Disfruto ser la mas puta de todas las putas

Mi nombre real no importa, pero me encanta llamarme … Penélope porque me siento muy puta con ese nombre, ya que soy descarada y de poca vergüenza

Este relato es mi vida real como en realidad soy sin nada de fantasía, algunos escriben para fantasear yo hablo mi realidad.

Tengo una relación de 6 años con mi marido, el cual sabe que soy la más grande de las putas, que no puedo vivir sin sexo callejero, sin acostarme con otros hombres y el aceptar que debe lucir sus hermosos cuernos por siempre.

Tengo tarjetas para entregar a los hombres ofreciéndome, me encanta el sexo sucio en todas sus formas, me fascina que me orinen encima de las tetas, de la cara y tragar abundante de este líquido sabroso amarillo, me gusta que me peguen en las nalgas, que me peguen en las tetas, que me halen fuerte del cabello, me excita demasiado sentirme indefensa, tirada en una cama, en el piso amarrada, con dolor, que me golpeen la cara, me den cachetadas, que me escupan la cara, que lo hagan fuerte, me masturbo pensando en las mejores vergas de hombres, uso ropa sexy pero lo más puta que pueda, depende la ocasión, me gusta verme vulgar para los machos “ soy Penélope la puta barata”

Me gusta sentirme sucia, soy una puta muy caliente que ama la verga, que necesita tener orgasmos fuertes, amo a los hombres y me encanta someterme sexualmente a ellos, soy una cerda ramera, sucia, golfa, perra, zorra, chupaverga, chupaculo, estúpida, tonta, viciosa de vergas, ninfómana, una mierda, un juguete, una cosa, un objeto, un animal…. Todo eso dicen que soy y me excita, me gusta y la verdad es que si, que es lo que soy, me excita y estoy orgullosa de lo que soy, es lo que siempre he sido, lo que siempre quise ser y lo soy, me gusta la fama que tengo de fulana facilona, que cualquiera se folla, tengo las tetas grandes y el coño siempre dispuesto a una polla, mi culo abierto rubricadito para tragarse todo lo que quieran meter en él, ni hablar de mi boca siempre dispuesta a recibir toda la cantidad de semen de todo el hombre que quiera depositar en ella.

Me encanta el sexo en todas sus formas, muy salvaje, tierno, hacer el amor con uno de mis novios muy sucio o tierno, me refiero que me gusta que el o los hombres, porque prefiero siempre tener a más de uno a la vez, me gusta que se tomen su tiempo para cogerme, ser sucios conmigo tratarme como una cerda o hacerme el amor, me fascina que me maltraten fuerte, que me manoseen, que me besen la boca, me muerdan el cuello que me hablen y yo hablarles todas las cerdadas, pero de las de peor clase y toda la suciedad que se pueda mientras lo hacemos, me pongo en desesperación tan necesitada que no me importa la manera de hacerlo, solo necesito pija, picha, palo, pene, verga, sexo, miembro.

Me encanta ser la puta callejera y puta barata de mi marido, pero en especial también me fascina ser la zorra de muchos, es excitante ser de otros hombres, que sean mis amos, mis dueños, que no me dejen pensar, que ellos piensen por mí, yo solo debo obedecerles servirles a todos y trabajar para ellos, al igual que con mi marido y con ellos mi trabajo es sentir, darme y darles placer ser follada por cualquiera de mis agujeros.

La mayoría del tiempo estoy caliente tengo ganas de verga, no quiero marido, no quiero novio, no quiero más ternura y necesito ser puta, que me dominen que sean brutos conmigo, que me usen, que me abusen, que me degraden fuerte, que me humillen, incluso que me golpeen, cualquier cosa que me haga sentir como la peor de las mujeres, como la peor de las putas.

La mayoría de mis dueños dicen que las zorras somos animales y que los animales no necesitan ropa, entonces me tienen desnuda mostrando toda mi mercancía y en ocasiones a algunos de sus amigos, todos disfrutan de mi coño toman fotografías y me hacen videos como la peor de las putas y los exportan para hacerme más famosa con otras vergas,

Eso me da mucho morbo, convirtiéndome en una sumisa muy obediente, me hace actuar más puta, ya que la idea de ofrecerme a otros hombres como la más barata de las prostitutas me excita demasiado, todos me usan y se aprovechan de mí, me fascina tomarme mucho tiempo lamiendo a los hombres, cuando están sucios sudados, cuando sus vergas están olorosas, eso me aumenta el morbo, me escupen la cara, me hacen rogar por las vergas, me toman del pelo fuerte, para obligarme hacerles cosas, me excita demasiado que se abran bien de piernas y enterrar mi cara lamiéndoles sus olorosas bolas sudadas, sus muslos.

