El amor me prostituyó (3)
El tamaño de esa gran polla me dejo sin voluntad para negarme hacer lo que el quisiera
Mi relación con Luis se convirtió en una de puro sexo, su hermoso cuerpo y su enorme miembro ejercía las veces de un poderoso imán que me atraía sin voluntad alguna para rechazarlo, yo lo llamo crudamente el poder que ejerce una gran polla, convirtiendose en mi felicidad y mi maldicion, porque si por un lado sentir su mamba negra metida entre mis nalgas me hacia casi perder el conocimiento de pura lujuria y placer, aun así me desflorara la cola, por el otro lado su trato conmigo no era amable, sino mas bien seco y rudo, podría decir que yo era para el un puro negocio.
Aun consiente yo , que para el no era nada mas que otra "hembra" que se moria por su maravilloso cetro, no lo podía abandonar y a pesar de que me manipulaba descaradamente, terminaba siempre accediendo a sus caprichos, sin importar que tan humillantes fueran.
Después de volver satisfecha de donde mi primer cliente (historia anterior), decidí que tampoco le diría la verdad lo mucho que había disfrutado con ese cliente, porque si yo disfrutaba siendo "puta" era una satisfacción mia y no suya y de esta forma tampoco le proporcionaba mas razones de poder sobre mi.
Después de buscarlo por todas partes como una hembra celosa con su macho, finalmente me llamo para vernos en su Apto, corri a ducharme, me depile bien mis respingadas nalgas y mi rosadito ano, dejando solo un poco de bello encima de mi pequeno pene, como decoracion, me humedeci la piel con una crema perfumada y me puse un hilo dental de encages divino que enmarcaban mis redondas nalgas a la perfeccion, me maquille discretamente pero sin ponerme muy sexy, para no despertar el morbo a su asqueroso companero de Apto que me habia cojido la ultima vez.
Luis me abrio vestido solo con su bata medio abierta, provocando mi lujuria por supuesto, efecto que siempre logra, ya que le basto cerrar la puerta y abrírse la bata, para dejar salir esa culebra negra grande que tiene como polla y agarrandola con su mano gruesa me la ofreció descaradamente, embobada y sin poder articular palabra alguna, me arrodille sin pestañear frente semejante espécimen, momento que aprovecho Luis para restregarla por toda mi cara mientras se burlaba de mi estado de postración absoluta ante semejante cetro impresionante.
Trate enseguida por arrebatarsela con mi boca, pero Luis siguió martirizando alejandola de mis labios que babeaban por sentirla en mi boca, finalmente con desesperacion y brusquedad se la quite de la mano y sin reparo alguno me la meti en la boca con devocion enferma, sintiendo enseguida como su enorme grosor llenaba mi boca y garganta sin haber llegado a chupar siquiera la mitad, entonces lleno de lujuria cerre mis ojos degustando ese mastil caliente de gruesas venas con vida propia, chupandola como si mi vida entera dependiera de ello, resuelta a hacerla mia y dispuesta a doblegar de placer a su dueno burlon.
No llevaba ni 5 minutos devorando como ternera huerfana semejante polla, cuando me la quito de la boca bruscamente, ordenandome que queria metermela, enseguida poseida como si la ropa me quemara, me la quite a toda prisa y ya completamente desnuda sin esperar su orden, me subi apresurada al sofa poniendome en cuatro, al tiempo que enterraba mi cabeza en una esquina esperando mi "castigador" y llena de excitación abri mis redondas nalgas ofreciendolas en pompa como una perra en celo que soy.
Enseguida lo senti colocarse detrás de mi y propinandome unas fuertes cachetadas en las nalgas, senti enseguida su negro taladro abrirse camino entre los cachetes de mis gluteos hasta colocarlo a las puertas de mi ano goloso, pero enseguida y sin previo aviso empujo su cadera y la cabeza purpura vencio mi esfinter arrancandome gritos de dolor incontrolables.
Casi llorando le rogue que se pusiera mas saliva o lo que fuera, que me estaba haciendo mucho dano, pero sin importarle mis gritos y manteniendome fuertemente agarrada por las caderas, continuo empujando su enorme barra hirviendo en lo profundo de mis nalgas, trate en vano de huir de su agarre pero solo consegui entonces que me la metiera aun mas, sollozando y sin otro camino finalmente me resigne y ahogando mis gritos en un cojin del sofa me abandone a sus crueles embates, sintiendo como chocaba su cadera con furia contra mis indefensas nalgas extremeciendolas fuertemente, al mismo tiempo su larga herramienta me propinaba estocadas que en la retirada pareciera que no tuvieran fin y cuando creia sentir cierto alivio cuando dejaba mis entranas, arremetia de nuevo llenandome a tope, estrechando mi interior al maximo con su piston negro, yo mientras tanto luchaba para seguirle el ritmo, tratando de hacerlo que se corriera rapido para acabar ese martirio, pero enseguida me di cuenta que yo estaba completamente a su antojo, el tenia total control sobre mi, finalmente rugiendo como un toro levanto mi cadera y sacando mis nalgas fuera del sofa y sin dejarme ningun punto de apoyo, me la metio con una fuerza descomunal, arremetiendo contra mis nalgas como con rabia de macho castigando mi osadia, hasta sentirlo correrse copiosamente dentro de mi con estocadas largas y mostruosas.
