otro, no debería romperse porque las reglas de juego han sido aceptadas de antemano.

-  En lo personal, Matías trabajaba todo el día y yo no me resignaba a estar esperando en casa, lavar los platos y criar a mis hijos, lo consensuamos juntos, estudié, me recibí, no me fallé a mi misma ni le fallé a él, tengo un marido de la que puedo estar orgullosa y él no tiene un “paquete” esperándolo en casa, el único problema es el de canalizar lo que aprendí porque hay muy poco campo para lo mío y generalmente mal utilizado y mal pagado.

La chica me gustaba por su forma de pensar pero me gustaba indagar en ella y no quería apelar a enterarme por otros medios…

-  Decime algo, ¿Cómo se entiende que pensando socialmente de esa manera estés casada con un Policía de carrera?

-  Creo que hay muchos equivocados en todos lados.  Hay demasiados dentro de las carreras sociales que se dicen ser “anti-sistema” pero quieren utilizar las mejores tecnologías que el “sistema” les brinda, tablet y celulares de última generación se imponen o usar ropa de moda o tener un auto del modelo más reciente o vacacionar todas las veces que se puedan, hay demasiadas hipocresías en todo lo “anti-sistema”, así como hay hipocresías en el mundo en que se mueve Matías , hay quienes dan órdenes sin saber qué es lo que se debe hacer pero, cuando se arriesga la vida para hacer cumplir esas órdenes, aparecen otros desde atrás de escritorios que las dejan sin efecto.

-  Como pareja tratamos de ser coherentes aunque, muchas veces, todas esas hipocresías nos jodan las coherencias.  No me gusta que sea Policía porque, aunque lo admiro por serlo, sé cuánto le afecta que esté todo podrido.

-  En otras palabras, te gustaría que dejara la Policía y vos poder hacer algo socialmente potable y valedero, ¿no?

-  Ojalá fuera posible pero… estamos rodeados de “peros”, tenemos una familia, debemos criar y educar a los hijos, pagar hipotecas, mantener lo que tenemos.  Hablar por hablar es fácil y muy cómodo, despotricar sin plantear alternativas es de mediocres, asumir responsabilidades y mantenerlas es más difícil, aunque haya que aguantar “cabronadas”.

-  Jajajaja, me encanta como pensás, a tu marido le ofrecí una posibilidad mejor pero le pedí que no dijera nada porque no era nada concreto-lo dije por si las moscas, no fuera a ser que se enojara por ignorar esto-y a vos estoy a punto de ofrecerte otra.  A él para que me dirija la Agencia de Seguridad a nivel nacional y a vos para que seas Presidenta de la Fundación que voy a crear y te aseguro que no va a ser “ad honorem”.

A Sofía le brillaron los ojos por la alegría al escuchar lo que decía y Matías se imaginó enseguida lo que implicaba un puesto de esa naturaleza.

-  Gonzalo, ¿es verdad lo que decís?

-  Jamás miento o bromeo cuando se trata de algo de negocios o de nivel laboral.  En la Agencia tengo problemas que solucionaría apenas tu marido deje su trabajo actual y con la creación de la Fundación tengo el inconveniente para juntar la gente idónea que la represente.  Vos serías una alternativa fantástica por tu modo de pensar y, seguramente, estarás rodeada de gente capacitada y con tu mismo modo de pensar.

-  Sí, conozco a mucha gente que es decente y se presta a ayudar, mucho más si cobran por esto.

-  Según sé, los directivos de una Fundación que creo que son siete miembros no pueden cobrar con fondos de ONG pero eso lo solucionó poniéndolos como empleados preferenciales de una de las empresas, cobran por la empresa con todos los beneficios y trabajan en otro lado, eso se arregla con papelería que maneja Chao.

-  Yo los dejo actuar acorde a la capacidad que les reconozco pero… hay una condición ineludible que baso en la competencia para los cargos y en lo que resumo en un dicho: “Las cuentas claras conservan las amistades”.  De frente y por derecha atiendo cualquier alternativa, por izquierdo no transo ni con mi madre.

-  Creo que ya te firmamos lo que quieras y no dudes de que las cuentas serán más que claras.

Mientras hablábamos lo llamé a Chao que se sumó a la conversación y expresó…

-  Por las caras que tienen los tres, me parece que están buscando el modo de hacerme trabajar, ¿me equivoco?

-  No Chao, no te equivocás.  Matías cuando podrías dejar el cargo que hoy tenés.

-  El lunes podría presentar la renuncia y el martes o miércoles a más tardar estaría a disponibilidad de ustedes.

