El Buen Vecino (02: La Vecina de la Camisa Negra)
El Buen Vecino Niko conoce a Liliana su vecina que le pide ayuda. Una nueva aventura entre Liliana, Niko y su telefono celular...
El Buen Vecino
Capitulo 2 - Liliana, la vecina de la camisa negra
Sábado por la mañana, un sonido de escoba barriendo la calle se escucha a través de la ventana de la casa de Niko, este ruido hace que Niko se despierte, mire por la ventana y observe detenidamente unas piernas esbeltas con unos shorts celestes, una camisa negra apretada con unos divinos senos, pertenecientes a Liliana, una mujer de 27 años, administradora sin ejercer, ama de casa, dedicada completamente a sus 3 hijos, Noemí de 9 años, Robertito de 6 años y Vane, la niña mas pequeña de 3 años, casada con Noe, ingeniero de comisión federal de electricidad, todo el tiempo se la pasa trabajando, la mayoría de los días llega tarde a su casa ubicada en la calle Arbustos numero 210, si no es que ande de viaje fuera de la ciudad.
Liliana hacia ya varios años que no trabajaba en algún lugar que no fuera su hogar. Hace ya algunos años, en su ultimo trabajo como administradora de los bienes de un banco, su cuerpo lucia mas esbelto que en la actualidad, en su guardarropa existía una extensa variedad de trajecitos ejecutivos y minifaldas, sus piernas eran casi perfectas, su piel bronceada resaltaba sus ojos verdes y sus asensos en el banco los lograba cada vez que sus piernas se abrían ante los penes erectos de los ejecutivos. Esa vida de libertinaje sexual se termino justo antes de comprometerse y casarse con Noe. Su esposo se creía que se había casado con un Ángel del cielo, no podía olvidarse del tierno rostro inocente que Liliana reflejaba cuando se vieron por primera vez.
En la primera semana de Agosto cumplirían su décimo aniversario de bodas, y como había sido ya costumbre durante los últimos 4 aniversarios, Noe estaría de viaje, Liliana pasaría su aniversario sola con sus 3 hijos. Esta situación, aunada a su falta de sexo de casi diez meses la habían orillado a masturbarse a diario por las mañanas cuando sus hijos estaban en la escuela. Sola en casa, casi como de rutina, a las nueve de la mañana comenzaba el ritual. Primero, se desvestía completa, ponía un CD de música de relajación, y se recostaba en la cama tocándose el clítoris, a veces usaba algún objeto domestico como el mango de un cepillo para el cabello, un frasco de su perfume favorito, un lápiz, el palo de una escoba; en fin, todo tipo de objetos domésticos le servían como amante. Todo su ritual duraba aproximadamente 45 minutos y terminaba siempre después del primer orgasmo, con una pequeña sonrisa en su rostro. Aun así, este ritual ya la estaba desesperando, cansada de no sentir algo de carne, algo vivo y caliente... poniéndose solo un short celeste, sin ropa interior, salio ese día a la calle a barrer con la escoba, su amante del ritual de hace tres días.
Liliana de repente sintió que alguien la observaba, y volteando hacia las casas de la acera de enfrente descubrió quien era su vouyerista vecino. Niko estaba parado detrás de un auto, mirándole sus piernas y siendo sorprendido por Lili que sonreía y le mandaba un saludo de hola con su mano. Niko respondió el saludo de la misma manera.
En eso, Liliana se cruza la calle y se acerca hacia donde esta Niko, y le dice sin titubear. -Vecino, ¿cómo estas?, necesito de tu ayuda, fíjate que tengo una fuga de agua en mi baño, y como Noe anda de viaje, no tengo a nadie, quien me pueda arreglar mi problema. - al momento Niko respondió. -No te preocupes vecina, yo puedo ayudarte, solo deja voy unas herramientas y por mi celular, porque estoy esperando una llamada y ahorita voy para tu casa, ¿cómo ves?.