Tan pronto termino de correrse dentro de mi, me tiro sobre el sofá y se fue al bano, dejandome completamente vencida y violada y solo entonces para mayor sorpresa mía, descubrí que yo también me había venido, aunque mi pequeña verga no mostraba erección alguna, pero tan pronto Luis volvía a la sala, trate de cubrir la evidencia de mi semen en el sofá, ya que no quería que el se diera cuenta que yo también había disfrutado de su brutal violación.
Me fui al bano como pude, el dolor entre mis nalgas era intenso, sintiendo enseguida como su esperma mesclada con mi sangre, me corria por las piernas, trate de lavarme pero el ardor era insoprtable y para sorpresa mia de pronto Luis entro al bano y sin pronunciar palabra alguna me ofrecio un unguento especial indoloro, que me unte entre las nalgas con escozor insoportable.
Tan pronto sali del bano lo confronte, preguntandole porque me habia cojido de esa forma tan brutal, me respondiendo que esa era la prueba que el le hacia a todas las que trabajaban para el y con eso el se aseguraba lealtad absoluta y que yo había pasado la prueba con creces, en ese momento no supe si ponerme a llorar o salir corriendo de allí para jamas volver, pero tan pronto me hube calmado un poco me di cuenta que no tenia fuerzas para dejarlo, que me tenia presa voluntariamente en su juego cruel, me había convertido a pesar de mi inicial resistencia en su puta y lo que era peor era que lo disfrutaba.
Al cabo de una semana Luis me volvió a llamar y burlandose me pregunto si mis nalgas estaban ya recuperadas para recibir otra buena dosis de verga, porque me tenia un trabajo que me iba a gustar mucho, sin poder negarme le dije que si estaba interesada.
Me arregle lo mas de bonita, me maquille sueve, me deje mi pelo liso suelto, una ramera corta que apenas me cubria el ombligo y con unos hotpants corticos encima de una tanga minima que escondia bien mi pequeno paquete por delante, pero dejaba mis nalgas completamente al descubierto por detras, bastaba que me agachara un poco, para sentir la tela de los horpant meterse entre mis gluteos, revelando la mitad de los cachetes de mis nalgas lozanas y firmes a la vista de cualquiera.
Era una casa grande y lujosa que quedaba en la parte de alta de ciudad, limitando con un cerro, toque el timbre toda nerviosa y me abrio un senor canoso que se veia muy bien para su edad pero que debería tener como 58 anos, enseguida me apresure a decirle que venia recomendada de Luis para limpiar la casa.
Enseguida vi como se le iluminaron los ojos y abriendo la puerta me convido a entrar, el interior era tan elegante como su exterior, sin esperar mayor introduccion me informo que necesitaba que alguien le limpiara la piscina que estaba llena de hojas, dirigiendonos al jardín interior, tan pronto salimos me di cuenta que había otro hombre como de la misma edad, sentado en una mesa al lado de la piscina, con cierta dificultad le comente enseguida al primer hombre que Luis no me había hablado de dos senores, enseguida el me tranquilizo diciendo que era un buen amigo suyo y que no tenia ningún obligación con el.
Tranquilizandome un poco me guio donde estaba la aspiradora de la piscina y demas utenzilios, sin perder tiempo me dispuse hacer lo que me ordenaba y quitandome la ropa que llevaba puesta menos la tanga, empeze a limpiarla, la verdad era que no estaba muy sucia, pero me dispuse a dejarla completamente limpia de todas maneras, agarrando el palo de la aspiradora y estirarandome en varias posiciones para alcanzar la mas minima hoja, sintiendo los ojos de los dos hombres clavados en mi cuerpo y nalgas, en una de esas por descuido perdi el equilibrio y cai al agua, enseguida vi a los dos hombres correr en mi ayuda con toalla en mano, llenandome enseguida de alabanzas de lo lindo que tenia mi cuerpo, mientras me secaban minuciosamente el cuerpo y las nalgas, yo los deje porque para eso le pagan a Luis, seguidamente sugirieron porque no me quitaba la tanga tambien para se secara mas rapido al sol, temblando un poco de emocion por lo que sabia que venia acontinuacion, me desnude ante ellos y enseguida pude oir una esclamacion de jubilo entre ellos.
