El Carnicero 2
Ahora Carmen prueba a los dos hermanos
Como ya conté en la primera parte de éste relato, para poner en antecedentes a los lectores, mantengo relaciones sexuales con Antonio, el carnicero del mercado de mi barrio, un chico de treinta años de edad, (yo tengo cuarenta y cinco como sabéis); es guapo, con un cuerpo escultural, un "pirsin" en la lengua y una polla superdotada de más de veinte centímetros de longitud.
En una de nuestras últimas citas me confesó que le había contado lo nuestro a su hermano pequeño Javi, de 22 años de edad, el cual pareció excitarse sobremanera con ello, por lo que le había propuesto organizar un trío, para quitarle el virgo jaja, si nosotros dos estábamos de acuerdo. Antonio me dijo que por él no había problema y que podría resultar muy divertido, quitarle el plomillo a su hermano una madurita como yo. Pero que yo tenía la última palabra en éste asunto, ya que por encima de todo me respetaba.
Como también expuse en el relato anterior, a pesar de ser una mujer felizmente casada desde hace muchos años, en el ámbito sexual soy bastante ardiente y viciosa, por lo que no me tomé mucho tiempo en aceptar aquella morbosa y caliente proposición.
Fijamos la cita para el día siguiente, en mi casa, entre las cuatro y las seis de la tarde. Os recuerdo que mi marido trabaja durante todo el día y no regresa a casa hasta las ocho o las nueve de la noche, y como mi cuñado Ramón al parecer estaba servido con lo que le daba Lola, yo estaba un poco desatendida. Jajá.
Decidí esperarles con ropa provocativa para calentar rápidamente el ambiente; un pantalón muy corto y ajustado, una camiseta rosa ceñida semi-transparente y unas zapatillas blancas de deporte sin calcetín ni medias. Por descontado que tampoco me pondría bragas ni sujetador. Abrí la cama, puse un poco de música de ambiente, y coloqué bombillas rojas en las lámparas de ambas mesillas de noche. Por último, baje la persiana de la ventana hasta el tope, creando un ambiente de auténtico prostíbulo.
Eran poco más de las cuatro menos cuarto cuando llené la cubitera de hielos, prepare unos vasos de tubo y saqué una botella de whisky J&B y varias latas de Coca-Cola, colocándolo todo sobre la mesa baja del salón. Luego encendí un cigarrillo y me senté a leer una revista. A las cuatro y un minuto sonó el telefonillo del portero automático. Al descolgarlo y contestar, la voz de Antonio me anunció su llegada. Pulsé el botón de apertura y me dirigí hacia la puerta, para abrirla dando paso a los dos muchachos.
Antonio estaba especialmente atractivo y deseable aquella tarde, con su habitual ropa ajustada que enmarcaba su perfecta musculatura y su abultado "paquete". Javi era bastante feo, con el rostro plagado de granos y aspecto de macarra. Los invité a entrar en el salón y servirse una copa. Estuvimos quince o veinte minutos conversando sobre nuestras preferencias sexuales. Antonio le contó a su hermano lo bien que yo la chupaba, con todo lujo de detalles, por lo que el chavalín empezó a exteriorizar una tremenda excitación, tanto en los gestos de su cara, como en la hinchazón de su bragueta. Además, no me quitaba ojo de las tetas, cuyos pezones se clavaban descaradamente en la frágil tela de mi camiseta, y le dijo, ”Javi lo que va ha pasar aquí júrame ,por nuestro padre que esta bajo tierra que no se lo vas a contar a nadie “ Carmen es una señora respetable con su marido y sus hijo,lo que pasa es que es muy ardiente y necesita que la follen por fuera,”Vale”, y Ja
El tiempo pasaba raudo y veloz, así que apuramos nuestras copas y nos trasladamos al dormitorio. Cuando accioné el interruptor de la luz, los dos chavales se deshicieron en elogios por el ambiente de vicio que había creado en la estancia. Yo les di las gracias y comencé a desnudarme. Antonio hizo lo propio, pero Javi se quedó un poco cortado. Entonces decidí ayudarle a desnudarse, lo cual pareció calmar su vergüenza inicial. Cuando finalmente le bajé su diminuto slip de color negro, la polla de Javi ya estaba apuntando al techo. No era ni mucho menos de la envergadura del de Antonio, pero seguía siendo más grande y gordo que el de mi marido. Aquélla primera visión comenzó a humedecer mi coño.
