El amor puede con todo???(4)

Kathi la invita a su casa, sin saber quién es en realidad, Laura le dirá la verdad?

Yo: ouch! Mmm bueno de acuerdo

Kathi – con una sonrisa en sus labios- pues vamos, es aquí cerca – volteando su cabeza a ver atrás –

Yo: - aun me está buscando, pensé – vamos.

En ese momento comenzamos a caminar mientras conversamos un poco.

Kathi: Y cómo te llamas?

Yo: Me llamo Laura.

Kathi: Me gusta ese nombre, Laura. – me lo habrá dicho solo para quedar bien? –

Yo: gracias, aunque a mí no mucho.

Kathi: Solo digo la verdad Jejeje

Yo: - comenzando a sonrojarme – eeemmm gracias

Kathi: Y bueno que hacías por acá

Yo: - sin saber que responder – pues nada, vine a la caza de una amiga y estaba regresando a la mía, y tu?

Kathi: pues se suponía que me iba a encontrar con una amiga, pero al parecer me dejó plantada Jejeje – con cara de desilusión –

Yo: - idiota, por qué preguntaste eso? – de seguro tuvo una buena razón

Kathi: - volviendo en sí – pues no se

Y en ese momento se detiene

Kathi: es aquí

Woao que casa más bonita pensé, era algo grande, de tres pisos, puerta grande blanca en la entrada, y un color medio amarillo en las paredes, me gustaba, aunque mi casa era más grande, pues mi familia tiene dinero, y de hecho solo les importa eso, el dinero.

Yo: Bonita casa

Kathi: pues sí, es de mi papá, Jejeje, pero ven entra – abriendo la puerta –

Yo: gracias – entrando –

Cierra la puerta y me invita a la sala

Kathi: Toma asiento, ahora regreso con el botiquín – se va –

Yo: claro

Me quedé observando la casa, era muy bonita, muebles grandes, un espejo muy bonito, antiguo y grande. Me di cuenta de que mi codo, había parado un poco de sangrar pero aún me salía sangre, y me ardía, en eso comienza a bajar kathi.

Se veía como un ángel, pues se había cambiado y utilizaba una blusa blanca, algo tranparente y me dejaba ver su brasier, que al parecer también era blanco, su pantalón era el mismo, pero su cabello, aun mojado, le daba un no sé qué a su apariencia que me excitó de inmediato, pues sus ojos azules me deslumbraban, que bonitos eran.

Kathi: - aun bajando por las escaleras – mira, aquí traigo el botiquín, veamos que encontramos Jejeje

Yo: muchas gracias, eeemmm – hecha la que no se su nombre –

Kathi: Soy Katherine, mucho gusto, Katherine Brito.

Yo: Laura Mendoza, me gusta tu nombre – por qué diablos dije eso??? –

Kathi: gracias, a ver – tomándome el brazo –

Que piel tan suave, parecía la de un bebé, sus manos, tal delicadas, tan femeninas, me volvió loca, como se arrodillo en frente de mí a ver mi herida, yo estaba un poco más arriba sentada, por lo mi vista se dirigió a la apertura de su blusa, pues no tenía el ultimo botón abrochado, por lo que su brasier se podía ver, y por ende parte de sus senos. Me los quedé viendo como boba, eran grandes, blancos, me gustaban, me enloquecían, quería poder tocarlos, tenerlos entre mis manos. En ese momento, por unos segundos me la imaginé conmigo en mi cuarto, en mi cama, desnudas, y yo tocando, masajeando, apretando esos senos, que ganas le tenía.

En ese momento ella alza la mirada y me ve, su cara se tornó de asombro, y en seguida se miró sus senos y con una mano, abrocha el botón. Yo por el contrario, me puse roja como un tomate, no sabía que decir, como zafarme de esa, me encontró mirándole los senos, no podía ir mejor, que me irá a decir? Qué irá a hacer?.