-  Bien, ahora te digo las buenas y te marco las pautas.  Matías, vas a cobrar un sueldo que está creo que en un 500 ó 600% más que lo que cobrabas hasta ahora, tendrás vehículo asignado y dinero para gastos de representación, sólo para gastos de representación que están determinados en la empresa.  Chao dale a cada uno de ellos tu tarjeta para que se comunique con vos apenas tenga el problema de la renuncia solucionado, a partir de ese momento “renunciás” al Director, al Subdirector y al Director de Finanzas, las pruebas en su contra para actuar sobre ellos las tienen en la Agencia de Detectives, ya sabés como actuar.

-  Matías, para tu conocimiento, la Agencia de Detectives trabaja exclusivamente para mí aunque estén registrados en la Empresa de Seguridad como efectivos, ellos no se tocan y no reciben órdenes de nadie más que de mí.  Respecto a los puestos a reasignar quedará a tu criterio poner a gente que ya trabaja en la empresa o buscar a gente de tu entera confianza y cuando digo entera confianza es porque te hago responsable a vos de su accionar, creo que soy claro con esto.

-  Tomá las decisiones necesarias pero quiero buena prestación de servicios, fallas mínimas y mejor capacitación de los efectivos, no quiero que sea una salida laboral para cualquier persona.  Aunque la empresa gane menos no me importa, resignar ingresos cobrando menos o pagando por más capacitación, implica lograr una empresa de primera línea y es lo que busco, es tu trabajo lograrlo.

El casi ex Comisario estaba anonadado y sorprendido pero asentía firmemente a lo que yo decía pensando en rendir lo máximo y no fallar ni fallarse, ahora le tocaba a Sofía …

-  Sofía, tus ingresos mensuales estarán en el orden de los siete mil Dólares mensuales, los directivos que te acompañen fluctuarán en los cuatro o cuatro mil quinientos Dólares mensuales que cobrarán como empleados de la empresa “tal” con todos los beneficios sociales.  Vas a manejar una Fundación con tres millones de Dólares de capital inicial, los empleados que necesiten cobrarán su sueldo de los fondos de la Fundación y se comprará una casa grande para que funcionen allí.

-  Quiero ayudar a la comunidad pero te toca ser la cara visible de esto, ergo, los “buitres” andarán a tu alrededor pidiendo ayudas variadas y viendo que beneficios sacar de todo lo que vos vas a manejar.  Amabilidad 100% pero dureza en las decisiones, sin “amiguismos”, el que quiera trabajar que cumpla como corresponda, las ayudas solicitadas deberán ser bien evaluadas y las decisiones finales serán tuyas con Chao o cualquiera de su equipo para apoyarte.  En caso de dudas con cualquier “personaje” o Institución que se acerque podrás contar con la Agencia de Detectives, ellos te pueden hacer una “radiografía” de cualquier persona, si persisten dudas podés recurrir a Cielo o Gisela, ellas conocen hasta la marca de calzoncillos que usan Trump.

-  Yo salgo de viaje mañana y regreso en aproximadamente diez días, muévanse con Chao para todo y espero que al regresar ya esté todo encaminado.

Los dejé a los tres conversando y no quise aceptar agradecimientos, me fui para el frente de la casa porque habían llegado las odaliscas y el cantante.  Las chicas del ballet árabe brindaron un espectáculo de nivel internacional, Gisela y Cielo aplaudían a rabiar a sus amigas y a varios hombres y mujeres se les cayeron las babas con el movimiento de esas caderas juveniles y no tanto.  Me sonreí mirándola a Siara que bajó los ojos al descubrirme, la “enganché” pensando en que si moviera las caderas de ese modo en la cama me dejaría destruido, me acerqué y le dije, “practicá pantera, practicá que me gusta la idea” .

Luego le tocó el turno al cantante y fue durante la cena, ninguno se fue antes y se agregaron las chicas y chicos del ballet.  Aquí fue sensacional porque no sólo imitó a varios, sino que accedió a imitar a varios que les pidieron, la completó haciendo participar a las mujeres para que les hicieran de coro y alguna que otra se animó a cantar sola.

Cuando todo terminó se fueron despidiendo, el Intendente y el Comisario quedaron para lo último y les pedí que no dijeran nada, me daba por bien “pagado” por haber disfrutado de un día maravilloso.  Cuando quedamos solos les agradecí a todos y les pedí que no tocaran nada, mañana se ocuparía el personal contratado para eso.  Escuché el desesperado llamado de mi cama y subí las escaleras, mañana sería otro día.

Continuará…

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