El Amanecer de EVA 02: Examen Médico

Los elegidos han de pasar un examen médico rutinario en el cual la doctora Ritsuko descubrirá algo que hacía tiempo que no experimentaba. Asuka confiesa a Misato su secreto.


El Amanecer de EVA 02

Capítulo: Examen médico

Resumen: Los elegidos han de pasar un examen médico rutinario en el cual la doctora Ritsuko descubrirá algo que hacía tiempo que no experimentaba. Asuka confiesa a Misato su secreto.

Autora: Asuka Hentai

Fecha en la que se acabó: 11-08-2009


Como todos los Lunes en la clase de 2-A del instituto principal de Tokyo-3 los alumnos estaban medio dormíos, asistían a las lecciones con los párpados pesados y sujetándose las cabezas, los bostezos también eran algo habitual, pero al llegar la hora del almuerzo todos se animaron, todos excepto la pelirroja Asuka.

"¿Te ocurre algo?" Le preguntó su amiga y delegada de clase Hikari Horaki cuando la vio sentada en su pupitre con la caja del almuerzo que le había preparado Shinji aún en su envoltorio. La de ojos azules tenía la mirada perdida en el infinito.

"Será que no le gusta la comida que le preparó su maridito, mira, ni siquiera abrió el paquete." Dijo Touji desde la otra punta de la clase bien alto para que todos le escuchasen. Shinji que estaba a su lado se puso muy rojo y agachó la cabeza. Hikari le miró mal reprochándole la broma, pero Asuka simplemente suspiró cerrando los ojos y cogiendo los palillos para almorzar los lanzó con maestría contra la cabeza del chico que cayó por el impacto. "¡Auch!"

"No me pasa nada Hikari, es sólo que hoy no ando de muy buen humor, por favor, quiero estar sola." Conociendo a la alemana la chica de coletas asintió levemente y se retiró con sus amigas, todos se fueron marchando de clase hasta que quedó totalmente vacía, sólo con la piloto que seguía sin tocar su almuerzo.

La mente de Asuka estaba trabajando a tope en un problema, sus dudas sobre Misato, la había descubierto besándose con Ritsuko y no sabía qué hacer ante ese descubrimiento. Al principio se alegró porque si su tutora era lesbiana eso significaba que tenía vía libre con Kaji, pero después un extraño sentimiento se apoderó de su corazón, era una especie de angustia. No es que ella tuviera nada contra los homosexuales, pero pensaba que Misato era diferente y ahora estaba muy alterada y extrañada, sentía una opresión en el pecho, como si necesitara compartir con alguien su secreto, ella pensaba que el único al que se lo confiaría era Shinji. El chico era el otro motivo de sus preocupaciones, en aquel extraño fin de semana se había acercado a él como nunca lo había hecho. Siempre esperaban el uno por el otro para comer aunque no quedaran para ello, jugaban juntos a videojuegos aunque ella sabía que a él no le gustaban y pasaban largos ratos solos charlando de tonterías. Asuka seguía pensando que era un idiota aunque cada vez disfrutaba más de su compañía. La chica suspiró e intentando no pensar más para que no le doliera la cabeza abrió la cajita con la comida y se dispuso a almorzar.


Despacho de Ritsuko


Por la tarde en la base de NERV a los elegidos les tocaba pasar su reconocimiento médico mensual. Este era un trámite importante ya que al ser los únicos capaces de pilotar los Evangelion los chicos tenían que estar perfectamente de salud. Era la doctora Akagi quien se encargaba directamente de comprobar que todo estaba en orden. La primera en llegar fue Rei Ayanami vestida en su uniforme escolar recién salida del instituto, a pesar de que la puerta estaba abierta la golpeó con los nudillos. "¿Puedo pasar?"

"Adelante Rei." Ritsuko la recibió girando su silla para mirarla y quitándose las gafas, la chica de pelo azul entró tranquilamente y sabiendo de antemano el procedimiento se sentó en la silla que había en frente de la mujer y se recogió la manga de la camisa de su brazo izquierdo. En silencio la científica le colocó una goma apretada y con una jeringa empezó a tomar muestras de sangre.

