Dulce, una tierna amante, la visita

Dulce una tierna amante (III), La visita.

Dulce tiene una prima de nombre Yunuet, quien no es tan agraciada como la tierna amante...

Yunuet tiene apenas 13 años es de complexión media, no gorda ni flaca, tiene los pechos pequeños, piernas gorditas torneadas, unas nalgas muy bien llenas, sus pies no están maltratados, ella se viste muy recatada, nada que ver con su prima...no usa maquillaje más que un poco de brillo en sus labios...está de visita en la casa de Dulce ya que su madre Adriana está enferma...

• Tendré que aguantar las ganas de dedearme ahora que mi prima se encuentra en la casa - Pensaba para si misma Dulce... -Hola prima...estaré unos días en tu casa espero que no te moleste que me hayan dejado dormir contigo... Fue entonces que a Dulce algo en su interior se le encendió...¿Sería quizás la idea de una relación diferente a las que hasta ahora había probado?.

La noche llegó y las primas se quedaron solas...

-Bueno primita, creo que ya es hora de dormir, -dijo Dulce con una mirada que encerraba toda su delicada cachondes... -Es que...todavía no me voy a dormir, tengo que ducharme ya que el trayecto para tu casa me hizo sudar... -Esta bien Yun, dúchate...

La niña con toda la normalidad del mundo se metió al cuarto de baño, ahí se sacó la blusa, y sus morenos pezones recibieron un poco de frío, que los hizo endurecer, ella se acarició los pechos...luego tiernamente se retiró el top que llevaba...ahora su torso desnudo se dejaba ver con todo su esplendor en el espejo, su abdomen liso, suave, virginal...Desabotonó su pantalón...este se abrió un poco y una pantaleta amarilla se asomaba pudorosa...se agachó y sus pechos se rindieron a la gravedad, sus nalgas dibujaban un corazón...se quitó los zapatos y las calcetas, la piel morena de sus pies contrastaba con el esmalte transparente de sus uñas...el pantalón bajaba por sus piernas sin vello, cayó...su pantaleta continuaba ahí...Dulce por el ojo de la cerradura veía, mientras se masturbaba...tenía que besarla...tenía que chupar esos pezones, lamer las nalgas, acariciarla de cabeza a pies...Fue cuando se decidió a entrar solamente en top y calzones.

-Hola Yun, ¿Puedo ducharme contigo? - Decía mientras le sonreía inocentemente, al mismo tiempo su lampiña pucha se lubricaba...recorrió con la vista el cuerpo de la morena. -Bueno, por mi no hay ningún problema - contestó Yun. -¿Te vas a meter a la ducha con calzones? -Claro que no tonta, ahorita me los quito - rió yun Las pantaletas amarillas fueron retiradas por las manos morenas de yun, fue dejando al descubierto unas nalgas preciosas que fueron plenamente admiradas por Dulce, la morena se había agachado para retirarlas de su tobillo y su ano fue advertido por Dulce...Yun se incorporó y se colocó de frente a Dulce, su pubis era tapado por un escaso y ralo vello pubiano...

Tocó el turno a Dulce, se quitó el top, sus pechitos de pezones rozados estaban erectos, dejó que su cuerpo fuera admirado por su prima que atónita veía la hermosa silueta de la niña...se dio la vuelta e imitando a yun se agachó dejando que le viera el precioso culo, su ano rozado fue admirado...se dio vuelta su pucha sin vellos dejaba escapar una abundante lubricación que drenaba por sus labios menores.

-El agua está tibia, ¿Nos metemos? -Sí Dulce.

Ambas niñas entraron a la tibia lluvia, las gotas caprichosas caían sobre sus delicados cuerpos, yun se enjabonaba el cabello, y con los ojos cerrados no se percataba que Dulce se frotaba el clítoris, en silencio, viendo el bello cuerpo de su prima.

-¿Te tallo la espalda yun? -Bueno, porque no me alcanzo - seguía con los ojos cerrados.

Dulce tomó la barra de jabón la frotó en sus manos y comenzó a tallar con sus palmas la espalda de la niña...sus manitas expertas subían y bajaban masajeando la piel de la espalda baja, y en un momento dejó que su mano se introdujera en medio de las nalgas morenas, pasó sus dedos sobre el ano, la introdujo más hacia la pucha, yun solamente sentía, experimentó excitación, dejó que Dulce la tocara, abrió los ojos y se dio vuelta.

-¿Qué haces Dulce? - preguntaba con sus mejillas encendidas. -Te deseo, me gustas mucho, me atraes... -Pero, eso no puede ser, somos primas, somos mujeres... -Pero es más fuerte que todo eso, vamos a hacerlo, sin pensar en lo demás, ¿Acaso no sentiste nada cuando te toqué?, ¿No te gustó sentirte deseada cuando te vi? -si, y me gustó ver tu ano, tu cuerpo.

