El convento , mi castigo IX , final

Descubro a la monja fea follando con el cura y ella me provoca para que meta en su cama . Salgo corriendo. Por fin me llevo al coro a sor Ángela y sor Luisa .A la mañana siguiente se presentan en el convento unos curas a investigar la denuncia de la fea , me acaban echando del convento

EL convento , mi castigo IX

Después de mi experiencia con mi tía y la contadora mi vida entró en una etapa libre de sobresaltos pero no por ello carente de actividad .

El follar a diario se había convertido en mi rutina cotidiana y cuando digo follar no me refiero a compartir cama con una mujer , la gran mayoría de los días trabajaba a doble sesión . Todas la involucradas lo sabían lo cual me permitía establecer los turnos a mi gusto , las monjas entendían que no podía repetir con la frecuencia que habrían deseado .

En alguna ocasión volví a mi observatorio detrás del confesionario y comprobé que al cura le seguían contando los mismos cuentos , sus pecadillos y sus pajas . Ni una sola confesó que estaba follando conmigo . Noté que el cura cada vez era más inquisidor preguntando detalles y eso me hizo pensar que algo le rondaba en su cabeza . Mi tía le siguió sacando el cuerpo , la infección no acababa de remitir y el resto de las monjas , no se como lo hicieron pero se las arreglaron para que se quedara siempre la última sor Mercedes .No creo que al cura le gustara la situación pero no le quedó más remedio que aguantarse .

La conversación que tuvieron y yo escuché  fue alucinante.

Ave María Purísima

Sin pecado concebida

Hija ¿ te estás tocando?

Si  padre, usted me tiene dicho que cuando esté confesando me puedo tocar.

Así es hija , por eso te pregunto .Y estás mojada , hija mía.

Si padre estoy muy mojada , he estado todo el día esperando este momento en el que nos quedamos solos. Estoy muy caliente padre.

Cuéntame tus pecados.

Lo de siempre padre , no paro de tocarme . Y a pesar de eso tengo una desazón que no me deja dormir.¿ Por qué no viene usted a mi celda? Hace mucho que no me visita ¿ Ya no le gusto?

Hija mía , ¿cómo vas a dejar de gustarme? Peleo a diario contra el demonio de la carne y tu eres una tentación muy grande para mí.

Pero usted me ha dicho que cuando yo le ayudo a sofocar la inflamación que usted sufre , yo no peco.

Y así es hija mía , tu no pecas , pero yo si . Y me cuesta superar la tentación. Peleo a diario contra la tentación de la carne , y tu me provocas mucho.

La estrategia del cura estaba clara , halagar a la fea diciéndole que era la mujer más atractiva del mundo . La fea , además de fea era tonta , porque se lo creía , o era lista haciendo como que le creía cuando de verdad lo que perseguía era echar un polvo

Padre déjeme que vea si tiene usted inflamación y si eso le doy unos besitos.

Está bien hija , eso es menos pecado que fornicar.¿ Te vas a seguir tocando?

¿Puedo? padre.

Si hija , no solo puedes sino que es conveniente que lo hagas.

Que gorda la tiene don Julio .( Otra que le única polla que había visto era la del cura)

Cógela con tus labios que eso me calma. Hija que bien me lo haces , tienes una boca divina y me la estás aliviando mucho , sigue , sigue , pecadora , que cuando acabes te tengo que poner una buena penitencia . Tócate mientras me la chupas que quiero que te corras conmigo .

Un instante después la monja interrumpió momentáneamente su tarea porque la oí decir

Ay padre , que caliente estoy , me da mucho gusto chupársela y al tiempo hacerme yo la paja , me voy a correr , padre , me voy a correr. Como me gustaría tenerle en mi cama.

En ese momento el cura , sabiendo que su escopeta era de un solo tiro le dijo a la fea.

Vete a tu habitación y espérame allí que es donde voy a acabar de confesarte. Eres una tentación demasiado grande para mi. No me puedo resistir a tus encantos ni soy capaz de resistir la tentación de tu cuerpo. Pero antes enséñame tu chochito peludo que me gusta mucho verlo.

Ay padre déjeme acabar que estoy ardiendo.

Está bien hija pero deja de tocarme a mi .

La monja debió hacerlo

Ya me corro padre , ya me estoy viniendo , es que estaba muy caliente y saber que va a ir a mi cuarto me pone más .