"¿Cómo van los estudios?" Preguntó Ritsuko.

"Normal, ¿por qué esa pregunta?" Respondió de forma tajante la chica de ojos rojos, la mujer entornó los suyos, aquella chica era más fría que el hielo.

"Sólo simple curiosidad." Dijo en tono de voz suave mientras terminaba de sacarle la sangre, a propósito le sacó la aguja sin cuidado haciéndole daño. Rei puso una mueca de dolor. "Disculpa." Se burló ella.

El examen médico de la piloto del EVA-00 siguió sin ningún tipo de sobresalto hasta que la puerta se abrió entrando Misato. "Hola Rei, disculpa la interrupción, sólo vengo a dejarle estos archivos a la doctora Akagi." La mujer de pelo morado entró tranquilamente dándole una carpeta amarilla a su amante secreta.

"No se preocupe." La mujer de pelo largo no hizo caso de las palabras de la chica demasiado ocupada mirando a Ritsuko, esta abrió la carpeta y esbozó una sonrisa. Dentro había una nota para pedirle quedar para tomar algo y una caricatura de Misato agarrándose sus grandes senos.

"Me parece bien." Respondió la de la bata blanca mirando a su amiga con una sonrisa mientras cerraba la carpeta y le guiñaba un ojo. Misato tomó los archivos y se fue contenta dispuesta a salir del despacho pero antes entró Asuka.

"¿Aún no terminó la niña modelo?" Preguntó cruzada de brazos dando unas pataditas en el suelo impaciente por su turno para acabar cuanto antes todo aquello.

"Si Asuka, anda Rei, puedes marcharte." La chica de pelo azul asintió y se levantó marchándose sin decir nada mientras las otras tres la miraban.

"Bueno os dejos solas, hasta luego." Misato ya se iba pero Asuka se lo impidió.

"¡Espera Misato! ¿Puedes esperarme a que salga para llevarme a casa?" Le pidió la pelirroja.

"¿Es que no puedes coger el tren?" Le replicó esta.

"Si, pero quiero que me lleves tú y así aprovechamos que Shinji no está, quiero hablar contigo, ¿te parece bien?" Asuka se iba sentando en la silla que había dejado libre Ayanami pero miraba hacia su tutora.

"Claro Asuka, estoy aquí para lo que me necesites, esperaré a que acabes. Ritsuko trátala bien ¿vale?" Con una sonrisa la responsable táctica de NERV se despidió y fue a la cafetería a pasar el rato hasta que la pelirroja terminase de pasar su test médico. A ella le intrigaba que la joven quisiese hablar a solas.


Apartamento de Misato


Después de la visita a Ritsuko Asuka y Misato fueron juntas a casa sin esperar por Shinji que era el siguiente en entrar. La pelirroja se puso ropa cómoda, unos shorts amarillos y una camiseta blanca y se sentó a la mesa de la cocina con un refresco de limón hasta que su tutora se hubiese cambiado. Misato salió de su cuarto con unos jeans cortados y una camiseta de asas malva haciéndose una cola con su melena, tomó una cerveza y se sentó al lado de la alemana.

"Y bien, ¿de qué quieres hablar?" Preguntó tras dar un largo trago a la bebida.

La piloto jugaba con la lata color amarillo y plata, como si se estuviera pensando algo, no miraba a la otra mujer, parecía estar meditando hasta que finalmente se decidió a hablar. "Misato... tu..." Ella desvió de nuevo la mirada incapaz de salirle las palabras.

"Yo que." La mujer adulta estaba muy tranquila, bebiendo cerveza y muy recostada en la silla.

La pelirroja cerró los ojos y tomó aliento, estaba decidida a decirle lo que sabía. "El Viernes pasado por la noche os vi a ti y la doctora Akagi, os estabais besando en la calle, justo debajo de aquí." Finalmente lo soltó y se sintió aliviada, miró con curiosidad a la otra a ver cómo reaccionaba.