Yo: Creo que tienes un botón desabrochado – Fue lo primero que se me ocurrió, y lo más tonto desde luego –

Kathi: Si, no me di cuenta, gracias – mirando al suelo –

Yo: no hay de qué, y qué encontrarte en el botiquín – rogando para que se olvidara de lo ocurrido –

Kathi: Pues un poco de alcohol, y una benditas

Yo: alcohol? No por favor, eso duele – queriendo bromear un poco –

Kathi: con una sonrisa, pues te tenés que aguantar, aquí voy – acercándose con el alcohol –

Yo: despacito por favor – con vos llorona –

En ese momento siento un fuerte ardor en la herida que me hizo gritar un poco, y en seguida, kathi, me puso las benditas, tapando completamente la herida.

Yo: gracias creo que ya estará mejor

Kathi: eso espero, todo por mi culpa – con carita de culpa –

Yo: fue un accidente, no te preocupes, las cosas pasan por alguna razón  Jejeje

Kathi: eso creo Jejeje – poniéndose de pié – listo, he terminado

No sabía qué hacer, tenía que irme pues ya había terminado, pero no quiero, no quiero irme, que me invento, qué?

Kathi: deseas tomar algo?

Yo: - gracia Dios mío – claro

Kathi: a ver… tengo refresco, agua mineral, jug…….

Yo: agua mineral está bien

Kathi: claro – me la da – mientras tanto, podes darme tu blusa para ponerla a secar por un momento, claro si quieres

Yo: - me quedé completamente sin habla, tendría que andar en brasier – Mmm pues no se, no tengo nada mas

Kathi: tranquila te presto una de mis chaquetas

Yo: - con alivio y decepción a la vez – ok, suena bien

Kathi: ok, vamos a mi cuarto y te podes cambiar.

Yo: ok

Comenzamos a subir las escaleras, ella iba delante de mí, por lo que al momento en el que comienza a subir, pude ver su movimiento de caderas, sus nalgas eran perfectas, podía ver como sobresaltaban al momento de subir un escalón, el morbo vino a mí otra vez, me fascinaba, me excitaba, quería tocarle las nalgas, en mi mente ya lo estaba haciendo, todo esto fue muy pero muy intenso.

Llegamos arriba  y no dirigimos a su habitación, entramos, me dio la chaqueta y salió para que pueda cambiarme, lo hice y salí, le di la chaqueta y la puso a secar.

Mientras tanto encendió su equipo y puso algo de música, me contó algo de ella, lo bien que se llevaba con sus padres, que era muy devota y creyente de Dios, que tenía alguna amigas muy buenas, y que era una chica tranquila.

Yo por el contrario me describí un poco, le conté el tipo de música que me gusta, no me llevo muy bien con mis padres, y no creo mucho que digamos en Dios, tengo amigas pero no tan buenas, solo rosa, que era como mi hermana, pero también soy una chica tranquila.

Así la tarde pasó volando hasta que llegó el momento de irme

Yo: Ya se me hizo tarde, será mejor que me vaya, me das mi blusa plis

Kathi: Claro, y que pena que te tenga que ir – buscando la blusa –

Yo: si es que ya es tarde, gracias –recibiendo la blusa –

Kathi: de nada – volteándose para que me la ponga -

Así lo hice y me dirigí a la puerta

Kathi: me gustó mucho pasar la tarde con vos, espero que se vuelva a repetir

Yo: igualmente, en otro momento podemos reunirnos o que se yo

Kathi: Me das tu número para llamarte

Yo: claro es el ………

Kathi: listo, yo te llamo sí

Yo: claro, Bye kathi, ya estoy tarde

Kathi: Bye – se acerca a darme un beso –

Al verla venir, con esa intención, tenía tantas ganas de no girar mi cabeza para que el beso sea en la mejilla, sino en los labios, pero al último instante tuve que girar para que no sospechara nada.

Me despedí una vez más y  me dirigí a mi casa

Y bueno hasta aquí el relato de hoy, espero sus comentarios, todos son bien venidos, y si les gusta pues seguiré escribiendo sino pues desistiré Jajaja, pero bueno espero que les guste en verdad.

Bye ;)