Dragón ball universo 1 Capítulo 8

Cuando todo parece perdido llega un rayo de esperanza, la pregunta es: ¿conseguirá Rape recuperar a su familia? Nadie lo sabe, ¿lo intentará? Eso seguro.

Capítulo 8: el valle del exilio

La noche más terrible de mi vida, la noche en este planeta es muy oscura; me hice heridas por todas partes, me di golpes y me caí varias veces sino fuera tan fuerte...creo que hubiera muerto sin duda, lo peor era la tristeza que nuevamente anidada en mi corazón; otra vez a empezar de cero, otra vez solo y sin nada.

Saber que Rosa gris seria casada con otro, que Sonrisita bonita seria obligada a volver con Pincho; que Pincho se salían con la suya y que Dormilón me perdía...me destrozaba el corazón.

Tras salir del bosque, camine por un desierto; hasta que caí agotado en un oasis, bebí hasta saciarme y comí los frutos de los árboles. Al día siguiente el sol insoportable me despertó.

  • ¡agh! El sol quema.

Escondido estuve en una sombra, meditando y esperando al anochecer para poder salir; por la noche vage por el desierto, hasta caer rendido pues no sabia ni hacia donde iba ni donde estaba ni nada de nada.

Creí que al fin moriría pero no, al día siguiente me vi rodeado de animales con distintos defectos; un hipopótamo flaco, un elefante con trompita...un león negro, un tigre blanco; un perro sin pinchos, un jabalí sin colmillos y mucho más.

  • ¿donde estoy?

  • bienvenido al valle de los perdidos o los exiliados. - hablo el león - yo soy aquí el rey negro, solo hay tres normas; una vive y deja vivir, dos si un depredador o gamma de alguna raza quiere exterminar a tus vecinos ayúdales.

  • ¿y la tercera?

  • todos tenemos una historia, ni preguntes por ella; ni nos cuentes la tuya.

  • gracias. ¿cómo vivís aquí?

  • sencillo, cada uno come y bebé lo que puede; duerme donde puede y tiene relaciones con quien quiere, si ambos quieren.

Tras eso cada uno se marcha, por costumbre busco una cueva; compruebo que esta vacía y me hago mi cama, tras eso...me pongo a entrenar como loco lleno de frustración, pasan muchos por allí pero la mayoría se asustan y huyen.

Luego medito y sonrió al comprobar que un aura blanca me rodea, he conseguido activar el ki; me pongo a practicar para intentar volar, pero por ahora no lo consigo y luego me acuesto jadeando.

  • ¿necesitas ayuda? - pregunta el rey negro.

  • creí que aquí erais independientes...

  • y lo somos, pero no te veo ningún defecto a simple vista; veo tu cara de amargado y me pregunto que abras echo para acabar aquí, a menos que seas un mono sin pelo o un humanoide con cola.

Me rio.

  • creí que tampoco preguntabais.

  • bueno yo soy el rey, a veces me salto las reglas.

  • no diré nada, sino me cuentas tu historia.

El se sorprende, luego suspira.

  • esta bien chico, te la contare...erase una vez un león negro que por más que intentaba no podía cazar, no era culpa suya; por su color lo veían a kilómetros,  ninguna hembra lo quería y cuando sus padres murieron el rey en sus terrenos no lo quería.

  • entiendo...

  • ahora te toca a ti chico.

  • escucha con atención

Cuando acabó de escuchar mi historia...

  • pero eso es terrible...

  • ¿que parte?

  • todo, pero la parte de ese tal Freezer que destruye planetas es la peor ¿estas seguro de que podrás detenerlo si vuelve?

  • ahora no, pero confío en volverme más fuerte para entonces.

  • hagamos una cosa chico, a partir de ahora tu te vas a centrar en entrenar; si quieres cuando te sientas bastante fuerte ve a por tus mujeres y tu hijo, si quieres te traigo contrincantes cada día y los demás te traeremos lo demás.

  • ¿estas seguro?

  • tan seguro de que soy negro.

Tengo que reírme y el me sonríe.

  • hazle un favor al universo y aniquila a Freezer.

  • gracias Furia negra.

  • ¿furia negra?

  • ya sabes soy adicto a poneros nombre

  • ¿sabes que? Me parece un nombre adecuado para el rey de los exiliados.

  • me gustaría tener un grupo de voluntarios, Freezer tiene muchos hombres; si el viene, necesitaré un grupo de avezados guerreros que luchen con ellos.

  • lo intentare, pero ya te aviso que en nuestras filas no abunda el valor; la mayoría huimos de algo por no enfrentarlo.

  • gracias de todos modos.

  • nos vemos Rape

  • adiós furia negra

Dormí solo viendo las estrellas cuando se fue, llorando en silencio.