El camino de la exploración VI. Chantal tiene una
Realmente la había descuidado sexualmente durante mi proceso de sumisión a ama Sandra, juntamente, con mis problemas para poder mantener una erección y el tamaño micro de mi pene, no eran suficientes para poder satisfacerla sexualmente. Aún y así, no me esperaba verla salir con ese traje ajustado, tan corto y tan sexy que quiso expresamente enseñarme antes decirme que vendría tarde
El camino de la exploración VI. Chantal tiene una cita
Al ver salir así a mi mujer, sin aviso me dejó perplejo
Realmente la había descuidado sexualmente durante mi proceso de sumisión a ama Sandra, juntamente, con mis problemas para poder mantener una erección y el tamaño micro de mi pene, no eran suficientes para poder satisfacerla sexualmente. Aún y así, no me esperaba verla salir con ese traje ajustado, tan corto y tan sexy que quiso expresamente enseñarme antes decirme que vendría tarde
Además, yo venía de haber tenido una larga sesión con ama Sandra y sus dos machos alfa y estaba realmente agotado y no acerté a preguntarle nada. Vio mi cara de estupefacción, cerró la puerta y se marchó
Me volví a duchar, cené mirando la TV y después abrí el ordenador para mirar porno. Mi pene seguía anestesiado y totalmente flácido por lo que por más que lo intente no pude eyacular y satisfacer el grado tan intenso de excitación que no me abandonaba
Pensar que mi mujer pudiese tener un encuentro sexual con otro hombre, después de tantos años en pareja viviendo felizmente, contrariamente a mi pensamiento inicial de preocupación me excitaba aún más, realmente me estaba convirtiendo en un sumiso cornudo total
El sueño pudo conmigo y no me desperté hasta oírla llegar de madrugada, al ver que me había despertado quiso explicarme esta nueva situación en nuestras vidas
Me explicó, que a pesar de quererme con profundidad y que independientemente de la edad, ella continuaba con necesidades sexuales que yo no podía satisfacer y aun entendiendo que yo pudiese tener problemas de erección relacionados con la edad, la simple masturbación o el cunnilingus que yo le pudiese practicar no le eran suficientes…..ella necesitaba un buen pene grande y bien erecto que pudiese follarla varias veces en cada encuentro sexual, a lo que yo asentí avergonzado y cabizbajo sin poder mirarla a los ojos. Entendía perfectamente que yo ya no podía satisfacerla sexualmente y que ella buscará otros hombres que si la pudiesen satisfacerla
No nos plateamos una posible separación, nos queríamos profundamente, por lo que acabé aceptando esta nueva situación. Le pedí sin embargo que me tuviese informado de sus encuentros sexuales para que no pudiesen ser entendidos como una traición
Le solicité que me diera detalles íntimos de cada encuentro sexual que tuviese porque, aunque no pudiera tener una gran erección, esta situación me producía morbo y excitación y así se lo expuse
Nos besamos con intensidad y le pedí que hiciésemos un 69 porque quería sentir sus fluidos vaginales en mi boca y poder oler su sexo mientras me chupaba mi mini pene, a lo que accedió gustosa y sorpresivamente, diciéndome que había tenido sexo profundo esa noche con otro hombre y que no había podido ducharse, lo que encendió incluso más mi excitación, quería saborear la mezcla de fluidos vaginales y el semen de su amante. Ella estaba totalmente sorprendida de mi reacción de sumisión y consentimiento, pero aceptó encantada. No tardó mucho en sentirse intensamente excitada teniendo un gran orgasmo en mis labios mientras que yo seguía sin poder alcanzar un orgasmo ni poder eyacular a pesar de mi estado de excitación
Hablamos después. Le comenté que desde que tenía disfunción eréctil, había estado mirando porno en internet con frecuencia y con la intención de poder sentir una erección completa y poderme aliviarme masturbándome, cosa que hacía con frecuencia cuando mi mujer no estaba en casa. Le expliqué, un tanto avergonzado, mi excitación viendo películas de dominación femenina, sadomasoquismo y cornudos consentidores obligados a practicar limpieza del sexo de su pareja previamente follada por otros machos. Así que entendió claramente el porqué de nuestra sesión de sexo de esta noche
Pasaron unos días cuando me preguntó para salir y tomarnos una copa, se había puesto un vestido que yo le regalé para intentar aumentar nuestro deseo sexual, minivestido de pieza única talla grande que ajustaba perfectamente a su cuerpo maduro y rollizo, color negro de PVC con cremallera frontal, sin mangas y extremadamente corto, tanto que cualquier movimiento del tronco permitía ver su sexo que sorpresivamente se había depilado totalmente por primera vez
Quedé impactado. Estaba impresionantemente sexy, y yo había cumplido con uno de mis deseos ocultos, salir al exterior con mi mujer semidesnuda vestida con un traje extremadamente sexy para excitación de los demás y sentir como ella se excitaba viendo esas miradas lujuriosas de desconocidos que la pudiesen observar
Nos pusimos los abrigos y salimos a pasear…Le comenté que estaba excitadísimo a lo que me respondió que ella también lo estaba y me dijo que hoy tendría sexo con un desconocido delante mío, solo falta encontrar al hombre adecuado
Entramos en una sala de baile, estaba bastante llena, pero pudimos sentarnos en una mesa cerca de la pista donde bailaban música caribeña y no tardó en quitarse el abrigo que cubría su casi desnudez. Cruzó las piernas para evitar enseñar su sexo desnudo. Miré alrededor y noté como varios hombres clavaban sus miradas lascivas en su excitante cuerpo, mientras ella se encontraba extrañamente excitada al sentirse deseada por tantos hombres y yo la contemplaba en su excitación, excitándome al contemplarme la situación de ver a mi mujer en ese estado
