Distancia de Seguridad parte IX

Dedicado a la persona que al besar mi espalda mueve mi mundo.

En qué momento…

Conseguimos a base de mucho esfuerzo no coincidir con mis padres justo hasta la hora de la fiesta. Las chicas y yo nos fuimos a comprar a la ciudad algo que ponernos para el dichoso acto. Alice está en plan jefa y no deja que Dani y yo nos veamos hasta estar listas.

Llevo más de una hora preparada, los invitados no hacen más que llegar y las chicas que aún no bajan.

Intento poner atención a las conversaciones que tienen a mí alrededor toda la elite de la ciudad, pero por más que trato, ninguna consigue llamar mi atención.

Me distraigo un poco en la mesa de las bebidas mirando como el barman me prepara un coctel.  En una de estas noto como las pupilas del camarero de dilatan y un pequeño “joder” se dibuja en sus labios. Por mas curiosidad que otra cosa me giro para descubrir el por qué del estado del hombre.

En el momento que la vi me quedé totalmente helada, mi sangre dejo de correr por mis venas. Un ángel camina hacia nosotros, por alguna extraña razón cuando estas cosas pasan es como si el tiempo pasara más lento y te diera la oportunidad de grabar todo en tu cabeza.

El vestido que lleva la hace ver como una autentica diosa, marca su (para mí) perfecta figura dejando ver sus impresionantes piernas, unos tacones enormes hacen que con su indumentaria a mí se me caiga la baba.

Jamás la he visto de esta manera y tengo que reconocer que me encanta, nunca ha estado tan provocativa y hermosa a la vez. Me mira y sonríe. Yo también lo hago.

Mi madre llega sin avisar arruinando el momento.

-          Cariño quiero que saludes a alguien. –Me dice con su típica voz melosa.

-          No es buen momento ahora mamá. –Sigo sin dejar de mirar a Dani, sonriendo ampliamente.

-          Venga Samanta si es solo un momento, además te va a gustar mucho. –Insiste.

-          Buenas noches. –Llega Dani en el momento perfecto.

-          Estás espectacular Dani. –Me acaricia la mejilla. –¿Nos vamos? –Pregunto. –Ahora regresamos mamá.

La tomé de la mano para salir lo más rápido posible de allí. Nos encaminamos al jardín que está totalmente iluminado, mi madre no ha reparado en gastos por lo visto.

Algunas personas de la fiesta han tenido la misma idea que nosotras y también dan pequeños paseos a la luz de la luna, o algunos solo están fuera para fumar o seguir con la copa en un lugar alejado de tanta parafernalia.

Estuvimos largo rato paseando, las chicas se nos unieron y recorrimos el jardín, haciendo bromas y riendo.

Tuvimos que entrar al escuchar que mi madre se disponía a hablar. Nos sentamos discretamente en la mesa principal junto a mi padre, la niña, y un plato vacio que no tiene lugar ocupado.

-          Esta fiesta en principio solo tenía el fin de divertirnos y pasarlo bien entre amigos, pero una agradable sorpresa de última hora la mejorara un poco. –Decía muy segura de sí misma. – Es un honor poder cumplir un pequeño deseo de mi hija, que es que su amiga del alma regresara de nuevo al país. –Mi cara cambio. –Por favor un aplauso para Carmen Lázaro.

No puede ser Carmen, mi antiguo amor del instituto aunque eso pocos lo sabían. Siento como Dani sale corriendo de la sala, pero de la sorpresa no pude hacer nada para detenerla. Mis ojos solo pueden fijarse en la maravillosa morena que camina hacia mí.

Me rodea con sus brazos fuertemente, fue como si nunca se hubiese ido, siempre fue mi compañera de travesuras, mi primera mujer. Todo hasta que antes de empezar la universidad se fue a vivir a E.E.U.U

-          ¿Pero qué haces aquí tía? –Pregunte ansiosa.

-          ¿No te gusta mi sorpresa? –Me respondió divertida.

-          Claro que si idiota, pero, ¿te quedas o qué?