Ve , hija , ve que yo voy de inmediato. No me tientes más. Ya me has excitado mucho y no puedo resistirme a la tentación de tus carnes.

Salí a toda prisa de mi escondite para irme al patio y colocar la escalera que me permitía ver lo que pasaba dentro de las celdas .

Sor Mercedes debió salir disparada a su celda porque cuando tuve puesta la escalera y me pude asomar por el ventanuco que estaba a casi cuatro metros de altura , ya estaba tendida en su cama en pelota picada .

No es que fuera fea de cara , que lo era , además era propietaria de un cuerpo de los que se llaman antídoto contra la lujuria . Pequeña , regordeta , la espalda ancha , las tetas caídas como dos pimientos que casi le alcanzaban la cintura , barrigona , los muslos desproporcionadamente gruesos y llenos de celulitis y el culo , de la misma anchura que la cintura carecía prácticamente de volumen , culo de hombre . Solo llamaba la atención que por debajo de las lorzas de su barriga la monja mostraba un matojo de pelo negro zaíno inmenso que le cubría el interior de los muslos y le subía hasta el ombligo .

El cura no se anduvo con preámbulos , llegó a la habitación se quitó la ropa y la montó. La monja recibió la embestida con un berrido de gusto , y cura se lanzó  a un mete y saca que apenas le duró un par de minutos . Con las manos agarradas a aquellas dos tetas desprendidas empezó a gritar que se venía . Y se vino .

La monja no había llegado a su clímax , de modo que cuando el cura de bajó de ella , le pidió que le comiera el coño . Don Julio se lanzó a la tarea no sin antes decirla que quería oír como ella se corría .

Al poco rato la fea se empezó a venir arriba y realmente chilló como un gorrino al que estuvieran sacrificando , gritos incontrolados , animales y para mi desagradables .

Cuando el cura comprobó que la monja se había corrido en menos de dos segundos le concedió el perdón de sus pecados y le puso de penitencia dos rosarios .

Unos días después , sor Mercedes se hizo la encontradiza conmigo .

Jaime , se me ha estropeado el interruptor de la luz de la mesilla , ¿tu podrías arreglarlo?

Me temí lo peor pero no me quedó otro camino que decirla que si . Quedé en ir a su celda a media tarde .

No llames a la puerta , voy a dejar abierto .

Con mi cajita de herramientas me presenté en su cuarto . Entré sin hacer ruido y una vez dentro comprobé que la monja estaba tendida en su cama desnuda . La llamé bajito : sor Mercedes , sor Mercedes .

Ella que estaba más alerta que una liebre en una cacería , se hizo la sorprendida :

Huy no te esperaba tan pronto y me he quedado dormida .

Pero no hizo el menor gesto de taparse , supongo que pensaba que el contemplar sus carnes me iba a resultar un espectáculo irresistible.

Cuando le pregunté que era lo que tenía estropeado , ya sin el menor disimulo atacó

Métete en mi cama que te llevo esperando mucho tiempo , hazme lo que le haces a mi hermanas .

No se de que estás hablando y no tengo la menor intención de meterme en tu cama . A quien se le ocurre , una esposa de señor proponiéndome eso.

Pues con las otras hermanas bien que lo haces.

Estás completamente equivocada , que barbaridades dices , no he tenido que ver con ninguna monja en toda mi vida .

Sin decir una palabra más , salí de su cuarto , no sin antes escuchar :

Se muchas cosas de lo que pasa en este convento , si un día hablo se van a caer estas paredes y a ti te van a echar a la calle.

Esa noche con Garoa en mi cama le conté lo sucedido . La navarra siempre lista me dijo :

Hay que tener cuidado con Mercedes , además de fea es medio tonta pero es sobrina del obispo y puede largar .

He sido idiota porque la he podido grabar , pero no llevaba el teléfono.

Si tienes otra oportunidad , hazlo . Ya pensaremos que debemos hacer . Cómeme las tetas que sabes que me gusta .

Mi rutina pasó a ser estar con una monja en mi celda por el día y dormir en la cama grande con Garoa o con mi tía y la contadora por la noche.

Repetí con todas y cada una y, en todos los casos , la segunda vez fue mejor que la primera. Las hermanas , una vez superada la sorpresa y hasta las angustias de la primera cita, ya sabían a lo que iban y se estregaban a la coyunda sin reparos de ninguna clase .