Es excitante el olor de sus huevos y después limpiarlos con mi lengua, también lamerles las nalgas, toda la raya para después meterles la lengua en su agujero, lo más adentro que pueda, me usan de papel higiénico, haciéndome limpiar el culo de mis dueños, todo esto mientras me hacen todo lo que desean, les digo y me dicen cerdadas etc.

Siempre después que chupo estas vergas olorosas,  me gusta que siempre haya uno en mi agujero del culo mientras lamo otras vergas, me encanta la doble penetración sobre todo cuando estoy en ese estado, nadie me pide permiso solo me toman y lo disfruto demasiado, me encanta la posición perrito, porque me pueden dar tanto por el culo como por la concha, mientras me golpean fuerte en las nalgas, me tiran del pelo, allí me como todas las vergas que hallan, además me gusta estar sentada sobre el hombre, así él tiene las manos libres para manosearme, solo puedo pensar en una cosa y es en sentir más y más placer, en hacer todo lo que me ordenan mis machos humilladores, mientras yo acabo en los orgasmos más fuertes.

El semen me encanta tragarlo, no desperdiciar ni una sola gota de semen de la verga de cualquier macho, me encanta el sabor y recibirlo también sobre mi cara, mis tetas, adoro sentirlo sobre mi piel encima de mi abdomen, o mi coño me hace sentir sucia esparcir todo ese semen por mi pecho, limpiándome los dedos y la mano con mi lengua mientras miro con cara de puta a mis machos, eso me encanta ser su puta ser muy fácil sin siquiera saber quiénes son, que mientras me estoy masturbando disfrutando de todo su semen, ellos vayan orinando sobre mi cara y mi boca, para probar su delicioso orín y finalmente me dejen las vergas para limpiarlas con mi lengua, mmmmmm por dios que caliente estoy, me voy a masturbar tan pronto termine de escribirles .

Tengo 24 años y tengo sexo desde los 14, llevo 6 años con mi marido, pero no puedo dejar de disfrutar de buenas vergas en mi culo o en mi coño, ni dejar de tragar un buen semen de algún hombre muy semental, no puedo prescindir de nada de eso, soy una chica joven, aunque quede muy excitante decirlo, soy muy puta me gustan las cosas fuertes morbosas, que todos me hagan sentir como la mujer más baja de todas, una puta insignificante que solo sirve para ser sucia.

Anteriormente pertenecía a un grupo de WhatsApp, que conformábamos 6 amigas putas como yo, todas somos muy sucias y pervertidas sexuales, todo el día solo vivimos en busca de hombres, no importa la raza, color, edad, altura, feo, bonito, solo depredar las vergas de ellos, y que te den la vitamina que necesitas es delicioso, en fin desistí del grupo, porque me robaban mis vergas y mi perversidad necesita mucha verga a diario, además la envidia de todas esas zorras era inmensa, entonces estoy fuera, ahora solo comparto con una de ellas, que es mi mejor amiga, quien es como yo muy zorra una guarra muy golfa, sumisa y humillada que está en boca de todos, le hacen las peores suciedades, de quien he aprendido un poco, siempre nos compartimos nuestras aventuras, pero ahora yo soy la peor, la reina de todas las suciedades, y eso me hace excitar demasiado, ahora les contare lo que me sucedió y que contare lo mejor posible.

Estaba yo en la calle paseando ya de regreso a casa, con unos pantalones cortos negros traslucidos, que dejaban ver mi tanga de hilo minúscula, también de color negro, unas botas de tacón, maquillada como hacemos las putas y mis tetas casi al aire.

– Cuando se acercó un coche con dos hombres dentro, que inmediatamente hicieron que mi coño comenzara a sudar de ganas.

– Me dijeron oye zorra acércate.

– Yo me acerque y uno de ellos me dijo se ve que eres una puta fácil te gustaría acompañarnos?

– Les dije que sí y me monte calladita

– Yo hablaba torpemente de la excitación que me causaba el momento, el otro que no manejaba me agarraba de la mano y con la otra me manoseaba la pierna y mi pelo.

– Me dijo quieres coger?

– Yo le respondí si señor sí.

– Te gusta ser una puta humillada y sometida?

– Nuevamente respondí sí señor.

– Es lo único que llegué a decir, cuando sentí un fuerte azote en mi culo mientras se pasaba a la parte de atrás conmigo en el coche, sentándose a mi lado, el que estaba conduciendo salió de allí hacia un edificio donde vivía uno de ellos.

