Dos maduros para mi (6)

Nunca pensamos que la mujer de nuestro portero fuera una autentica profesional del placer. Nos la follamos los tres.

Nos despertamos a medía mañana el sábado, reponiéndonos de la fantástica noche que habíamos tenido con nuestros dos camioneros Antonio y Dioni. Estuvimos paseando por Aranjuez, comimos allí y luego nos dirigimos hacía casa esperando que nuestro portero Carlos hubiera preparado la tarde bien y que los pilláramos follando a el y a su mujer Gloria en nuestra casa para asi llevar a cabo nuestros propósitos, follarnos a Gloria y a su marido a la vez.

Llegamos a nuestra casa como habíamos previsto con Carlos, a las seis de la tarde, Ricardo y yo estabamos muy nerviosos ya que no sabíamos que nos íbamos a encontrar en cuanto abriéramos la puerta. Giramos la llave con mucho cuidado y abrímos, de momento no se oía nada extraño, la verdad es que el salón y el dormitorio están muy retirados de la puerta principal. Avanzamos sigilosamente por el pasillo que llevaba al salón, oímos el ruído de la televisión encendida, había puesta una de nuestras películas porno, nos asomamos y no vimos a nadie allí, así que seguímos hacía nuestra habitación.

De repente empezamos a escuchar unos sonidos que procedían de la habitación, nos acercamos un poco más, la puerta estaba entreabierta, los sonidos eran palabras que salían de la boca de Gloria, "pero Carlos que me estas haciendo, te has vuelto loco, esto es pecado" Nos acercamos y vimos como Carlos intentaba follarle el culo a Gloria, "eres un guarro, con quien habrás ido que te ha enseñado esas cosas", Ricardo y yo estabamos mirando la escena y nos empezamos a sonreir, Carlos insistía en meterle su polla pequeña pero muy gorda en el culo a Gloria, estaba sudando y resoplaba a la vez que decía: "mujer, no te pongas así, es que siempre lo hacemos de la misma manera y una mujer debe obediencia a su marido" Gloria soltó una carcajada y dijo " obediencia, ja ja ja, tú lo que eres es un cerdo y a mi no me vas a meter tu cacharro por el culo, pero que te has creído".

Fue en ese momento cuando Ricardo decidió entrar ya que podía peligrar la integridad de Carlos y por supuesto nuestro plan. Entró como si no hubiera visto nada, puso cara de sorpresa y dijó "perdón no sabía que utilizabais nuestra casa para follar, así nos devolveis la confianza que os hemos demostrado? Gloria inmediatamente intento taparse sus enormes tetas y su sexo con las manos, Carlos ni se movió y siguió allí de pie con su rabo tieso como el acero. "Don Ricardo, perdoné, ha sido idea de mi marido, yo le dijé que esto estaba mal y que ustedes no se merecían esto, perdón, perdón Don Ricardo" dijo Gloria entre sollozos. Y tu Carlos, no tienes nada que decir" dijo Ricardo en tono de enfado aunque entre risas. "Señor, yo... la verdad.... no sé, en fín,... no pensé que....." Carlos balbuceaba, "bueno es suficiente" gritó Ricardo "tampoco es para tanto, además nosotros somos unas personas liberales y entendemos que cuando una pareja necesita hacer el amor no repara en nada más" continuó, "por cierto Gloria, tienes un cuerpo muy bien conservado para tu edad y tu Carlos se te sigue poniendo dura", Gloria se quedó perpleja ante la afirmación de Ricardo, "Don Ricardo, ¿qué insinua?" Nada especial Gloria, simplemente que teneis unos cuerpos que todavía se pueden mostrar y que siguen deseosos de dar y recibir placer", Ricardo se acercó a Gloria y la beso en la mejilla, Gloria seguía petrificada, pero su sonrojo iba disminuyendo, la estrategia de Ricardo estaba funcionando.