Entre medias abordé a las dos sores que me faltaban para poder decir sin mentir que me había acostado con todas las monjas , la fea y las viejas no contaban. De las dos , desde el primer momento estuvo claro quien llevaba los pantalones , Sor Ángela .

De mañana entré en el cuarto en el que bordaban, que era una de las actividades con las que el convento se financiaba , y silenciosamente eché el pestillo .

Sabiendo que estaban por la labor he de reconocer que no fui nada delicado en mi aproximación , es más hice algo que nunca había hecho y que siempre había soñado con hacer. Me acerqué por detrás de sor Ángela , una andaluza cuarentona y que a todas luces era el hombre del grupo y sin decir palabra , desde detrás de ella , le eché mano a las tetas.

La monja , sorprendida no dijo ni palabra , se quedó quieta. Antes de que me pudiera dar una contestación o un guantazo , me cambié de sitio y le cogí las tetas a sor Luisa. Fue entonces y no antes cuando les dije:

Que ganas tenía de saber quien tiene mejores tetas , ahora se que quien las tiene más grandes y quien más duras , me gustan mucho las de las dos.

Eres un descarado que lo que te mereces es una bofetada. Contestó la andaluza.

Perdóname pero llevo muchos días pensando en que me gustaría follar con las dos al tiempo y tenia curiosidad sobre quien tendría mejores tetas.

Y quien te ha dicho que nosotras queremos estar contigo.

Nadie , pero siempre he preferido pedir disculpas a pedir permiso. Si no os apetece no pasa nada me doy la vuelta y me voy.

Ninguna de las dos hemos estado nunca con un hombre así que no sabemos si nos va a gustar.

Prometo ser cariñoso y delicado.

¿Cuánto de cariñoso y cuanto de delicado?

Lo necesario para que los tres nos quedemos encantados.

Todos los hombres sois igual de mentirosos.

Como la que llevaba la vos cantante era sor Ángela , y estando yo de pie detrás de ambas , me fue fácil volver a hacerme con sus pechos. En esta ocasión en vez de dedicarme a una de ellas les cogí a las dos, cada una con una mano y las acaricié son suavidad.

Me quiero comer las tetas de las dos , me quiero comer el coño de las dos y quiero follar con las dos. Y si algo de lo que os haga no os gusta solo tenéis que decirme que me vaya y me iré sin rechistar.

Ninguna de las dos hizo el menor gesto de retirar mi mano de donde estaba lo cual hizo que me viniera arriba.

Antes de que me contestéis necesito hacer una comprobación.

Me fui delante de las dos , les quité el bastidor sobre el que bordaban y sin perder un segundo les metí mi mano entre sus muslos. Superada la zona de las medias , para mi sorpresa las dos llevaban bragas , pero no me fue difícil echarlas a un lado para alcanzar su zona más intima. Tampoco en esta ocasión me lo impidieron.

Con los chochos de las dos monjas a mi alcance empecé un suave masaje haciendo correr mis dedos a lo largo de su sexo. Sin interrumpir mi tocamiento les dije:

Me digáis lo que me digáis vuestro cuerpo ya ha dado la respuesta , estáis las dos mojadas y para que veáis que soy delicado os voy a seguir acariciando a no ser que me lo prohibáis.

La respuesta al unísono de ambas fue abrir los muslos para facilitar mi maniobra. Crecido como yo iba les pedí :

Quitaros las bragas que no son más que un incordio.

Para facilitar el cumplimiento de mi orden les subí los hábitos a las dos hasta dejarles sus muslos al aire . Las dos cumplieron mis ordenes a toda velocidad lo que dejó a mi vista dos coños peludos y , según lo que había dicho sor Ángela , que no habían conocido varón.

A la vista de aquellos dos sexos palpitantes y sabiendo que a quien me tenía que ganar era a la andaluza , en vez de seguir tocando hundí mi cara entre los muslos de sor Ángela y la empecé a comer el coño . La maniobra me impedía seguir atendiendo a sor Luisa pero ese era un riesgo que tenía que correr.

Empecé con lengüetazos anchos y lentos , de abajo arriba y de arriba abajo , recreándome en la faena , disfrutando de cada rincón de la monja . Mientras tanto su novia , que quería participar de la fiesta se puso de pie y empezó a comerle la boca y a acariciarle las tetas.

¿ Te está dando gusto , mi amor , estás disfrutando? Le preguntó su novia

Con voz entrecortada mi victima reconoció:

Me estoy muriendo de gusto , me esta haciendo muy rico con su lengua. Sigue acariciándome las tetas que quiero compartir mi placer contigo , mi amor .

