Dominada por mis compañeros de curso parte III

Seguía tirada en el piso, tal como me habían dejado.

-Al fin tenemos una esclava-dijo Alex.

-¡yo no puedo esperar a mañana!-grito Felix-me la quiero coger ahora.

-si ni se puede levantar-dijo Pedro.

Mi cuerpo no podía más, pero de escuchar esas palabras comencé a mojarme. Era increíble lo que me calentaba ver a Pedro desnudo, si bien la verga más gorda era la de Alex.

-yo quiero hacer un video-dijo Juan-para nuestra colección-señalo una biblioteca que tenia muchas películas.

-¿no filmaste lo de ayer?-se quejo Nacho-¡iba a ser un regalo para un amigo idiota!

-vamos a darle una película mejor entonces-dijo Manuel sonriendo-Pedro ¿trajo la ropa del colegio?

Pedro agarro mi bolso.

-si tiene todo, el uniforme, la carpeta los libros ¿por?

-tengo una idea ¡MAURO!

El esclavo se levanto corriendo y Manuel le dio mi uniforme.

-pónselo, y tu también ponte tu uniforme.

Mauro me puso la pollera escocesa del colegio, era a cuadritos grises y azules, luego me puso la camisa con la corbata, la corbata del mismo color q la pollera y la camisa blanca me la ato a la cintura para que se me viera el ombligo, luego fue de una corrida a buscar mi mochila del colegio.

Manuel se puso un pantalón y una camisa.

Mire a mi alrededor, mis compañeros  también se estaban poniendo todos sus uniformes y agarrando sus mochilas.

-¡nunca pensé que tendría tantas ganas de ir al colegio!-dijo Tomás.

-Mauro, ve por la cámara de video.

Fuimos saliendo todos de la quinta. Por suerte ahí empezaba la parada del colectivo así que venía vacío.

Al colectivero ya le pareció extraño que fuéramos con el uniforme del colegio un día feriado, pero cuando me vio a mí, con la pollera corta, sin ropa interior y mis pezones se notarían bastante con la camisa se le cayeron los ojos.

Me llevaron a la parte de atrás y me sentaron entre Pedro y Alex.

-que buenas tetas que tenes-me dijo y comenzó a acariciármelas-el morbo de estar así en un colectivo me pone a mil.

Mauro saco la cámara y comenzó a filmar.

Pedro le guiño un ojo y saco su verga. Me tomo de las dos colitas que me habían echo y me empujo hasta que se la chupe.

Me estaba mojando y así agachada sin ropa interior debería notarse mucho, porque Alex comenzó a acariciarme y yo se la chupaba a Pedro entre gemidos.  A mi también me excitaba mucho hacerlo en un colectivo.

Mire al colectivero, la tenía totalmente empalmada y note que no se detenía en ninguna parada.

Entonces Pedro enloquecido por la mamada lenta que le estaba haciendo se puso como loco y de golpe me dio la vuelta para que me sentara encima de él y de una estocada me la metió entera, y yo no pude aguantar el grito de dolor/placer. Pedro comenzó a darme con fuerza y yo no podía aguantar los gemidos de placer. Porque me estaba cogiendo al chico hermoso del que estaba enamorada en un colectivo.

Pero aunque estaba muy caliente el colectivero se detuvo y nos grito:

-¡esto es un colectivo, no un telo!

-usted señor lo que quiere es un agradecimiento-le dijo Carlos-esclava hazle una paja al señor.

Le toque el bulto y automáticamente el saco su verga del pantalón.

-mira lo puta que sos-me decía Pedro en el oído-te dejas coger en un colectivo y después le haces una paja al colectivero, nunca soñé con tener una esclava tan puta, encima estas empapada, te gusta que te diga puta ¿no? Porque eso es lo que sos, una puta, que ni siquiera cobra. Lo haces por placer putita.

Mierda que me excitaba la voz de Pedro, y el colectivero me acabo en la mano.

-límpiatelo en la camisa zorra-me dijo Carlos.

Igualmente nos bajamos ahí, ya que era nuestra parada.

El colegio era tétrico de día, aun mas de noche.

Santiago era sobrino del director así que tenía todos los juegos de llave del colegio.

Entramos todos y luego comenzamos a reírnos, entrar al colegio de noche.

Nos fuimos corriendo a nuestro salón, pero Manuel, Felix, Mauro con la cámara y yo fuimos al salón que estaba al lado.

