El chat IX
Introducen a Lucia, pero a Laura le espera una sorpresa... una cena donde todo se desmandara un poco.
(Viene de el Chat VIII)
La espera no duro demasiado. Amo y Briggitte llegaron al cabo de una hora… Ambos nos miraron con evidente admiración por cumplir las ordenes recibidas. Briggitte estaba encantadora enfundada en un mono negro con una cremallera que dejaba ver un escote muy sugerente. Amo estaba vestido de traje, inmaculado.
- Muy guapas… Te queda muy sexy esa ropa puta.
Era la primera vez que ante mi hija se dirigía a mi en esos términos. El uniforme de colegial me quedaba apretado, la falda corta adivinaba el fin de mis medias sujetas por el liguero. Briggitte había fijado su mirada en mi, y le dio un repaso a mi hija. Lucia estaba encantadora con un vestido blanco ligero, sin sostén se adivinaban sus pezones a través de la tela. Las aureolas oscuras no ayudaban al ocultamiento. Sus zapatos de tacón realzaban sus esbeltas piernas. Sus labios jóvenes eran ya los de una mujer, y podía dar fe que besaba y actuaba en la intimidad como una mujer adulta… Su entrega, de la que pronto, estaba segura, gozaría Amo, era admirable.
- Bien, vamos, os invitamos a cenar… os gustara el lugar… jajajaja.
Cuando salíamos, Amo agarro a Lucia…
¿Seguro que quieres venir?
Desde luego… ¿ o no deseas que..?
Oh, si, desde luego que si… espero que sepas a que juegas.
Lo se.
Subimos al coche, Brigitte, Lucia y yo no sentamos atrás. Briggitte en el medio. El coche arranco.
¿Lleváis bragas?
Si.
Si.
Debería castigaros por ello. A ti Lucia no, aun no conocerás bien las normas, pero a esta cerda… me encargare de que las recuerde. Eres muy dulce, estoy deseando que Amo te entregue a mi… aunque de momento me temo que tendré que contentarme con la puta esta. En cuanto a ti preciosa, espero que estés preparada para el aluvión de pollas que van a luchar por romperte ese chochito precioso que debes tener.
Lucia no dijo nada. A mi se me mojo el tanga casi de inmediato pensando en como seria estar en manos de Briggitte, y en la imagen de mi hija sometida a decenas de machos… era increíble lo salida que estaba con la situación. Luis conducía siguiendo las indicaciones de Amo. Pronto llegamos a una casa de campo, un chalet. Habia luces, música, coches aparcados, gente bebiendo con traje. Casi todos hombres, alguna mujer también, muy elegante. Lucia no desentonaba, pero yo parecía una puta callejera… supongo que eso habían buscado.
Descendimos. Escuche alguna frase admirativa sobre mi hija, realmente estaba preciosa. Irracionalmente, estaba orgullosa… ¿que tendrían pensado?. Tampoco apartaba mi vista de Briggitte… me di cuenta de lo bonita que era… No tenia un pecho excesivo, ni era una modelo… pero tenia algo… y entonces caí en la cuenta de cuanto deseaba ser suya, mas que de Amo… deseaba que me tocara, me tuviera, me hiciera suya… me gustaba su decisión y aplomo… Pasamos por una puerta que dio acceso a un salón, también con gente… Una especie de recepcionista nos condujo a un saloncito, allí había una mesa con cubiertos y cartas...Sorprendida tome asiento, al igual que mi marido cornudo, Amo, muy galante, separo la silla para que Lucia se sentara. Briggitte tomo asiento junto a Amo. Este nos miraba divertido…
- Podéis pedir. Os aconsejo el pato, esta delicioso.
Estaba claro que se divertía con nuestro desconcierto. Pedimos la cena, charlábamos como si fuéramos viejos amigos que habían quedado para verse esa noche.
Dime Lucia, sabes que tu madre es miá?
Si
¿Y que es puta?
Si.
Y tu, ¿quieres ser como tu madre?
Amo se rio ante el silencio de Lucia.
- Puta, metete debajo de la mesa y hazme una mamada.
Mire a mi hija… Aparte la silla y me deslice bajo la mesa, desabroche el pantalón de Amo… saque su miembro… y sin dudar lo introduje en mi boca… Lo hice con gran dedicación… con insistencia, pero con cariño. Me di cuenta que lo que realmente deseaba ahora era comérselo a Briggitte, y luego ser castigada por ella...Pero seguí cumpliendo mi cometido. De repente Amo agarro mi cabeza y no me permitió moverla, me estaba follando la boca… sentí como se corría...comencé a tragar su semen… hasta que lo deje limpio… Mi coño estaba empapado en ese momento de deseo.
- Muy bien, puta, vuelve a tu silla.
