Dos hijas complacientes

Continúan las aventuras de los protagonistas de la saga “UNA HIJA MUY COMPLACIENTE”, os recomiendo leerla si no lo habéis hecho para conocer mejor las relaciones de los personajes, pero he intentado escribir este relato de modo que pueda leerse de forma independiente añadiendo una breve explicación de los personajes y sus vínculos. Espero que os guste :)

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Estrella la jovencita pelirroja hija de Rogelio vive con su madre Inés que tiene la tutela, recientemente separada de su padre que apenas le ve un par de fines de semana al mes.  Estrella de carácter dócil, sumiso, ha descubierto el sexo antes que el amor consecuencia de la relación incestuosa que mantiene con su padre desde hace tiempo.

Rogelio de carácter dominante, es un hombre de 40 años, jefe del departamento de administración de una gran empresa donde trabaja Paco al que conoce desde hace 16 años cuando ambos comenzaron a trabajar en la misma empresa. La relación entre ambos siempre ha sido de confianza, manteniendo las distancias en el trabajo dado que Rogelio es el jefe de Paco, pero fuera del trabajo los lazos entre las dos familias se han ido estrechando.

La mujer de Paco, Marta, profesora de un instituto privado que pertenece a una orden religiosa intercedió por Inés para que la contratasen en la secretaría del instituto. De hecho son las únicas mujeres descontando las de la limpieza que trabajan en el colegio.

Se trata de un colegio religioso de prestigio que sigue manteniendo una educación segregada de los alumnos (clases separadas de chicos y chicas), al que acuden como alumnas las hijas de los dos matrimonios Estrella y Silvia, a las dos jovencitas les separan un par de años por lo que no coinciden en las clases.  Estrella una pelirroja de pelo corto rizado, muy pecosa, poco desarrollada, reservada, callada, modosita y obediente es la menor de las dos, Silvia por contra en una jovencita morena de larga melena a la cintura, delgada, muy desarrollada, rebelde, aficionada a los piercings y a los tattoos que tiene que ocultar y disimular cuando va a clase.

Ambas tenían algo en común hasta ahora, las dos mantienen una relación incestuosa con sus padres, Rogelio y Paco, que con los años se han confesado sus aficiones y actualmente han llegado a compartirlas.

Silvia siempre ha despreciado a Estrella, tan solo ve en ella una cría de la que su padre se aprovecha ocasionalmente pero no la ve como una rival en la relación que mantiene con su padre, sabedora de su gran atractivo físico es una gran manipuladora que sabe engatusar muy bien a su padre para conseguir lo que quiere en cada momento.  Nunca ha rehuido los deseos de su padre, al contrario siempre los ha facilitado no solo por conseguir sus favores sino por la atracción que siente por su progenitor, pero este hecho nunca le ha impedido comportarse fuera de casa como una auténtica zorrita. En el colegio tiene fama de chica fácil, de putita, una fama ganada a pulso dejandose manosear con facilidad por cualquiera y sobre todo  por la cantidad de pajas y mamadas que ha hecho a muchos chicos del colegio en los baños, en los corrillos de los recreos o fuera del colegio.

Últimamente Silvia ha incorporado un par de profesores a su lista de conquistas,  para poder mejorar sus notas ha sabido seducirlos y con frecuencia se la ve entrar en sus despachos cuando es llamada para “tutorías de mejora”. Silvia que ha demostrado ser una gran manipuladora, con mucha sangre fría y gran madurez a pesar de su corta edad, está convencida de que puede conseguir cualquier cosa utilizando su cuerpo y no tiene ningún prejuicio en hacerlo.

Estrella sin embargo es el polo opuesto, siempre callada, discreta, obediente, estudiosa y “puntualmente cumplidora con su padre  Rogelio y con Paco el padre de Silvia”, precisamente estando en casa de Paco complaciendolo a petición de su padre, llegó Silvia que celosa de la situación obligó a Estrella a realizar un trio con ella y su padre.  Este hecho había removido el interior de Estrella, ella nunca había estado así con otra chica, se sentía atraída por ella, la veía guapa, decidida, con carácter, todo lo que ha ella parecía faltarle y no dejaba de pensar en ella, ahora sentada en el baño sus pensamientos la habían llevado a tocarse pensando en Silvia, le había encantado besar su cuerpo, sus grandes tetas que tanto envidiaba comparadas con las suyas tan pequeñas, aquel  sexo rasurado que había lamido con tantas ganas, mmmm aquello había sido la mejor comida de su vida……

