El Amo :Sesion I
A Nani le queda aun para ser la sumisa que su Amo espera, Aún tiene que entregar mucho de su cuerpo y de su mente, pero es aplicada y su Amo sabe muy bien como sacar lo mejor de ella.
Nani se presentó pulcramente vestida, con la ropa que a el le gustaba... rojo pasion. No llevaba ropa interior ninguna. Sus pechos estaban libres bajo la fina tela y la brisa se colaba entre sus piernas y refrescaba su carne más femenina. Se había soltado el pelo y solo había usado un pintalabios rojo, todo porque así le gustaba a él y a ella le complacía enormemente complacerle.
La puerta se abrió con un chasquido y Nani se encontró de cara con un hombre alto, apuesto y rubio. Sus ojos celestes brillaban con lujuria siempre que la miraba y ella le ofreciñon una timida sonrisa que el devolvió. Inclino la cabeza muy ligeramente para hablar.
- Amo -dijo con los labios apretados en una sonrisa.
El sonriente se inclinó y la atrajo contra su cuerpo con un movimiento posesivo a la vez que gentil. Nani se sujetó a su pecho y dejó que el capturara sus labios. Reprimió un gemido de placer al sentir su lengua penetrar en su boca y a su duro cuerpo masculino apretandola contra el.
Sintió su gran erección a traves de la ropa, en el vientre y la deseó en su entrepierna. Pero Nani no expresaría esos deseos en voz alta, no a menos que su Amo le preguntase directamente por ello. El Amo la tomo entre sus brazos y cerró la puerta de un golpe. La llevó en volandas hasta su cuerto especial.
No sabía que era lo que el le tenía preparado pero estaba completamente segura que sería más que excitantey placentero. Quizá seguiría educando su culo para ser penetrado, o la haría correrse solo rozandola... se mordió los labios ansiosa.
- Ven -ordenó de modo autoritario tomandola de la mano al entrar en la mazmorra.
Ella lo siguió y se fijó en la familiar estancia. Amplia, con paredes y techo negros. Baldosines de primera calidad, tambien negros y tan brillantes y pulidos como espejos. El moviliario era sobrio pero de diseño escandinavo. La cama amplia y redonda. Las luces eran regulables. El suelo estaba frio y brillaba, si miraba hacia abajo podía ver su sexo desnudo en él.
El Amo se dió la vuelta y con un gesto le indicó que se quedase quieta, la examinó detenidamente hasta que quedó conforme con su aspecto. A veces podía ser un hombre muy exigente. Le levantó el vestido y examinó toda su entrepierna al completo. Primero comprobó que estaba suave por completo y despues que estuviese totalmente limpia. Ella lo estaba, se esmeraba mucho por complacer a su Amo.
Con unos dedos gruesos abrió sus pliegues, sometiendola al examen, comprobó su humedad y su excitación. Su amo tenía la habilidad de saber cuando y en que grado se encontraba excitada. Sabía mejor que ella el placer que podía brindarle su cuerpo. Sus dedos fueron a su ano apretado. Gruñó molesto y le puso el dedo indice en los labios para que lo chupara.
Obediente, Nani lubricó al maximo el grueso dedo. El lo zambuyó embelesado entres sus labios una y otra vez antes de volver a su culo. Describió circulos en su suave ojete lo cual hizo que las piernas empezaran a temblarle de placer. El se dio cuenta y sonrió.
- Hoy seguiré educando a tu culo para que disfrutes pero no solo hare eso-dijo él, Nani asintió -a cuatro patas, en la cama, ya -ordenó.
Nani hizo le que el le pedia y se asentó con el culo en ponpa. El vestido apenas le tapaba el sexo y sus pechos se asomaban peligrosamente por el escote. El Amo le ofreció su dedo de nuevo en la boca y despues volvió a jugar con su ojete.
- Aun tienes que aprender a relajarte -explicó -cuando lo hagas tu culo se abrirá solo.
El aun no la había follado por el ojete. Nani tenía cierto temor, pero confiaba en su amo y cuando el le decía que lo iba a disfrutar, ella le creia. Su amo contantemente le hablaba y explicaba todo, ella tomaba nota mental y aprendía como buena sumisa que era. Jugando con el dedo fue ralajando el apretado agujero con maestría hasta poder intruducir uno completramente.
Ella se encogió de gusto y de incomodidad, era extraño y a la vez placentero sentir su dedo ahí.
- Ralajate -ordenó el -sino no disfrutaras de la experiencia que te estoy brindando.
Ella se relajo cuanto pudo y dejó que su amo penetrase con el dedo humedo lentamente, una y otra vez. Nani sentía su clitoris hinchado y su sexo tambien. No sabía por qué pero siempre que su amo jugaba con su culo ella se ponía terriblemente humeda. Su amo le permitía gemir, no era un ogro ni un manipulador. De un golpe saco el dedo de su ojete y Nani se encogió de gusto. El rio encantado.