Justo cuando dijo esas palabras Misato había llevado la cerveza a sus labios y ahí se quedó, desvió su mirada hacia la joven chismosa y bajó la bebida hasta la mesa. "Vaya... pensé que estaríais durmiendo. ¿Qué hacías despierta a esas horas?"

La adolescente se ruborizó un poquito al recordar que había ido a cama tarde por salir a cenar con Shinji pero pronto se recompuso al darse cuenta de que quería cambiar el tema. "Eso no importa... No sabía que tu y Ritsuko fuerais... bueno, más que amigas."

"Ah, pues si." Dijo la de pelo morado muy serenamente aunque la noticia de que ella lo sabía la tomó por sorpresa.

"¿Sois novias?" Quiso saber con mucha curiosidad Asuka.

"Puede decirse que sí." Respondió ella sin darle mucha importancia al asunto. "Supongo que eso te hará feliz, ya puedes intentar ligar con Kaji, te deseo suerte porque no creo que de repente le gusten las niñas, yo de ti probaba con Shinji, después de todo últimamente se os ve muy unidos."

"¡No digas bobadas!" Asuka indignada se cruzó de brazos cerrando los ojos y ladeando la cabeza con un ligero rubor en sus mejillas. "Además puede que sí que vaya a por Kaji, veremos si soy tan niña como tú dices. Aún así y volviendo al tema, no puedo decir que apruebe lo vuestro..."

"¿Por qué Asuka-chan?" Al oír aquellas palabras la mujer se levantó de su asiento y fue a junto la pelirroja con voz sensual. Esta alzó una ceja extrañada por ese tono y la miró, dándose cuenta de que estaba muy cerca de ella. "¿Es qué tienes celos?" Se inclinó sobre la pelirroja sonriéndole con sus labios muy cerca de los de ella, la chica se puso muy roja y abrió mucho los ojos.

"¿Ce... Celos?" Tartamudeo nerviosa, la cercanía de Misato era evidente y sentía su aliento haciéndole cosquillas en los labios.

"Si, a lo mejor estás celosa de que esté con Ritsuko y no contigo..." Le susurró seductoramente.

"No... No digas tonterías Misato..." Muy asustada se echó hacia atrás inclinando la silla hasta casi hacerla caer, pero la mano de su tutora la garraba firmemente.

"¿Tonterías? Veamos si es eso, un beso lo aclarará todo." La mujer de pelo morado cerró los ojos y juntó sus labios a punto de darle un beso a Asuka.

"¡¡¡Ah!!!" La piloto gritó asustada cuando vio que la capitana de NERV se acercaba en serio para besarla, pero justo cuando sus bocas iban a hacer contacto pasó de largo.

"Era broma." Dijo divertida muy satisfecha consigo misma de haberle gastado una jugarreta a la alemana. "Y sobre lo mío con Ritsuko hazme un favor y no se lo cuentes a nadie." Le pidió mientras iba a la cocina a por otra cerveza.

Asuka quedó un rato en estado de shock hasta que suspiró y enterró su cabeza entre sus brazos encima de la mesa.


Despacho de Ritsuko


"Buenos días señorita Akagi." Shinji entró a la oficina de Ritsuko con su timidez y amabilidad corrientes, era el tercer y último que iba a pasar el reconocimiento médico, a la salida se había encontrado con Asuka que tan sólo había cruzado unas pocas palabras con él, parecía distraída con algo.

"Buenos días Shinji, por favor, siéntate." Le ofreció la rubia contenta de que al fin iba a terminar con eso, los exámenes médicos a los pilotos le cansaban y prefería dedicar su tiempo de trabajo a las mejoras en MAGI o los Evangelion. El chico de manera obediente se sentó, iba vestido con pantalones negros y camisa blanca del uniforme escolar. "Ahora pon tu brazo derecho estirado, voy a sacarte sangre."

El piloto así lo hizo extendiendo mirando hacia arriba su brazo y cerró el puño, la mujer de bata blanca buscó una vena y pinchó para la extracción de sangre, Shinji hizo una mueca. "¿Te duele?" Le preguntó la doctora mientras el vial se llenaba de rojo.

"Ah... un poco..." Respondió este con una tímida sonrisa.