"Tienes unos pechos enormes, firmes y duros, muchas mujeres de tu edad te envidiarían" Ricardo empezó a tocarle los pechos a Gloria, "tienes unos muslos poderoso, un trasero imponente, un poquito gordita, pero eso les gusta a los hombres" Gloria se dejaba tocar sin atreverse a decir nada "todo tu cuerpo, querida Gloria es una fuente de placer y por eso Carlos quiere disfrutar de ti, de todo cuerpo lleno de sensualidad y amor" Yo desde el pasillo oía la conversación y no podía creer que Ricardo estuviera diciendo todo aquello, estaba llevando la situación al terreno que queríamos, yo ademas empecé a sentir como mi polla empezaba a crecer dentro de mis pantalones, Ricardo continuó "por que crees que tu marido esta como está" mientras lo decía cogío la polla de Carlos con la mano y mientras sopesaba sus huevos peludos dijo "desea que tu recibas todo el placer que él lleva almacenado en sus bolas de placer" Fue entonces cuando Gloria se atrevió a hablar "ya Don Ricardo pero me quiere hacer unas cosas que a mi me dan mucha vergüenza y que son pecado, eso me decía mi madre" Ricardo escuchaba y contestó "tu cuerpo merece recibir todo el placer, solo tienes que relajarte y disfrutar" acto seguido acercó sus boca a la de Gloria y empezó a besarla, ella se sintió confusa pero no apartó su boca de la de Ricardo incluso permitió que la lengua de Ricardo empezará a explorar, Gloria se fue soltando y dejó de taparse con las manos.

"Lo ves Gloria, solo tienes que relajarte" Ricardo siguió lamiendo el enorme cuerpo de Gloria bajo la atenta mirada de Carlos que en ningún momento perdió su tremenda erección, este empezó a pajearse, estaba claro que le calentaba la situación que estaba viendo. Gloria se tumbó en la cama boca arriba mientras Ricardo se acercaba a su sexo ya mojado, empezó a comerle su clítoris casi excitado, abrió su labios vaginales y la penetró con su lengua que empezó arecorrer su vulva en toda su extensión y profundidad, Gloria empezó a gemir, se retorcía anunciando que iba a recibir el primer orgasmo de su vida y así fue gritço como una posesa mientras llenaba la boca de Juan con todos sus jugos vaginales que el comió hasta que Gloria paró de moverse y quedó rendida en la cama. Fue entonces cuando ella dijo "nunca antes había sentido nada igual y pensar que yo creía que esto te condenaba al infierno" "esto solo es el principio, ahora vas a disfrutar a tope de tu sexualidad, de todas las maneras posibles".

Acto seguido Ricardo se desnudó completamente dejando ver a Gloria el tremendo aparato totalmente tieso que tenía, Carlos seguía pajeandose viendo petrificado como su mujer había llegado al orgasmo, algo que él nunca había conseguido. Ricardo levantó a Gloria de la cama y la llevó cerca de Carlos, se arrodilló y se metío el pollón de Carlos en la boca, empezó a chuparlo de arriba abajo, apenas le cabía ya que Carlos tenía la polla gordísima (ver Dos maduros para mi 4), masajeaba sus huevos, acaricaba su enorme barriga y pellizacaba sus pezones duros como piedras. Carlos apretó la cabeza de Ricardo contra su pubis y empezó a follarlo por la boca como un poseso, sudaba como un cerdo, empezó a tensarse y polla se hizo mas grande en la boca de Ricardo, Gloria estaba perpleja, Carlos gritó y empezó a soltar leche que Ricardo tragaba como podía, parte de ella se le escapa por la comisura de los labios, Ricardo tragaba y tragaba, lamió el capullón de Carlos hasta dejarlo limpio y reluciente y con su boca todavía llena de leche le dijó a Gloria " ahora tu vas a disfrutar igual que yo he disfrutado con tu marido" se levantó y le dijo a ella que se pusiera de rodillas, ella se acercó con miedo hacía el tremendo pollón de Ricardo, lo cogío con una mano y se lo fue acercando a su boca, lo lamió con cuidado, se metió un poco del capullo de Ricardo en la boca y poco a poco fue introduciendo el ariete palpitante que ante ella tenía, Carlos empezó a besar a Ricardo y a comerle las tetas mientras Gloria seguía con la labor de dar placer a Ricardo, consiguió meterse toda la polla en la boca y empezó a chupar casi como una profesional (era increíble como algunas personas aprendian tan rápido). Yo seguía en el pasillo, completamente desnudo y haciendome una paja de campeonato, decidí que era el momento de actuar, entre sigilosamente, me acerqué por detrás de Gloria, me tumbé boca arriba y empecé a comerle su coño todavía mojado, ella dio un respingo pero Ricardo la sujetó la cabeza para que no se ditrajera por nada del mundo ya que le estaba dando un placer enorme. Carlos se arrodilló al lado de su mujer y empezaron los dos a comer la polla de Ricardo, Carlos esbozó una sonrisa a la que Gloria contestó con un beso en la boca de Carlos.

