El chico rubio del camping
Como tuve mi primera experiencia gay en el camping de un festival. Los nombres están cambiados. Este es mi primer relato, espero que les guste y dejen comentarios para animarme a escribir más.
Empezaré presentandome, mi nombre es Aitor y tengo 18 años, vivo en Murcia, soy moreno de pelo y piel y mis ojos son verdes y soy bastante deportista con lo que tengo un cuerpo bastante bueno. Actualmente tengo novia desde hace dos años y por supuesto ella no tiene ni idea de la historia que os voy a contar.
Todo ocurrió la semana pasada, yo fui a un festival de música con mis amigos. La primera noche montamos todo en el camping del festival y después empezamos a beber, como era la primera noche teniamos muchas ganas de pasarlo bien así que bebimos bastante. Cuando pasaron un par de horas mis amigos decidieron que era hora de ir a ver algun concierto pero yo había bebido bastante y estaba muy cansado debido al viaje asi que decidí quedarme.
Todos se fueron y yo me quedé sentado en una silla mirando el cielo hasta que oí ruido al lado de nuestras tiendas, me giré y vi a un chico sin camiseta, sentado en el suelo y con unas maletas. El chico era bastante guapo, era rubio con los ojos azules y tenía unos brazos y unos pectorales muy marcados y tatuajes por todo el cuerpo. Al verlo noté algo en el corazón y en mis partes, entonces deduje que ese chico me atraía sexualmente a lo que atribuí a mi embriaguez.
El chico al verme levantó la mano para saludarme y yo le respondí de la misma manera y me hizo un gesto preguntando si podía sentarse en una silla que tenía a mi lado y yo moví la cabeza asintiendo, entonces se acercó y dandome la mano se presentó:
-Hola me llamo Fran ¿y tú?- Me dijo con una sonrisa que mostraba unos dientes perfectos a los que me quedé embobado mirando y como despertando de un sueño le respondí - yo me llamo Aitor, coge una cerveza si quieres y ponte comodo- a lo que el obedeció
Entonces el me contó que había venido con su novia que vivia en un ciudad distinta a la suya y que la estaba esperando pero como no tenía cobertura no podía llamarla para preguntarle cuanto le quedaba para llegar y no tenía tienda para dormir hasta que ella llegase.
Pasaron las horas y nosotros seguimos hablando y bebiendo de chicas, fútbol, choces... etc. hasta que me dijo:
-Oye Aitor me has caido muy bien y mi novia parece que no viene y yo ya tengo sueño así que ¿Me puedo quedar en tu tienda esta noche?
A mí se me iluminó la cara y creo que el lo noto por la sonrisa picarona que tenía y le dije que por mi vale si no le importaba el compartir cama con un tio
y él me respondió: -No será la primera vez que lo hago- y me guiñó un ojo, en ese momento supe que esa noche tendría algo con él y esa sería mi primera experiencia gay.
Ambos nos metimos en la tienda y nos quedamos en calzoncillos porque hacía mucha calor y no pude evitar fijarme en su bulto, enorme y perfecto, me quedaba embobado mirandolo mientras hinchabamos el colchón y lo preparabamos todo. Cuando nos tumbamos los dos nos quedamos mirando y entonces él rompió el hielo de una manera que me dejó a cuadros:
-¿Alguna vez lo has hecho con otro tio?-
-No, nunca
-Y ¿ no tienes curiosidad?- Me dijo poniedo su mano en la cadera. En ese momento me empecé a poner morcillón y se me empezó a acelerar el corazón, decidí ir a por todas. Me lancé y le di un beso muy apasionado cogiendo su mano y poniendola en mi paquete, haciendo que creciese mucho más.
Él se separó y dijo:
-Estaba deseando que esto pasara desde que te vi mirando al cielo y se me pusiese dura solo de imaginarlo-
Eso me puso mas cachondo aún y hizo que surgiera mi lado más salvaje y deseara reventarle el culo.
Después de un rato enrollándonos a lo bestia y restregando nuestras pollas empalmadísimas el bajó dandome besos en el pecho, en la barriga, en el ombligo... y yo no pude soportar más la espera y le agarré el pelo y le baje la cara hasta mi polla. Él empezó a masturbarme y a darme besos en la punta, y luego metió la punta en la boca, yo gemí del placer y apreté las manos en su pelo y eso le sirvió de estimulo para empezar a meter cada vez más en su boca, subiendo el ritmo poco a poco y yo cada vez gemia más y más fuerte hasta que no pude aguantar más y le avisé que me iba a correr, entonces se la metió toda entera para notar toda mi leche en la garganta y al notar toda mi polla metida dentro me corrí a lo bestia, soltando un lefazo que nunca había sentido así, pero estaba tan cachondo que mi polla seguía empalmada.
Él subió y mirandome a los ojos y tragando me dijo: -Quiero que me rompas el culo-
Conforme dijo eso le di la vuelta y lo puse a cuatro patas, entonces me lamí dos dedos y empecé a meterlos poco a poco en su ano para dilatarlo lo suficiente para poder meter toda mi polla de una sola vez, el gemía al mismo ritmo que yo le introducía los dedos, cada vez más rapido y entonces me pidió que metiese uno más y así lo hice, embistiendo mi mano cada vez con más fuerza. Cuando lo ví suficientemente dilatado su ano me cogí la polla y poniendo la puntita al principio de su agujero embestí mi cadera metiendola toda entera, él soltó un chillido, no sé si por dolor o por placer pero a mí me dió igual y seguí embistiendo.
Él decía cosas como: fóllame más fuerte, soy una guarra, soy una puta, y eso me ponía muchisimo y le cogí el pelo levantando su cabeza mientras seguía embistiendole. Cuando llevaba un rato sentí que iba a correrme y no quería que acabase todo esto pero no podía evitarlo así que le pregunté si podía correrme dentro y como no respondió pensé que era un sí así que lo hice. Entonces me separé muy sudado y vi que él aún estaba empalmado y pensé que él no se había corrido y que eso no estaba bien, así que bajé para probar su polla, pero entonces mientras bajaba oímos a una chica gritando el nombre de Fran, él me miró con la cara en blanco y se puso las calzoncillos y los pantalones rápido y salió, entonces oí como ella le decía que había tenido una averia con el coche y por eso había tardado tanto. Los dos montaron su tienda y se metierón a domir.
Mientras yo estaba tumbado intentado dormir y pensando en lo especial que había sido eso, oí como los dos follaban y pensé que yo podría estar en el lugar de ella y me entraron ganas de entrar y quitarla para ponerme en su lugar, así que pensé que esta no sería mi última experiencia con un chico y espero que tampoco la última con Fran.