Estrella estaba encerrada en el baño de casa mientras pensaba en esto,  su mano frotaba con ganas el clítoris y con la otra metida en su blusa presionaba con fuerza sus pezones duros como piedras, sus tetas eran pequeñas nada que ver con las de Silvia, pero aquellos dos conos eran firmes y duros, en pleno desarrollo sus pezones puntiagudos sobresalían descaradamente, le dolían de lo duros que estaban, de los apretones que ella misma se daba con fuerza, mmmmm, deseaba tanto volver a estar con aquella chica, no se la quitaba de la cabeza…esta noche tenía la oportunidad de volver a repetirlo, se quedaría a dormir en casa de Silvia, invitada por Marta para que no se quedase sola en casa.

Inés, su madre, mientras tanto estaba en su cuarto cambiandose de ropa, ese día tenían la cena de fin de curso con los profesores y el personal del centro, al igual que la cena de navidad era tradicional hacer una cena antes del comienzo de las vacaciones de verano. No es que le ilusionase mucho ese tipo de cenas donde tan solo ella y Marta la profesora eran las únicas mujeres entre un grupo de mas de veinte hombres, pero no podía permitirse el lujo de quedar mal ni de poner en riesgo su puesto de trabajo y ahora que se había separado de su marido Rogelio con mayor razón.

La cena se celebraba en Barcelona, un restaurante céntrico, de lujo, apenas 40 minutos en coche, el director del colegio las recogería para llevarlas a Marta y a ella, la mayoría de los trabajadores del colegio vivían en la pequeña localidad costera cercana a Barcelona donde se encontraba el colegio, allí residían Inés y Marta.

Después de la cena estaba concertado la asistencia a una sala de fiestas en un complejo hotelero donde todos tenían reservada una habitación para evitar desplazarse de madrugada posiblemente con unas copitas de más. La verdad es que todo lo que organizaba el colegio lo organizaba a lo grande, la matrícula en aquel colegio privado era la mas alta de todos, cuanto mas caro mas elitista y eso hacía que entre sus alumnos se encontraban los hijos de las mejores familias de la comunidad.

No era la primera cena de ese estilo a la que acudía, todos los años se celebraban al menos dos, para navidad y verano, y en todos los años que llevaba trabajando allí estaba acostumbrada a ver a los rectos y estrictos profesores transformarse en garrulos de pueblo cuando el alcohol hacía su efecto y se comportan como si estuvieran en una boda. Habitualmente cuando esto comenzaba a pasar Marta y ella se despedían correctamente y se iban a su habitación ya que generalmente les reservaban una doble para las dos.

Inés se miraba en el espejo, a sus 35 años, había estada 14 años casada  con Rogelio, era una mujer que rondaba el 1.70, rubia de pelo corto, delgada, de grandes ojos azules, labios carnosos, nariz pequeña, guapa de cara, un pecho generoso que alcanzaba la talla 100 pero bastante caído para su edad y le hacía sentirse algo acomplejada, deseaba operarlo para subirlo y colocarlo de nuevo en su sitio pero de momento era algo inalcanzable para ella.

Cogió sus pechos con las dos manos, juntando las, levantándose, imaginando que eran las manos de un hombre quien se las acariciaba, hacía seis meses que se había separado de Rogelio en los que no había tenido sexo con nadie y comenzaba a echar mucho en falta un buen polvo, últimamente demasiado, por eso había comenzado a masturbarse con cierta frecuencia. Notaba como sus pezones se ponian duros ahora solamente de pensarlo, no eran unos pezones muy grandes pero si bastante sensibles, por contra sus aureolas eran grandes y muy marcadas, sonrosadas, destacaban mucho en sus tetas. Bajo la mirada y se fijó en su sexo desnudo, comenzaba a estar demasiado poblado de un vello rubio abundante, totalmente descuidado los últimos meses, pero donde se veían perfectamente unos labios grandes que marcan con claridad la entrada de su vagina, tan necesitada últimamente.

El descontento que sentía por sus pechos lo compensaba por la satisfacción que sentía por sus piernas largas, delgadas y aquel culo marcón, redondo, abultado, muy duro y muy bien puesto en su sitio, si señor. Su piel bronceada con un bonito color tostado que mantenía todo el año, en la playa solía llevar bañador de una pieza porque tenía la sensación que le sujetaba mas el pecho y lo disimulaba mas. Sin embargo ahora desnuda el contraste de la piel morena con la zona tapada por el bañador extremadamente blanca,  era muy exagerado.

