El amor a traves del internet (chat) 3era parte

Todo lo q paso un dia antes de mi cumpleaños.... cortico

Agradecimiento: quiero expresar mis más sinceros agradecimientos a esas personas que se toman unos minutos de su tiempo para leer un poco de mi relato, una historia real que por los comentarios obtenidos no he sido la única que el cyberchat llamado “Cupido” llego a mi corazón y fue correspondido al igual que mch@s de ustedes, una vez más gracias me alegra que les haya gustado; Ezy, Melvira, Zoe, Nahomy, Sunmi, Angeles2875, KrlitaVzla, Spin17, Lokii, Wind Whisper, Solange, Carros, Paola, Hombrefx Ezy… ustedes han sido mi inspiración espero que sigan disfrutando de mi historia.  Si desean hacer comentarios más privados lo pueden hacer por mi correo lorantr@hotmail.com**

Ambas permanecimos abrazadas sin decir una palabra, una vez más el tiempo se detuvo y solo existíamos nosotras, al  abrir mis ojos vi como la gente nos miraba un poco extraño, pero nunca he vivido del que dirán además no quería desperdiciar ese momento tan anhelado, tenerla en mis brazos lo deseaba. Al soltarnos decidimos ir a casa de mi madre la cual estaba ya de salida a su trabajo pero llegue a tiempo para que la conociera, claro como una amiga quien muy sonriente les dijo – un placer, están en su casa, ella le respondió con una sonrisa y estrechando su mano le agradeció por tan lindo gesto que tuvo con ellos.

Recuerdo que ese día mi madre antes de irse les ofreció jugo de melón que era lo que había en ese momento, ambos se miraron y al mismo tiempo dijeron –preferimos tomar cerveza—eso a mí me causo risa no sé si eran los nervios que ella sentía que necesitaba algo más fuerte que un simple jugo de melón, le explique a Edward donde vendían dicha bebida mientras que Bella y yo nos quedamos en casa SOLAS (no sean mal pensadas, aun no paso nada, jejeje) nos sentamos en el solar de la casa, ella sin hablar, esquivando mi mirada la cual no podía apartarse de sus ojos miel, sus labios, sus cachetes que al sonreírse aparecían unos agujeritos tan tiernos, le quise tomar la mano para romper el hielo pero llamaron a la puerta, era  Edward con la bebida no se pudo tardas unos segundos más. L

Comenzamos hablar, bueno realmente el comenzó hablar yo solo la observaba y ella en silencio muy pensativa mirándolo como si le estuviera prestando atención a todo lo que él decía, no soportaba mas tenerla tan separada de mi, así que me levante y me senté a su lado cosa que a ella le sorprendió muchísimo y era obvio porque yo no nunca había estado con una chica, ese era mi primer encuentro y se suponía que debía de estar nerviosa como que no era así. Estaba tan emocionada que quería tenerla cerca y ya lo había logrado sentándome a su lado, ella seguía sin mirarme a lo que coloque mis manos debajo de la mesa y la estire hasta colocarla en su pierna, ella se asusto tanto que la bebida que tenía en la mano se le cayó sobre la mesa, pidió disculpa estaba muy apenada yo le tome la mano la cual tenía muy fría y le pregunte al oído.

Raíza: estas nerviosa? Ella solo movió la cabeza diciéndome que no con la mirada agachada, su cabello largo tapaba su rostro y pues como yo la quería ver más alce mi mano y muy suavemente recogí su cabello detrás de las orejas a lo que ella muy nerviosa dejo caer de nuevo la bebida.  Ese día fueron más las que boto que las que se tomo y casi no hablaba solo gestos o movimiento.

Edward y ella fueron al refrigerador a buscar más cervezas como vi que tardaban un poco más de lo normal pensé en ir a ver qué había pasado, mi sorpresa fue que al entrar a la cocina ella lo estaba abrazando a él diciéndole –esa mujer me gusta más de lo normal, no sé porque me pone tan nerviosa—al yo escuchar esas palabras mi corazón iba a salir de mi cuerpo, mis piernas temblaban no sabían si moverse o quedarse allí para seguir escuchando lo mucho que en poco tiempo ella estaba sintiendo por mí y yo por ella, el sabía que yo estaba parada allí e imagino que para que ella no siguiera hablando le dijo –voltea—cuando ella miro hacia atrás y me vio parada allí suspiro y me dijo.

Bella: que tiempo tienes parada allí?

