Diciembre - cenas
Se acercan las fiestas navideñas y por razón de empresa participo en tres cenas navideñas, si le añado un par de las juntas de entidades, vaya puente entre la constitución y Navidad !.
Se acercan las fiestas navideñas y por razón de empresa participo en tres cenas navideñas, si le añado un par de las juntas de entidades, vaya puente entre la constitución y Navidad !.
Por razón de empresa un par las empezamos muy al principio ya que se trata de dos clientes a los que gestionamos su patrimonio y no tanto empresas propiamente dichas. Y una de ellas fue este pasado jueves. No, no, durante la cena no pasó nada, transcurrió dentro de una amenidad natural y divertida ya que solamente se trataba de una cena distendida y para ratificar relaciones. Pero para mí fue el receso de una tarde noche reservada a mi Amo. Era a finales de noviembre que ya me ordenó que le informase de todas la cenas y mi compromiso en ellas.
A esta cena acudíamos el titular del negocio, dos compañeros, entre ellos el que me folló sin saber que era yo a quien disfrutaba y otra compañera, un par de años más joven que yo y que si bien viste con elegancia varias veces ha comentado como visto en según que momentos. De buen rollo pero con ciertas distancias si intentamos profundizar un poco más. Mi Amo me asegura que terminaran follando y que será tanto o más apasionada que yo.
Así que el jueves comí en casa y me despedí de la familia ya vestida para la cena. Ya sabéis como somos las mujeres y yo la primera, así que le pedí a mi Amo que me dejase tiempo para acudir a la peluquería, a lo que respondió que no me preocupase. En eso también las mujeres somos muy nuestras y no dejamos que cualquiera se erija en estilista. Pero el Amo es el Amo.
Estaba llegando a Barcelona cuando recibí un mensaje de mi Amo en el que me daba la dirección donde me esperaba así como instrucciones. Me sorprendió porque yo habría dirigido mi coche a una dirección que solemos frecuentar si nos citamos en Barcelona. Ya en la ronda del litoral y siguiendo sus instrucciones salí por la zona del Fórum, pare el coche en una de aquellas zonas diría más de picodromo que de estacionamiento y me acomodé siguiendo sus instrucciones. Me quité la falda y me quedé con las medias y una americana de corte masculino que me llega por encima de medio muslo. Así sentada al volante cogí mi satysfer y me regalé una amplia sesión de placer con el artilugio de moda y acto seguido le mandé un vídeo a mi Amo en el que se veía perfectamente como se excitaba mi clítoris y mejor aun se oían mis gemidos de placer rozando el éxtasis.
Temblandome todavía las piernas puse el coche en marcha y retomando las rondas continué hasta llegar al hotel W. Allí seguí las instrucciones recibidas y vestida como he descrito y con el abrigo abierto encima pedí la llave en recepción.
En la habitación no había nadie pero si que había estado preparada y de la cama salían cuatro cordones con unas tobilleras de velcro, así como un antifaz y una bola mordaza. Me quité el abrigo y sin quitarme los zapatos de tacón alto me ajusté la mordaza; contorneandome como pude me até los tobillos y quedando boca abajo me até una muñeca y bajé el antifaz tapandome los ojos. Me iba excitando sola, todo era silencio y yo cada vez me sentía más entregada. La excitación se reflejaba con una indisimulada humedad en mi sexo. Me pareció oír algo pero nada. Aunque si, pequeños sonidos como quien no quiere delatar su presencia.
Desde el silencio una mano cogió mi muñeca todavía libre y la inmovilizó y luego ajusto lo que yo había atado. Sin decir ni una sola palabra y sin preámbulo alguno un dedo se introdujo en mi ano y siguiéndole, un segundo dedo me forzó por via anal. Con la mordaza mis gemidos quedaban ahogados. Quien quiera que me estuviese sodomizando con los dedos no estaba solo ya que mientras estos entraban y salian mis nalgas recibieron el primero de una serie de azotes practicados con la fusta. Me cogió tan desprevenida que no los conté y cuando oí la voz de mi Amo que me pregunto cuantos llevaba de los 30 que me tenía reservados tuve que tirar a la baja, porque si le hubiese dicho una cantidad superior a la real habría recibido 5 azotes extras por cada uno de exceso. Fuese como fuese recibi más de 30 al tiempo que mi culo era violado por ya tres dedos que buscaban mi placer más oculto.
Contados los azotes, ellos, fuesen dos, fuesen tres, estaban totalmente en silencio provocando aquella excitación que produce lo desconocido y así note que alguien se montaba encima de la cama. Ahora era su miembro que buscaba el camino forzando mi esfinter. No, no era mi Amo quien me sodomizaba, lo supe porque al correrse el invitado gimió con unos aullidos que le situaban al borde del infarto. Con el resoplando encima mio mi Amo empezó a desatarme y abrazándome empezamos a morrearnos con delirante pasión. Estuvimos un rato los tres, el otro era un señor que no llegaba a los 40 años. Entre los momentos que pasamos en la habitación destaca una doble penetración de la que todavia me queda el sabor de los besos de mi Amo mientras su miembro se hundia en mi sexo.