Inés era bastante tímida, no le gustaba llamar la atención y solía vestir muy discreta. se colocó el conjunto blanco de lencería que tenía preparado, un sujetador de aros que le mantenía el pecho en su sitio a juego con una braguita tipo culotte que se adapta muy bien a su cuerpo, no le gustaba que la lencería se marcase en su vestido pero ahora en verano con los tejidos vaporosos era algo muy difícil de conseguir.

El director les había regalado un vestido para la cena, eso si era novedad, nunca hasta ahora lo había hecho pero los últimos meses desde que se separó había notado un aumento de las atenciones e insinuaciones hacia ella, no se sentía cómoda porque era un hombre bastante mayor que su ex, supera la cincuentena y no le atraía lo mas mínimo pero sabía perfectamente que su trabajo dependía de él así que intentaba siempre ponerle una buena sonrisa, disimular y darle largas.

Cuando le entregó el vestido estuvo a punto de rechazar el regalo, pero un “me haría mucha ilusión que te lo pongas para la cena” hizo que se callara y le diera las gracias con un “estaré encantada”. Cogió el vestido que estaba sobre la cama y se lo puso, era un vestido color salmón, muy veraniego, de tejido vaporoso, ajustado, de tirantes, abotonado por delante, escote tipo barco, demasiado generoso para su gusto que le hacia lucir el canalillo de sus pechos aun teniendo abotonados todos los botones, estaba mirándose cuando sin tocarlo se abrió el primer botón, el que cerraba el escote,  la presión de su abundante pecho hizo que el vestido se abriera y dejaba a la vista gran parte del sujetador, volvió a cerrarlo y comprobó que el ojal de ese botón era un poquito mas grande por eso se abría con facilidad “esperemos que aguante, no tengo tiempo de coserlo ahora”, se dijo..

La falda del vestido era corta, con bastante vuelo, no era exagerada pero si bastante mas corta que la ropa que ella solía ponerse.  La verdad es que estaba muy sexy, el vestido se ceñía al cuerpo como un guante, resaltaba mucho sus curvas, tanto el pecho como el culo que se lo marcaba sobremanera, quizás demasiado para una cena donde con Marta serían las únicas mujeres pero una vez aceptado el vestido se veía en la obligación de ponérselo. Se enfundó unos zapatos blancos abiertos de tacón y se dispuso a maquillarse….

-Estrella necesito usar el baño, ¿que haces tanto rato?, vamos ábreme la puerta.. Espero que estés arreglada, ha sido muy amable Marta dejando que te quedes en su casa con su hija, no quiero que llegues tarde-

-Ya voy, ya voy….- se escuchó decir a Estrella que no había podido terminar a gusto su dedo y esperaba con ganas que su madre se fuese para seguir con sus fantasías, necesitaba llegar al orgasmo antes de salir de casa, estaba muy nerviosa por volver a ver a Silvia, un relajo previo era imprescindible. Malhumorada por la interrupción Estrella salió del baño, aún no estaba vestida para marcharse, seguía llevando un bikini fosforito muy llamativo en el que se notaba una gran mancha de humedad en su entrepierna, su coño estaba empapado pero su madre no se dió cuenta de ese detalle…-tranquila mama me visto enseguida, ya tengo la mochila preparada- le dijo a su madre que ya estaba dispuesta a regañarla “que ganas tengo de ser mayor y tener mi propia vida, ni siquiera pueda una tocarse a gusto brrr”, pensaba Estrella mientras iba a su cuarto.

Mientras se maquillaba Inés pensaba que le vendría bien salir un poco, apenas quedaba con nadie, del trabajo a casa y vuelta a empezar, la presión de la separación había sido fuerte, seguía teniendo ansiedad y su médico le había recetado ansiolíticos y relajantes. Instintivamente abrió su pastillero y se tome sus medicinas como hacía todas las noches, después de tragarlas se dio cuenta..”no tenía que haberlas tomado, dicen que con el alcohol se potencian los efectos pero bueno ya está, no tiene solución, intentaré beber lo imprescindible para quedar bien y prontito como siempre nos iremos con Marta a la habitación”, se dijo para sí.

Un ratito después recibió la llamada en su móvil para que bajase a la puerta, el director con Marta la esperaban el coche, la última mirada en el espejo, un beso de despedida a  su hija y salió de casa.

En el coche la esperaban el director, un señor serio cincuentón con traje oscuro y corbata a pesar del calor que hacía y sentada junto a él Marta que llevaba un vestido muy parecido al suyo pero este color celeste.