Raíza: lo suficiente, ella bajo la mirada expreso vergüenza y salió de la cocina, pensé que ella no quería que yo me enterara de algo tan obvio, en cambio yo suelo ser más expresiva. Edward y yo volvimos a la mesa esta vez me senté un poco mas retirada de ella para que se calmara o no sintiera que yo la estaba presionando y el se sentó mas cerca de ella imagino que para darle más valor, sonó el teléfono de la casa y salir a responder al regresar a mi lugar Edward me hizo un pregunta.

Edward: cuantos baños tiene esta casa? Esa pregunta para mí fue algo extraña, pero le respondí de la maneras más corta y sencilla

Raíza: varios, porque?

Edward: por nada, me respondió con una sonrisa muy picara—ok, fue mi respuesta a lo que el vuelve a decirme.

Edward: y en esta área donde estamos cuantos hay?

Raiza: solo 1, pero porque?

Edward: ella quiere ir al baño—me dio mucha risa y le respondí-- ah eso!! Ven es por aquí la lleve de la mano ella camina detrás de mí y al abrir la puerta me aparte para que ella pasara a lo que me dice

Bella: no quieres entrar conmigo? Se podrán imaginar mi cara, ahora la nerviosa era yo, que iba a pasar detrás de esa puerta? No sé!!  Ella se quedo parada mirándome esperando una respuesta y yo sin hablar y con mucho miedo avance hasta entrar con ella, no había terminado de cerrar la puerta cuando me zumbo sobre la pared y me ha dado un beso, no era de amor, no era de gusto era de deseo! mucho deseo,  su respiración  se aceleraba cada segundo mas y mas  tomaba mi labio inferior y lo mordía muy suavemente  su lengua la cual tenía un piercing exploraba la mía paseándola por mis labios, yo aun en shop pero respondiendo a ese flamante y delicioso beso el cual hacia mojar mis pantis pensaba en que no lo podría creer y que por primera vez estaba besándome con una mujer, ese beso fue tan apasionado que se me estaba agotado la respiración que tuve que alejarme un poco y comencé a besar su cuello y con suaves mordisco tomaba su oreja, cosa que la debilito totalmente que comencé a quitarle la camisa y besarle su pecho, pase mis dedos por sus senos y estaban totalmente erectos reaccionado a mis caricias y besos seguí bajando poco a poco mis labios recorriendo su piel y cuando ya estaba cerca de sus senos para por fin probarlos ……… toc toc  tocaron la puerta del baño, era Edward diciendo que alguien se acercaba yo Salí súper rápido ella tardo un poco mas y ya se deben imaginar porque Edward me miro y me pregunto –lo disfrutaste?, a lo que yo respondí casi sin aire MUCHO.

La persona que había llegado era mi “esposo” yo se los presente y como era un poco tarde le dije que se quedaran durmiendo en casa porque sería difícil conseguir bus a esa hora para donde ellos iban  ella muy seria dijo que no, un no rotundo, su mirada había cambiado estaba como molesta y como no estarlo si mi “esposo” no dejo de tocar mis piernas, abrazarme, besarme entre tanto romanticismo ella se levanto y se despidió sin darme a mi oportunidad de acompañarlos a la puerta.

Ese día las incógnitas fueron muchos, porque si sabía que estaba casada porque tomo esa actitud? Porque no quiso despedirse? La volveré a ver? Estaba celosa? En fin, muchas interrogantes habían en mi cabeza, comencé a escribirle y no respondía hasta que en un momento me llego un mensaje de texto diciéndome.

Bella: lo mejor es dejar esto hasta aquí yo seguiré mi vida normalita y olvidare lo que paso, porque esto no es lo que quiero en mi vida. Wow!!! Un mensaje algo fuerte para una persona que hace pocas horas la besabas apasionadamente. Lo cierto es que no le hice mucho caso a su mensaje yo entendía que lo que pasaba era que le molestaba mi situación pero no podía dejarla ir así tan fácil así que seguir escribiéndole ella trato de ser indiferente, casi no respondías mis mensajes, ya las llamadas eran muy pocas así que no aguante mas y llama a su “amigo”

Raíza: hola Edward, como estas?

Edward: bien chévere y tú?

Raíza: bien, te llamo para pedirte un favor.

Edward: si claro dime— y yo comencé a decirle la loca idea que se me había metido en la cabeza, la quería ver así que le pedí a el que me diera la dirección de donde ensayaban, pero que por favor no le dijera nada así ella no podría esquivarme esta vez, y así fue llego el día del ensayo y ya casi al medio día Salí de mi casa al llegar allá ella no estaba así que me senté afuera en un acera de la calle a esperar que llegara.

Continuara……