Domingo de Ramos... volviendo al comienzo II

Domingo de Ramos... volviendo al comienzo II

Esta confesión es la continuación de mi anterior confesión “Semana con sabor a nostalgia I”, donde gracias a la invitación de mi hermano vuelvo a la cuna de donde nací y de la verdadera persona que me hizo quien soy. Otra año más y nuevamente semana santa con ese olor tan peculiar que tiene Sevilla a azahar y sobre todo a incienso. Según dicen mis amigas… lo que me ocurre entre mi novio y yo es solo un roce emocional, solo es miedo a perder nuestra libertad… a perder ese cachito que tenemos de vida donde es solo nuestra y de nadie más.

Dicen que es algo normal que ocurre los meses previos a la boda... que debería de estar acostumbrada, pues ya me ocurrió en su momento y precisamente fui yo quien retraso la boda, pero que os quiere que os diga si en aquella ocasión fui tan inocente como lo soy ahora… y en esta ocasión ha sido el… y no es lo mismo.

Bueno os debo de ser sincera... mi presencia realmente en casa de mis padres, se debió a mi hermano que desde que teóricamente ha sentado la cabeza está irreconocible, como ya sabéis fue mi hermano quien me llamo días previos al inicio de la semana santa… o sea al viernes dolores, pidiéndome el favor de volver a ser una familia… deseaba que enterraremos el hacha de guerra al menos hasta que se casara, pidiéndome el favor de pasar la semana santa en casa de mis padre y con ellos... como antaño.

Inicialmente me iba a negar pero después pensé y porque no, mas aun cuando mi novio me hizo saber que él se marchaba a la playa, ya que este año no deseaba salir en semana santa ni en su hermandad ni detrás de otra… no deseaba hacer penitencia pues ya con la que tiene… tenía suficiente, dejando caer que no había ningún motivo que le retuviera en Sevilla y claro esta eso suena mal.

Obviamente también es verdad que lo sucedido durante las semanas previas a acelerado nuestro enfriamiento y por dicho distanciamiento, difícil es olvidar los modos en que me trato... nunca se había comportado como ese día (coño, no os negare que me gusto al final que me cogiera de la manera que lo hizo, pero… bueno mejor me callo).

El sábado cuando desperté y me levante a desayunar… ni me cambie, baje con mi pijama… recordáis no… uno de esos de dos prendas, mi madre me hizo saber que era la única que aun quedaba durmiendo pues mis padres hacia horas que se levantaron y mi hermano aun no había regresado. Cuando baje a desayunar mi madre me informo que debía de salir un momento a la iglesia y que si veía a mi padre que se lo hiciera saber, aun recuerdo al cabrón de mi padre cuando desayunando el se sentó a acompañarme al tiempo que me hizo saber lo sucedido la noche anterior.

• “Sabía que las pastillas que tomo para dormir entre sus efectos secundarios esta la somnolencia y erecciones involuntarias, pero este medicamento se caracteriza por la dificultar que tarda en entrar en ese sueño profundo, por lo que gran parte de lo ocurrido anoche lo recuerdo”, me dijo.

Casi se me atraganta la tostada… no quise ni levantar la mirada del café… ahora sí que estaba avergonzada, incluso abochornada por una parte y por otra utilizada… pero me hizo saber que para nada se molesto (joder, claro como que encima se enojara… si salió hasta beneficiado). Me levante cogí mi taza del café y el palto de la tostada y me dirigí hacia el fregadero al tiempo que mi padre también se levantaba, me recordaba la conversación que tuvimos sobre mi relación y mi novio… haciéndome saber que si tuviera algún problema que pensara que ahí tiene una familia donde apoyarse. Palabras bonitas que estropeo al posar su mano en mi cintura… no porque la pusiera en la cintura, sino que descendió hasta mis nalgas… mmm.

• “Padre… no, padre… no”, le decía.

• “No pasa nada Susana… solo es el amor entre un padre y una hija, tu siempre igual ve pecado donde no lo hay… te pareces a tu madre… joder”, me soltó.