"Bueno, aguanta un poco, ya casi acabo." La mujer retiró el vial lleno y procedió a sacarle la aguja y ponerle un algodón en la herida. "¿Cómo van los estudios?" Preguntó al igual que había hecho con Rei.

"No tan bien como antes, pero antes no tenía que pilotar un EVA." Bromeó el adolescente, la doctora le devolvió la sonrisa.

"Si, estáis haciendo los tres una gran labor que agradecemos todos." Mientras tanto Ritsuko guardaba la muestra de sangre en una nevera etiquetándola con la fecha en la que fue recogida, luego se acercó a su ordenador personal para introducir unos datos y vio algo que le había pasado desapercibido. "Mmmm..."

"¿Ocurre algo?" Quiso saber Shinji bajándose la manga de la camisa al notar la reacción de la doctora.

"Pues sí, se supone que ya debería tener una muestra más tuya, pero no la tengo, así que te la voy a tener que pedir Shinji."

"¿Más sangre?"

"No sangre precisamente." Le dijo la de cabellos rubios con una mueca que al chico le parecía extraña, como si le divirtiera la situación. "Pero es de otro fluido, al ser el único piloto chico necesito una muestra de tu semen."

"¿Ah?" El joven se puso muy sonrojado por la petición y miró hacia el suelo avergonzado.

"Puedes usar el cuarto de baño que está a tu espalda." Le indicó la mujer pasándole un frasquito precintado con tapa roja donde debería ir la muestra de esperma de Shinji.

"¿Pe... Pero tengo que hacerlo ahora?" Preguntó nervioso mientras cogía de forma torpe el frasco que le acababan de dar.

"Claro, cuanto antes mejor, no tengas miedo, es algo muy natural, estaré esperándote, puedes cerrar con llave si quieres." Resignado el Tercer Elegido suspiró y con desgana se levantó encerrándose en el baño, colocó el frasco ya abierto sobre la tapa del inodoro mirándolo.

Shinji no sabía qué hacer, se había masturbado otras veces pero nunca lo había hecho por ser una obligación, además al tener a la doctora Ritsuko ahí fuera le daba más corte. Se bajo la cremallera del pantalón y metiendo la mano en la bragueta sacó su flácido pene, se puso a masajearlo con cuidado intentando pensar en cosas eróticas, pero no quería responder y la erección no llegaba.

"Shinji, si quieres puedo imprimirte algunas fotografías de internet para ayudarte, te ofrecería una revista pero esto no es una clínica." Al ver que tardaba ya mucho la doctora llamó a la puerta, el joven creyó detectar cierto tono burlón en el ofrecimiento.

"¡No importa!" Gritó con un hilo de voz muy avergonzado por la situación, su miembro se negaba a endurecerse y su mente estaba bloqueada para componer ninguna imagen erótica. Al cabo de 45 minutos salió muy abatido con el frasco vacío en la mano. "Lo siento, pero no soy capaz... Por favor, déjeme hacerlo en casa, mañana lo traeré."

"Lo siento Shinji, pero necesito la muestra ahora o no podré terminar tu examen." Le dijo muy seria ella mientras se cruzaba de brazos.

"En serio... no puedo..." Shinji casi se echó a llorar y a Ritsuko le dio algo de pena. Era mentira eso de que necesitaba la muestra ahora mismo, claro que podía esperar pero había urdido un plan para divertirse un poco con el hijo del comandante Ikari que le parecía adorable y encantador. Se levantó de su silla y colocó sus manos sobre los hombros del chico que estaba con la cabeza baja.

"No te preocupes, yo te ayudaré, pero es un secreto entre nosotros dos, ¿de acuerdo?" Estas palabras susurradas dieron mucha curiosidad al chico que alzó la vista. La doctora se bajó la cremallera de su camisa azul de NERV y descubrió sus senos muy grandes sin sostén con unos pezones y aureolas oscuras y gordas. El adolescente no daba crédito a lo que veía, sus ojos azul oscuro brillaron y se relamió, no perdió oportunidad y acercó su cara a ellos lamiéndolos despacio, como pidiendo permiso para hacerlo. Ritsuko sonrió con un leve rubor en sus mejillas satisfecha de que el chico captase el mensaje.