Despidió al invitado y yo fui a ducharme, al salir desnuda le miré, con inocéncia pero con aquel lenguaje por el que se entienden dos personas con complicidad. "No pateixis, tinc hora reservada a la perruqueria".
Iba a ponerme la falda pero con otra mirada me lo nego. Así que recompuesta salimos los dos como había entrado, solamente con la chaqueta. Fuimos en su coche y durante el trayecto sus dedos no paraban de buscar mis puntos de placer sin preocuparse de por donde pasabamos ni de si parabamos en algún semáforo. Cruzamos media Barcelona para llegar a la zona de Sant Gervasi. Ya fuera del coche me acompañó hasta una peluqueria. No voy a comprometer a nadie pero si bien desde la calle ya aparenta un estableciomiento de tarifa alta, una vez dentro es un misterio. Tampoco detallaré la procedéncia del personal, pero si diré que son unas chicas de un trato sutil y exquisito. Fui conducida a unas dependencias reservadas y allí empezaron varias manos a ocuparse de mi. Manicura incluída. Pero hablando de inclusiones la más sorprendente es la del relax completo. Con que sutileza fui lamida y masturbada. No pude por menos que preguntarme, cuantos servidios como aquellos deben de realizar y a cuantas clientas ?.
Al terminar se me permitió vestirme adecuadamente para acudir a la cena con la instrucción de que avisase un poco antes de retirarme para procurarme un taxi a la salida del restaurante.
La cena transcurrió con la amenidad prevista ya que entre todos reina una relación distendida y por parte de nuestro cliente la satisfacción de unos resultados satisfactorios. Bromas, alguna rubricando algún chiste un poco subido de tono y mi compañera que si bien se hacia desear mantenia un tanto más las formas. la cena y su sobremesa se alargo lo suficiente pero no en demasia y al salir me excusé a las invitaciones de mis compañeros no sin pesar pero responsable del deberme a mi Amo. Y el me esperaba.
El taxi que me esperaba me llevó de vuelta al hotel W y ya en la habitación mi Amo me folló con un deseo inaudito. En la cumbre del orgasmo retozamos, nos abrazamos y nos besamos jugueteando con nuestras lenguas. Recompusimos nuestros vestidos y mi cara no podia reflejar nada mejor que mi satisfacción y como sabeis, lo mejor de una mujer bien follada es que deseamos seguir siendo folladas. Al llegar al ascensor me sorprendió, en lugar de bajar subiamos y mi sorpresa fue mayúscula al entrar en la zona de copas Eclipse Tempting. Dentro de mi confusión dejenme que lo describa como una de aquellas salas de película americana en lo alto de un hotel con Barcelona a los pies. Entramos juntos mi Amo y yo y fuimos conducidos a una mesa en la que nos esperaba su mujer besándose con un jovencito. Si alguien conoce el lugar no me negará de lo espectacular tanto del espacio como del ambiente y los clientes que lo frecuentan.
Su esposa nos presentó casi como lo que éramos, a el como su marido y a mi como a una amiga con más derechos que obligaciones. Me gustó y sorprendió la definición.
Si el chico estaba a gusto no le ibamos a frustrar y siguió con los escarceos con la esposa de mi Amo mientras mi Amo no podía quedarse corto y empezó a manosearme allí, enmedio del mundo y en la atalaya de Barcelona. Nada es gratuito cuando viene de mi Amo y al rato, habiendose asegurado de que varios jovenes se habian percatado de nuestra pasión me ordenó que me levantase y mezclase con los que a su ritmo iban moviéndose al son de la música. No tardé en notar una mano rozando mi cintura. Cual pavos reales se produjo un cortejo entre la hembra y varios machos, todos jovenes y algunos más atrevidos en sus insinuaciones que otros. Mi movil vibró y sin dejar de contornearme miré, era un mensaje "no tornis i sigues complanet. T'escriuré". Así que yo continué bailando ?, contorneandome ?, provocando ? Los roces pasaron a ser manoseos descaradamente elegantes. Luego supe que mientras yo estaba ahí el chaval seguia disfrutando del placer de la esposa y mi Amo la animaba acariciandola.
Otro mensaje "Quants t'estan posant a mil?", me preguntaba, todos, les respondi con un emoticón riendo. y seguidamente, "No ho sé Amo, 3 o 4 segur" Yo estaba allí como abducida por la música, manteniendo las formas pero sin evitar los acercamientos de aquellos jovenes.
Vamos a lo seguro, decia otro mensaje. Llevabamos más de una hora allí y yo tengo mis obligaciones. Así que en otro mensaje me ordenó que me mostrase activa con los 2 más jovencitos y les fuese atrayendo a la salida.
Su mujer seguia allí con el chico que ya habia descubierto todos los rincones de su placer y susurrandole le invitó a seguir en la habitación.
Tres chicos jovenes. Universitarios ? por la edad seguramente, pero ya situados también. Dos mujeres, con los 50 cumplidos y un Amo poniendo orden.
En la habitación ocurrió de todo, no solamente por el impetu de la juventud sino también por los consejos y proposiciones que nuestro Amo les animaba a cumplir con nosotras.