Ya desnuda me invitaron a que me sentara a la mesa con ellos para tomarnos una copa, temblando todavia por mi completa desnudes, nos sentamos ala mesa, ofreciendome champan, frio y seco como a mi me gusta, ellos eran muy buenos anfitriones porque desde ese momento me sentí a gusto con ellos y después de tener un poco mas valor y confianza con ellos les sugerí que no era justo que yo sola estuviera desnuda, mas me demore en decirlo para que ellos se empelotaran rapidísimo y para alegría y gozo mía, ambos gozaban de unas pollas que sin ser muy grandes eran hermosas y circuncidadas.
Desde ese momento me sentí como una reina atendida por dos senores educados y corteses, con el correr de las copas vi al rato que se repartian unas pastilas azules y enseguida comprendi que era Viagra, me ofrecieron una que tome por primera vez en mi vida, ellos me aseguraron que la pastilla subiria aun mas mi libido y me iba a ayudar a "abrirme"completamente.
Dichosa e impaciente continuamos platicando hasta que me sugirieron si no queria tomar el sol en una de las camas alrededor de la piscina, sin pensarlo dos veces me acoste boca abajo en la mas cercana y ya sintiendo una comenzon entre mis nalgas, les pedi si me podian poner un poco de crema para el sol en la espalda.
Felices se levantaron como con resorte y diviendo la tarea uno se concentro en mi cuello y espaldas, mientras el otro empezo en mis pies y continuo subiendo hasta llegar ala parte baja de mis respingadas nalgas, enseguida muy respetuoso me pregunto si deseaba que me untara crema igualmene sobre las nalgas, excitada les dije que si cerrando los ojos y entregandome a ellos dos, sintiendo enseguida como un mano suave pero firme me aplicaba crema por todo los contornos de mis gluteos, dandome masajes circulares hasta sentir unos dedos deslizarse a todo lo largo de la ranura que separa los cachetes de mis nalgas, cosa que hizo que se me escapara un quejido de placer e involuntariamente separa mis piernas al maximo y arqueando mi espalda, levantando mi cola al encuentro de esos dedos invasores, sintiendo enseguida esos dedos urgar suavemente en lo mas profundo de mis nalgas hasta encontrar el boton de mi perdicion.
Lo que aconteció después fue subiendo en intensidad hasta alcanzar un clímax esplendoroso, pero no podría precisar que disfrutaba mas, si seria estar desnuda al sol con dos hombres guapos y morbosos o la bebida o la pastilla o la combinación de esas tres cosas, pero la verdad que estaba que volaba de lujuria y excitación.
Ya que tan pronto ellos recibieron mi aprobación de que me podían cojer juntos, me voltearon boca arriba sobre la cama y mientras uno me puso su hermosa verga en la boca, para que sa la chupara, el otro se arrodillo a los pies de la cama y levantando mis piernas, enterro su cara entre mis nalgas devorandome el ano con su lengua maravillosa, que creí por momentos enloquecer, lo que provoco que me desquitara entonces mamando entonces con absoluta determinación, ese troso de carne duro en mi boca como si fuera el mas jugoso chupete, hasta que lo sentí palpitar entre mis labios mientras ametrallaba mi paladar con chorros gruesos de semen que se atragantaban en mi garganta, pero que logre tragar sin dejar escapar la mas mínima gota de tan delicioso néctar.
Y ahora el otro hombre no queriendo perder un minuto mas, me voltio boca abajo en cuatro y colocando mis nalgas en pompa al borde de la cama, se paro en medio de mis gluteos metiendomela toda de un solo envion, afortunadamente gracias ala crema el dolor no fue muy intenso, entonces ya completamente excitada y fuera de control, me entregue a ese hombre como la mas puta de las hembras, pidiendole mas, estrellando mis nalgas contra su cadera en completa desesperacion, buscando que su dura verga me desflorara las nalgas sin misericordia alguna, mientras gritaba de dolor y placer.
El otro hombre viendo lo "loquita" que estaba, metió su mano debajo de mi y apoderandose de mi parado pene (tiene que haber sido el viagra), me masturbo deliciosamente hasta hacerme venir en espasmos de eyaculación entrecortada al mismo tiempo que su amigo me taladraba el fondo de las nalgas hasta vaciarse dentro de mi con arremetidas cada vez mas fuertes.
Ellos después fueron se portaron tan divinos que se desvivían por ayudarme a banar en la ducha de la piscina, enjabonando todo mi cuerpo, llenadolo de caricias y halagos.
Mas tarde cuando los deje me preguntaron si deseaba volver otro día, a lo que no pude negarme para nada.
Tan delicados fueron que nunca hablaron de dinero conmigo, haciendome sentir valorada y apreciada.
Cuando volvi al Apto llame a Luis y quedamos en vernos el fin de semana siguiente que tenia una fiesta y queria que lo acompanara.
La historia continua.......