El campamento del amor
Planeamos mi novia y yo un viaje, ya que estábamos cansados de la monotonía que se vive en Cuernavaca y decidimos salir al campo. Llevamos tienda de acampar, linternas, bolsas para dormir, y bastante comida pues ni internaríamos entre las montañas y no hay tiendas cercanas, y por supuesto la protección necesaria y no hablo de los condones y demás cosas, jejeje.
EL CAMPAMENTO DEL AMOR
Planeamos mi novia y yo un viaje, ya que estábamos cansados de la monotonía que se vive en Cuernavaca y decidimos salir al campo. Llevamos tienda de acampar, linternas, bolsas para dormir, y bastante comida pues ni internaríamos entre las montañas y no hay tiendas cercanas, y por supuesto la protección necesaria y no hablo de los condones y demás cosas, jejeje.
Durante el camino fuimos admirando el paisaje, lo hermoso de la naturaleza y me hizo reflexionar que la mayoría del tiempo nos pasamos destruyendo nuestra casi poca naturaleza que nos queda en nuestras ciudades y decidí que la regresar a mi casa construiría un hermoso jardín. Mas adelante llegamos a un cabaña donde un lugareño nos ofreció una muy bonita lámpara y como esta bien vara, que la compro. Nos internamos, le calculo unos 6 kilómetros mas de donde estábamos, donde solo podíamos escuchar el grato sonido del bosque, durante nuestro camino encontramos a varias personas y hubo en particular una cabaña que nos llamo la atención por lo grande y bonita, pero no mas bonita que dos de sus ocupantes, pues eran dos hermosas mujeres al parecer de Puebla pues una a la otra le decía: "Me las pagas todas juntas en la noche "pipope", "no tu si eres un pipope".
En fin seguimos nuestro camino y vimos que comenzaba la noche, en eso mi novia me dijo: "Escuchaste lo que se dijeron las chicas", "Si", pues tu también te llevarás una sorpresa esta noche, traje algo que los dos habíamos planeado comprar.
Y desde ese momento comencé a imaginar como lo usaría.
Por fin después de tanto caminar y explorar encontramos un lugar hermoso, junto a una de las 1000 cascadas que hay; comenzamos a armar la tienda, prendí la fogata, cenamos algo ligero y fuimos a tentar el agua y como esta agradable decidimos entrar a disfrutar de la naturaleza. Y entre nuestros gritos y sonidos de la naturaleza nos fuimos calentando hasta que nos fundimos en un apasionado beso, la tome y la levante y la saque del agua dejándola sobre el pasto junto a la fogata ahí sobre esa noche maravillosa bajo la luz de la luna y el calor de la fogata nuestros cuerpos desnudos comenzaron a sentir un clima rico excitante, con mi cuerpo desnudo me deje recostar sobre el suyo su senos se aprisionaron con mi pecho donde pude sentir la dureza de sus pezones , mi verga fue recibida y cobijada por su linda panochita que se cubría y a la vez cubrió a mi verga con unos lindos y abundantes bellos, con mi boca y mi lengua recorrí cada parte de su cuerpo el cual se encontraba tibio, enseguida note que contorsionaba sus caderas y lo note cuando introduje mi verga en su panochita que estaba como me gusta humedecida, velludita con las puertas abiertas lista para recibir a mi verga y ayudarle a producir ese gran placer que tanto deseaban ambas partes y hacer de esa noche esplendida, sensacional fuera inolvidable.
Esa noche lengüetee los dedos de sus pies, su culo, su clítoris, sus pechos, pezones, sus cachetes, sus nalgas, sus ojos, en fin todo su cuerpo desnudo a la luz de la luna, luego los dos nos sentamos con nuestras piernas abiertas, ella me tomo de la mano y me jalo quedando cerca uno del otro, ella tomo mi verga y mirándonos a los ojos me comenzó a masturbar, yo estire mi brazo y con mi mano comencé acariciar su panochita, luego poco a poco y muy despacio le fui introduciendo uno de mis dedos hasta lograr meter totalmente mi mano un poco arriba de mi muñeca, después me tomo mi mano y la saco escurriendo de todos su jugos de su panocha y me dejo anonadado al verla que los chupaba con una gran placer que hasta sus ojos los cerraba, yo enseguida tome sus piernas y las subí sobre las mías la tome de su cintura y la jale hacia mí, tome mi verga y la introduje una vez mas en su panocha dándole unos ligeros movimientos circulares sin sacarla de su panochita, luego ella después de limpiar mi mano se dejo ir hacia atrás quedando acostada sobre su espalda y provocando que sus caderas y su panocha hicieran una especie de columpio e hizo un ligero apretón sobre mi verga la que enseguida reacciono como nunca la había hecho, ese placer que sentíamos los dos fue excitante, maravilloso, delicioso y provoco que tuviéramos unos orgasmos abundantes y ricos, después como pudimos por lo cansados nos arrastramos y nos metimos a la tienda, y nos quedamos dormidos.