Marta era tan discreta como ella vistiendo por eso se sorprendió al verla y se imaginó que el director les habría regalado vestido a las dos, el pecho de Marta que todavía era mas grande que el suyo sobresalía mas generosamente en el escote, “definitivamente nos lo ha regalado a las dos, Marta nunca va tan provocativa”, pensó pero no dijo nada, durante el trayecto también pudo comprobar como el botón del escote de Marta se abría un par de veces, provocando el sobresalto de su compañera que se apresuró a cerrarlo de nuevo  -me pasa lo mismo Marta, el ojal del primer botón es un poco mas grande y por eso se suelta el botón, pediremos aguja e hilo cuando lleguemos al restaurante y le daremos unas puntadas…son bastante ceñidos estos vestidos y no aguantan la presión-

-Tranquilas chicas, estáis preciosas las dos, os sientan fantásticos los vestidos, gracias por aceptarlos...veréis qué cara ponen todos cuando os vean tan guapas- dijo el Director entre risitas confirmando las sospechas de Inés.  El comentario no pareció hacerle mucha gracia a ninguna de las dos mujeres que con un simple gracias y una falsa sonrisa salieron del paso pero no podían evitar comprobar cada poco tiempo que el botón del estuviese cerrado, bastante generoso era ya de por sí el escote para quedarse en sostén al mínimo movimiento.

-Este curso han ido muy bien las cosas y hemos decidido ser mas generosos de lo normal, por eso los vestidos y algunos detalles más que iréis viendo en la velada, espero que lo paseis muy bien…- dijo el Director.

ESTRELLA Y SILVIA

Después de marcharse su madre Estrella se queda sola en casa,  “por fin”, piensa…. coge su móvil y envía un whatsapp a Silvia -mi madre ya se ha ido con la tuya-.  Estrella se estira en la cama, se quita el bikini fosforito y se queda completamente desnuda, piensa en la respuesta de Silvia, en la noche que le espera en su casa, con ella, mmmm, que ganas de besarla, de acariciarla, ojala le deje volver a lamer su cuerpo como la  última vez, quizás con suerte ella vuelva a lamerle el sexo, “Dios que orgasmo me regaló”, jamás había sentido así por nadie, con su padre o con Paco el padre de Silvia es solo sexo, simplemente se deja llevar, pero lo otro mmm la hace temblar de placer, de deseo tan solo de imaginarlo…..Los segundos se hacen eternos esperando,, “¿porque no responde? ¿estará con alguien? maldito whatsapp…” piensa…

Por fin aquel maravilloso pitido que está esperando impaciente suena….- Lassie ¿tienes ganas de verme?-

-¿Lassie? ¿porque me llamas así?... si, tengo ganas de verte, claro que sí..- responde Estrella, preguntándose el motivo, no entiende la broma, ¿que significa?, ansiosa espera la respuesta… pero Silvia parece que no tiene prisa en responder… Estrella se impacienta ..¿estará respondiendo a otra y se ha equivocado?, ese pensamiento la atormenta… su madre le ha dicho muchas veces que el primer amor suele ser el mas intenso, el que mas se recuerda...quizás le este pasando eso… se siente encoñada con Silvia, siempre le había gustado pero le parecía una chica inaccesible, …. hasta lo ocurrido el último día en su casa…

De nuevo aquel pitido del móvil la hace mirar impaciente el mensaje…..

-Lassie es un nombre de perra que me gusta… ¿tu eres mi perrita no?-

Sin pensarlo responde Estrella, , -si claro, me gusta ese nombre puedes llamarme como quieras.. ¿puedes hablar?, es mas rápido...-

Silvia, observadora, madura para su edad, gran manipuladora de la gente se dió cuenta desde el primer momento que estuvo en la cama de su padre con Estrella que la chavala estaba colada por ella, en su cabeza solo tenía un pensamiento, cómo sacar partido de aquella situación, “un juguete nuevo, podría ser divertido y muy práctico tener una perrita obediente que haga muchas cosas por ella”.

El móvil de Estrella sonó, esta vez era llamada de voz..-¿Estas cachonda Lassie?, te corriste como una perra en mi boca el otro dia, ¿quieres repetir? ¿lo estas deseando?.. dime la verdad, no me gusta perder el tiempo-

-si, si, si, ¿cuantas veces quieres que te lo repita?-

-Todas las que yo te lo pregunte. Ni una mas ni una menos. Yo pregunto tu respondes, Yo mando tu obedeces. Si quieres estar conmigo esto funciona así.-

-Esta bien, esta bien, lo entiendo. - A Estrella de naturaleza dócil, sumisa, no le era extraño ese tipo de actitud, ni mucho menos, su padre se había encargado de educarla muy bien en ese sentido desde muy pequeña, era algo a lo que se sentía acostumbrada, en cierto modo era como prefería  que fuera, obedecer siempre le había resultado mas fácil, simplemente hacer lo que se le pedía, no preguntar, no pensar, …. hacer era mas fácil.