Sali de debajo de la mesa para sentarme en mi asiento. El camarero estaba presente en ese momento, y por tanto era conocedor de todo. Me sentí tremendamente avergonzada. Mi hija no decía nada, como si nada hubiera pasado.
¿Has visto Lucia?… Esta es la clase de entrega y sometimiento que deseo… Pero entiendo que aun eres una niña.
No soy una niña.
Físicamente, desde luego que no… estas muy buena, pero… no se… ven aquí.
Lucia avanzo hacia Amo. Este le separo la silla y le indico que se sentara sobre su regazo, donde tenia su pene a la vista. Lucia, se sentó… Amo separo la falda para que el contacto de su polla fuera directo con la piel de mi hija.
Estas cómoda?
Muy cómoda.
Amo. Dilo.
Muy cómoda, Amo.
Delante de todos, incluido el camarero, Amo empezó a acariciarle los muslos, claramente a la vista. La beso, y Lucia respondió a su beso… Las manos de Amo se posaron en sus senos… entonces.
- Cerdo, ven aquí. Y tu puta, también.
Nos pusimos Luis y yo al lado de Amo que no dejaba de sobar a nuestra hija. El la aparto poniéndola de pie.
-Desnudadla.
Así que iba a ser allí… y ahora… Mire para Lucia…, pensaba “dime que no”… pero Lucia no dijo nada. Luis se quedo mas parado, se notaba que no sabia que hacer… Yo di el paso… comencé a desabotonarle el vestido.
-Así no. Arrancáselo. Quiero que me la des.
Cerre los ojos, agarre de las solapas y tire con fuerza rompiendo todos los botones… Entonces Luis reacciono, agarro el vestido por detrás y tiro de el para dejar a Lucia desnuda, salvo por un tanga, ante Amo… Luis agarro el tanga de su hija y lo rompido. Lucia ahora estaba desnuda ante todos. Amo se levanto… la agarro, le dio la vuelta y la puso apoyada contra la mesa. Enseguida me di cuenta de lo que iba a pasar. Se bajo los pantalones… abrió sus piernas y de un golpe entro dentro de Lucia que gimió de placer ante aquella violación. Amo busco los labios de su nueva sierva, que encontró… se notaba que deseaba a Lucia, pero también que Lucia lo deseaba a el… porque no se la estaba solo follando, la estaba amando. De hecho Lucia le abrazaba y le besaba en el cuello y en los labios. El busco sus pechos…
Yo estaba violenta viendo la escena… pero mas por celos que por otra cosa… A mi lado Luis estaba excitadisimo y un bulto en su pantalón lo delataba claramente.
Amo tiro a Lucia sobre la mesa, y siguió besándola y tocándola…
De repente Briggitte tiro de mi…
-Vamos. Para ti tenemos otra cosa. Dejalos. Camina zorra.
Nada dijo de Luis que allí quedo. El camarero entre tanto recogía los restos del suelo mientras sobre la mesa seguía la escena de Amo follándose a mi hija y esta ahora ya no disimulaba sus gemidos ni gritos de placer.
Salimos del saloncillo, atravesé el salón principal donde había varios hombres de traje negro… nos miraron… Briggitte hizo unas señas, y bajamos por una escalera, varios hombres y mujeres nos seguían… Llegue a una especie de sótano… Allí Briggitte me condujo al centro… estaba iluminado por un foco… En unas sillas las personas que nos seguían tomaron asiento.
- Desnudate.
Lentamente, me quite la ropa… Se escucharon comentarios.
Realmente esta sexy con esa vestimenta de niña… casi mejor que se la quedara.
Deja.. quiero verle bien las tetas. A ver si merece la pena pujar por ella.
Me la imagino a cuatro patas mientras se la meto y mugiendo como una vaca jajajaja
Comentarios obscenos sobre mi cuerpo y lo que pensaban hacer con el… Lejos de asustarme, me excitaban… al punto de que no pense en lo que Lucia estaba “sufriendo” en manos de Amo.
- Toda puta… En pelotas. Tirate al suelo.
Me estire en el suelo… Briggite me sujeto los tobillos con unas argollas cerradas con pasador, que a su vez engancho a una cadena que pendía del techo. Se acerco a mi oido y me dijo…
Preferiría hacer otra cosa contigo. Me gustas de veras.
A mi también me gustaría…
Te dolerá ser miá. Yo no respeto limites.
No me importa.
Me miro… !yo le gustaba!… Ella se abrió la cremallera de su mono ajustado… se lo quito, dejando a la vista una braguita negra de encaje y un sostén a juego… decir que me moje es quedarse corta. Fue una catarata. Se dirigió a la pared y pulso un botón… las cadenas comenzaron a tensarse, tirando de mi, al poco tiempo estaba con las piernas abiertas, cabeza abajo suspendida en el aire… el dolor era fuerte y sabia que no podría aguantar así mucho tiempo mas.