"Espero que ahora sí que seas capaz de darme esa muestra." Los labios del chico ya atrapaban los duros pezones de la rubia, sus pechos gordos brillaban por la saliva que iba dejando por estos al lamerlos, besarlos y succionarlos. Parecía más que evidente que en esta ocasión sí que iba a ser posible para la doctora guardar un poco del esperma del chico, sobre todo por el bulto que se había formado en los pantalones de este. Con gran habilidad ella deslizó su mano derecha bajando la cremallera aprovechando la distracción del chico con sus tetas, luego metió su mano sacando su ya erecto pene para masajearlo lentamente con los dedos.

"Mmmm..." Shinji gimió sin abrir los ojos con su cara color tomate mientras seguía saboreando los pechos de Ritsuko que estaban exquisitos, ella también disfrutaba pero quería algo más directo así que con delicadeza apartó al muchacho de ella, le costó pues no quería dejar de besar sus pechos.

"Bien Shinji, tu erigirás como pero quiero que tengas sexo conmigo." Ante estas sugerentes palabras el chico asintió algo cohibido quitándose los pantalones y los calzoncillos por completo dejando ver su pene erecto algo palpitante sin vello púbico y sus testículos colgando. La científica se relamió con esa imagen, le gustaba mucho la situación. Animado por la cara de lujuria de la mujer el piloto se acercó hasta ella y la tomó de la cintura para que se sentase sobre la mesa de su escritorio, luego le levantó la falda dejando ver sus bragas negras con liguero y medias, la imagen era tremendamente sexy y de la punta del pene del chico apareció una gota de líquido pre seminal.

"No tengo condones..." Se disculpó el joven mientras le bajaba las bragas a la doctora viendo su coño con pelo oscuro y un fino hilo transparente de humedad que unía sus labios vaginales con la tela de la ropa interior.

"No te preocupes cariño, la exposición al LCL os provoca una esterilidad temporal a los pilotos masculinos, entra sin miedo." Se ofreció la mujer abriendo bien sus maduras piernas dejando ver su sexo rosa y brillante. El chico asintió con más confianza y tomando su falo con la mano derecha apoyó su glande contra la entrada de su vagina y empujó metiéndolo.

"¡Ah, qué bien se siente!" Gimió él con los ojos cerrados cuando metió todo su erecto pene de unos 15 centímetros en el coño de Ritsuko, notando su humedad interior que ayudaba a que la penetración fuese más sencilla.

"¿Es tu primera vez?" Le preguntó ella mientras apoyaba sus manos en los hombros del chico y empezaba a disfrutar de la sensación de la dura y cálida carne de la erección penetrándola, muy diferente al tacto de los juguetes sexuales que tanto usaba.

"¡Si doctora!" Confesó con apenas un jadeo mientras empezaba a mover sus caderas con locura queriendo follarla a la máxima velocidad que podía haciendo mover la mesa y escuchándose el ruido mojado de su verga entrando y saliendo de su coño expulsando fluidos vaginales calientes que lo hacían todo más placentero. Ritsuko se unía al placer del chico gimiendo sonrojada y tomó su cabeza para enterrarla entre sus enormes senos brillantes de sudor en su canalillo.

"Mierda Shinji... Eres todo un semental." Por su tono de voz y sus piropos subidos de tono se sabía que la mujer teñida de rubio estaba muy cachonda, no recordaba el tiempo que llevaba sin hacerlo con un hombre, pero a cada embestida del adolescente parecía recordarlo. Probablemente había sido con Kaji poco antes de que fuese destinado a Alemania. Su amor Misato la complacía de sobra en el sexo pero ahora con Shinji descubría que con los hombres experimentaba un placer diferente pero igualmente satisfactorio que se complementaba con el lesbianismo. El Tercer Elegido siempre le había parecido un chico lindo, nunca había tenido deseos sexuales con él pero imaginárselo a tan poca distancia intentando masturbarse fue algo que encendió su llama y ahora se alegraba de que todo hubiera salido así.