Yo seguía lamiendo el coño de Gloria mientras me pajeaba como un mono, mientras nuestros porteros disfrutaban de la polla venosa de mi amor, se la iban pasando de una boca a otra, mientras uno chupaba, el otro le comía los huevos, Ricardo estaba en la gloria, Carlos ya estaba empalmado otra vez, su mujer se dio cuenta y empezó a pajearle mientras llenaba mi boca con sus fluidos, había llegado a su segundo orgasmo y ni siquiera se movío simplemente disfrutó. La hicé que se pusiera a cuatro patas y así poder ver esa vulva empadada ante mis ojos y ante mi polla que deseaba follar aquel coño maduro. Ellos siguieron comiéndole la polla a Ricardo que ya no podía mas, se tensó como un arco y empezó a escupir leche a borbotones que fueron a parar a las caras y las bocas de nuestros porteros que empezaron a tragar leche como locos, se besaban y se pasan la leche de Ricardo de una boca a otra, Ricardo seguía soltando leche y Gloria decidió que aquella segunda lechada iba a ser entera para ella, en ese momento yo penetré el coño de Gloria lo cual hizó que se metiera la polla de Ricardo hasta la garganta y tragara todo el líquido que mi amor seguía soltando hasta dejarle seco.

Yo seguía con mi mete y saca mientras Carlos lamía la cara de su esposa para quitarle los restos de semen que todavía chorreaban. Ricardo se unió a la fiesta y la cara de Gloria se llenó de lenguas ávidas de semen, luego se entrelazaron las tres lenguas en claro síntoma de complicidad. Yo seguía follando ese coño jugoso, conseguí que Gloria orgasmara dos veces mas antes de llenar su coñito con mis jugos calientes y volviera a llegar a otro orgasmo esta vez mucho mas salvaje que los anteriores, saqué mi polla aun chorreando y Carlos, Ricardo y yo empezamos a comer su coño lleó de mi semen y sus propios jugos y nos miramos de una manera complice pensando que habíamos conseguido nuestro propósito, aunque vimos que Carlos era el hombre mas feliz del mundo.

Nos tumbamos los cuatro en la moqueta de la amplia habitación, Gloria estaba extenuada pero feliz, dijo que nunca pensó que iba a disfrutar tanto en su vida y menos con tres hombres a la vez, los cuatro reimos y Ricardo le dijo que tenía que terminar lo que estaban intentando hacer cuando nosotros llegamos a casa. Ella dijo que eso era muy difícil ya que por delante no había problema por "su" Carlos la había abiero al cabo de muchos años con esa polla gordísima, pero que el culo era diferente. Ricardo le dijo que no preocupara que lo ibamos a hacer de una manera lógica. Primero la iba a brir Alberto que era el que tenía la polla más normal, luego entraría Ricardo con su enorme pollón, pero no tan gordo como el Carlos y que al final entraría Carlos para terminar de desvirgarla. Gloria no estaba muy convencida pero accedió ya que habíamos conseguido arrancarle sus primeros orgasmos y nos debía el favor.

Pusimos a Gloria a cuatro patas para que su ojete estuviera lo mas visible posible. Yo (Alberto) empecé a lamerle su negro orificio notando como se contraía al primer lenguetazo, aquello no iba bien asi que decidimos que lo mejor era que ella estuviera entretenida, así que Carlos y Ricardo se tumbaron boca arriba poniendo sus pollones justo en la cara de Gloria, la cual empezó a chupar uno a uno mientras Carlos y Ricardo se besaban y acariciaban su enormes barrigas y pellizcaban sus poderoso pezones. Yo seguí con mi tarea de ensalivar aquel culazo virgen, empecé a meter un dedo y Gloria ya no se resistía como antes ya que tenía dos golosinas que no paraba de chupar, luego metí dos mientras seguía ensalivando aquel ojete. Ricardo y Carlos seguían besándose como locos entrelazando sus lenguas y llenándose de saliva toda la cara, nunca pensé que Carlos disfrutara tanto con un hombre. El ojete de Gloria estaba listo asi que apunté mi polla y empecé a meterle mi capullo, ella lo recibió con un poco de dolor pero apretó hacía atrás para que metiera mas, asi lo hice y de un golpe le metí el resto de mi polla y me agarré a sus enormes tetas que bailaban en el vacío, ella pegó un grito pero enseguida volvió a su labor de comerse esas dos pollas y ensalivarlas bien para que tambien follaran su ojete.