Me senté en el primer pupitre y Manuel me dijo:

-hora del show-dijo-¡Peréz! ¡Un uno se saco!

Yo no sabía que decir y sentí un golpe en la nuca.

-seguí la corriente tonta-me dijo Felix.

-¡Perdón profesor! No había estudiado.

-vas a repetir por estúpida.

-no profe, por favor no.

-¿Qué vas a hacer para que te apruebe?

Me quede un rato callada y como me estaban por golpear nuevamente dije:

-cualquier cosa.

-¿cualquier cosa señorita? ¿Qué tan lejos podría llegar?

-muy lejos.

Manuel se bajo su mano hasta la bragueta.

-le voy a dar unas clases particulares-saco su verga parada del pantalón-esto es el pene.

Lo tome por la base y comencé a acariciarlo, mierda ya estaba muy mojada.

Manuel me agarro la cabeza y me obligo a que se la chupara, cosa para la que no necesite un golpe en la nuca, lo hice de muy buena gana.

Estuve unos minutos así hasta que Manuel se apartó y acabo sobre mi carpeta diciendo:

-chúpatelo.

Comencé a chupar toda mi carpeta, que cosa más rara, necesitaría una nueva con el olor que le quedaría a esta, termine de hacerlo y Manuel me dijo:

-Tengo unos cuantos alumnos particulares señorita Pérez, acompáñeme que creo que no entendió bien la clase de educación sexual.

Nos fuimos caminando hasta nuestro salón y cuando entre todos mis compañeros estaban sentados en sus respectivos lugares, y en el pizarrón estaba escrito: “educación sexual”.

-chicos, hoy les traje un modelo para que pongan en practica lo aprendido. Pero por esta vez lo haremos sin condón.

Me hizo sentarme en el escritorio del profesor con las piernas abiertas.

-esto es la vagina-paso un dedo por mi centro, ya estaba chorreando, me abrió la camisa-estas son las tetas-me tironeo de los pezones-acérquense por favor.

Todos mis compañeros se levantaron y se acercaron a mí mientras sacaban sus vergas.

Me acostaron y Carlos se llevo mis piernas a sus hombros y comenzó a darme rápido mientras gemía.

Algunos de los chicos metían sus vergas en mi boca y yo las chupaba con ganas mientras gemía e intercalaba a quien se la chupaba. Con las manos hacían un par de pajas.

Empecé a escuchar mas gemidos, así que supongo que algunos también se estarían cogiendo a Juana, aunque no tan brutamente como a mi.

De un momento a otro, Alex se subió encima de mí y poniendo la polla entre mis tetas comenzó a masturbarse con ellas mientras las apretaba subiéndolas y bajándolas haciendo una turca.

Entonces comencé a correrme.

-que puta sos como te calienta estar corriéndote sobre el escritorio del profesor dejándote coger por todas estas vergas.

Entonces me dieron vuelta y poniéndome de espaldas pasaron una polla por mi ano.

-¡no por favor!-conseguí decir-soy virgen por ahí, me va a doler mucho.

-vos te callas esclava.

Me metieron un dedo, pero yo cerré el culo, así que comenzaron a darme palmadas en el hasta que lo relaje, pero ahí no me metieron un dedo, sino la puntita de una verga.

-Vamos puta te voy a dar por el orto.

-por favor no-me dolía horrores pero el seguía empujando, me estaban desvirgando el culo y ni siquiera sabía cual de todos mis compañeros era.

Cuando la metió entera (no era muy grande por suerte) comenzó a moverla con lentitud.

Yo comencé a gritar por el dolor, pero me metieron una pija en la boca, obligándome a hacer un garganta profunda entre los gritos y las arcadas me lloraban los ojos.

El chico eyaculo en mi boca, obligándome a tragármela toda y cuando se la deje bien limpia no duro un momento que me metieron otra en la boca.

El culo me dolía muchísimo, pero parece que eso le excitaba, el morbo de que yo estuviera sufriendo, porque aumento las embestidas.

Y comencé a sentir placer, un inmenso placer, no era mejor que por el coño, era distinto. Volví a gemir y al poco tiempo me corrí, mis compañeros rieron entre gemidos.

Me siguieron dando por el culo hasta que sentí como se llenaba de leche caliente, me sentía sucia.

Me levantaron un momento y un chico se puso debajo de mí y comenzó a darme por el culo.

