El comienzo

Hola me llamo Sonia, no sé cómo calificar este relato entre confesiones y exhibicionismo, pero sí que es un poco la introducción a una serie de acontecimientos que hemos ido teniendo con el paso de los años. Alguien en un chat me comento lo de esta página para que fuese contado alguno de mis relatos ya que el solía entrar aquí y podría leerlos con tranquilidad y cuantas veces quisiera. Llevo casada con Angel seis años y estuvimos de novios ocho. Tengo 34 años, mido 1,64, peso 52kg, morena, con una talla 95 de pecho y un trasero llamativo.

En la época que empezamos todo esto yo tenía 24 años y un poco más rellenita que ahora…. Angel al principio de la relación era algo celoso y por eso me sorprendió cuando empezó a pedirme de hacer algunas cosas morbosas, o al menos para nosotros lo eran… Salir sin ropa interior, hacerlo en el campo cuando salíamos para hacer alguna ruta de senderismo sin pensar si alguien podía o no vernos, hacerlo fuera del coche en el campo o en cualquier camino y el ir desnuda en el coche por los caminos. Etc.

una de las veces fuimos con Luis y su pareja de acampada, Luis es amigo de mi marido Angel, lo son desde pequeños, vivían en la misma calle, solíamos salir juntos muchas veces, de acampada, de comida al campo, de cena o copas. Nosotros estábamos en nuestra tienda de campaña desnudos y Angel me estaba metiendo mano, como hacia calor Angel me dijo que abriese la mosquitera de la puerta para que entrase algo más de aire, yo me incorpore un poco y abrí la cremallera, mientras tanto Angel seguía tocándome como podía, Entonces me dijo que me asomase por la puerta de la tienda desnuda por el morbo de si alguien pasaba y me podía ver…. yo solo saque un poco la cabeza y Angel aprovecho para seguir metiéndome mano y comenzar a masturbarme, me dijo que sacase un poco más del cuerpo que con el avance de la tienda no podían ver nada.

Y así y con un poco más de cuerpo fuera Angel me empezó a penetrar, con los meneos que me daba los pechos se balanceaban sin control y yo iba saliendo un poco más de la tienda, como parecía un poco raro estar a si sin más, me encendí un cigarro para disimular, pero ya sí que tenía que salir más de la tienda para que no se fuese todo el humo para dentro o quemar algo, entonces lo dije a Angel que me tenía que poner algo arriba porque era muy descarado salir sin nada puesto, me puse una camiseta de tirantes y saque el cuerpo fuera de la tienda hasta la cintura, estando yo a cuatro patas no le fue difícil a Angel metérmela otra vez, unos cuantos meneos más y  note que Angel se corrió dentro de mí, sin darme mucho tiempo Angel se puso detrás de mí y sin dejar que yo entrase en la tienda  comenzó a comerme el coño estando yo con el culo en pompa...  cuando me corrí casi me caigo del temblor que se me quedo en todo el cuerpo. Fue todo muy excitante y morboso y disfrute muchísimo.

Pero de las más morbosa y de donde luego parte todo esto fue cuando quedando 2 años para casarnos más o menos un sábado que Angel se quedó solo en su casa yo me quede a dormir con él, estando en plena faena Angel me dijo si me atrevía a ir andando hasta la casa de Luis desnuda, solo con el abrigo puesto. Me sorprendió la propuesta porque a pesar de hacer algo morboso estando con ellos, se suponía que era sin que nadie lo supiera….

Le pregunte que porque quería hacerlo y que le decíamos a Luis que hacíamos a las 11 de la noche llamando a la casa ya que cuando se dejó con su pareja se volvió a casa de sus padres a vivir…. Angel me dijo que si nos abría la puerta yo le pidiese un cigarro que estábamos en su casa y me quede sin tabaco.

La calle es de un barrio a las afueras y son casas bajas antiguas, por las horas y que era el mes de noviembre no había nadie por la calle, el abrigo era corto por la mitad del muslo y la bota por debajo de la rodilla, entre las dos cosas quedaba algo más de una cuarta donde se podía ver solo la piel y para el mes que era no se veía muy normal el ir supuestamente con una falda que sería muy corta para que no asomase por debajo del abrigo y sin medias.

Llegamos hasta la casa y el coche de Luis estaba en la puerta, era la primera vez que iba desnuda bajo el abrigo por una calle, me daba vergüenza y también morbo el pensar que con poca atención que prestase Luis a mi vestimenta podía ver que algo raro pasaba… Sin dar tiempo Angel pulso el timbre y me entraron los nervios, retrocedí un poco hasta bajar de la acera.

Angel llamo dos veces más y como nadie salió nos marchamos para casa otra vez. Fue una de las más morbosas que hice hasta ese momento a sabiendas de que podían pillarnos en el juego, llegamos a casa y nos volvimos al dormitorio, Angel me quito el abrigo y a pesar del frio cuando me toco la vagina noto que yo estaba mojada, nos pusimos manos a la obra otra vez,  Angel con la excitación y creo que con el morbo  me follaba con fuerza, cuando se iba a correr yo me la metí en la boca y termino dentro de mi tragándola toda, yo me tumbe en la cama y Angel me comía el coño que con lo excitada que yo estaba no tarde mucho en correrme y cuando me corrí me pareció que no paraba nunca.

Todo quedo en ese día y no volvió a pedirme nada más referente a Luis, paso el tiempo y seguíamos con nuestros juegos solo el morbo de que alguien nos pudiese estar observando sin que lo supiésemos era la mayor excitación.