Dominada por mis compañeros de curso

Historia de como me convertí en la esclava de mis compañeros

Me llamo Claudia Perez, tengo 18 años y soy la esclava de mis compañeros de curso.

Para empezar estoy en anteúltimo año, mi escuela era antiguamente solo de hombres, por lo cual solo somos cinco chicas mujeres de 25 alumnos.

No soy la única esclava de la clase, también esta Maurito, no se como llego a ser esclavo porque no le dejan contarlo pero por lo que se lleva casi dos años siéndolo, y las cosas no eran muy fáciles para él hasta que llegue yo.

Llegue a ser esclava por varios motivos, uno de ellos fue que realmente mis compañeros me habían ayudado. Tenía padres muy ausentes que no se fijaban en mi, mi madre muchas veces me dejaba en la calle e iba a pedirles ayuda a ellos que siempre se reunían en la quinta de Juan que estaba a 20 minutos en colectivo a emborracharse o lo que fuera. Por otro lado estaba enamoradísima de Pedro, un chico alto musculoso morocho de ojos verdes, y cuando me dijo que fuera su esclava acepte sin pensarlo, pero creí que solo su esclava, no la de todos, pero cuando me entere ya era tarde, les debía favores a todos y todos sabían cosas de mi.

En total tenía 19 amos y una ama. Era Juana, una chica bisexual. Las otras tres chicas restantes del curso podrían ser simplemente cactus porque nadie las registraba y tampoco hacían nada por hacerse notar. Así que no sabían nada de nuestra esclavitud.

El día que me inicie fue terrible y a la vez genial.

Era un fin de semana largo y Pedro me paso a buscar por mi casa, yo tenía mi bolso preparado como me había pedido y nos tomamos el colectivo hasta la quinta de Juan.

Una vez que llegamos saco un collar de perro de su mochila y me lo puso.

-era de Fido, mi perro-dijo sonriendo-así que tiene valor para mi.

Entramos en el quincho de la quinta. Mis 20 amos se encontraban ahí. Y Mauro, estaba haciendo la tarea vestido solo con un collar de perro y unos calzoncillos. Del collar salía una cadena que sostenía Juana, quien sonrió cuando me vio entrar.

Mis compañeros comenzaron a gritar y aplaudir cuando me vieron gritando: ¡LLEGO LA ESCLAVA!

Yo no entendía, seguía creyendo que era solo esclava de Pedro quien me dijo firme:

-Desnúdate.

-¿enfrente de todos?

Me miro con firmeza pero a la vez sonreía.

-son tus amos y debes obedecerlos en todo.

-¿amos?

-¿creíste que era solo yo? Basta de charla y desnúdate.

Me quede inmóvil, entonces Nacho se puso de pie.

-Va a haber que enseñarle-saco una navaja de su bolcillo-Desnúdate o te corto la ropa.

Con lentitud obedecí.

-Es putita-dijo Felix-no va a costar mucho.

Me saque toda la ropa dejando solo el collar de perro.

-Juana revísala.

Juana se puso de pie pasándole la cadena de Mauro a Pablo y comenzó a mirarme. Me toco las tetas con firmeza y me tironeo de los pezones para que quedaran erectos.

-Son grandes, y están tiesas, por cierto bonito perfume.

Se agacho y me golpeo los tobillos para que abriera las piernas.

-te haces el cavado con una maquina de afeitar. A partir de ahora lo harás con cera-miro un poco mas profundo y escuche como se relamía-tiene un lunar.

Todos mis compañeros miraron sonriendo sorprendidos.

-¡QUIERO VERLO!

-ya habrá tiempo para eso-dijo Pedro.

-¡miren a Mauro!-grito Agustín-como se te paro e esclavo ¿Por qué no venís y me la chupas? Seguí haciendo la tarea.

Nacho y Pedro me miraron y tomándome por las axilas se sentaron en una mesa, y tomando unas cuerdas rápidamente me ataron de pies y manos dejándome con las piernas abiertas.

-mira ese lunarcito-dijo Tomás.

Observe que todos mis compañeros la tenían parada y comenzaban a sacarse la ropa.

-¿ME VAN A PENETRAR TODOS?-dije asustada.

-ya abra tiempo para eso-dijo Pedro y me chupeteo el cuello, hoy somos nosotros los que te daremos placer a ti. Sáquenle la cadena a Mauro, ven para acá esclavo-Mauro se acercó rápido-Tu trabajo es masajearle las tetas, que sus pezones estén bien estimulados, pero recuerda que es lo último que debes tocar, eso la volverá loca, si sacas las manos y te pajeas serás castigado.

Mauro asintió nervioso y comenzó a sobarme las tetas.

-esta bien mojada la muy puta-dijo Felix-Empieza tu Pedro.

¿Cómo quería que no estuviese mojada teniendo 18 chicos desnudos y uno sobándome las tetas?

Pedro se agacho y se arrodillo con la cabeza entre mis piernas, paso un dedo por mi centro lo que me hizo dar un gemido y se lo llevo a la boca.

-bien puta, bien.

Y comenzó a chupar lento, horriblemente lento. Contra mi voluntad empecé a gemir cada vez mas fuerte con lo que veía que mis compañeros se pajeaban y Juana se colaba los dedos.

No se cuanto tiempo paso pero Pedro comenzó cada vez mas rápido y comenzó a chupar furioso y me hizo tener un terrible orgasmo que hizo que varios de rieran.

-ahora voy yo putita, te voy a borrar el lunar de tanto chuparlo-dijo Juan.

No se como, pero hasta el día de hoy tienen la coordinación de correrse todos al mismo tiempo y luego de un rato se corrieron todos encima de mi.

Yo estaba llena de semen, mis pezones que no podían parar de reclamar por atención por fin fueron tocados lo cual hizo que me corriera.

Y así, toda la tarde hasta que me la chuparon todos excepto Juana y Mauro. Perdí la cuenta de mis orgasmos. Lo que recuerdo es que al terminar a Mauro se le permitió pajearse, aunque ya se había corrido sin hacerlo, y le permitieron correrse encima de mí.

Finalmente me desataron y me senté en la mesa. Me dieron algo de comer y de tomar.

-Mauro llévala a la ducha y lávala.

Mauro me llevo y me puso debajo de un chorro de agua caliente, enjabono mi cuerpo y lo enjuago, era evidente que tenía mucha práctica en eso, porque lo hizo muy rápido. Luego de secarme Manuel se acercó a nosotros y sin decirnos nada nos tomo de los collares de perro y nos llevo hasta unas jaulas y nos encerró a ambos por separado.

-¡¿Qué es esto?!¡Dejenme salir!

Mauro me miro y sonrió.

-agradece que no te ataron, igual no son malos amos, son divertidos y hacen regalos de vez en cuando, por otro lado la jaula no es tan mala, asi que no grites porque no me vas a dejar dormir.

Me acosté en una manta que había en la jaula y al rato me quede dormida porque estaba agotada.

Esa fue mi primera noche como esclava de mi curso.


Díganme que les pareció por favor!! Es mi primer relato y me gustaría saber sus opiniones. Y si les gusta lo continuo.