Antonio me cogió por las tetas y empezó a darme lengüetazos en la boca, mientras su hermano miraba atónito el espectáculo. Entonces les cogí la polla a ambos y les fui masturbando lentamente. La saliva de Antonio me chorreaba por la comisura de mis labios, y mis tetas estaban siendo sometidas a un masaje continuo, mientras la polla de Antonio iba creciendo y creciendo en mi mano, ya que la de Javi ya estaba a tope desde el principio. Cuando Antonio dejó de morrearme para respirar un poco, aproveché para besar en la boca a su hermano. Al notar el contacto de mis labios, el chaval bajó una de sus manos y me acarició el coño con bastante habilidad, y metiendo su dedo en el interior.
Ahora la escena era digna de una película X: Yo les besaba en la boca, por turnos, mientras les masturbaba las pollas al unísono. Antonio me magreaba las tetas y Javi me hundía el dedo índice de su mano derecha en mi húmedo y caliente coño. A los pocos minutos los tres estábamos como motos, sollozando y vibrando de excitación.
Antonio le dijo a su hermano que se tumbara en la cama, boca arriba. Luego me colocó a horcajadas sobre él . La polla del chaval estaba tan dura, y mi coño tan mojado, que la penetración fue rápida y profunda . Entonces me recosté sobre Javi y empecé a besarle en los labios muy suavemente . Antonio se situó en pie por detrás de mí y, tras lubricarse la polla con su propia saliva me la metió en el culo y me agarró por las tetas. Después, ambos empezaron a mover sus caderas rítmicamente, follándome el coño y el culo al mismo tiempo. Mira que zorra es, le encanta tener todo lleno, Antonio me decía “¿Te ha gustado Carmen?” Siiiiiiiii, me encantaaaaa vuestras pollasssssssss,COMO ME GUSTA CABRONES , seguir fuerte,fuerteeeee,Ohhhhh siiiiiiiiiiiiii, Me corrroooooooooooooo, comoooo me follaisssss de bieeeen hijos de putaaaaaa-que pollasssss que buenoooooooooooooo, ya,yaaaaaaaa me corrooooooooo , En menos de dos minutos alcancé mi primer orgasmo. Los besos de Javi ahogaban mis gritos de gusto, lo que le agradecí mucho, ya que de lo contrario todo el vecindario se hubiera enterado de que me estaba corriendo.
La posición en la que me encontraba era perfecta para que Antonio, en cada empujón que me daba para taladrarme el culo provocaba que mi cuerpo se hundiera contra el de Javi, y, debido a la delgadez de éste, mi pelvis se incrustaba en el pubis del chaval permitiendo que su polla me entrara hasta hacer tope con los cojones. El bombeo era tan intenso y profundo que mis orgasmos se fueron sucediendo consecutivamente sin apenas pausas intermedias. Era uno de los mejores polvos de mi vida, porque me estaban follando dos tíos jóvenes.
Los dos muchachos estaban empapados en sudor, por lo que tuvieron que parar un poco sus arremetidas. Entonces aprovechamos para cambiar de posición. Esta vez me tumbé yo sobre la cama, boca arriba. Antonio se arrodilló entre mis piernas y me penetró el coño con su tremenda polla Una vez metida coloqué las corvas de mis rodillas sobre sus hombros, rodeándole la espalda con mis pantorrillas. En esa posición empezó a joderme el chocho a buen ritmo. Javi por su parte se sentó sobre mi estómago y colocó su polla entre mis tetas. Con ambas manos presioné mis tetas contra su polla y, metiéndome el capullo en la boca, empecé a hacerle una cubana al tiempo que le lamía el capullo.