-esta jodidamente cerrado.

Era una verga más grande y Nacho comenzó a darme por la vagina mientras me estimulaba el clítoris.

Me sentía jodidamente llena, tenía una verga en todos los agujeros, Alex se corrió en mis tetas y seguía escuchando los gemidos de Ana.

Dure muy poco y comencé a tener un orgasmo tras otro. Así que comenzaron a darme hasta que sentí que no podía aguantar mas, entonces me levantaron y me hicieron correrme en mi banco.

-toma puta, para que el martes cuando vengamos te acuerdes que tienes el banco lleno de tus fluidos.

Yo gemí en respuesta.

Finalmente volvieron a acostarme sobre el escritorio del profesor y todos, incluyendo Juana y Mauro se corrieron sobre mí.

Empecé a untarme el semen por todo el cuerpo y a llevármelo a la boca tomándomelo.

-uff que puta eres, las pajas que me voy a hacer con ese video-dijo Nacho.

Nos acomodamos el uniforme, a mi ni siquiera me lo habían sacado. Y nos volvimos a la quinta, yo así como estaba llena de semen.

No hicimos nada en el colectivo esta vez, fuimos directamente a la quinta donde comimos todos juntos entre risas contando cosas del colegio y recordando lo que habíamos echo allí.

Luego de eso nos llevaron a las jaulas a dormir, aunque antes nos dijeron que teníamos prohibido pajearnos.

Pocas veces dormí tan bien en mi vida como dormí esa noche.

Al día siguiente para mi sorpresa nos despertaron temprano.

-estamos aburridos-dijo Santiago-queremos ver una buena porno, pero son todas aburridas. O ya las vimos todas.

-así que queríamos fabricar una-dijo Alex y abrió las jaulas.

Le puso a Mauro un cinturón de castidad y le ato las manos a la jaula, y a mi el vibrador azul y unos broches en los pezones y también me ato las manos.

-tienen prohibido correrse, necesitamos que estén calientes.

Volvieron a cerrar las jaulas, pusieron en marcha el vibrador y a Mauro le pusieron una película porno enfrente.

Poco a poco fueron aumentando la velocidad del vibrador. Y Mauro gemía furioso, ni siquiera podía pararla con el cinturón.

Los broches obligaban a mis pezones a estar parados, yo estaba totalmente mojada y poco aguantaría.

Mis compañeros nos miraban divertidos. Mientras nosotros gemíamos cada vez más fuerte.

Finalmente levantaron la reja que dividía nuestras jaulas a Mauro le dieron la llave del cinturón y le desataron las manos, a mí me desataron las manos y dijeron:

-dense duro chicos.

Me arroje sobre Mauro que la tenía de piedra.

Me la metió rápido, ya que estaba muy mojada y dilatada por el vibrador.

El primer orgasmo fue rápido, pero no termino, ahí. Lo que nuestros amos querían era un sexo totalmente salvaje, puramente por placer y calentura.

Mauro me dejo en el piso y comenzó a comerme el coño exquisitamente, me corrí tres veces mientras él se tomaba todo.

Se incorporo y me la metió por el culo y me dio furioso, como un salvaje y yo gritaba y gemía como una puta mientras aumentaba el ritmo de las embestidas.

Me puso en cuatro patas y me dio aun más rápido.

-toma puta no te vas a sentar en una semana.

Me agarro las tetas con mucha fuerza me dolía.

Me aleje y él enojado me metió la pija en la boca para que se la limpiara directamente de mi culo haciendo un garganta profunda limpiando todo, luego lo hice acostarse, me senté sobre su pija y comencé a cabalgarlo con furia.

El también gemía pero cuando estaba por correrse me quito de encima y acostándome en el suelo me levanto una pierna y tomo su verga metiéndola en otro ángulo que me hizo ver las estrellas.

El bendito punto G, mierda que me corrí al minuto gimiendo como una perra.

Pero el me siguió dando y dando, yo solo dejaba que me diera placer.

-¡me corro puta!-grito y levantándose y me acabo en las tetas mientras yo también me corría.

Se quedo desplomado sobre mí, yo no podía mover  las piernas, mientras todo era filmado y mis compañeros se pajeaban mirándonos.

Gracias por leer! Y gracias por leer los otros relatos, si tienen alguna idea o algo que no les gusto haganmelo saber.

Besos Anonima125