El castigo

Ser sumisa no siempre es fácil pero es muy placentero

LLevo días sin hablar contigo por que estoy muy ocupada, tú cada vez estás más enfadado y quieres castigarme pero no me pillas. Estás muy enfadado y se lo comentas a tu mejor amigo, este te dice que soy una mala puta y que debes dominarme, te anima a la idea que ya tienes. Venir a mi casa a demostrarme quién es mi amo pero no me dices nada. Me haces una videollamada sin audio ni video por tu parte. Me ordenas que me desnude y me empiece a masturbar como una golfa. Obedezco. Cuando ya estoy calentita me pides que entre en una sala de zoom y que me muestre desnuda. Estás tú y otro usuario con la cámara apagada. Me ordenas que me pegue en el culo con la cuchara de madera, obedezco lo mejor que puedo levantándome un poco de mi silla de ruedas. Cada azote me duele y me excita, me susurras puta y mi coño chorrea. Al fin conectas tu cámara. Te veo y reconozco el fondo ¡es mi portal! Estás en mi puerta, me ordenas que te abra la puerta, desnuda y con el culo rojo. No me lo puedo creer... te tengo algo de miedo en este momento pero casi me corro pensando en tenerte tan cerca al fin. Me besas y abrazas dulcemente, susurrando a mi oído "puta, te vas a enterar".

Me arrastras al comedor, delante del portátil y dices "conecta la cámara, amigo". En ese momento se activa el tercer usuario de nuestra sala de zoom que ya está polla en mano disfrutando de mi sometimiento. Te anima a que me recuerdes lo puta que soy y me muestras como un trofeo, me pellizcas los pezones, parece que sigues enfadado...Me pones con el culo en pompa con las manos apoyadas en una silla. Ya no hace falta la cuchara, me pegas con la mano abierta, mi culo tiembla... Varias veces. No puedo mas y lo notas, entonces tu dedo se dedica a torturar mi clítoris entre azote y azote hasta que estoy a punto de correrme. Paras para meterme tu polla en mi coño húmedo y abierto. UFF! TODA ADENTRO. Me bombeas con todas las ganas contenidas hasta que te corres dentro de mí. Ahora me ordenas como a una puta que le coma la polla a tu amigo. Yo no entiedo nada, él hace rato que se ha corrido con el espectáculo pero me traes un regalito. Una gran polla con ventosa que pones delante mismo del ordenador y me ordenas que la coma y la lama lo mejor que sepa sentada en la silla pero inclinada hacia delante. Mientras has ido a buscar mi vibrador con mando y me lo introduces en mi coño ardiente. Te sientas en el sofa con el mando y lo vas poniendo a tope mientras me ordenas que siga comiendo polla. No puedo, casi me vuelves loca con el vibrador, me estoy corriendo otra vez, no quieres bajar el ritmo del vibrador mientras te masturbas lentamente para volver a la carga en cuanto tu amigo se corra con mi mamada virtual.

Es una tortura. Tu amigo se vuelve a correr, solo entonces me ayudas a ir a tu lado y sentarme en el sofá. Por fin me sacas el vibrador pero metes el pequeñito por mi culo, es toda una sorpresa. Coges la polla de plastico y me la metes por el coño, tu polla empieza a reanimarse y está cerca de mi boca "ya sabes lo que tienes que hacer, puta!" La meto en mi boca y la succiono con hambre, es mucho mejor que la de plastico aunque me esté follando con ella el coño por que asi me lo ordenas. Me magreas los pechos y pellicas los pezones. Me duele, realmente me duele aun el culo, el coño y ahora los pezones pero he de hacerme perdonar y sigo mamando con ansía. Creo que estoy a punto de recuperar mi titulo de buena puta cuando tu semen empieza a brotar de nuevo. Con el empapas mis pechos por que soy tu puta.