El Corsario Pata Chula y la grumete (08)

"El Corsario Pata-Chula y la grumete (8)"

Salvamento en Tortuga

Mientras la Diosa Boreal, agasajaba a sus huéspedes y amigos, en la fortaleza se vivían situaciones extrañas.

Los corsarios recién capturados, no dejaban de asimilar cuanta imagen captaban sus ojos y oídos. Se sabían en un estado un tanto incierto, aunque estaban seguros de la respuesta de Blake, si les llegara a pasar algo, por lo que sus ánimos aún eran aceptablemente positivos.

En el sur de la isla, Blake y sus hombres eran agasajados siguiendo la tradición antigua de Tortuga, cuando llegó la primera noticia a oídos de Bore.

Nada más enterarse, lo hizo público y Blake quedó muy afectado. Liw, que se había mantenido lo mas cercana posible junto a él, se sintió apesadumbrada, pero aguardó acontecimientos.

Miel, se irguió y declamó que ella era capaz de entrar en la fortaleza, sin ser vista. Inmediatamente dicho ésto, los hombres de Blake se tornaron como voluntarios a acompañar a su mascota en el rescate de los hombres de Blake.

-           Blake, observo que nuestra inmediata mazonera, es ya todo un símbolo para tus hombres.

-           Tienes mucha razón al decir éso, Bore. Sé que mis hombres serían capaces de luchar contra galernas y hasta con el mismísimo demonio, si Miel estuviera entre todos ellos. Esta jovencita es especial y todos mis hombres y yo mismo, la queremos.

-           Liw, tu irás con Miel y llevarás a nuestras mejores hermanas para este tipo de situaciones. Miel, tu serás nuestra capitana en la fortaleza y Liw lo será en el trayecto y te ayudará en todo. Iréis el mismo número de corsarios y corsarias, sin contar a Liw y Miel. Deberéis salir por las cuevas del este.

Mientras se organizaba el equipo de rescate, Blake mandó avisar a Diego "Veneno" y Shaman, para que levasen anclas y lanzaran quemadas contra la flota del gobernador deshonesto.

Blake, deseaba ir, pro Bore se lo impidió argumentando que era mejor que el Corsario Blake se mantuviera al mando del único galeón que quedaria en la bahía.

Blake, desistió de acompañar al comando de corsarios y mazoneras seleccionados y se quedó junto a Bore con algunos de sus hombres.

Sin embargo Bore, ya había clavado sus ojos en Cool y éste en los de ella.

Liw y Miel, partieron hacia las grutas que daban acceso al exterior secreto, seguidas de las mazoneras y corsarios, sin que se sintiesen distintos, porque todos eran todo y nada a la vez. Era una misión sagrada y a ella accederían sin mas pensamientos.

En la bahía, Diego junto a Shaman, escuchaban las palabras del mensajero de Blake. Y ordenaron arriar velas y lanzar el ataque a la fortaleza del gobernador, al otro lado de la isla.

Cuando levaron anclas, las dos barcazas regresaban a tierra. Los dos enormes galeones se hicieron a la mar rápidamente y se fueron confundiendo en el horizonte. El galeón de Blake se mantuvo en el estrecho, orientando sus cañones de largo alcance a las dos bocanas de la bahía.

Liw y Miel habían avanzado ya bastante muy por detrás de la retaguardia del gobernador y se encaminaban hacia las cuevas que darían lugar a los pasadizos secretos hacia la fortaleza.

Mientras Blake se quedaba en la playa, Bore y Cool quedaban solos y en privado.

Nadie les molestaría durante horas y ellos, simplemente, se dejaron llevar por el mundo de la carne.

Cool, pensaba en Miel y aunque la veía como una maravilla de mujer no la deseaba hasta el extremo en que deseaba a esa Diosa, llamada Bore y ante la cual se encontraba.

Bore era magnífica. Bore era maravillosa. Bore era hermosa. Bore era apetecible. Bore era perfecta. Y Cool no pudo ni supo guardar nada y sus ojos se declararon a Bore.

Las miradas cálidas, llegaron al nivel de ardientes y Bore se entregó en los brazos de Cool.