-          Si, si, tendrás que aguantarme durante un tiempo, he venido detrás de una mujer. –Confesó.

-          Qué raro tu detrás de una mujer. –Dije con sarcasmo.

-          No te burles tía, que me importa de verdad, fíjate que casi ni la he engañado. –Se burlo.

-          ¿Casi? –Pregunte levantando la ceja.

-          Ya me conoces y la carne es débil.

-          Si es que tú no vas a cambiar nunca.

-          Solo doy amor, amor preciosa.

Nos fundimos en otro gran abrazo, a pesar de los años que hace que no nos vemos, Carmen  y yo no perdimos del todo la comunicación. Aunque no fuese diaria siempre teníamos nuestros momentos de ponernos al día vía internet.

El fin de fiesta llego sin esperarlo, Carol y Alice están encantadas con Carmen, no dejan de preguntarle anécdotas de nuestras travesuras y de todas las pequeñas maldades que hacíamos en el colegio.

Dani no ha aparecido desde que llego Carmen y yo ya estoy un poco desesperada buscándola por todas partes. Subí corriendo a la habitación y ahí la encontré.

-          ¡PRECIOSA! Por fin te encuentro, ¿estabas huyendo de mí? –Dije besándola tiernamente.

-           No bonita, aquí estaba. –Lo dice sin mirarme.

-          ¿Dani estas bien? –Pregunto preocupada.

-          Siéntate un segundo, ¿sí? –Hice caso y me senté en la cama. –Sabes que yo te quiero mucho y que me encantas ¿no?

-          Claro preciosa, pero, ¿Por qué me lo dices así? –Esto no pinta bien.

-          Sam yo estoy muy confundida, se que te amo, pero también amo a otra persona. –Eso dolió.

-          ¿Quieres explicarte mejor? –Dije atropelladamente.

-          No sé por dónde empezar…

-          Por el principio suele funcionar. –Mi tono es serio.

-          Sam… -Susurraba.

-          Es la especia de relación esa que tenías ¿no? –Asiente. -¿Y yo todo el tiempo que fui, un juego?

-          No, no digas eso, yo te amo, no dudes de eso.

-          Pero amas a otra Dani. –No contesta. –Deja  que me aclare, me amas a mí y a otra. –Intento no levantar la voz. -¿Tu qué quieres hacer? –Me duele más hacer la pregunta que la respuesta que se que me va a dar.

-          No es nuestro momento. –Lo dice bajo, queriendo que no la escuche.

-          No es nuestro momento. –Repito en un suspiro.

-          Lo he pensado muchísimo. En ti, en mi y en un nosotras, pero siempre acabo pensando en lo imposible que resulta que esto acabe bien. Ambas sabemos que nuestro momento llegará. Necesito tiempo bonita, pensar en el sinfín de sentimiento que me provoca tenerte cerca. Quería hablar contigo antes, pero me trajiste aquí y es tan maravilloso como tú.

-          No puedo decirte que será fácil Dani, pero sí que valdrá la pena.

-          ¿Ves? Por eso estoy tan confundida, eres increíble. Eres una persona genial, y cuando me dices esas cosas me derrites.

-          Pero no es suficiente. –Intenta hablar pero un gesto de mi mano se lo impide. –Mi amor eres la única persona en el mundo a la que no podría decirle que no, y ahora no va a cambiar. Si tu decisión es que esto se acabe, yo no haré nada para que eso cambie, aunque eso no me guste en lo más mínimo. Solo puedo decirte que te espero, todo el tiempo del mundo, todo el que sea necesario. –No puedo contener las lágrimas.

-          No princesa, no llores, no puedo saber qué lloras por mi culpa. –Me abraza y llora conmigo. –No quiero hacerte daño Sam.

-          Tú no me haces daño, al contrario, me has hecho muy feliz Dani. No te preocupes yo estoy bien.

-          Necesito que sepas y tengas presente siempre, SIEMPRE,  que pase lo que pase, decida lo que decida, seremos amigas y lo que siento por ti no va a cambiar. Ni tú me perderás ni yo puedo perderte.