"Doctora... me voy a correr..." Anunció el chico mirándola entre sus tetas con cara de pena, quería continuar pero como antes había dicho era virgen hasta ese momento y la excitación era mucha, sus bolas ardían a cada metida queriendo expulsar el semen que guardaban.

"Está bien Shinji, aguanta todo lo que puedas y luego sácala para llenar el bote." Le indicó con la respiración entrecortada Ritsuko acariciando con amor su cabecita. El chico mirándola de manera muy tierna con sus ojos brillando asintió y se concentró en darle como mejor podía agarrándose a sus caderas y agachando la cabeza haciendo las penetraciones profundas y duras. Ella se mordía el labio inferior para no gritar de gusto como una loca y tomó el bote de muestras abriéndolo para que lo tuviera a mano.

"¡Ah!" El momento del clímax llegó y con celeridad el piloto sacó su polla de dentro de la mujer y la dirigió apuntando al frasco que s ele hacía muy pequeño. Eyaculó siete chorros de esperma blanco y espeso que llenaron el recipiente y también lo mancharon por fuera. Las gotas resbalaban desbordando. Shinji se quedó de pie exhausto respirando por la boca con su pene ya blando.

La doctora tomó el bote y limpió por fuera con la lengua relamiendo el rico semen del adolescente para dejar el frasco limpio, luego lo etiquetó escribiendo su nombre y la fecha que era para guardarlo en una pequeña nevera. El chico observaba excitado todo lo que la mujer hacía habiéndose subido ya los pantalones.

"Shinji, ¿crees que sería posible repetir esto en alguna otra ocasión?" Ella le miró muy sexy aún con las tetas y el coño al aire.

"Si usted quiere..." Dijo muy tímido el chico desviando la mirada aún sonrojado y rascándose la nuca. Ritsuko sonrió por la inocencia del muchacho y alegre por su respuesta afirmativa.


Apartamento de Misato


Cuando Shinji llegó a su casa no quiso hablar con nadie, Misato le hizo preguntas sobre el examen médico pero como el chico sólo respondía con monosílabos desistió, cuando tenía un mal día no había quien lo sacase de su burbuja de autocompasión, ni siquiera los gritos de su compañera de piso pelirroja para que le hiciese la cena de una vez parecían alterarle. Tranquilamente se fue a la cocina para preparar la cena que compartió con las dos chicas y después se fue a la cama rechazando el ofrecimiento de Asuka de ver una película.

A la mañana siguiente Misato se despertó de buen humor, a pesar de que tenía que ir a trabajar tan temprano había pasado una buena noche con Ritsuko aunque no llegó tarde a casa, tan sólo tomaron unas copas y se dieron unos cuantos apasionados besos delante de los sorprendidos clientes del bar. Se dirigió al cuarto de baño que por suerte no estaba ocupado y se metió a la ducha.

Sonriendo con los ojos cerrados echaba su melena hacia atrás mientras el agua caliente relajaba y despertaba a la vez su cuerpo algo dormido, la ducha mañanera le daba mucha vida. De repente escuchó que alguien llamaba a la puerta. "¿Se puede pasar?" Era la inconfundible voz de Asuka quien preguntaba.

"Claro, pasa." Le permitió desde la ducha la mujer y la pelirroja entró con el pelo suelto y despeinado, con cara de dormida, se dirigió al lavabo y empezó a lavarse la cara. Llevaba un sujetador y bragas de rayas horizontales azules y blancas. A Misato le pareció un conjunto muy sexy, el sostén le hacía buenos pechos y las bragas eran pequeñitas viéndose el oblicuo de sus caderas y algo de la separación de sus dos nalgas por detrás.

"Asuka, no deberías pasearte así por casa, no vivimos solas, ¿recuerdas?" Le dijo con algo de picardía pensando que si Shinji la veía así probablemente moriría por un derrame nasal. La alemana no respondió, pero se le quedó mirando de forma extraña mientras se duchaba, estaba muy seria como mirando al vacío.

