El amor

Lo que el amor te hace sentir y cómo debería ser.

El amor.

Ella le conoció, de la forma en la que todo el mundo conoce al amor de su vida. Sin esperarlo, sin estar preparado, de la forma y lugar más inesperado e imprevisible.

Al mirarle a lo ojos, notó como algo despertaba en su interior. Un leve hormigueo en la boca del estomago, esa sensación que te recuerda que estás vivo.

Comenzaron a hablar, y ella sintió complicidad. Fue como si empezara a conocerse así misma en otra persona. Y sintió que había conocido a su alma gemela.

El entusiasmo y la ilusión que te hacen que al terminar el primer encuentro se establezcan maneras de mantener cuando más contacto mejor.

Citas, cenas, conversaciones, compartir tiempo juntos. Todo lo que te lleva a conocer a un extraño un poco más y hacerlo más humano y cercano. Y cuanto más le conocía, más complicidad y a gusto ella se sentía a su lado.

Al terminar cada una de las salidas y tiempo compartido juntos. Ella se  sentía viva, con ilusión, con ganas de comerte el mundo. Su estomago está lleno de mariposas nerviosas, que hacen que se le olvide hasta comer. Deja su vida a un lado, porque solo puede pensar constantemente en esa nueva persona en su vida, la cuál arranca un tonta sonrisa en su cara en cuanto recibes noticias suyas. Vive con la única ambición de volverle a ver una y otra vez. Porque cuando no está a su lado se siente como si le

faltara el aire para respirar, se siente vacía, siente ansiedad, nada tiene sentido, solo volver a recibir su droga.

Su droga, pueden ser sus ojos, su olor, su sonrisa, su risa, sus besos, el sabor y textura de sus labios, sus caricias, el tacto de sus manos…

Y estos sentimientos son mutuos. Los dos están enamorados. Y cuando se miran a los ojos mientras se abrazan y se besan… todo el mundo a su alrededor desaparece, como si ellos fueran los dos únicos habitantes del planeta y en sus mentes surge un único pensamiento: pasar el resto de sus días junto a esa otra persona, para compartir lo bueno y lo malo con amor, porque es TU persona, TU amor, el amor de TU vida.

Y así debería ser. Y debería mantenerse así para siempre. Y que el amor no se extinguiera, sino que evolucionara, porque el amor tiene muchas formas.

El amor no debería hacerte sufrir, no debería hacerte llorar. Amar a otra persona que te ame tanto como tú a ella, en iguales proporciones. El amor debería ser fácil, sin complicaciones. El amor debería hacerte todos los días ser la persona más feliz del mundo, porque amas y te aman.

Pero eso solo existe en novelas románticas y en películas románticas.

Ya sea por nuestra imperfección humana, por la sociedad, por el mundo en el que vivimos y las circunstancias que éste mundo nos hacer vivir, el amor es jodidamente complicado, raro y difícil de encontrar.

A todos a ellos que lo hallan encontrado, consérvenlo, mímenlo y cuídenlo como el tesoro más valioso que una persona pueda tener, aprecien lo que tienen, por todos aquellos que no lo tienen.