-Bien, así me gusta. Si quieres estar conmigo quiero poder estar orgullosa de ti, para mi mis amigos son muy importantes. Si quieres gustarme a mí tendrás que gustarles a ellos.- dijo Silvia

Estrella se preocupó un poco al escuchar aquellas palabras, era no era una chica explosiva como Silvia, ni tan desarrollada, no tenía aquellas tetas grandes que tanto envidiable, al contrario, solía pasar desapercibida, sabía perfectamente que ella no sería el tipo de chica que les gustaría a los amigos de Silvia…-Yo no soy como tu, ya me gustaría ser tan guapa, yo no les gusto a los chicos …- dijo Estrella mostrando sus complejos

-Yo no he dicho que seas guapa Lassie, he dicho que tienes que gustarles, eso es muy distinto. A los hombres les gustan las perritas obedientes, no hace falta que sean muy guapas, hace falta que sean “perras” y “obedientes”, ¿tu lo eres, no?, mi padre dice que si, tu padre dice que si, ¿lo eres Lassie? ¿eres mi perra?- preguntó Silvia.

-Si, lo soy, soy tu perra- respondió Estrella convencida.

-¿Tu padre te compro un bikini color carne como a mí?, de esos que se trasparentan mucho cuando se mojan, si me lo regaló a mí imagino que a ti también -

-Si, tengo uno guardado, mi madre no sabe que lo tengo-

-Bien, estoy cerca de tu casa, voy con un par de amigos, quiero saber si les gustas,... ya sabes si les gustas a ellos me gustas a mi… ponte ese bikini, metete en la ducha y mójate bien, te quiero empapada, no te seques….quiero que abras así la puerta, llegó en seguida, date prisa, no me hagas esperar…- dicho esto Silvia corto

Estrella dió un salto en la cama, buscó en su armario y encontró el bikini que le pedía Silvia, se lo puso y fué corriendo a la ducha.. se ducho por completo sin mojar la cabeza, su pelo pelirrojo muy rizado si lo mojaba le hacía parecer un pollo hasta que lo secaba y no tenía tiempo para eso…..sin tocar la toalla salió empapada de la ducha, el timbre de la puerta sonó y fue corriendo a abrir la puerta… sin mirarse, sin ver si le transparentaba o no el bikini, eso no era importante, lo importante era hacer lo que Silvia le había pedido..

Iba por el pasillo dando zancadas que dejaban marcas de agua en el suelo que ella ni se daba cuenta de dejarlas, llegó a la puerta y abrió...allí estaba Silvia, con la larga melena morena a la cintura, una minifalda vaquera muy corta, su camiseta blanca ceñida al cuerpo que se resaltaba aquel par de tetas que tanto envidiaba, su sandalias de plataforma que la hacían mas alta aún, con ellas le sacaba mas de un palmo de altura… ni se fijó en los dos chicos que iban tras ella, eran dos chicos del curso de Silvia, …..

-Hola Lassie, veo que te ha dado tiempo- dijo Silvia al tiempo que se inclinaba hacia Estrella para darle un morreo, le comió los labios con ganas, abriendo bien la boca, metiendo la lengua hasta dentro de la boca de Estrella y esta le devolvió el beso con ganas, con muchas ganas……

Estrella estaba encantada de que lo hiciera, sin complejos, sin rodeos, directa al grano...esa decisión de Silvia para todo la volvía loca…

-¿Tiene cervezas tu madre?-

-Sí- respondió Estrella

-Bien, sacanos tres- dijo Silvia que sin preguntar nada se dirigió directa al salón para sentarse en el centro del sofá, un sofá de tres plazas espacioso  que había en el centro del salón, los dos chicos se sentaron uno a cada lado de Silvia pero antes se bajaron las bermudas que llevaban los dos y los calzoncillos, tan solo se dejaron las camisetas, Silvia ya había comenzado a pajearse cuando Estrella volvió con tres cervezas.

Estrella dejo las tres cervezas sobre la mesita baja que había delante del sofá, era una mesita de madera, rectangular, de un medio metro de altura y se les quedo mirando…

Silvia pajeaba a los dos chicos a la vez, sentada en el borde del sofá, sus dos manos se movían rítmicamente, los chicos se dejaban hacer sin decir nada…..aquellas dos vergas jóvenes se pudieron muy duras al momento….