Acabe por dejarlo… mas al pensar que quizás tuviera razón y solo eran imaginaciones mías, pero cuando se me acerca y me dio un beso en la mejilla… piensas en un principio… ya comenzamos, pero la verdad un beso en la mejilla no es malo… solo es un signo de amistad, un saludo, una manera de felicitar o simplemente muestra de respeto. No es nada irrespetuoso y menos aun significa algo sexual… no sé, quizás mi padre tuviera razón y me dejaba llevar por miedos pasados, pero tras ese primer beso en la mejilla se le sumo dos y luego tres… mmm, alejándose de mi derecha y colocándose detrás al tiempo que me rodeaba con sus brazos y posaba su barbilla en mi nuca.

Comencé a fregar lo poco que había en el fregadero… llevándome la sorpresa al sentir los labios de mi padre en mi nuca y este comenzar de forma sutil a darme besos, dejándole hacer. Sus labios descendieron hasta mi oreja… recorriéndola al tiempo que la besaba… mmm e ir bajando por mi cuello muy lentamente besándomelo suavemente… mmm, para volver a ascender hacia mi oreja y mordisquear sutilmente mi lóbulo y volver a descender… ooohhh.

Pero en esta ocasión hacia mis hombros… apartando un poco la tela de mi pijama hacia un lado a modo de besarme muy suavemente la zona de la clavícula… uuummm (jode, sentí como escalofríos al tiempo que notaba como comenzaba a excitarme). Creo que hubiera sido el momento de haberlo alertado que se estaba pasando… ya sabéis debía de haberlo apartado, pero no sé porque lo deje hacer… tampoco era malo pues eran solo y simplemente besos.

Sus brazos dejaron de abrazarme para posarse sobre mis caderas descendían hasta mis muslos para volver a ascender… mmm, sentí su corpulento cuerpo pegado al mío y en vez de separarme deje caer mi cabeza hacia atrás al tiempo que su labios besaban mi cuello… ooohhh. No dije palabra alguna y tan solo el mentaba algo que me parecieron como una canción de cuna, tarareaba algo o decía algo… pero muy bajito… casi en susurros mientras sentía lo necesitada que estaba de mi polvo mañanero… ooohhh. Pero la nota la puse yo y ojo… sin darme cuenta, pues llevada por la excitación retrocedí hasta que mis nalgas presionaban su ingle… mmm, note su duro miembro introducirse entre mis glúteos a pesar de mis prendas de pijama.

Fue él quien quiso separarse… quizás jugo sus cartas de iniciarme o provocarme pero no de ser quien descaradamente me buscaba, mientras me incline hacia delante a modo de recostarme sobre el fregadero, eche mis nalgas hacia atrás… como el polo positivo de un imán que busca el polo negativo. Teniendo por fin mi premio y sentir primero las manos expertas de mi padre en mis caderas al tiempo que su miembro se pegaba contra mis nalgas… aaahhh, fue él quien comenzó a restregar su duro miembro por mis nalgas… quien callado en esta ocasión comenzó a besar mi cuello, oreja y hombro al tiempo que yo me apoyaba sobre el granito del fregadero… mmm.

Su rostro áspero me ponía los pelos de punta… me hacia estremecer, no pensé que era mi padre… se me fue la cabeza y solo veía el rostro de mi novio o quizás solo quería ver que fuera el… ooohhh, cuando mi boca busco su boca y comenzamos a besarnos… era pasión y desenfreno, pues comencé a morderle el labio inferior con suavidad… mmm, lamiéndoselo con delicadeza y succionándolo al tiempo que con la punta de mi lengua lo recorría. Deseaba sus manos en mis senos y tuve que ser yo quien las tomara y me la tomara… primero me las cogió sin firmeza, como si no deseara mis senos pero tras comenzar poco a poco y muy lentamente fue acomodando su mano a mis senos… mmm, eso sí… ambas al mismo tiempo mientras su duro miembro continuaba restregándose a placer contra mis glúteos y ser nuevamente yo quien separara las piernas, sentido más que evidente que deseaba ser penetrada… ooohhh.

• “Coño… eres un hombre o que, coge las riendas como lo hacías antes o quizás esas pastillas te han dejado un eunuco de día”, le solté.

