Dra. fogosa

Fue un día como cualquier otro, me levanté muy temprano pues tenía clase a las 7 de la mañana, al llegar al baño abrí las llaves de la tina mientras me quitaba la pijama despacio despacio, resultado del sueño que aún tenía. Me metí al agua calientita y recorrí todo mi cuerpo con jabón, al llegar a mi rajita la acaricié y me retorcí del placer, creo que esa mañana estaba muy caliente.

En fin, salí del baño y busqué una ropa sexi entre los cajones, me decidí por un coordinado blanco y diminuto , la parte superior solo cubría mis pezones y la parte inferior de mis pechos, la parte inferior mi monte y muy poco de mi trasero. Aquel día tenia que ir al hospital así que debía ponerme mi uniforme blanco, busqué un pantalón pegadito a la cadera pero no puse cuidado en ponerme licras debajo así que dejaba transparentar el bikini, me puse una blusa blanca también un poco transparente, sin mangas y señida a mi cuerpo, puse un poco de brillo en mis labios, sobra en mis párpados y poca máscara en mis pestañas. Tobilleras blancas y sapatos del mismo color, como hacía frío cambié la bata clínica por una chamarrita blanca y salí corriendo pues se me hacía tarde.

Al llegar al hospital sentí un par de miradas en mi culito, ya que está redondito y el bikini se marcaba mucho, al abrir la puerta del aula, me percaté de que había comenzado la clase, así que me quedé atrás y al acomodarme me quité la chamarra pues estaba muy agitada y acalorada, me percaté de que había alguien a mi derecha separado por unas 5 bancas, era un doctor muy guapo de unos 27 años y no dejaba de verme y sonreía muy pícaramente, a lo que respondí con una sonrisa similar. Al salir de clase no tuve mas remedio que irme a la biblioteca, pues un examen me esperaba al día siguiente. Estaba leyendo un libro con mucha atención cuando alguien se sentó a mi lado, tenía un olor delicioso y no pude evitar voltear a ver de quién se trataba.

Era el Dr que estaba en mi clase... – Buenos días Dr, necesita algo?- - sí te dijera que sí, que harías?-; -pues... ayudarle, supongo, ¿Qué necesita?- le pregunté muy nerviosa, me sentía muy excitada al ver sus labios mojarse con su lengua cada ves que bajaba la vista a mis piernas, -creo que necesito lo mismo que tú.

• Me contestó acercando su boca a la mía y tocando mis labios con su lengua calientita, puso su mano en mi rodilla y la subía lentamente. No había mucha gente así que teníamos la oportunidad de portarnos un poco mal. Me miró a los ojos como esperando una respuesta, lo tomé de la mano y se la puse sobre mi sexo que ya estaba palpitando, desabroché mi pantalón y él no perdió la oportunidad de meter su mano y acariciarme el sexo su mano grande y juguetona.

Yo toqué su entrepierna y sentí un bulto que crecía cada vez mas y mas, la otra mano la llevó hacia debajo de mi blusa y desabrochó mi pequeño bikini, me apretaba los pezones duros y besaba mi cuello ... observó a mi alrededor y al no ver mucha gente cerca, acercó su cabeza a mis pechos y mordía y succionaba como un niño pequeño, bajó por mi vientre y se las ingenió para bajar mi ropa, abrí las piernas y tuvo acceso a mis partes mojadas, yo respiraba muy rápido, jugaba con su lengua en mi clítoris, llegué al orgasmo, mis jugos llenaron su boca, se incorporó mientras trataba de subir mi ropa, seguía tocando mis senos con desesperación, quise regresarle el favor, asi que me metí completamente debajo de la mesa de estudio, y saqué aquello tan enorme, lo metí y saqué de mi boca, rodeaba su glande con mi lengua, pude escuchar que alguien llegó a preguntarle por mi, era mi novio pero no dejé de succionar aquello tan delicioso hasta que se corrió y mi boca estaba llena de su leche, salí con precaución para que nadie me viera. Me abroché el bikini y acomodé mi pantalón, sacudí mi cabello y me acerqué al Dr. –Espero verlo esta noche en guardia- le dije mordiendo su cuello y pasándole la mano por la entrepierna, -ahí la veo Dra.

Pero mejor quédese un poco mas- , -no, creo que alguien vino a buscarme, voy a ver que es lo que desea y esta noche cumpliré sus deseos, fue un placer estudiar con usted en la biblio... – salí de la sala y encontré a mi novio, lo besé con pasión y se dio cuenta de que estaba muy caliente. –Mira lo que me puse para ti, y sabrás que estoy mojadita, así que porque no vamos a estudiar a tu depa?- - muy bien amor, solo voy al sanitario y nos vamos- Se dirigió al sanitario pero yo ya no aguantaba tenerlo a él, así que lo seguí al sanitario y....

Eso se los contaré en otra ocasión, por lo mientras espero sus sugerencias... yllali_ri@hotmail.com