– Veras puta ninfómana, vamos a divertirnos contigo y tu harás todo lo que pidamos, para nosotros serás solo una puta sucia, que nos vas a divertir entendiste cerda.

– Si

– Tome mi celular y llame a mi marido, para que no me esperara temprano, ya que me iba a divertir como una puta callejera.

– No había terminado de cortar la llamada, plaaaaaassss, plaaaaaassss me abofeteo la cara dos veces.

– A ver puta, muestra respeto golfa.

– Si señor sí.

– El edificio estaba tan cercano que llegamos pronto, me hicieron bajarme y ponerme a cuatro patas, se veía que estaban acostumbrados a llevar allí sus putas y humillarlas, agarrando mi pelo me guiaron hasta la entrada, allí estaba el recepcionista

– Lo siento señores, no está permitida la entrada con animales.

– No se preocupe la perra no va a molestar.

– Yo me sentía muy humillada y excitada, hablaban de mi como si fuera un animal al que le prohíben la entrada, era delicioso estoy acostumbrada a que me traten como la peor de las mujeres, por ser una puta sucia pero nunca ser tratada como un animal.

– Señores son las normas nada de animales.

– Vera… si usted nos deja pasar con la mascota, la podrá usar usted también.

– Entendí que estaban acostumbrados a humillar las putas que conocían y estaban teniendo aquella conversación para humillarme más.

– Bueno si es así señores suban, ahora llegare hasta ustedes.

– Yo callada todo el tiempo, lo único que hice fue seguirles hasta el ascensor.

– Dentro del ascensor, metieron los dedos por el culo y el puto coño, después me los daban a chupar y yo lamia sus manos.

– Salimos del ascensor y nos cruzamos con dos hombres, que se quedaron mirando y escuche como decían.

– Puta de mierda la van a reventar por zorra.

– Abrieron la puerta y uno de ellos me tiro duro del pelo. me dio una bofetada, plaaaaassss

– Me ahogaba el cuello gritándome.

– Oye estúpida chupapollas, vamos a vaciar nuestras vergas en todos tus agujeros, solo sirves para eso.

– Si señor si le respondí, mientras me apretaba el cuello casi sin poder respirar.

– Bien está bien, que sepas para lo que sirves y que es lo que eres, solo un recipiente para recibir descargas de semen. ¿Verdad zorra?

– Si señor sí.

– Repítelo puta de mierda.

– Plasssssssssssss

– Solo soy un recipiente para ser llenada de semen.

– Escuche como se reían.

– Plassss, plassss, plaasssss.

– Recibía bofetada de los dos.

– Mientras los dos me ordenaban que los fuera desnudando, lo hice completamente sus vergas estaban sucias, se veía que no se habían bañado, que llevaban muchas horas o talvez más de un día sin haberse lavado, había restos de cerros blancos, de jugos en sus pollas, el olor era rancio y fuerte, eso para mí más me excitaba, que estuvieran así de guarro y sin lavarse era excitante, olían a sudor y verga de machos, mmmmmm, como me gustan los hombres así.

– Mientras uno me azotaba el culo con fuerza, hasta ponérmelo rojo, me decía toda clase de insultos, zorra estúpida viciosa, el otro metía su polla sucia en mi boca, que yo trague con todo el morbo, su cerro blanco su olor y los jugos de aquella verga deliciosa, que estaba chupando.

– Chupa y límpiame bien la verga, come todos sus jugos para quedes con olor a puta sucia.

– Sí que sabía rico sucio, todo lo limpie lamiendo y chupando todo por completo incluidas su bolas sudadas y pegajosas.

– Mientras estaba en mis labores de limpieza, el otro había bajado todo hasta mis hilos y me decía.

– Ponte de pie y abre tu puto culo, puta de mierda.

– Me levanté y mientras chupaba la deliciosa verga sucia, con las manos abrí mi culo y sentí como entraba la verga de aquel, sin más que con una embestida bestial, sentí que su verga me entraba hasta que sus huevos chocaban en mi coño.

– Venga puta abre bien el culo.

– Rápidamente sentí como aquel hombre, se estaba meando dentro de mi culo.

– No me está follando, sino que se está meando.

– Aaaaaahh que ganas tenia de vaciar mi vejiga aaaaahhhhhh.

– Sentía como mi culo se llenaba de meado, pero no dejaba salir ni una gota, sentía su liquido caliente dentro de mí.

– Yo seguía limpiando la polla del otro.

– Voy a sacar mi verga puta, no quiero que escape ni una gota de mi meada, entendiste cerda.