- Vas a disfrutar mucho por aqui - le dijo y añadió- y yo tambien al penetrar en este lugar tan apretado.
El se separo de ella unos instantes para buscar algo en alguno de los cajones del moviliario. Nani giró la cabeza para ver qué era lo que su amo buscaba. El se dio cuenta y ella se giró sonrojada. Oyó los pasos volver hacia ella y sintión una palmada en su nalga derecha que lejos de dolerle, la excitó más.
Obedeceme -dijo el en un tono divertido y a la vez autoritario.
Lo siento -se disculpó Nani y añadió - Mi Amo.
Su Amo levantó de nuevo su vestido y huntó su ojete con lubricantese. Las piernas de Nani volvia a ser de goma. Enseguida sintió como algo penetraba por su culo, dilatandolo mas seriamente. Estaba frio, era duro y juraría que tenía forma de pera. En cuanto la tubo colocada supo que era una joya anal.
Su amo tumbó en la cama y le ordeno que le desvistiera. Nani, obedeció con la joya apretada en el ojete y le quitó la camisa, los pantalones y la ropa interior con lentitud. Se recreó y se excitó con su cuerpo, le encantaba mirarlo, tocarle, lamerlo.
Su polla, como ya sabía desde el principio, estaba completamente erecta. Era gruesa como su muñeca y de piel morena. De largo... era descomunal, por eso aun no le había follado el culo, tenía que acostrumbrarla al tamaño y a relajarse y dilatarse con facilidad. Con chasquido de dedos le indicó lo que tenía que hacer.
Ella se inclinó y empezó a lamer su duro y descomunal rabo. Lo mamo con fuerza y lentitud, excitandose. Cada lamida le sabía mejor, se la tragaba por completo pues su amo ya había educado su boca para tragarse cualquier cosa. La saliva se escapaba por la comisura de sus labios a cada cupada, empapando el duro mango y resbalandole por la barbilla.
- Mirame -jadeo él.
Obediente se la chupó con mas ganas sin dejar de mirar su cara de placer. Le encantaba complacerle. Harto de no hacer nada le sujetó la cabeza con ambas manos para que chupase el ritmo que el imprimia. Nani tenía el culo en ponpa y dilatandose gracias el juguete, la boca se le hacía agua de placer. El duro pollón entraba a buen ritmo y por completo hasta su garganta. Su amo jadeaba complacido y a ella le encantaba.
Calculó que se la estuvo mamando mas de media hora sin descanso. Tras ello su amo la ató a la cama, usando cuerdas y postes la colocó en una postura especial en la que su cabeza casi colgaba del borde de la cama, sus caderas estaban levantadas hacia su pecho y sus piernas abiertas. Su amo era un experto en lograr que estuviese cómoda en posturas inverosímiles. Colocandose de pie, fuera de la cama él le explicó lo que iba a hacer con ella.
- Voy a entrenar tu culo para ser follado, mientras tanto vas a seguir dandome placer con la boca.
Nani asintió ansiosa e incapaz de moverse. El duro nabo de su amo volvió an entrar en su boca y ella echó la cabeza hacia atras para que su amo le follase la boca a gusto. El movió sus caderas un par de veces antes de empezar a enredar con su ojete de nuevo. Uso gran cantidad de juguetes y lubricante. la postura especial en la que la había atado le permitía a su amo, educar su culo y follar su boca.
Usó pequeños dilatadores el principio y despues mas grandes, la dilataba suavemente y poco a poco mientras su polla entraba y salía de su boca. Tenía el coño encharcado y si su amo se lo permitiese se correría una y otra vez. El ojete se le ensanchó cada vez mas y su amo le habló complacido.
- Pronto podré metertela sin compasion por el culo -dijo más para si mismo que para ella -me muero por darte duro e innundarte por completo.
Nani sintió como su amo le azotaba suavemente las nalgas mientras le metía todo tipo de plugs y consoladores. Además su amo follaba su boca con fuerza. Sabía que él estaba muy excitado y eso solo significaba una cosa... que le esperaba una larga sesión de placer, juegos, dolor, sudor y desenfreno.
Acabó follandola con fuerza a cuatro patas, sus manos azotando su carne y sus embestidas llenando por completo su coño. Su descomnal pene le producía un dolo/placer exquisito, los dedos de su amo, follaban su culo tambien. Le había dado permiso para correrse y había sucumbido tres veces.
Cuando esto ocurría el le hablaba al oido con ternura pero no dejaba de follarla con potencia... al final el le ordenó que se bebiera su semen y ella encantada y extasiada le complació.