Obviamente estaba fuera de mi… e incluso ni yo misma me conocía, no comprendo mi reacción y menos mi comportamiento, lógicamente necesitaba una buena follada… pero siempre alejaba a mi padre porque era algo anti natural y aberrante… y precisamente ese día estaba que me salía. Quizás lo inicio el con esos besos… que me encendieron, esos besos que me pusieron como una moto… esos besos que deseaba que mi novio fuera quien me los hubiera dado y que me tomara por la fuerza.

Porque encima fui yo misma quien se lo hice saber yo a esta persona, le suplique que lo hiciera… le implore que me tomara allí mismo y hacer posible por la fuerza, casi me falto rogárselo de rodillas aunque mirándolo ahora hubiera sido buena idea pues de paso se la hubiera chupado… mmm.

Mi padre continuaba en silencio y su primera reacción fue abrirme la camisa de pijama de un tirón… haciendo saltar los botones de este, continuando por tomar mis pechos con fuerza y brutalmente… ooohhh, pellizcándomelo hasta que solté entre gemidos algún que otro grito… continuando con mis pezones, haciéndome girar un poco… lo suficiente para que su rostro una vez que se inclino llegue hasta ellos y su boca lama mis pechos… aaahhh. Aprovechando que se inclino para bajar mis prendas inferiores hasta dejarla caer a mis pies y al incorporarse, hacerme sentir su caliente y desnudo miembro sobre mis nalgas… ooohhh.

• “Lo deseas… suplícame que lo quieres, ruega porque te folle zorra”, me dice entre obscenidades.

• “Fóllame… hazme tuya, quiero que me folles ya cabron”, le suplique.

No me hizo falta que me lubricara pues estaba empapada y deseosa de una buena follada, lógicamente hubiera encontrado cualquier semental de los que conozco o amigos que me hubieran dejado más que satisfecha, pero era el momento de ser cogida… no podía ser otro… quizás si hubiera pensado lógicamente con la cabeza en vez de con otra cosa, me hubiera entregado a cualquier hombre y no tendría problema de conciencia pero la verdad es que nunca lo he tenido y bastantes años tengo para comenzar ahora a tenerlos.

Continúo, hecho mi padre el cuerpo sobre el mío mientras que su glande recorría mi ingle hasta toparse con mi orificio vaginal… mmm, presiono su cuerpo contra el mío y su glande comenzó a introducirse dentro… ooohhh, comenzando a embestirme brutalmente y ambos gemíamos.

• “Te gusta puta… te gusta”, me soltó.

• “Ooohhh… sigue… sigue… no pares cabron”, le dije

• “Tu novio no te folla tan bien como yo… verdad, como te gusta que tu viejo te de placer”, me dijo.

• “Como tú no hay nadie… tú fuiste el primero que me hizo mujer… ooohhh”, le conteste.

“Quiero dejarte embarazada y que el cabron de tu novio se coma el regalito, quiero follarte todos los días y que dejes de follar con extraños”, volvió a soltarme.

Tras venir me el primero… continuo hasta que en pocos minutos tuve el segundo y así se lo hice saber, sacándomela e hincar su rodilla en el suelo… comenzando por comerme el culo… ooohhh, no recuerdo cuando fue la última vez que lo hizo… pero que gusto. Tras incorporarse tomo su miembro con la mano y me la introdujo dentro de mi orificio vaginal… uuummm, hasta que entre espasmo me anuncio que se venía y con su mano en mi cuello me hizo arrodillarme, no hizo falta decirme para que… pues lo entendí y tras coger su miembro lubricado por mis fluidos me lo introduje en la boca hasta que en escasos minutos descargo… ooohhh. Chupe y chupe hasta succionarlo y trague toda su leche, sacándomelo limpio y duro para que me volviera a follar pero en esta ocasión en mi culito.