– Si amo sí.

– Saco su verga de mi culo, el otro se apartó y el metió su verga con sus meados, la mierda de mi culo y los jugos de su verga sucia en mi boca.

– Limpia bien guarra, que quiero follarte con mi verga limpia, no importa si cogemos alguna enfermedad con tus agujeros de puta callejera.

– Mientras el otro fue al baño trajo un recipiente y me dijo.

– Echa aquí toda la meada, que mi amigo te ha dejado metido en el culo golfa.

– Mientras limpiaba aquella verga, abrí mi culo y salió toda la meada que me había metido, con restos de mierda de mi culo, el reía mientras recogía todo aquello.

– Jajajajaja, pero que cerda y sucia eres puta, jajajajajajaja

– Cuando termine soltó el recipiente y abriendo mi culo me metió toda su verga de un solo golpe.

– Ahora voy a vaciar yo mi vejiga.

– Sentí como un chorro fuerte y caliente salía de aquella verga, que estaba dentro de mi culo y me excitaba en las paredes de mi interior, mientras yo seguía limpiando aquella otra verga y las bolas tragando todo lo que allí había.

– De verdad puta, que sucia eres con razón se dice que eres la más zorra sucia de todas.

– Ahhh ya sabias de mí.

– Claro todos saben que eres una puta fácil, estas regada entre todos los machos todos tienen fotografías de ti, eres la más puta asquerosa de todas.

– Gracias mi nuevo amo es lo que quiero ser.

– Tranquila puta de mierda tranquila que lo eres, le ganas a todas las zorras de aquí no se conoce ninguna puta más mierda y sucia que tú, conocemos muchas, pero tú eras la mas de todas hijas de puta.

– Luego colocaron de nuevo el recipiente, me ordenaron coloca la otra meada allí puta deja ya tu culo vacío.

– Mientras yo vaciaba mi culo, azotaban mis nalgas y reían.

– Hablaban a esta hija de puta le vamos a llenar de semen ya, a ver si la preñamos, es lo que le excita, que la preñen como a una callejera, jajajajaja.

– Yo no dije nada.

– Después uno de ellos se sentó en la cama y tirando de mi pelo, me lanzo al piso hasta que conseguí, meter su verga en mi boca.

– Traga mierda de puta traga.

– Decía mientras sentía como me abofeteaba con fuerza.

– Plassss, plaaaassss, jajajajajaja.

– Y el otro me metía ahora la polla por el culo, hasta los huevos y azotaba mi culo.

– Plassss, plaassss.

– El que estaba chupando me la saco de la boca y ofreciéndome su culo me dijo, puta de mierda mete tu lengua por mi agujero, metelaaaa.

– Yo metí mi lengua en aquel culo, mmmmmmmmmmm, como me gusta chupar un culo así, meter mi lengua, mientras mi nariz siente todo el olor que hay allí, hasta el de los huevos, mmmmm.

– Después me escupió en mi cara dos veces, resbalando su saliva por mis pómulos.

– Así está más bella puta, jajajaja.

– Y abofeteo mi cara dos veces.

– Plaasssss, plaaassss.

– Allí sentía tener orgasmos involuntarios de la excitación que sentía.

– Cogiéndome del cuello me apretaba.

– Solo eres una mierda y nos estamos divirtiendo contigo, que es para lo que sirves.

– Mientras el otro se acercó y comenzó a darme bofetadas, mientras me insultaba.

– Después uno se sentó en la cama y me ordeno que me metiera la verga en mi coño.

– Respondí si señor sí.

– Me clave toda su deliciosa verga dentro de mi coño, inmediatamente experimente un fuerte orgasmo, estaba recibiendo una humillación, tal como me encanta y deseo de todos los hombres que me follan, que me hagan sentir sucia y la más baja de todas las mujeres.

– Me balanceaba encima de él, dejando a mi culo a disposición del otro, que no tardo en meter su verga hasta los huevos, dentro de mi culo, así estaba allí con las dos vergas dentro de mí.

– Acababa una y otra vez, aaaaaaaa, si, si, si, aaaaaa.

– Sentía como aquellas vergas entraban y salían de mis dos agujeros con facilidad y a la vez con fuerza y velocidad.

– Vamos zorra cámbiate.

– Y así obedecí ohhhhh, acababa fuerte con cada verga y mientras no paraban las bofetadas, los insultos, eso aumentaba mi morbo haciendo, más intensos mis orgasmos.

– Te gusta zorra de mierda, te gusta que llenen el culo y el coño de semen, puta de mierda, te gusta quedar preñada de cualquiera verdad puta.’