De las dos hermanas , la que me estaba comiendo era la más grande , dos muslos rotundos me rodeaban la cabeza y ella de vez en cuando me ayudaba lanzando su cuerpo hacia delante.

Mis lengüetazos pasaron a ser algo más rápidos y más profundos. Jugué con la punta de mi lengua con su clítoris , lo absorbí , le di pequeños mordiscos y le volví a dar lengua . La monja se empezó a derretir :

Dame más lengua , canalla , dame más lengua que me vas a hacer correrme con un hombre , esta noche quiero que me folles , que me metas toda tu verga y que me llenes con tu leche y quiero que también te folles a mi mujer para yo verlo . Dame más que me vas a hacer venirme , sigue por dios , sigue que me estoy corriendo como una puta , sigue , no pares , no pares que yo me estoy corriendo , me corro , me corro , me corro .

No había acabado de correrse la macho de la pareja cuando ya había yo puesto a su amante a cuatro patas sobre un cojín . Pensé en alzarle las faldas pero preferí sacarle el hábito entero por la cabeza.

Sor Luisa no tendría más de veinte años y su cuerpo se correspondía con la edad. Carnes prietas , los muslos y el culo , si bien no de gran tamaño , tersos , y las tetas como dos membrillos , redondas y rematadas por unos pezones pequeños y oscuros , de un color café que contrastaba con la blancura de su piel. Colocada a cuatro patas las tetas de la monja apenas colgaban .

Me tiré en plancha entre sus nalgas y la  apliqué el mismo tratamiento que tanto éxito me dio con su novia

Excitada por lo que había estado viendo , sor Luisa tenía su coño empantanado con sus propios flujos . La monja era pequeñita si la comparaba con su pareja , pero aún así tenía un culito redondo y prieto muy de mi gusto . Le separé las nalgas y lancé mi lengua contra su ano y ahí me mantuve durante un rato. Su reacción fue instantánea:

Se está comiendo mi culo , siento su lengua en mi ano .Que guarro, pero que gusto me está dando. Sigue por dios , sigue dándome.Que hombre tan cochino pero qué placer me da.

Estaba claro que la información iba dedicada su pareja .

Dame también en el chocho , sigue en mi culo , pero dame lengua en el chocho que estoy muy caliente , me tienes muy cachonda y con muchas ganas de correrme .

Pasé , mi lengua por su chocho y comprobé que su clítoris estaba duro y mi lengua se dedicó a incidir en ese punto. Llegado un momento ya con mis pantalones bajados , decidí que en vez de excitarla con mi lengua iba a hacer uso de otra herramienta.

Empecé a recorrer su entrepierna con la punta de mi polla. Hacía como intención de metérsela en el culo sin apenas hacer fuerza para inmediatamente bajar al vestíbulo de su chocho. Lo mojada que estaba hacía fáciles mis maniobras , mi capullo tan pronto tocaba una zona como otra y la monja me lo agradecía con sus gemidos. En alguna de las escaramuzas , pasé de la pura entrada y le metí el capullo completo en su chocho , pero ni un centímetro más.

Sor Ángela , que se había percatado de mis intentonas de repente saltó:

Que estás haciendo , animal , vas a metérsela , bárbaro, que eres un bárbaro que no respeta nada . No se la metas a esta pobre niña que la vas a hacer daño , la vas a desgarrar con esa tranca , degenerado.

Deja que sea ella quien decida si quiere que le de solo a la entrada o quiere que se la meta entera . No le voy a hacer nada que ella no desee.

Mi amor , esta hombre tiene una polla gordísima , creo que te va a hacer daño si te la mete entera , ¿quieres que te la meta?

Quiero que me la meta hasta el fondo y no me importa lo gorda que la tenga , cuanto más gorda mejor , quiero que me llene el coño , quiero que me folle y que me llene con su leche . Jaime , por dios métemela toda , si me haces daño yo te aviso.

Ya con la autorización avance hasta su interior . No encontré la menor resistencia prueba inequívoca de que , en contra de lo dicho, la monja ya había estado con hombres antes. Mi polla se deslizó entre aquellas prietas paredes hasta que mis muslos chocaron contra sus nalgas

Cuando Luisa notó la penetración soltó un grito sordo antes de decir .