En la pista había mujeres jóvenes atractivas con vestidos cortos que bailaban siguiendo el compás de la música acompañadas de jóvenes mestizos bien fornidos que las acompañaban y guiaban en sus movimientos
Pedimos unas copas, ella estaba tranquila dominando perfectamente la situación mientras que yo me encontraba nervioso y excitado al ver las miradas de tantos hombres sobre mi mujer. Mi pene seguía flácido sin poder tener una erección desde la inyección administrada por ama Sandra pero yo seguía encendido
No pasaron demasiados minutos hasta que se acercó un hombre joven de unos 25años, posiblemente caribeño, para pedirle si quería bailar con él, sin importarle que yo estuviera con ella. Chantal no había sido nunca muy bailadora, pero aceptó y la vi levantarse con cuidado para no enseñar su sexo a todo el mundo de la sala y dirigirse a la pista de la mano de su acompañante
Yo les contemplaba desde la mesa como unían sus cuerpos calientes mientras bailaban y él manoseaba con cuidado sus nalgas y la estrechaba hacía si y mostrando su desnudez ante el público que la contemplaba extasiado, produciéndome una extraña gran excitación que no se reflejaba, sin embargo, en una erección de mi pene que permanecía totalmente flácido
Al cabo de un tiempo apareció en escena otro hombre, posiblemente un compañero suyo, también de aspecto caribeño que también quiso bailar con mi mujer, a lo que el primero accedió de mala gana
Estuvieron bailando un rato para después dirigirse a la barra junto al primer joven de baile y reían. Al cabo de un rato mi mujer me hizo un ademán para que cogiera su abrigo de la butaca y me dirigiese a la barra a compartir una bebida con ellos
Me presentó como su marido impotente, que la había traído a este local para encontrar a un auténtico corneador que pudiese follarla intensamente el resto de la noche ya que yo no podía satisfacerla con mi micro pene flácido de apenas 2 cm. Me dijo que pagara la cuenta y que nos marchásemos todos a casa porque quería tener sexo con ellos dos mientras yo me limitaba contemplarlos
A la salida cogimos un taxi que había a la puerta, ellos 3 se sentaron detrás riéndose e informando al taxista que el marido iría delante junto al taxista, al que indique la dirección, mientras, vi como rápidamente besaban a turnos a mi mujer Chantal y como deslizaban sus manos entre la entrepierna que, imagine mojada en extremo, y acariciaban sus tetas mientras ella jadeaba de placer intensamente. El taxista no pudo evitar mirar por el retrovisor al oír a mi mujer jadeando de placer y noté su pene engrandecido en su pantalón mientras miraba como le tocaban las tetas y su sexo haciéndola gemir como yo ya no era capaz. Entre risa y jadeos, uno de ellos le dijo al conductor que si se sacaba la polla por la bragueta yo se la chuparía hasta descarga del todo en mi boca. No era la primera vez, ama Sandra ya me había obligado en varias ocasiones a comerme las pollas de su machos, pero nunca delante de mi mujer que no sabía nada de mi vida extra familiar con ama Sandra… al momento vi como sacaba su polla erecta del pantalón, la cogí entre mis dedos, incliné el cuerpo y se la chupé hasta correrse profundamente en mi boca. Mi mujer quedo impactada al verme con los restos de semen todavía en mi boca, pero empezó a entender la escena del otro día en que en la posición del 69 yo le comía su coño con los restos de semen de su amante
Llegamos a casa, pasamos al salón y yo me dirigí a la cocina para preparar unos cocteles mientras ellos ponían música suave.
Entré en el salón con las bebidas y vi a mi mujer sentada en el sofá, todavía vestida con el mini vestido, agarrada a las pollas erectas de los jóvenes ya completamente desnudos. Les ofrecí las copas y me quede sentado en un sofá mirándolos libidinosamente
Contemplar a tu mujer medio desnudo con un mini vestido realmente provocador dejándote ver sus pechos casi descubiertos así como sus piernas y su sexo húmedo mientras agarra unos falos de enormes dimensiones entre sus manos y chupándolos con avidez era una escena que, no por deseada seguía siendo impactante y realmente lujuriosa
Al final uno de ellos le hizo inclinarse para así poder penetrarla desde atrás con su miembro viril totalmente erecto mientras ella chupaba la polla del otro joven mientras yo disfrutaba viéndola disfrutar siendo poseída por dos grandes pollas que alternaban su boca, vagina y ano sin parar hasta correrse en varias ocasiones dejando a mi mujer totalmente exhausta y bañada de semen en todo su cuerpo
Antes de vestirse, los jóvenes me pidieron que les lamiese sus semiflacidas pollas dejándoselas totalmente limpias de restos sexuales y se marcharon
Nos fuimos a la cama y limpie cuidadosamente con mis labios y boca su cuerpo extenuado, después de múltiples orgasmos, del semen de sus amantes en sus pechos, boca y sexo haciéndole sentir unos orgasmos finales con la eyección de flujo vaginal y seminal tragándome hasta la última gota y nos dormimos
Había quedado con Chantal, mi mujer, que aceptaba que tuviese relaciones sexuales con otros hombres, pero con la condición que yo estuviese presente o al menos avisado y que no repitiese con ninguno de ellos para intentar evitar relaciones sentimentales conflictivas que pudiesen afectar a la nuestra futura relación