Dragon Ball: Entrenamiento intensivo

Videl está cachonda y hará lo posible por quitarse el calentón.

Dragon Ball: Entrenamiento intensivo

Gohan y Videl llevaban unos días entrenando con Goten para el próximo torneo de artes marciales. Los dos hijos de Son Goku intentaban enseñar a la muchacha como usar su energía para volar. La pobre Videl estaba frustrada, porque no conseguía levantarse más que un par de pies del suelo mientras que el pequeño Goten parecía que hiciese una exhibición.

Además la pobre Videl había hablado con Gohan para que le enseñase a volar, pero lo que ella quería era pasar un tiempo a solas con él, ya que en los últimos días se había fijado en el fabuloso cuerpo de Gohan, y ella tenía sus necesidades. Al principio creyó que sería fácil acostarse con él, pero su exasperante inocencia era una traba importante. Primero porque parecía que no se diese cuenta de que ella era una mujer, y segundo porque había invitado a su hermano pequeño a entrenar con ellos.

Ya no podía más, el calentón de la pobre Videl parecía estar al límite ya, así que se decidió a tomar al toro por los cuernos:

Goten, me parece que ya es la hora de comer... – Sólo oir la palabra comida Son Goten se fue volando en dirección a su casa.

Pero si hace menos de una hora que hemos desayunado Videl, voy a buscarle antes de que mamá se enfade.

Gohan hizo el gesto para salir volando, pero Videl no podía dejar que la dejase allí, así que se agarró a sus pantalones, bajándolos hasta las rodillas y dejando libre el pene de Gohan. Sólo verlo Videl no pudo evitar sorprenderse del gran tamaño que tenía.

Pero se puede saber qué haces Videl?

Pareces tonto Gohan, llevo días intentando que nos quedemos solos, no paras de provocarme con ese cuerpazo que tienes, tocándome para ponerme en la posición correcta... Y ya no puedo mas, necesito que me hagas tuya.

Pero Videl yo...

Gohan se tapó un poco con las manos, avergonzado de la situación; así que de nuevo fue Videl la que tuvo que lanzarse.

Increíble, te bajan los pantalones y ni así te lanzas! No me dejas otra opción.

Cogió el miembro de Gohan y empezó a chuparlo, venciendo toda resistencia que pudiese quedarle. Empezó a lamerlo con gusto, dulcemente, por fin había llegado el momento de desahogarse. Cuando por fin empezó a gemir y miró hacia abajo estaba lamiéndole el capullo, mientras le miraba con una sonrisa de picardía y una mirada traviesa. No dejó de chuparla, metiéndosela casi entera en la boca, absorviéndole los huevos como si fuera una aspiradora. Haciendo jadear a Gohan mientras los jugos de Videl resbalaban entre sus muslos.

Empezó a moverse cada vez más deprisa, con más fuerza sobándole los huevos y agarrándole el culo. Videl no podía más, deseaba tener esa barra de carne enorme dentro de sí, pero tenía miedo de que si paraba ahora Gohan huyese de allí. Una última embestida hizo que Gohan se descontrolase:

Por favor Videl, no pares, no pares!

Y Video paró. Pero sólo para lanzar a Gohan al suelo de un empujón, cogerle el rabo con una mano y sentarse encima de un rápido salto. Por fin se lo follaba!

A Videl la situación no podía excitarle más: se encontraba en medio del bosque, con el chico que le gustaba cabalgando sobre su miembro y sabiendo que en cualquier momento podía volver el hermano pequeño. Esa excitación hacía que se moviese más deprisa, cabalgándole con furia y gozando al sentir a Gohan en sus entrañas. Se movía arriba y abajo, con una velocidad fruto de años practicando artes marciales. Casi con desesperación.

Gohan no podía creer que Videl tuviese esas ganas de follárselo, si se llega a dar cuenta antes podrían haber disfrutado durante más tiempo. Desde su posición tumbado veía como Videl saltaba enloquecida sobre su polla, con los ojos como idos, gimiendo, contorsionándose. Moviendo sus caderas a un ritmo diabólico y haciendo que él estuviese a punto de correrse. La visión de la chica enloquecida encima suyo hizo que Gohan empezase a tomar la iniciativa, cogiendo a Videl de los brazos mientras se levantaba. Ahora Videl estaba a su merced, la tenía cogida de las caderas y la movía arriba y abajo igual que las veces en que se masturbaba: Videl era su mano, así que había que moverla.

Y vaya que si la movió! El nuevo ritmo impuesto por Gohan hizo que Videl se corriese, pero Gohan no paraba, así que Videl gozaba y gozaba enloquecida. Estaba en el cielo, un orgasmo tras otro. Cuando Videl creyó que se iba a volver loca de tanto placer Gohan sacó la polla de su interior y se corrió encima suyo.

Gohan, ha sido increíble! He hecho bien en fijarme en ti

Videl, te podrías haber lanzado antes, habríamos disfrutado más veces.

Calla tonto, que será que no te he lanzado los trastos veces! Debería haberte dado cuenta de que me gustabas.

Bueno, yo...

Sí!, tú no pensaste! Pero bueno, ha estado genial, así que te perdono. Ahora volvamos a tu casa, que tu madre seguro que sospecha algo.

Minutos más tarde llegaban a casa de Chichi, donde les esperaba la madre de Gohan con su hijo menor.

Goten ha venido porque tenía hambre, así que he preparado algo de comer. Queréis comer algo vosotros?

Sssí...

Ah, que hacíais que habéis dejado que Goten viniese sólo, apenas es un mocoso.

Videl y Gohan sólo pudieron contestar de una forma: ruborizándose.

Éste es mi tercer relato, y me lo he tomado como un descanso dentro de mi historia personal. Espero que os haya gustado!