Ya me la ha metido , me ha metido la polla , siento mi coño lleno , me la ha metido hasta dentro , dios que placer , que pedazo de polla , siento como me da con la punta en el fondo , me estoy volviendo loca de gusto , se están yendo las fuerzas y todo lo que quiero es sentir que me das tu leche. Fóllame duro , dame fuerte , dame todo lo fuerte que puedas que quiero sentir tus pollazos , ay dios mío me vienen ganas de correrme , Ángela cómeme las tetas que quiero que tu también me des gusto.

La otra monja se tiró al suelo y se dedicó a comerle las tetas mientras yo me la follaba. En medio de la escaramuza pude ver como Ángela , además de comerle las tetas a su pareja se estaba tocando.

Sor Luisa se corrió y lo dijo bien fuerte y bien seguido

Meestoycorriendomeestoycorriendomeestoycorriendo.

Yo seguí dándole verga y la monja , y si fue cierta su declaración se volvió a correr y cuando yo le dije que le daba mi leche , que me iba a verter en ella , cuando sintió mi semen entrándole , se corrió por tercera vez entre gemidos y estertores .

Cuando ya nos habíamos recuperado del esfuerzo , sor Ángela me cogió la polla que ya estaba en franco retroceso y sopesándola me dijo :

Que pedazo de polla más rica tienes ,  esta noche quiero que me la metas a mi . No se si me va a caber pero quiero tenerte dentro . Me ha puesto muy cachonda ver como te follabas a mi pareja , muy cachonda .

Y dedicado a su pareja

¿ Has gozado mi amor , te ha dado gusto el que este bruto te la haya metido con lo gorda que la tiene? Me ha parecido que gozabas como una perra.

Ante tanta alabanza tuve claro que las dos habían pasado por los aposentos del cura y que probablemente la suya era la única polla que conocían.

Si mi vida , me ha dado mucho gusto y no me ha hecho ningún daño al metérmela, todo lo contrario me ha dado mucho gusto , me he corrido tres veces muy rico , se me ha aflojado todo el cuerpo y si por mi fuera hubiera seguido follando y corriéndome .

Esta noche , en vez de venir a mi cuarto o de ir yo al vuestro quiero que vayáis al coro , no me preguntéis porqué .

Antes de irme le pedí a las dos algo que me gustaba , quédate en pelota Ángela que quiero veros a las dos desnudas .

Sin exageración ninguna sor Ángela era el doble que su pareja y a pesar de sus más de cuarenta años tenía un cuerpo la mar de apetecible , caderas anchas , un más que buen culo y unas tetas grandes y poco caídas.

Ah , se me olvidaba , os voy a llevar a vuestro cuarto mis útiles de afeitar , quiero que esta noche cuando nos veamos tengáis las dos el coño afeitado , tenéis demasiado pelo . Es fácil primero os cortáis el pelo más largo con una tijera , luego os dais jabón y os pasáis la maquinilla , no tengáis miedo que con esta maquinilla es imposible cortarse .

Les di a cada una un azote en las nalgas y salí de la habitación .

Como medida para preservar mi salud , me fui a mi cuarto a descansar . Dormí como un lirón . Tuve un sueño raro , me vi en el cuarto del coro follando con la navarra y con mi tía al tiempo. Me llamó la atención el contraste entre la mata pelirroja del coño de sor Garoa y la desnudez absoluta del de mi tía . En mi sueño quedaba claro que las dos habían sido amantes durante años y que tenían mucha experiencia frotándose el coño la una contra la otra. No se si fue debido al sueño pero lo cierto es  que me desperté empalmado como un adolescente .

Para cumplir con mi compromiso cené y me fui al coro a preparar el escenario .

Recibí a las dos monjas al pie de las escaleras que daban al coro. Las dos monjas venían cogidas de la mano , como una pareja de novios.

¿ Os ha visto alguien venir?

No , no nos hemos cruzado con nadie .

Una vez ya en la habitación y tras las exclamaciones de asombro ante el tamaño de la cama les pedí que se quitaran los hábitos. Mi preparación consistía fundamentalmente el mantener el cuarto caliente lo que permitía estar en cueros con toda comodidad.

Mejor nos quitamos la ropa , sugerí.

Ya los tres en cueros , fue sor Ángela la que se vino hacia mi , juntó su cuerpo con el mío lo que yo aproveché para echar mano a sus nalgas. Con sus tetas incrustadas en mi pecho , me dio su lengua , más que dármela la sepultó en mi garganta. Mientras nos besábamos la monja deslizó su mano entre los dos cuerpos y me cogió la polla con fuerza.