Los cuerpos desnudos de ambos, retozaron en mil torbellinos de pasiones desenfrenadas. Sus sudores y sus olores eróticos se unieron en una danza tórrida y tumultuosa, en la que ambos cuerpos rodaban sobre sí mismos, sintiendo toda la pasión y el placer de sentirse combinados y de un modo tan estrecho y sensual.

Mientras......en la fortaleza, se vivían momentos un poco extraños, ya que los hombres del gobernador parecía ser que no supiesen nada del acuerdo, preestablecido.

Sir Dark, hablaba con el comandante de la fortaleza y le decía :

-           Señor, a estas horas es mas que probable que varias naves y demás elementos estén en camino. Sí no nos libera de esta situación, Tortuga será pasada a cuchillo. No le estoy amenazando, pero es lo que será.

-           Sir Dark, curioso nombre para un pirata miserable, como vos. Nada evitará que la soga os anule para siempre.

-           Comandante, espero por su bien que no tenga familia en el archipiélago, porque serán transportados al otro mundo.

-           Cállate estúpido pirata de mierda.

Y cuando todo parecía estar como sentenciado, de una esclusa en el suelo apareció la cabeza de Miel.

Miró en todas direcciones y al verse a salvo y sin presencia enemiga, salió seguida de Liw y el resto de corsarios, mientras las mazoneras guardaban la parte baja.

Miel descubrió al Comandante de la guarnición y acercándose a él, le tapó la boca y le rebanó la garganta.

Miel se sintió mal, demasiado mal......pero penso en Sir Dark y sus ojos se transformaron en algo que nunca había imaginado, porque estaba liberando a su amor.

Cuando llegó ante él, aún con las manos manchadas de sangre y ver los ojos de él, se sintió flojita.

Pero los hombres de Blake, cuidaban de su Diosa y mascota y nunca la dejarían caer. Pero la dejaron en manos de Sir Dark, quien tomó la iniciativa para liberar a los demás.

Miel, le siguió como una pantera al acecho de todo hasta liberar al último de los corsarios de Blake. Cayeron pocos guardias, pero los que salieron al paso dejaron este mundo de un modo silencioso.

Cuando todos los corsarios estuvieron liberados, abrieron las celdas de otros reclusos y les conminaron a destruir todo cuanto quisieran dentro de la fortaleza, pero respetando a las mujeres, ancianos y niños.

Todo el grupo desapareció misteriosamente y se adentraron de nuevo por la esclusa en donde aguardaban las mazoneras.

Una vez a salvo y en los caminos secretos hacia el mundo de Bore, Miel hizo un guiño a Liw y ésta asintió sin que se notase el más mínimo gesto y condujo a los corsarios al sur de la isla.

Miel se quedaba rezagada junto a Sir Dark. Pero un hombre de Blake y una mazonera se quedaron en las cercanías, por si hubiese problemas con Sir Dark y Miel.

Sir Dark, quitaba las ropas de Miel ante la pasividad de ella, mientras sus ojos volaban en la inmensidad de la pasión.

Miel admiraba a Sir Dark en todos los sentidos. Primero era bien parecido, segundo bien armado y tercero se sentía enamorada de él.

Sir Dark al tener desnuda a Miel, sintió el influjo de la pasión y de tener ante sí a la mascota de Blake.

Miel desnudó a Sir Dark y se entregó a él por amor y pasión.

Sir Dark, desnudo ya mostraba su polla rígida y erecta a los ojos de Miel, que primero se arrodilló y despues de besarla, lamió y le dió la consistencia adecuada para que la penetrara.

Sir Dark, la ensartó en la vagina sensual y lubricada de Miel......y la poseyó de un modo que jamás había sentido.

Sir Dark, supo que Miel era la mascota de Blake, porque ella era mágica. Pero su polla entraba y salía de dentro del cuerpo de Miel, mientras ella cerraba los ojos y cuando los abría era para enloquecerle de placer.

Miel sintió como Sir Dark se corría dentro de ella y se sintió bien, más que bien, maravillosamente bien.

Cuando se serenaron, regresaron encontrándose con sus guardianes, a los que sonrieron agradecidos y los cuatro juntos, volvieron a los conductos que les llevarían ante Blake y Bore.

* (continuará) *