-Me parece perfecto, te espero Niko. -sonriente, Lili se alejo hacia su casa, interrumpiendo la barrida que le estaba dando a la calle.
Niko escaneo con la mirada a Lili mientras charlaban y pudo observar como los pezones de su vecina se transparentaban a través de su blusa, la imaginación de Niko dio muchas vueltas y casi visualizaba en la mente el cuerpo desnudo de su vecinita.
Niko fue por su caja de herramientas de plomería y su celular, al minuto ya estaba tocando el timbre de la casa de su vecina.
Lili abriendo la puerta indico escaleras arriba, en donde se encontraba el baño con el supuesto problema de plomería. Niko subió hacia el baño y revisando la tubería se dio cuenta que no existía ningún tipo de fuga o algún problema que ameritara algún arreglo. Levantándose del suelo algo desconcertado por no encontrar problema alguno, Niko volteaba hacia atrás y cual era su sorpresa que encontraría a Lili a sus espaldas, con los pechos al aire libre. Sus tetas eran más grandes de lo que se pensaba y había visto sujetadas por el sostén debajo de las blusitas encantadoras de Lili. Sus pezones estaban totalmente erectos, eran oscuros y medianos. Lili solo miro a Niko y le dijo. -Ven papi. -Niko no titubeo, cuando ya estaba succionando los pezones de su vecina, lamiéndolos y mordisqueando uno y otro sin parar, desesperadamente, Liliana abrazándolo lo llevo hacia la habitación principal, entre tropiezos y esquivando muebles como obstáculos, llegaron hacia la orilla de la cama, recostándose Lili sobre el colchón, se quito el short, y volteándose boca abajo sobre la esquina del colchón, ordenaba a Niko. - Cojeme por atrás. -con voz de desesperación y entrecortada.
Niko sin decir ni una sola palabra, se bajaba los pantalones, su pene erecto como si fuera resorte salio ansioso de penetrar algo.
Las nalgas de Lili eran también mas grandes de lo que se veían con pantalones, la humedad de su vagina se trasladaba hacia su culo, aun así, Niko junto saliva en su boca y la arrojo en el pliegue de las nalgas de Liliana, escurriendo hasta llegar al orificio anal. Niko tomo su pene y lo acomodo en la orillita del culo de su vecina, y así, penetrándola lentamente escuchaba como su vecina se quejaba tan excitada, gemía como vaca y sus manos sujetaban fuertemente y arrugaban la colcha de la cama matrimonial.
De pronto, una tonadita de la canción "la camisa negra" de Juanes se escucho e interrumpió la sabrosa cogida que le estaba dando Niko a Lili.
Niko saco el pene rápidamente y busco entre sus pantalones su celular, que al mismo tiempo que entonaba la camisa negra, vibraba.
Lili tendida en la cama, volteaba a ver a Niko como contestaba la llamada de su esposo en su teléfono celular. Niko mientras sujetaba el celular, miraba como Lili tenia su frente gotitas de sudor y como su boca babeaba, sus ojos se veían fatigados y llorosos. Liliana escuchaba la conversación que Niko mantenía con su esposa, y quería a toda costa que pronto Niko terminara la llamada.
Minutos antes, la esposa de Niko despertaba, y volteaba a ver que a su lado, su esposo, el madrugador Niko ya había despertado y no estaba acostado en su lecho. La esposa de Niko busco a su esposo en todas las recamaras de la casa y no lo encontró, miro que no estaba su ropa deportiva, ni su teléfono celular en la mesita donde siempre lo dejaba. así es que sin pensarlo marco al número celular de su esposo para preguntarle en donde se encontraba.
Niko se escuchaba agitado, y le dijo a su esposa que estaba en la pista del parque corriendo, haciendo algo de ejercicio aprovechando la bonita mañana que había aquel día de verano.