Tienes una polla preciosa y dura como una piedra , quiero que me la metas pero no te quiero hoy dar mi coño , ese es de mi mujer , pero a cambio te dejo que te metas en mi culo.

Hipócritamente le contesté : Me encanta , te lo iba a pedir yo a ti.

Nos echamos los tres en la cama , lo en el centro. Dediqué un buen rato a comerme las tetas de las dos. Fue un placer inmenso el ir de unas tetas a otras mientras acariciaba los dos sexos que ahora estaban afeitados. Hubiera seguido con los prolegómenos pero fue sor Ángela la que me pidió:

Tengo muchas ganas de sentirte dentro de mi , quiero que me la metas ya porque estoy muy cachonda.

Ponte en cuatro que yo te pueda coger a gusto.

La monja se puso en posición . En su caso las tetas le colgaban y antes de nada me di el gusto de acariciarlas.

Su novia se acomodó enfrente de su cara , se puso de rodillas para así darle acceso a que le comiera el coño con total facilidad , a su vez su posición me permitía a mi cogerle las tetas.

Sabiendo a priori lo que me esperaba me había provisto con un bote de vaselina. Me lubriqué la polla y le puse un generoso pegote en su culo. La hermana no estaba para demoras , le oía decir :

Métemela , métemela toda , reviéntame el culo , rómpemelo.

No tengo idea de cuales fueron sus antecedentes en lo que la uso de su culo se refiere pero lo cierto fue que nada más enfilar mi polla a su hueco y tras una ligera presión , mi polla entró hasta el fondo sin la menor resistencia.

Con una monja espatarrada frente a mi , con las ancas separadas y su culo en pompa y la otra sentada sobre su cara con sus tetas a mi alcance , me sentí el rey del mundo . La escena me había puesto más cachondo de lo que podían estar las dos monjas juntas.

Empecé a darle tralla a la andaluza , no perdí el tiempo en un comienzo lento , desde el primer minuto mis empellones fueron brutales y la victima me lo agradeció acelerando su respiración , gimiendo , sollozando y sobre todo pidiéndome que la diera más fuerte.

Dame duro , más duro , rómpeme el culo con tu verga , rómpemelo todo que me estás dando mucho gusto .

Sor Luisa había agarrado a su novia por las caderas y me ayudaba llevándolas atrás y adelante mientras yo me agarraba a sus tetas.

Yo tenía preparada otra maldad para saber cual sería la reacción de la monja si yo llevaba la situación al limite.

Después de darle unos empujones violentos que hicieron que la monja gritara de gusto , me paré .

Me gusta mucho cogerme tu culo , pero no quiero seguir , quiero que me dejes cogerme tu coño. Quiero follarme tu chocho.

Eres un canalla , sigue donde estás.

Si no me das tu chocho te la saco y lo dejamos así.

Así no me puedes dejar , hijo puta , así no me puedes dejar , amor mío ¿me dejas que le de mi chocho a este animal?

Sor Luisa contestó rápido : si tienes ganas de dárselo , dáselo yo ya le he dado el mío.

Entonces métemela en el coño , métemela donde quieras pero sigue follándome.

Al oírla sor Luisa me miró y sonrió con complicidad .

Follamos como dos animales , ahora era mi responsabilidad el echarla un polvo antológico. Debí hacerlo bien porque la hermana empezó a decirnos que se iba a correr , que se estaba volviendo loco de gusto.

Me voy a correr , quiero que me des toda tu leche , sacúdete dentro de mi y no te dejes nada , lléname el coño con tu semen , llénamelo

Me corro , me estoy corriendo muy duro , me estoy corriendo, me estoy corriendo .

En esta ocasión no me hice esperar la escena me tenía cardiaco de manera que le anuncié que me iba a correr en ella.

Córrete tu también , viértete en mi , lléname que me vas a hacer correrme otra vez.

Me vine como un caballo , me dio la impresión de que de mi surgía un torrente , que la vida se me iba con la corrida .

Luisa mientras tanto le pidió a su amante que la siguiera dando lengua que ella también se quería correr .

Antes o después nos corrimos los tres y nos desplomamos en la cama.

¿Por que has querido cogerte mi coño?