Tomándome de los pelos me hizo echarme sobre la mesa y mientras con una de sus manos oprime mi espalda para que no pudiera levantarme con la otra… conduce su miembro hacia mi orificio anal… mmm, siento su glande apretar cada vez con más fuerza hasta tener al menos la mitad… ooohhh. Os debo confesar que le suplique que fuera despacio pues me doliera… mmm, colocando ambas manos en mi cintura y con un golpe de pelvis me mete algo más que la mitad… dando yo un sonoro grito… aaahhh. Comenzando mi padre a incrementar las embestidas… a aumentar la penetración, cada una de sus embestidas me duele aun más que la anterior… suplico una vez más que fuera despacio, pero como si las hojas volaran junto a él… mmm. Mi padre solo gemía y suspiraba en cada una de sus embestidas, no durando mucho más de cinco minutos para suerte la mía… mmm, cuando acabamos nos retiramos cada uno a nuestra habitación… yo me encontraba rendida y eso no era normal en mi, finalmente me acosté y durante al menos tres horas estuve durmiendo, cuando me levante tenía dolor de cabeza y estaba toda mareada… apenas recordaba lo que había ocurrido.

El domingo como suele ser normal... aquí solemos vestir con nuestra mejor indumentaria, por mucho que digan por ahí... que las sevillanas somos mucho de mantilla, pero para aquellos que sois de despeña perros hacia arriba nosotras las andaluzas, nosotras no vamos toda la semana Santa de mantilla pues hasta el jueves es difícil ver a alguna vestida… esto es como el sexo anal, no a todas les gusta hacerlo por detrás. Yo por ejemplo fui de mantilla el jueves Santo, dejamos las mejores galas para el Domingo de Ramos... por ejemplo me compre un precioso vestido en Tintoreto blanco marfil cortísimo con unos zapatos de no más de 15cm (joder, que dolor de pies). Y eso que me dijeron que las calles no estaban pavimentadas como yo pensaba... coño que debía de estar atenta a los pies, que era de locos llevar tacones de más de 15 centímetros con plataformas.

Pero bueno como soy una chica precavida y que ya he aprendido de otros años, suelo estar preparada... llevando una alternativa en mi bolso (coño, claro está unos zapatos planos)… entre otras cosillas. Mirad aunque el domingo tuve algún que otro escarceó y me deje hacer en alguna que otro bullicio… os lo hare saber en otra ocasión. El Jueves Santo es el día de la mujer andaluza, vestida de mantilla: "La tradición sevillana dice que hay que tener más de 18 años e ir acompañada por un hombre de traje de chaqueta oscuro para vestirse de mantilla" y es “importante” no llevar mucho tacón, pues luego siempre te encuentras a chicas jóvenes con tacones de 12 cm o más que vuelven descalzas a sus casas.

Para aquellos que no seáis de aquí yo siempre recomiendo que si deseáis que seamos respetuosos con vuestras fiestas o cultos, respetar las nuestras… os recomiendo tened buenos modales, evitad charlar a voces más aun cuando está pasando una cofradía, pues esto es casi imperdonable cuando se trata de la Esperanza de Triana o la Macarena… entre otras. Bueno mi semana Santa fue de más a menos y lo que más deseaba ir al encuentro de mi novio al cual, obviamente no le confesare el desliz de mi padre entre otros pues el muy cabrón ha llegado a probar sus pastillas para dormir conmigo, lo sé por la falta de prendas de dormir y encontrarme repleta de semen… por no mentar el dolor de mis orificios… mmm.

Bueno mis querido lectores aquí llega a su fin esta confesión… que os la iré publicando a medida que pueda, hasta aquí ha llegado esta secuela de mí Semana Santa 2014, espero que al menos os haya sido placenteros, vale no me enrollo más y esta ardiente Sevillana debe ponerse mano a la obra en acabar muchas más confesiones que aun tengo. Pero en el caso que deseáis poneros en contacto conmigo, ya sabéis mandarme vuestro emails a:

susanabix@hotmail.com

o si lo preferís dejar algún comentario… besis.

Mirad como bien sabéis y para los que no… yo solo publico mis confesiones en

www.todorelatos.com

, aunque lo tengo abandonado pero no por eso lo he borrado… es el único sitio por donde me podréis ver más natural, me refiero a mí blogs personal (

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pero para aquellos que deseáis estar más cerca de mí… os invito a seguirme por mi cuenta en Twitter (

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