Empecé un mete y saca lento hasta que su culo se acostumbró a mi polla, fue entonces cuando ella empezó a decir "no me la saques y revientame mi culo" fue entonces cuando empecé a bombear como un loco y acto seguido noté como mi polla se hinchaba dispuesta a soltar mi semen caliente en su culo abierto, asi lo hice, en ese momento ella tuvo un orgasmo que ayudó todavía mas a ordeñarme del todo, saqué mi polla de aquel culo y ocupé el lugar de Ricardo que tení la polla a punto de estallar, Gloria comí mi rabo todavía con restos de semen y yo seguí besando a Carlos y acariciarle su tremenda barriga y coger sus cojones peludos y masajearlos.

Ricardo apuntó su pollón en el ojete abierto y chorreante de Gloria y de un solo golpe le metío medio cipote, Gloria se estremeció como una posesa, pero no le dolió ya que mi semen en su culo actuó de lubricante, de otro golpe de caderas Ricardo acabó por ensartar el culo de Gloria que volvió a tener otro orgasmo sin tocarse, empezó un mete y saca y Gloria se movía como si la hubieran follado por el culo toda la vida, mientras seguí disfrutando de dos pollas, la mía ya estaba dura otra vez y la de Carlos estaba morada de la tensión que acumulaba, era increíble lo que Carlos estaba aguantando sin correrse, solo de pensar que iba a taladrar el culazo gordo y ansioso de su mujer. Ricardo empezó a gritar y allenar el culo de Gloria de semen que como siempre salía del pollón de Ricardo a borbotones, le empezó a chorrear por los muslos a Gloria una mezcla de semen , sangre y caca, ella estaba enloquecida pidiendo que su culo no estuviera vació que quería la siguiente polla, la de "su" Carlos. Así fue Carlos apuntó su inmenso capullo amoratado en el culo chorreante de su mujer, mientras Ricardo ocupó el lugar de Carlos y yo empecé a besarle como nunca a mi macho fonador.

De un solo golpe entró aquel mostruo en el culo de Gloria, Carlos golpaba con sus huevos contra el culo de su mujer, Gloria estaba en extasis completo, se movía como una posesa, mientras no para de chupar nuestras pollas, Carlos estaba sudando por todo el cuerpo, su pecho peludo y su barriga estaban brillantes de todo el sudor que generaba, incluso vimos que babeaba, era un placer ver a Carlos golpear su barriga contra el culazo de su mujer, como sus tetas se movía como un puchin ball de boxeador, asi que decidimos levantarnos y empezar a dar todo el placer posible a Carlos, Ricardo empezó a besarle y yo mordisqueaba sus pezones, acariciba su barriga y tocaba con ansía su culo u su ojete, incluso metí un dedo lo cual enloqueció a Carlos de tal manera que entre espamos y palabras inconexas empezó a soltar su espema caliente en el culo chorreante de su mujer, ambos estaban enloquecidos y Gloria tuvo el enésimo orgasmo de la tarde, Carlos cayó destrozado sobre su mujer, ambos jadeantes, sudorosos y chorreando fluidos, sobre todo ella. Por fín Carlos se recuperó sacó su polla flaccida del culo de Gloria y los tres comimos su culo chorreante dejándolo limpio y relajado, Gloria de dio la vuelta tenía una sonrisa complice, nostros tres también nos reímos. Gloria dijo que le gustaría repetir esto mas a menudo y que quería ver como tres hombres follaban entre sí y sobre todo ver como al macho de su marido le metía Ricardo su enorme pollón. Ricardo y yo nos reimos pensando que eso ya era una prueba superada, pero Gloria no debía saberlo. Asentimos los tres y nos emplazamos para futuras tardes de placer con nuestros maravillosos porteros.