-          Si esta es la última vez quiero decirte una vez más que te amo mi niña.

-          Yo también te amo Sam.

Nos besamos, no es un beso de lujuria o pasión, es un beso de despedida, lo sabemos, por eso ambas lloramos mientras nuestros labios se separan por última vez.

Besa mi frente y yo solo pienso en salir de aquí. Justo cuando mi mano toca el manillar de la puerta su voz retumba en mis oídos.

-          ¿Me llamaras mañana? –Pregunta.

-          Como cada día. –En mi respuesta se va la pequeña esperanza de que me dijera “quédate”

Salí de la habitación dejando en ella mi alma, una última lágrima rueda por mi mejilla, aunque soltara un millón de ellas no podría reflejar lo que pasa dentro de mí en este momento. Un dolor inexplicable se ha instalado en mi pecho.

Sin despedirme de nadie, subí al coche y conduje hasta el único lugar en el que me sentía protegida, mi casa.

Llegué de madrugada, con un tremendo dolor de cabeza añadido al que tengo en el pecho, que se acaba de convertir en habitual.

Me tumbé en el sofá repasando cada palabra, el sonido de mi móvil me sacó de mis cavilaciones, un whatsapp de Alice. “ amiga, lo sé todo, ¿Dónde estás? ¿Todo bien?”. Mis dedos responden por inercia.  “ Todo bien, en casa.” Enviar. Apagar. En este momento es mejor que este sola, porque si me da por llorar me puedo tirar así horas, y no quiero.

No sé en qué momento me dormí. Desperté más por el dolor de espalda que por estar totalmente descansada. Sigue siendo de noche, al encender el móvil descubro que llevo durmiendo más de 14 horas. El teléfono no para de sonar e incrementa el horrible dolor de cabeza. Leo por encima los whatsapp, la mayoría son de Alice y Carol. Solo uno de ella, hace 2 horas. “ Hola, como estas? “ Tres palabras que son como un balde de agua fría. Contesto. Perdona por no responder, mi cama me ha secuestrado, todo bien. Ya es tarde para que te llame, hablamos. Bs. Sin esperar su respuesta, subí a darme un buen baño, escuche el móvil a mitad de las escaleras, aún sabiendo que era ella continué, ya no puedo dejar todo por ella, ya no.

Busqué uno de los mejores vinilos que he escuchado y lo coloqué con mucho cuidado en el tocadiscos, volumen a tope y a disfrutar de mi cantante favorito. Thriller, Michael Jackson.

Deje que mi cuerpo se relajara en las burbujas que llenan la bañera al ritmo de grandes canciones como, billie jean, wanna be startin somethin o la mismísima thriller.

Tuve que salir de mi baño de burbujas por el insistente sonido de la puerta de mi casa, me enrosqué en una toalla y baje dejando un rastro de agua a mi paso. Me sorprendí al abrir la puerta.

-          ¿Qué haces tú aquí?

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Atenea89: Tu eres mi equipo favorito siempre ;D Como en este comentario solo vas a decir cosas meramente profesionales no te digo nada yo tampoco Jajaja!!

Angie: GRACIAS GRACIAS GRACIAS!! Después de leer tu comentario lo primero que he hecho ha sido decirle a mi chica que lo leyera, porque no me lo creía, ella dará fe de ello :D Es un verdadero honor para mí que te guste. Gracias. Un beso guapa!

LLUPPINNA: Gracias por seguir por aquí, esta parte es menos de “mi estilo” pero espero que te guste,

Lemaga: Bonita, muchas gracias, intentare escribir más seguido, pero empiezo los entrenamiento el lunes, así que mi tiempo se reduce. Con respecto a la otra personita, yo lo sigo intentando, pero es terca.

Yelyah: No animes a mi chica que después solo me habla de lo mismo. Noa pretende que yo escriba el final de su relato, estoy intentando convencerla de lo contrario, seguire informando de este tema Jajaja!!

Ceci: No contestare a nada después de lo que has puesto… L

GEira: Aquí lo tienes