Me hizo girar, supongo que para que todos los espectadores me vieran bien. Entonces, uno de ellos dijo.
- Fusta. En su coño.
Briggitte tomo una fusta de un estante… acaricio mis labios con el… yo lami la fusta… subio a mis pezones… se paro en mi coño…. Y entonces descargo un fuerte golpe que me hizo gritar… luego otro, y otro… y otro… Azoto mi culo, mis pechos… se que le encataba torturar mis pezones… Intervino otro espectador.
- Un momento… si ya esta a punto, metesela jajajaja.
Briggitte agarro una botella, champan por lo que vi… acerco su boca a mi coño… estaba empapado… su mano empezo a frotarmelo provocando mas mojadura y acercandome al orgasmo. Sabia como tocar, donde y de que manera… yo me olvide de la vergüenza de que todos aquellos hombres y mujeres me estuvieran viendo disfrutando de mi aparente tortura.
Briggite descorcho la botella, la agito y de repente la introdujo en mi sexo haciendo que el champan se desbordara dentro de mi coño… el placer fue tan intenso que el orgasmo fue insoportable… entonces dos hombres se levantaron y comenzaron a beber el champan que emanaba de mi coño… El pacer aumento mas.
Briggite se acerco a mi boca… me beso…
Podemos parar… solo pídelo.
No.
Entonces se acerco a la pared, accionado el botón volvió a posarme al suelo… el dolor se aligero un poco. Soltó mis tobillos, y ato mis muñecas… Alguien grito “contrapeso” entre risas.
Brigitte volvió a elevarme, esta vez por las muñecas. Cuando solo podia apoyar las puntillas de los pies, sujeto las argollas de los tobillos al suelo… pensé que quería desmembrarme… me asuste… Entonces, tomo una cuerda, la paso por mi sexo hasta una polea. La otra parte de la cuerda pendía del techo…. El extremo lo ato a un cubo… Entonces los presentes se acercaron al cubo y empezaron a tirar piedras dentro de el, piedras que observe estaban acumuladas en un monto… al aumentar el peso del cubo la cuerda se tenso…y se clavo en mi sexo… al mismo tiempo, Briggitte trabajo mis pezones mientras me besaba… la mezcla de dolor y placer era insoportable. Coloco unas pinzas en mis doloridos pezones… tiraba de ellos con pericia…
- Arrancáselos jajajaja… deberíamos de cortárselos a esa puta.
Briggite me miro… me decía… “tranquila, eso no pasara”… estaba en sus manos… quería estar en sus manos. Una mujer y dos hombres se acercaron a mi, Briggitte se aparto… ellos comenzaron a tocar mi cuerpo dolorido e inmovilizado… la mujer me beso y mordio los pezones, en tanto que los hombres tiraban de la cuerda que estaba clavada en mi sexo… la mujer, una gorda y muy mayor, me beso varias veces… se reían… los hombres jugaron con mis pechos… estaban excitados sin duda alguna.
Briggitte decidió que era suficiente, me soltó y me arrastro a una mesa donde volvió atarme con las piernas abiertas… Con unas velas se dedico a encerar mi cuerpo… la mezcla de dolor y calor provoco en mi corridas aplaudidas por el publico… Briggitte no dudo en castigar mi sexo con cera, prácticamente cerrándolo. Un hombre se acerco.
- Pobrecita… tendremos que quitarle todo esto.
Tomo un cuchillo… se dirigió a mi cuerpo y fue recorriéndolo liberándolo de la cera… Cuando rozo mis pezones me volví a correr… siguió bajando hasta mi sexo…. Tuve miedo pero no proteste. Hábilmente libero la cera sin hacerme un solo corte. Yo estaba exhausta… entonces me soltó… Briggitte recorrió mi cuerpo para librarme de cada pedazo de cera que quedaba… Me situó en el centro, bien a la vista de todos.
- Bien señoras y caballeros, han visto lo que es capaz de hacer esta perra… empieza la subasta en 2000 euros… Recuerden que solo tendrán derecho a la posesión durante 48 horas y con acuerdo de fechas previo. Las limitaciones de la puta las tienen en la documentación que se les ha hecho llegar. Por supuesto la prostitución esta permitida ya que la cerda no se ha opuesto, asi que pueden rentabilizar su inversión.
No me lo podía creer. Me subastaban como si fuera ganado. Comenzaron a pujar… era lo mas excitante que me había pasado en la vida… ¿quien me ganaría?¿Que pasaría?¿Que le estaban haciendo a Lucia?.
(Continuara)