Luego en la madrugada, ella me despertó y me dijo que estaba excitada nuevamente, y me pidió que le pasara su bolsa café, me estire la tome y se la pase, enseguida ella la abrió y para mi sorpresa apareció un miembro negro y otro como el mió, güerito, entonces ella dijo, "Quiero que me cojan los tres, mi rey", enseguida me subí en ella y la penetre mientras ella mamaba ambas al mismo tiempo con lujuria, luego cambiamos mientras me la chupaba, las otras 2 vergas entraban y salían con ritmo en su culo y panocha, volvimos a cambiar de posición yo boca arriba y ella sobre de mi cabalgando y chupando ambos pitos, se salió y se volvió a encajar pero ahora sobre su culo y se llevo la verga negra a su panocha que podía sentir que le escurría sin parar, eran tan grandes sus gemidos que me excite al máximo y sentía terminar. Pero pare por un momento y recuperar mis energías, minutos después se acomodo y me dijo "Dame en mi boca tu trofeo y deja que se vacié", y axial fue se dedico a darme semejante mamada que no pude mas y le vacié todo lo que había en ella.
Dentro de la tienda tuvimos mucho calor y decidimos volver a
meternos al arroyo, ya adentro del arroyo nos dimos cuenta que alguien se
acercaba con una linterna, así que nos quedamos sumergidos hasta el cuello para
que no se diera cuenta en el estado que nos encontrábamos. No podía ver muy bien
ya que la luz me deslumbraba lo que solo pregunte quien era y me contestaron
"De Cuernavaca, y ustedes?".
"Ah!! Ustedes son de la casa grandota"-le dijo mi chica.
No se por que, pero no te que mi chica estaba siendo muy amigable y me extraño pues es algo reservada. Y al cabo de algunas preguntas más, el negro pregunto.
"No, venimos precisamente a eso, buscamos la tranquilidad del campo, le conteste".
Entonces una de las chicas me pregunto que si no tenia frió, y le dije
"Claro, tengo un rato aquí en el agua".
Como no supe que decir, mi chica me animo:
"Claro, salte, no creo que ellas no sepan que estas desnudo".
Salí y nos quedamos callados, todos mirándome y les dije:
"Normalmente es mas grande lo que pasa es que tiene frió".
Creo que ya te repusiste, dijo mi chica y se acerco.
"Yo la verdad es que le atinaste."
Después de eso los invitamos a la fogata y charlamos
Al estar meando, me preguntó:
"Bien apenas llevamos 4 meses."
Lo pensé un momento y pregunte que como llegaríamos a tal situación, me contesto que solo le siguiera la corriente. Regresamos y el negro le insinuó a mi chava que lo acompañara al laguito. Temerosa me miro y la anime a que fuera con el, mientras las chicas se me acercaron y comenzaron a fajar de lo mas rico, uno de ella me cogió la verga y me la mamó, mientras que la otra me besaba con pasión. Pero como no veía muy bien, les dije que esperaran un momento me fui y saque la lámpara y ilumino perfectamente que logres ver que mi chava estaba ensartada por el negro, axial que me acerque a las chicas y estrene a una de ellas luego jale a la otra que era la mas buenota, la primera jalo a mi chava y comenzó a besarla yo estaba sorprendido por que no se negaba y después se les unió la otra, y las tres se unieron con sus lenguas, se acariciaban una a la otra, después hicimos una cadena para darnos placer mutuamente, nos besamos, nos chupamos, nos mordimos y nos cogimos por todos lados, cada una de ellas disfrutaron una doble penetración, luego el negro y yo disfrutamos a cada una de ellas, pues nos acostamos boca arriba una se clavaba en nuestra verga, la otra se sentaba en mi boca, la tercera nos abría las piernas y nos chupaba los huevos y a la vez jugaba con su dedo en nuestro ano, hasta que tuvimos cada uno de nosotros tremendos y ardientes orgasmos, y desnudos y completamente exhaustos nos quedamos dormidos, hasta que los primeros rayos de sol nos despertaron.
Cuando lo hicimos, nos levantamos y nos fuimos a nadar, donde jugueteamos, nos manoseamos, luego salimos y desayunamos, después intercambiamos direcciones y teléfonos, y luego mi chava y yo regresamos con un criterio diferente.