Disfrutando la vida

Un matrimonio joven y enamorados se dan cuenta, después de una de vivencias negativas, que la vida está para disfrutarla.

La mujer cada día se propone sorprender a su marido en su tema favorito: el sexo (al igual que el mío).

Así una noche cuando el entra por la puerta de casa, se encuentra las luces apagadas, música suave y velas por el suelo que le llevan hasta el dormitorio.

Al entrar se encuentra a su mujer con un conjunto de lencería muy sexy; medias de ligero muy finas y taconazo. El se queda alucinado, pero más cuando descubre que ella está atada de manos y pies, tienes los ojos vendados y una nota encima de su cuerpo que le dice:

“Soy toda tuya, pues hacerme lo que quieras”.

El alucinado empieza por besarle su cuello, bajando poco a poco por su cuerpo, se quita toda la ropa, y se pone a horcajadas sobre ella: al hacerlo ella puede sentir su miembro erecto.

El empieza a quitarle el corpiño q lleva, besando su piel cada vez que quita una parte, le deja las braguitas y sobre todo las medias con los tacones.

Descubre que tiene una vela encendida en la mesilla y por casualidad es un vela de masaje, así que sin pensarlo se la tira encima de un pezón de su mujer, esto hace que ella se estremezca de placer.

Después hace lo mismo el otro pezón, mientras la va lamiendo va bajando su mano hasta el clítoris y mete sus dedos por las braguitas.

-Estás muy mojada.

No dice nada más sólo le da una palmada en su clítoris, cosa que a ella le hace volverse loca de placer.

Pero entonces es él que se da cuenta que ella lleva metidas las bolas chinas, y sin decir nada hace que su mujer se mueva y levante su precioso culito.

Una vez así, sin avisar, coge la cuerda de las bolas chinas y tira de ella con fuerza, provocando en ella un autentico placer y sin poder remediarlo se corre; al verlo su marido sonríe y le mete la lengua dentro del coño y se lo empieza a lamer, ella al sentirlo lo agarra fuerte de la cabeza para que no se mueva y cada vez lo aprieta más fuerte hasta que vuelve a correrse en su cara. Cuando se queda un poco más tranquila, el  marido se incorpora y sin darle tiempo a reaccionar le mete su polla tiesa dentro de ella, tan violenta y profunda, que no tardan en correrse los dos a la vez.

Se tumban uno al lado del otro y la mujer le dice: cada día de esta semana te sorprenderé con una fantasía.

Se incorpora y lo besa.

CONTINUARÁ…..

P.D.: se buscan mujeres o parejas de Barcelona o los alrededores que quieran pasarlo bien; aquí os dejo mi correo por si alguien se anima: laxa1980@gmail.com . Besos!!!!!!!