Porque estaba muy excitado y quería tomar posesión de tus dos huecos , de sentir que me lo dabas todo sin reserva.

Vamos que era tu esclava y que podías disponer de mi a tu capricho

Si , se puede decir así , que quería doblegar tu voluntad y que me lo dieras todo , me lo has dado y he sentido un placer enorme. Cuando me he corrido he sentido que se iba la vida. He sentido más placer con tu coño que con tu culo

Cuando te has corrido yo me he vuelto a venir , me cuesta reconocerlo pero la verdad es que me has echado un polvo descomunal , nunca me había corrido tan fuerte. Yo también he disfrutado más cuando me la has metido en el coño.

Sor Luisa para no ser menos también dijo :

A mi ver como follábais me ha puesto muy caliente , me ha gustado mucho ver como disfrutabas Ángela y yo también me he corrido muy rico , todavía estoy cachonda perdida.

Os habéis dejado el chocho muy bien afeitado , me gusta porque así se siente más . Luisa si por mi fuera te follaría ahora mismo pero la verdad es que no me quedan fuerzas , Ángela me ha dejado muerto.

Si os parece bien , descansamos y mañana por la mañana vemos que hacemos.

Me dejas con muchas ganas me dijo Luisa , pero si ahora no puedes mejor que descanses .

Me coloqué entre las dos y nos dormimos.

En medio de la noche me medio desperté , estaba echado de lado y tenía cogida una teta de sor Luisa que me daba la espalda. Hasta ahí normal salvo el detalle de que ella me tenía cogida la polla con una fuerza que no podría mantener dormida. No solo eso , con suavidad pero de forma continua me la estaba meneando despacito .

Subí mi mano desde sus tetas hasta su cara para taparle la boca , acto seguido le levanté el muslo que no reposaba en la cama . Luisa entendió cuales eran mis intenciones y no solo mantuvo su pierna en alto sino que con su mano retiró la nalga para permitirme que la ensartara desde detrás .

Se la metí con lentitud , y en silencio como si estuviéramos haciendo la travesura de echar un polvo sin que sor Ángela lo supiera.

Echamos un polvo silencioso , haciendo los movimientos mínimos pero no por ello menos gozoso.

Cuando ya estaba a punto de venirse su reacción fue volver su mano hacia atrás y clavarme las uñas en mi culo. Nos corrimos muy rico .

Ya acabado el polvo la monja se volvió hacia mi , nos besamos y ella muy bajito me dijo :

Nunca en mi vida había sentido lo que siento cuando tu me follas , me matas de gusto y quiero que me sigas follando todas las veces que puedas , yo te voy a esperar con las piernas abiertas , mi amor.

Lo siguiente que recuerdo fue despertar cuando la luz entraba por el pequeño ventanuco. Estaba solo.

Me quedé un buen rato en la cama en la confianza de que mi monja cocinera me iba a dar un buen desayuno aunque llegara tarde . Tan fue así que me quedé en la cama hasta bien entrada la mañana , había decidido darme un día libre sabiendo que por la noche me tocaba compartir cama con sor Garoa , mi confidente .

A todos los efectos parecía que iba a ser un día normal , pero los acontecimientos de aquel día me acompañaran toda la vida.

Ajeno a los acontecimientos yo dormía plácidamente sin saber que me habían ido a buscar a mi celda , pero no me habían encontrado.

A las nueve de la mañana aparecieron en el convento tres siniestros curas, habían llegado al convento para aclarar lo que la sobrina del obispo había denunciado.

Lo primero que hicieron fue hablar con mi tía , quien naturalmente lo negó todo. La verdad es que los agentes de la Congregación para la Doctrina de la Fe , una especie de Santa Inquisición de hoy , fueron bastante ingenuos. Si hubieran madrugado de verdad habrían podido comprobar que mi tía estaba compartiendo cama con su novia , y también habrían cogido a mis dos compañeras de aquella noche en el mismo cuarto, pero cuando llegaron , las hermanas ya estaban entregadas a sus tareas.

Cuando salí de mi escondite , sor Luz María que fue la primera que me encontré me dijo:

Han venido tres curas a investigar una denuncia de sor Mercedes , te han estado buscando , vete a los huertos y ponte allí a hacer algo , en esa parte no han estado mirando.

Se me cayó el mundo a los pies. La fea me acababa de joder , bien jodido.