Niko terminaba la llamada, mientras que Liliana se estiraba para alcanzar el teléfono inalámbrico de casa que estaba en un buró a un lado de la cama matrimonial. Niko preguntó; -¿que haces?. -Liliana sonriente le dijo.- Se me acaba de ocurrir algo bonito.
Liliana tomo el celular de Niko, y le paso la lengua por el teclado numérico del celular, lamiéndolo hasta llegar a la antenita del celular con la puntita de la lengua... después, se levanto un poco, y colocó el teléfono celular entre sus labios vaginales, metiéndolo lentamente... y pidiéndole ayuda a Niko, que no creía en la escena que estaba sucediendo. Con el celular completamente metido en su vagina, Liliana le entrego el teléfono inalámbrico de su casa a Niko, y le dijo. -Ahora llámate a tu celular... marca tu numero mi amor, hazlo rápido y marca, marca, marca, yaaaa!
Niko tomo el teléfono inalámbrico y marco a su numero celular, de pronto, la música de "la camisa negra" comenzó a escucharse como si estuviera el mismo Juanes tocando dentro de una cueva. Al mismo tiempo Liliana comenzó a gemir mas fuerte, y se volvió a poner en posición para que Niko la continuara penetrando por el culo.
El culo de Liliana se abrió mas, y el pene de Niko entro con mayor facilidad envuelto en la humedad extrema que Liliana emanaba. Niko estaba encantado cogiendose a su vecina. Niko le metía todo el pene y no podía creer que Liliana ni se quejara, solo gritaba excitada y gemía como loca, estaban cogiendo al ritmo del tono polifónico de "la camisa negra".
Liliana de pronto grito de satisfacción, una vez y otra vez, Niko no dejaba de cogersela, el culo de Liliana estaba lleno de semen, y Liliana había tenido mas de cinco orgasmos seguidos, algo que nunca olvidaría.
Niko le saco el celular de la vagina, y con el pene lleno de semen la penetro una y otra vez por delante, cargando a su vecina, Liliana, los ojos de color se volvían blancos cada vez que llegaba al clímax y Niko pensaba que la calentura de Lili no podía ser saciada con nada...
Al fin, después de 2 horas continuas, Liliana termino con un súper orgasmo que la hizo gritar, haciendo temblar las ventanas, y escuchándose su grito por toda la extensión de la calle. Niko no alcanzo a taparle la boca, y rápidamente se separo de ella, secando el semen de su pene con las sabanas de la cama matrimonial. Liliana tendida con las piernas abiertas, la vagina, el culo, el abdomen y las tetas llenas de semen, exhausta le pidió a Niko que saliera de su casa y que jamás le contara a nadie lo ocurrido, que lo que había acabado de pasar fue ficticio y que olvidara todo, que les pudiera traer problemas en sus vidas.
Niko desconcertado, se vistió y salio de la casa de la vecina, olvidando la caja de herramientas y el celular por completo. Se dirigió a su casa y continuo con su día normal.
Pasaron los días, Liliana continuo con su vida normal, cuando su esposo Noe sale de viaje, ella llama al celular de Niko para pedirle algún tipo de ayuda domestica. Niko continuo usando el celular con el tono de "la camisa negra" hasta que "dejo de funcionar por si solo"... eso fue lo que Niko le dijo al Técnico de Motorola que arregla celulares descompuestos.
El famoso celular estuvo en el taller de celulares dos semanas, sin que el Técnico lo pudiera arreglar. El reporte de la compostura también incluía que se había averiado el pequeño motor que hace que un celular vibre. Eso si, lo que se le hizo extraño al Técnico de Motorola fue que al abrir el celular y revisarlo pieza por pieza, nunca había encontrado bello pubico dentro de un celular...
Hasta la fecha, Liliana y Niko tienen esporádicamente, sexo secretamente, usando todo tipo de artículos domésticos y haciéndolo de todas las formas posibles.
Algunos vecinos aun recuerdan el grito misterioso proveniente de alguna de las casa de la calle Arbustos, como una de las tantas cosas extrañas que suceden en esa calle...