– Si señor si, aaaaaaa, siiiiiii, mi amo.

– Sentí como sus pollas se hinchaban dentro de mí y empezaban a palpitar, sentí como mi culo, mi coño también comenzaba a palpitar para venirme en fuertes orgasmos, por mis dos agujeros, al poco tiempo sentía dentro de mi coño, un chorro de semen caliente, que me inundaba toda por dentro y llenaba mi vientre de semen, sentí como el otro hacia los mismo en mi culo, inundado todas mis entrañas con semen de aquellos dos tipos.

– Caí al suelo, dolorida y muy excitada de las embestidas de aquellos dos y esperaba sus órdenes…

– Vi como los dos se sentaban en la cama y me decían.

– coge el recipiente, golfa.

– Lo cogí y me acerqué a ellos.

– bien, puta, ahora vacía el semen que hay en tu coño y en tu culo, en el recipiente, que se mezcle con nuestros meados.

– sí señor.

– Allí, delante de ellos, me puse en cuclillas y poniendo el recipiente debajo de mi fui sacando todo el semen, que había en mi puto coño y culo, hasta que no quedo nada, con mis manos las pase por mi coño y culo, limpie lo que quedaba y lamí mis manos, de aquellos restos de semen.

– mmmmmmmmmmmmmm.

– Bien cerda, ahora demuéstranos que eres la más sucia de todas y báñate con ese recipiente, con nuestras meadas el semen y la mierda que salió de tu puto culo, vamos hazlo.

– queremos ver que eres más que una puta sucia, queremos ver que eres la más degenerada y mierda de todas las putas, vamos.

– puse aquel recipiente arriba de mí y abrí mi boca para que callera también, empecé a derramar encima de mi todo aquello, delante de ellos, parando para enseñarles mi cara y lamer mis labios, para después seguir bañándome toda.

– Creo que estaban asombrados de lo sucia que soy y que puedo ser, que ya muchos hombres han confirmado, pasando por mi boca mi culo y mi coño.

– Cuando terminé de vaciarme todo aquello, puse el recipiente en el suelo y me relamía, mientras con mis manos que pasaba por mi cara, recogía lo que había en ella y metiéndolas en mi boca, lamia lo que había quedado fuera, seguía allí en cuclillas cuando vi cómo se levantaban se pusieron cada uno a un lado.

– con esta puta no nos va pasar como con las otras, a esta la vamos a marcar con nuestros meados.

– Y si más sentí como sus chorros de meado, salían de sus vergas y me mojaban todo mi cuerpo, mis tetas, mi pelo, mi vientre, mi coño, yo con la boca abierta bebía lo que podía de uno y de otro, pero se mojaba el suelo.

– Cuando terminaron dijeron.

– puta, pasa tu lengua en el piso queremos hacer un video.

– Yo me puse a cuatro patas y comencé a lamer aquel suelo, ellos filmaban, mientras yo estaba en la limpieza, ellos se fueron duchando uno tras otro y vistiéndose, cuando estaba arreglados me dijeron.

– vístete, golfa que nos vamos.

– Yo busque mi tanga, pero no lo encontraba. creo que alguno de ellos se la había guardado para que no lo encontrara.

– bueno no importa, que no lleves tanga, golfa, así tu puto coño se ventila.

– Me iba a poner a cuatro patas, pero uno de ellos me cogió del pelo y tirando me dijo.

– nada de eso, derechita y la cabeza bien alta, que se vea bien lo sucia que quedaste.

– vamos a la calle, y tu delante nuestro, saldrás la primera.

– Pregunte si podía lavarme un poco.

– lavarte? las putas como tú no se lavan. solamente tienen que ir enseñando lo sucia que eres, sino que debes oler a perra sucia.

– jajajajajajajajajajajaja… reían.

– Salimos de aquella habitación y al llegar al ascensor.

– me ordenaron, vete por la escalera.

– Obedecí y baje solo con mis pantalones cortos transparentes, que dejaban ver claro mi coño y toda sucia oliendo a meado y a semen, por aquella escalera, no me importo la gente que me encontré, Salí a la calle y aquellos tipos reían de mí.

Me fui a mi casa donde mi marido, mi amo fijo, esperando que no estuviese con ninguna de sus zorras amantes, para que se hiciera mi dueño y me diera otra dosis de humillación, que disfrute todo lo que hice, me hicieron acabar, con degradaciones y me hicieron todo tipo de insultos y vejaciones, pero a mí me gusta estar así en la calle, dando escándalo, siendo una puta barata.

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