"¿Te encuentras bien Asuka?" Su tutora estaba algo preocupada por su expresión, pero esta siguió sin responder hasta que empezó a moverse para quitarse su sujetador dejando ver unos pechos grades para su edad y cuerpo, firmes, redondos, con pezones pequeños y rosas. Luego se bajó las bragas tenía una franja de vello púbico depilado perfectamente, así dio unos pasos hasta meterse en la ducha. "Si quieres ducharte ya termino ahora." Misato estaba extrañada por el comportamiento de la piloto.

"He estado pensando Misato, en lo que me dijiste ayer, y sí, creo que quiero probar." La de pelo morado alzó una ceja, no recordaba lo que había paso el día anterior y no tenía claro a lo que se refería, pero Asuka sí que lo sabía y mirándola con decisión apoyó sus manos en los hombros de ella y se puso de puntillas para cerrando los ojos besar en los labios a la mujer más alta que ella.

Los ojos de la capitana de NERV se abrieron hasta límites insospechados de lo repentino del beso que le había dado la pelirroja. Aquello aclaraba todo, así que la alemana quería probar lo que era el lesbianismo, pues Misato no la iba a defraudar, también cerró los ojos y la tomó de la cintura dándole un beso tierno.

Cuando acabaron se separaron lentamente y con una dulce sonrisa la mujer mayor preguntó a Asuka. "¿Te ha gustado?" La joven estaba muy sonrojada y parecía confusa pero finalmente sonrió sonrojada y asintió.

"Ha sido raro, pero sí, me ha gustado." Confesó ella con más ánimos.

"¿Quieres otro para estar más segura?" La voz de Misato sonaba sensual mientras tomaba de los hombros a la alemana y acercaba e nuevo peligrosamente sus labios a los de ella.

"Mmmm... No sé si eso estaría bien Misato..." Asuka estaba dudosa e intentaba apartar a su tutora con las manos, pero ella era más grande y consiguió hacer contacto con sus lenguas mientras tomaba de las mejillas a la piloto que miraba a otro lado sonrojada pero que poco a poco empezó a excitarse y a gemir moviendo su lengua. "¡Ah!"

Las manos de la de pelo morado viajaron desde sus costados hasta su culito redondo y respingón, tan diferente al de las japonesas de su edad. Lo masajeó en círculos a la vez que sus grandes senos se pegaban a los de ella sintiendo como le clavaba sus duros pezones. Asuka tenía un cuerpazo, Misato siempre lo había sabido, pero ahora tenerla desnuda delante de ella y dejándose acariciar era demasiado, estaba muy cachonda y no iba a perder aquella oportunidad. Se arrodilló delante de la joven y pasó su lengua por la franja de pelo que tenía en su coño, luego empezó a lamer por fuera de sus labios vaginales.

"¡Ah!" Para la pelirroja la sensación era increíble, notaba la cálida y húmeda lengua de la mujer dándole placer de forma oral, algo que nunca hubiera pasado ni en sus más salvajes fantasías, siempre había pensado en Misato como en una especie de hermana mayor. La chica pegó su espalda a la pared de la ducha, con sus manos frotaba la cabeza morada de su repentina amante, gemía y gemía mirando al techo. La mujer que estaba arrodilladla entre sus piernas miró hacia arriba con una sonrisa viendo la expresión de éxtasis de la adolescente, con más ánimos comenzó a lamer el clítoris de ella y a meterle dos dedos por su vagina estrecha.

"¡¡¡Misato!!!" La alemana gemía el nombre de la mujer adulta que tanto placer le estaba dando al meter y sacar con velocidad sus dedos de dentro de su coño. Sintió un calor electrizante recorrer su cuerpo desde su entrepierna hasta su vientre, sus piernas le temblaron y pensó que se iba a caer. "¡Ah! ¡Ah! ¡Ah!" Asuka tuvo un potente orgasmo que hizo que su entrepierna tuviera contracciones expulsando fluidos que mancharon los dedos de su tutora que lamió con gusto. La joven miraba al frente con la mirada perdida mientras jadeaba.

"¿A qué te ha gustado el sexo entre chicas, ahora entiendes lo mío con Ritsuko?" Le preguntó mientras se ponía detrás de ella sosteniéndola con las manos pero aprovechando también para masajearle sus pechos húmedos por el agua.