-Estos dos chicos son amigos míos, van a mi curso… me gusta ponerselas duras, les hago pajas y mamadas muy a menudo…¿te molesta que lo haga?- preguntó Silvia

-No, claro que no, puedes hacer lo que quieras…-

-Así es, quiero saber si les gustas…. si les gustas a ellos me gustas a mi. Chicos esta perrita pecosa se llama Lassie, parece una mosquita muerta pero os aseguro que está acostumbrada a dejar contentos a tios muy mayores, la chupa muy bien y se deja joder el coño y el culo sin problemas, ¿verdad que si Lassie?-

-Sí- dijo por toda respuesta Estrella,

El bikini de fina lycra se le pegaba al cuerpo como un guante, seguía empapado, se le transparentaba por completo, las pequeñas tetas conicas muy firmes en las que resaltaban dos areolas muy marcadas igual que sus pezones se veían con claridad, su sexo sin vello se veía perfectamente delimitando una rajita no muy grande que se marcaba descarada en el tanga, el culo marcon y ser un poco ancha de caderas la hacía parecer un poco rellenita pero no estaba gorda, su piel pecosa estaba bronceada, nariz y labios pequeños, ojos azules, era guapa de cara, se notaba que estaba en desarrollo, los dos años de diferencia con Silvia se notaban mucho…..

-Lassie ponte de pie delante de la mesa, date un par de vueltas, quiero que te vean bien y luego siéntate en la mesa separando bien las piernas …-

Estrella se quedó quieta en esa postura dejando que la vieran bien, con las manos apoyadas en las rodillas mantenía muy separadas las piernas, los labios de su joven coñito se marcaban en la fina lycra con descaro igual que sus pezones

-¿Qué os parece chicos? pregunto Silva que les daba fuertes tirones a aquellas dos vergas que estaban realmente duras….

-Tiene pocas tetas, pero no esta mal, tiene un buen culo, si es verdad que la sabe chupar y se se le puede joder el coño y el culo a mi me vale- dijo uno

-A mi tambien, dile que se quite el bikini y se ponga a cuatro patas sobre la mesa …-pidió el otro

-Ya lo has oído, quitate el bikini, ponte a cuatra patas con el culo hacia nosotros, apoya la cabeza en la mesa y ábrete bien el ojete con las dos manos. Parece que tienes suerte, de momento les gustas- ordenó Silvia

Estrella obedeció sin problemas, sin reparos, estaba muy acostumbrada a obedecer, a escuchar órdenes parecidas,...sabía que en ese sentido Silvia estaría contenta con ella. Sin decirselo separó bien las piernas, para que pudieran ver bien su sexo abierto, tenía muy poco vello, no se lo había rasurado nunca, no le hacía falta de momento, sus manos tiraron de las dos poderosas nalgas al mismo tiempo, abriendo bien el ojete, lo tenía bastante dilatado acostumbrada a recibir penetraciones por detrás desde hacía bastante tiempo. La marca del bikini era bastante pronunciada, resaltaba el culo blanquito con su piel pecosa bronceada lo mismo que ocurría con los dos triángulos blancos de sus tetas…

Los dos chicos se pusieron mas cachondos al ver aquel culazo bien abierto para ellos, Silvia lo noto y aceleró el movimiento de sus manos, les estaba haciendo dos buenas pajas, si señor..

-¿Tiene un buen culo ehh chicos? preguntó maliciosa Silvia

-ufff sii muy bueno, me ponen mucho las marcas del bikini, - dio uno

-Lassie, si vienes conmigo a la playa enseñaras las tetas, me gusta que te las vean, y depende de donde estemos y con quien tambien quiero que enseñes el culo y el coño ¿lo harás? ¿vas a ser mi perra Lassie? ¿una buena perra?-

-Si, hare lo que quieras..- respondió Estrella

-mmm bien, así me gusta, te estas portando bien, voy a darte un premio, ven aqui, comeme el coño, me apetece que me lo comas bien…- ordenó Silvia

Estrella se levantó de la mesa y se arrodillo delante de Silvia que dejo de pajear a los dos chicos para que siguieran ellos por su cuenta…. Silvia se puso de pie, metió las manos bajo la minifalda vaquera y se quitó el pequeño tanga, volvió a sentarse  apoyando el culo en el borde del sofá y separó bien las piernas mostrando bien aquel coño rasurado, de labios marcados y sonrosados …

-Ven Lassie, LAME,  … disfruta tu premio.. y levanta bien el culo, te van a montar mientras me comes el coño, quiero ver como lo hacen..-

Estrella metió la cabeza entre las piernas de Silvia, comenzó a lamer la parte interior de los muslos para ir subiendo poco a poco hasta llegar a aquel coño que deseaba tanto, quería que Silvia se corriera de gusto.. quería demostrarle que sabía darle placer, mucho placer…..