Con mi marido había intentado aquella posición varias veces, pero su polla no era tan larga como la de Javi y no se la podía chupar al mismo tiempo, la de mi cuñado Ramón si. A los pocos minutos, me sobrevino un nuevo orgasmo. En ese mismo momento, la polla de Javi empezó a escupir leche en mi boca. El orgasmo era tan intenso y placentero que me tragué todo aquel espeso cuajo de leche sin dudarlo. Cuando Javi estaba terminando de descargar en mi garganta, la polla de Antonio reventó violentamente dentro de mi empapado y caliente coño, inundando mis interiores con su leche caliente, lo que provocó que me corriera al mismo tiempo que él. Para entonces Javi me besaba en la boca con pasión y vicio, explorando con su lengua ensalivada todos y cada uno de los rincones de mis encías.
Luego, exhaustos, los tres nos tumbamos en la cama, situándome yo en el centro, y encendimos un único cigarrillo que nos fuimos pasando como si se tratara de un "canuto". El sudor que cubría el cuerpo de Antonio , resaltaba aún más sus formidables y perfectos músculos. Javi también estaba todo sudado y algo espeso, a juzgar por el olor que desprendían sus pies. De pronto, aquel olor a pies me volvió a poner cachonda y, recostándome en la posición opuesta a mis dos machos, empecé a lamerles las plantas de los pies y a chupar sus dedos uno por uno. Ellos mientras tanto me magreaban el culo y el coño con sus juguetonas manos. Estuve más de cinco minutos lamiéndoles los pies, de lo cachonda que estaba no me preocupaba que olieran.
Luego me dieron la vuelta y me comieron el coño por turnos. Sus lenguas recorrían mi raja por dentro, deteniéndose de vez en cuando en la pipa. Las caras de ambos se fueron bañando en mi flujo, que ya estaba "a punto de nieve". Mi cuerpo vibraba de placer con sus lenguas. Cuando me quise dar cuenta, ambos tenían de nuevo sus pollas empalmadas. Esta vez fue Javi quien abrió el turno y empezó a follarme. Ahora Antonio me chupaba las tetas, imprimiendo suaves mordisquitos en mis pezones, mientras que yo le masturbaba con las manos.
Después de un buen rato Javi se salió de mi coño, llevó su polla hasta mi boca y empezó a descargar leche en ella. Su hermano le decía “ estas tonto Javi a una hembra así le tienes que llenar el coño de leche so tonto ”, y raudo y veloz como la pólvora, aprovechó el hueco libre y me la metió de una estocada hasta el fondo . Cuando Javi terminó de correrse en mi boca, se levantó de la cama y salió del dormitorio. Todavía Antonio me estuvo follando un buen rato antes de correrse nuevamente en mi coño, Ohhhhhhh…….siiiiiiiiiii, me gustaaaaaaa, quiero maaaas, quierooo que me folleeees cabroooon, siiiiii lo necesitoooooooo.Toma mi pollaaaaaa cabronaaaaa, como disfrutooooooo, que coño más apretado tienes, me encantaaaa, ohhhhhhh tiaaaaaaaa, que gustooooo, te voy a follar hastaaaaa que me digas bastaaaaa,Siiiiiiiiiii, soy tuyaaaaaa, quierooo maaaaas, follame más fuerteeeeeee, maaaaaas dameeeee.
Estaba siendo con diferencia el mejor polvo de mi vida, sentí que estaba a punto de correrme y además note que a él también le venía el orgasmo y le espere para corrernos juntos ,¡!Me corrrooooooooooooooo!!,le dije y Antonio dijo ¡!Y yooooooooooo!!.
Esta vez su leche se derramo en el interior de mi coño, sentí totalmente aquella gran polla correrse, en cada espasmo que dio, su leche caliente saliendo y deslizarse desde dentro hasta fuera llegándome hasta los muslos, toma leche Carmen ¡!Joder que buena estas tía!!,eres mejor que las mujeres de nuestra edad, mi novia no te llega ni la altura de un zapato.
Ya eran las seis y media de la tarde, media hora más de lo previsto en un principio. Nos duchamos juntos los tres y luego nos vestimos. Poco antes de las siete Antonio y Javi se despidieron y abandonaron la casa.
Mi marido cuando llego a casa se dio cuenta y me dijo, ¿A quien te a follado hoy? Y le dije a los dos carniceros y me contesto pues bueno a ver si nos traen buena carne que bien que se come la mia jaja, y se acostó.