"Ah... Sí..." Fueron las únicas palabras que salieron de sus labios aún agitada por la corrida que había tenido y disfrutando de las caricias de la mujer. De repente sonó de nuevo la puerta.

"¿Está ocupado?" Preguntó Shinji desde fuera, Asuka estuvo a punto de responder pero Misato le tapó la boca con la mano derecha.

"Me estoy duchando Shinji, espera un poquito ¿vale?" Dijo la mujer guiñándole un ojo a la pelirroja que la miraba sonrojada pues Misato estaba aprovechando para meterle un dedo en el ano masturbándola.

"Está bien, volveré en cinco minutos." Shinji se disponía a marcharse cuando la voz de la mujer volvió a detenerlo.

"¿Por qué no aprovechas para buscar a Asuka?" No sé si salió a buscar algo para desayunar." Ella rió muy divertida mientras la alemana negaba con la cabeza mirándola con miedo mientras era penetrada analmente por el dedo medio de la mano izquierda de su tutora, quería gritar pero afortunadamente ella se lo impedía, no quería que Shinji se enterase.

"¡No debiste hacer eso Misato!" Se quejó la chica cuando el chico ya se había alejado de la puerta del baño y su tutora la soltó, se cruzó de brazos y sonrojada la miraba con indignación.

"Jajajaja, un poco de diversión extra Asuka-chan." Le dijo riéndose y luego chupó con delicadeza el dedo con el que la había penetrado. "Mmmm... Rico culo..." La joven de ojos azules negó como si su tutora estuviera loca y salió de la ducha a secarse con una toalla. "Oye Asuka... si sigues teniendo dudas, estaré para lo que quieras." Dijo sexy Misato mientras se acariciaba su cuerpo. La pelirroja se sonrojó mucho y salió corriendo del cuarto de baño antes de que el otro piloto regresara, la mujer se quedó riéndose para terminar de ducharse.

FIN

OMAKE


La doctora Ritsuko había terminado de limpiar los fluidos que habían manchado su despacho tras el sexo con Shinji, ya se había vestido e iba a irse cuando la puerta se abrió, fuera quien fuera era un maleducado por entrar sin llamar.

"¡¿Rei?!" La mujer rubia se sorprendió al ver entrar a la chica de pelo azul, pero lo sorprendente es que estaba completamente desnuda, dejando ver su cuerpo pálido con pelito azul en el coño y sus pechos poco desarrollados aún pero firmes con pezones rosas que resaltaban. "¡¿Qué haces así?!"

"Estoy harta de no tener ningún protagonismo en la historia. Hagamos una escena usted y yo doctora Ritsuko." Dijo ella muy seria y tranquila. A la científica le apareció una gota de sudor en la cabeza mientras su mandíbula inferior caía casi hasta el suelo.

"Pero Rei... no sé si los lectores estarían de acuerdo con una escena sexual tan gratuita." Intentó razonar Ritsuko.

"¿Y lo suyo con Shinji? ¿Acaso no fue gratuito?" Se defendió la chica desnuda avanzando hacia ella.

"Pues no lo creo..." Mientras entornaba los ojos para pensar la mujer no se dio cuenta de que Rei ya se le echaba encima. "¡¿Eh?! ¡Rei para!" La chica se le echó encima tirando la silla donde se sentaba ella a su paso.

NOTAS


-Gracias por todos los que comentan mi fic en los sitios donde los publico, se agradecen vuestros aportes.

-A los que esperéis acción entre Shinji y Asuka sed pacientes XD.

-Lo del Omake es un pequeño chiste, ya sé que Rei debería aparecer más por la historia, a sus fans tampoco os preocupeis.

-Este fic se publicará en los siguientes sitios:

http://www.todorelatos.com

http://nervdenoche.blogspot.com

http://fanfiction.blackmoonrol.es/

Y en el próximo capítulo...


¡Kaji al fin aparece! ¿Qué planes habrá para él? Además Ritsuko pasará por una fase en la que buscará placer en las personas que más cerca tiene.