Uno de los chicos se levantó del sofá con la verga completamente tiesa mirando al frente, era un chaval delgado, fibroso, alto, mas alto que Silvia, moreno, se le marcaba muy bien la tableta de abdominales, cogio las botellas de cerveza y se las pasó a Silvia y su colega con la suya echo un chorro sobre las nalgas de Estrella que lamia ansiosa el coño de Silvia..

-Lo estas haciendo muy bien perrita, muy bien, ahora quiero que se la chupes a mi amigo,  demuestrale lo bien que sabes comerte una polla, vamos…- Silvia se refería al chico que seguía sentado junto a ella y Estrella gateo un par de pasos para ponerse entre las piernas del chico, tenía un buen cipote, hermoso, grande, muy desarrollado para su edad, lo cogió con una mano y lo acercó a su boca, comenzó a lamer el glande y luego a lamerlo de arriba abajo por fuera hasta llegar a sus huevos que se los metió en la boca como si fuesen dos peladillas gordas, el chico se retorcia de gusto, nunca le habían comido los huevos así…..

El que estaba de pie se agacho  y comenzo a sobar el cuerpo de Estrella, desde la cabeza, bajando por su cuerpo, las tetas, la espalda, las nalgas, la entrepierna, se entretuvo un buen rato manoseando el coñito y el culo con las dos manos… Estrella estaba empapada, tenía el coño chorreando después de haber lamido el de Silvia, el chico de atrás acercó su verga a la entrada de aquella vagina que chorreaba flujo y se la calzo de un solo golpe, comenzando a follarla con fuerza…..embestidas fuertes, secas,  movimientos rápidos, mientras su mano derecha presionaba un par de dedos sobre el ano de Estrella, luego los llevó a su boca y los lamió para volver a presionar sobre el ojete de la chica, los dos dedos se deslizaron sin problemas…..viendo lo fácil que entraban saco la polla del coño y apuntó hacia arriba, sin problemas presiono en la entrada del ano y comenzó a encularla, un par de embestidas y la tenía toda dentro….

-mmm vaya culito mas rico…. que bien entra…- decía mientras Estrella seguía mamando la polla del amigo, ahora se la había metido toda en la boca y chupaba con ganas metiéndosela hasta el fondo de su boca

-joder pues no veas como la chupa, esta cría la chupa como ninguna… buff me tiene a cien-

Silvia hecho una fuerte carcajada viendo lo bien que se lo estaban pasando sus dos amigos -¿os gusta ehhh?, ya os dije que aprendió muy pronto y a practicado mucho, vais a ver las buenas notas que saco este año gracias a esta perrita…-

El que la estaba enculando comenzó a darle fuertes cachetes en el culo después de cada embestida -joder que si me gusta… ufff vaya culo… jamas lo habria pensado de esta mosquita muerta, mmmm que rico, me voy a correr putita me voy a correr en tu culo ahhhh mmm ahhhh-

Viendo a su amigo a punto de correrse el que se la estaban chupando no pudo contenerse mas -buff siii siii yo tampoco aguanto mas-, los dos chicos se corrieron casi al mismo tiempo, dos corridas generosas, abundantes, una le lleno de leche la boca mientras la otra inundaba su culo….

-Tragate la leche Lassie, tragatela toda perrita- ordenó Silvia, y así lo hizo Estrella, los dos chicos se levantaron dejándola arrodillada entre las piernas de Silvia

-Ha estado muy bien Silvia, tu perrita nos ha gustado mucho, lastima que se hayan terminado las clases para ver cómo la chupa en los baños, pero me parece que algun dia vendremos a estudiar aquí con ella…. ya sabemos que eres hija de la secretaria… tu madre esta bien buena también… me ponen las maduritas tetonas como tu madre-

El otro confirmó lo que decía su amigo -si ami tambien me pone mucho tu madre, tiene un buen culo tambien, me he hecho mas de una paja pensando en ella buff-

-Jajajaja tranquilos chicos, mi perrita seguro que consigue este verano fotos en pelotas de su mami para que os os hagáis las pajas a gusto ¿Verdad Lassie?- preguntó Silvia