Los tres hombres de negro interrogaron a una por una a las hermanas y todas sin excepción negaron todo lo dicho por la fea , no solo eso muchas se escandalizaron de tener que escuchar semejantes atrocidades , como norma , cuanto más putas , más escandalizadas.

También interrogaron al cura esperando que a través de el y sobre todo de lo que le contaban las monjas en confesión sacaría la verdad. No sabían los pobres que el cura era desde hacía años el mayor corruptor del convento .Don Julio también se declaró horrorizado con las cosas que había contado la monja y con gran autoridad aseguró que todo lo dicho por sor Mercedes era producto de su imaginación , más aún , puso en seria duda la estabilidad mental de la monja.

Por fin dieron conmigo y los tres sujetos me pidieron que contestara a una preguntas . Yo en realidad no tenía obligación porque no estaba bajo su autoridad , pero me mostré dispuesto a colaborar.

Ha llegado a nuestros oídos que usted ha tenido trato carnal con alguna de las hermanas de este convento , que nos puede decir sobre esta acusación.

Padres , tengo 17 años y no he estado en mi vida con una mujer , no les digo que no sea algo en lo que a veces pienso , pero hasta ahora no he tenido oportunidad , quizás cuando cumpla los 18 pueda.

Sólo tienes 17 años .

Si padre , recién cumplidos y me considero un buen cristiano . Pregunte al señor cura , cada semana me he confesado y no falto a la misa diaria.

Sus pesquisas duraron dos días en los que los curas detectives demostraron su incompetencia , tanto es así que sabiendo que volvían a hablar con la monja fea , me fui a la cocina y la navarra y yo , en el cuarto del fondo aprovechamos para echar un polvo. La monja se apoyó en un fogón en desuso , le levanté los hábitos y siguiendo sus deseos me metí en su culo. La escena tenía el morbo añadido de que estábamos follando mientras los curas interrogaban buscando la verdad.

En sus conclusiones finales los tres curas llegaron a la conclusión que todo lo dicho por sor Mercedes era producto de su imaginación y causado por algún tipo de desarreglo psiquiátrico , incluso por una más que probable posesión demoniaca por lo que ordenaron su traslado inmediato a otro convento en el que severamente vigilada esperaban descifrar la causa de sus delirios.

Hasta ahí todo bien , su segunda decisión fue peor para mi. Le sugirieron a mi tía que para evitar equívocos yo abandonara el convento. Mi tía aludió al Tribunal de Menores y a su compromiso de tenerme trabajando durante seis meses , de los que faltaban casi cuatro. Les hizo reflexionar sobre el daño que podían hacer a un pobre niño que durante el tiempo que llevaba en el convento había tenido una conducta intachable . Llegó más lejos , se comprometió a vigilarme personalmente.

Acabaron por aceptar sus argumentos pero aún así le pidieron que me mandara un mes  a mi casa , hasta que la congregación se hubiera recuperado de los sucedido.

Mi tía me comunicó lo que le habían ordenado , pero a la vista de que la monja chivata ya no estaba en el convento me dio una semana de plazo para que pudiera despedirme con cada una de las hermanas antes de tomar la vacaciones que le habían ordenado . Al final no fueron siete sino doce días los que prolongué mi estancia en el convento , en las que me dediqué intensivamente  a sor Garoa y a mi tía , pero al final , muy a mi pesar tuve que volverme a Madrid .

Mi última noche en el convento , antes de irme para estar un mes fuera compartí la habitación del coro con mi tía , esta vez solos los dos, la hermana superior estuvo más cariñosa y más entregada que nunca , me dijo y yo la creí que iba a contar los días en los que iba yo a estar fuera porque estaba segura de que iba a echar de menos nuestras sesiones de sexo.

Me has dado tanto placer que me va a ser difícil dejar pasar los días sin follar.

A la mañana siguiente , me despedí de ella , previamente yo lo había hecho de cada una de la monjas , y me fui a mi cuarto a terminar mi maleta. En esas estaba cuando apareció en mi cuarto sor Garoa

Quiero que la última mujer con la que estés en el convento sea conmigo.

Me llevó a la cama y echamos el polvo más cariñoso de cuantos eché en las semanas anteriores . Después de corrernos como dos animales , la navarra se despidió de mi llorando.

Han pasado dos semanas desde que salí del convento , me faltan otras dos para volver y cuento los días y los minutos como un preso a punto de cumplir condena y alcanzar su libertad.

Fin.

Muchas gracias por todos los comentarios y la valoraciones.