Fue cuando ambas se abrazaron y sus bocas se unieron en un beso, sus lenguas recorrieron la boca de cada una, sus pechos chocaban con cada movimiento, los dedos de sus pies se acariciaban.

-Yun, volteate... y Yun sin mediar palabra se volteó, Dulce la acarició sobando sus pechos, apretando sus pezones, bajaba las manos hasta el pubis y masajeaba la vulva, mientras hábilmente besaba el cuello y orejas de la niña...la agachó y metió su carita entre las nalgas de la morena, chupó ansiosamente el ano, y saboreó la puchita agridulce, puso un poco de jabón en sus dedos y los introdujo en el ano de la agachada niña, comenzó a germir.

-Ay Dulce, siento que me hago popó, mmmhhh, pero siento rico, despacio por favor.

Dulce seguía, mientras sentada en medio de las piernas de Yun, chupaba ávidamente el rojo clítoris de la hermosa morena, sintió como su prima se convulsionaba de placer.

-Ahora cambiemos

Al momento de decirlo, sacó su dos dedos del ano de la morena que sin pensarlo dejó que su excremento saliera sin poder retenerlo, el cual cayó sobre el pecho de Dulce, que en ese momento experimentó un placer extraño...

-Ahhh, sí, siento caliente tu mierda...puja, puuujjjaaa máaas. -Si, todavía tengo más jjjjmmmm.

Y la mierda salió cayendo sobre la caliente Dulce...

-Lávame Yun... -Pero con mis orines porque me hagoooooo

Y la dorada lluvia cayó barriendo los restos de mierda... Dulce chupó la pucha de la morena, y cambiaron...

-Abre la boca yun, quiero orinar en ti. -Hazlo, quiero saber a que saben tus orines. -Ya viene...chupameeeeEeeEeE

Una lluvia dorada, fuerte, joven, deliciosa cayó en la boca de Yun, que tragaba lo que podía...

-Glup, slurp, glup - Tragaba Yun -Ya no hay... -No, jijijiji, que rico, ahora vamos a secarnos!!

Las niñas se secaron, y limpias se acostaron en la cama una arriba de la otra besando sus pechos, sus axilas, su abdomen, las ingles, las lenguas caminaban en el cuerpo de cada una, un bello 69 hizo que ambas experimentaran orgasmos seguidos, el beso negro era un deleite en las bocas de las preciosas niñas.

-No metas los dedos en mi pucha. -Tú tampoco Yun

solamente el placer anal y oral era su prioridad, todavía deseaban conservar intacto el himen. Ya llegaría su turno.

En posición de perrito, Dulce lamió el ano de Yun, metió dos dedos al inicio, pero con ayuda de crema, 4 dedos se abrían paso, y poco a poco la mano de Dulce entró en el ano de la inclinada niña.

-Ay, siento que tengo la cola muy abierta, pero sigue, despacio...Eres única!!! -¿Te gusta?, ¿TE GUSTA?. -Si amor, sigue, siguuuuuEEEEEEE y un nuevo orgasmo la inundó. Dulce sacó su mano, y vio con deleite el dilatado ano de Yun, escupió dentro de el y lamió el contorno del ano. -Ahora, chuparé tus pies Yun. Dulce lamió y chupó poco a poco y dedo a dedo los morenos pies, Yun siguió experimentando placer, tanto que metía lo que podía del pie de Dulce en su ano... -Yo también quiero sentir lo que tú Yun... y colocando el pie de Yun sobre su ano, comenzó a meter el dedo gordo, mientras chupaba el otro, embarró de crema el pie y su ano, y comenzó a introducirlo, entrando los dedos y medio empeine... -Ay que rico, que rico, que rico... -Te meteré la mano Dulce. Dulce se volteó y dejó su culo al descubierto y empinada. -Ahora Dulce sentirás lo rico. Yun embarró su mano y comenzó a trabajar el experto ano de Dulce que sin reproche se dilataba cada vez que sentía una metida, su mano entró hasta la muñeca. -Muévelo de lado a lado, circular, así mamita rica, asiiiiiIIIiIIII El mete y saca de la mano en el ano de la niña hizo que se viniera casi en seguida. -AhhaAAaAAAAHHHH, que ricoooooOOOOOOOOO!!!! Y el Culo abierto de Dulce dejó entrar la saliva de Yun, y cerrándose poco a poco apretaba la lengua que lamía ávidamente.

-Wow, eso fue fantástico, ¿Lo vamos a hacer de nuevo Dulce? -Claro que si amor, lo haremos hasta que te vayas, ahora bésame.

Las niñas se besaron, y después desnudas y abrazadas se quedaron dormidas.

Cansadas.

Extasiadas.

Amadas.

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