-No lo se, a mi madre no le gustan mucho las fotos y menos desnuda, no suelo verla así…-dijo Estrella

-Tranquila perrita, tranquila, yo te dire como lo tienes que hacer a mi también me apetece ver fotos de tu madre en pelotas mientras me comes el coño, parece tan santurrona como parecía mi madre y ya ves .. la mia a salido puta, puta- decía Silvia

-Acuérdate que este próximo curso nos dará clases tu madre, tienes que conseguir lo que prometiste Silvia…- dijo uno de los chicos

-Si, eso que tu madre si que tiene un par de tetas de campeonato- recalcó el otro

-jajaja tranquilos chicos, ya os dije que ahora no habrá problemas con mi madre, se ha vuelto un putón de cuidado- río Silvia

-buff eso si me pone, follarnos a la profe es lo más… espero que cumplas Silvi, bueno nos vamos ya hablamos, ¿vale?-

-Ok chicos, hablamos….- dijo Silvia con indiferencia viendo como se marchaban de casa

-Te has portado muy bien Lassie, estoy muy satisfecha de ti, esta noche dormiremos juntas, verás que bien lo pasamos…-

-¿No está tu padre?

-Creo que sí, pero no te preocupes, entre las dos nos lo ventilamos muy rápido, ¿sabes?, tu me lo comes mucho mejor que él, los hombres creo que piensan mas en ellos son unos egoístas, tengo que enseñarte a llevar tú la iniciativa con él, verás que pronto se corre y te lo quitas de encima… tienes aún mucho que aprender perrita- dijo cariñosa Silvia que le acariciaba la cabeza  mientras Estrella seguía sentada en el suelo, entre sus piernas, abrazando a ellas…

-Quiero me enseñes Silvia, quiero que me enseñes… nunca he conocido nadie como tu..-

Silvia se estaba encariñando de Estrella, no le gustaba manifestar debilidad por nadie, siempre había sido fría, egoísta, pero estaba comenzando a sentir cosas por aquella chica que nunca había sentido antes, se inclinó y volvió a besarla en la boca como cuando entró en la casa, un beso largo, muy largo, no solo de deseo, las dos compartían mucho mas, una historia parecida en sus familias las había llevado a encontrarse y no querían perder ese tren..

CONTINUARÁ

Queridos lectores sé que complicó en exceso los relatos añadiendo más y más personajes, hacer que aparezcan y desaparezcan igual que ocurre en mi vida, unos entran y otros se van. La vida da muchas vueltas, nunca sabes cuando vuelves a encontrar a muchas personas que en un momento dado han entrado en tu vida.

Al final las fantasías de todos siempre suelen moverse dentro del círculo de personas que conocemos en la vida real no dejo de imaginar si una persona fantasea o no con otra, ¿como sería esa relación?, ¿Qué pensarán? ¿Que deseos ocultos tendrán?.

El pudor, la vergüenza, el qué dirán hace que no seamos capaces de expresar esos oscuros pensamientos que tenemos con la vecina, el familiar, el compañero de trabajo, el profesor, el novio de la amiga, ... la mayoría de las veces se traducen en maravillosos orgamos en soledad cuando nos masturbamos, dicen que los hombres  se masturban mas que las mujeres, personalmente no estoy de acuerdo, no me gusta generalizar en nada y menos en el sexo.

Descubrí que me gusta escribir cuando después de hacerme un dedo en el baño puse letras a lo que había imaginado, y me gusto hacerlo, me gusto mucho, desde entonces intento hacerlo cuando tengo tiempo. Convertir esos pensamientos sueltos que te vienen a la cabeza cuando te tocas en un relato completo me parece emocionante, excitante, es como darle vida a algo que solo tienes tu en la cabeza y deseas compartir, hacer partícipes a los demás de esa aventura que imaginas.

Solo escribo si me excitó imaginarlo, si me corrí deseando que sucediese. Cuando imagino algo junto experiencias vividas con deseos y fantasías, ni todo es real, ni todo es mentira, la vida es mucho mas compleja,

Se que lo que escribo asusta a algunos, espanta a unos pocos, atrae a otros muchos, se queda corto para una parte, se que no puedo complacer a todos, a fin de cuentas son mis deseos, mis experiencias y mis fantasías, las mías, pero me gusta compartirlas y me gusta mucho conocer vuestra opinión sobre ellas, tanto si os gustan como si no.  Porque lo que sí me gusta, me gusta de verdad, es intentar aprender de todos vosotros.

Gracias por leerme

Un beso fuerte

Mariaruizred