Diario de un Hipnotista (Ganga 2 por 1)

Ultima terapia con Clara y Alexa, ¿El Doc habrá hecho un buen trabajo?

Siempre hay limites en nuestras vidas, existe una tendencia a juzgar estas limitaciones negativamente. En general tiendo a ver ese enfoque como un error, sin limites no se puede comprender. Debo admitir que como muchos siento cierta reticencia al terminar mis anécdotas, porque la vida continua, y esos limites, solo son una barrera conceptual. He comenzado este diario, no para ser leído o para ser apreciado, sino para comprender. Para limitar aquel espectro de sucesos vividos.

Han pasado tantas cosas, tan deprisa, y ahora estoy en completa calma. Esto ultimo me aterra, nunca ha sido tan fácil. Tal vez soy más hábil que antes, tal vez el tiempo esta a mi favor.

El cumpleaños de Laura, fue de maravilla. El evento esta registrado en video, de principio a fin, para mi disfrute. Pronto escribiré a detalle ese evento glorioso. Pero primero debo recordar.

Ultima terapia:

Allí estaban: Alexa sonriendo, con su camisa rosa delgada, un oso blanco estampado en medio, deformado por sus enormes tetas, los jeans rotos por las bastas, en sandalias violetas con flores decorativas. Clara a su lado en el futón, de piernas cruzadas, short corto y negro, una camisa ombliguera, dejando libres sus hombros, el cabello sujetó. Creo que mis sugerencias le sentaron bien a su aspecto, se veía más sexy, era mucho más fácil verla y pensar: “Esta chica merece recibir fuerte y duro de amor pélvico”.

-Esta es nuestra ultima terapia. Alexa y Clara, ha sido un honor ser el profesional a cargo de su caso. Se separaron por un tiempo, han experimentado un aire nuevo en sus vidas. Y hoy es momento de decidir, si continuar o dar un paso al costado y tomar rumbos distintos. ¿Que piensan? Empieza, por favor, Clara.

-No estoy segura. Muy lindo discurso, pero no he sentido un cambio positivo en mi relación. Peleamos desde que vinimos aquí, ¡Alexa me termino por celular! -Dirigiéndose a su pareja.- ¿Como pudiste tener tanta frialdad? No volvería con Alexa, ni aunque me pagaran un millón de dólares.

La miré, juntando las manos, simulando seriedad.

-Entiendo, explicame. ¿Porque estas aquí? ¿Que necesidad tenías de venir?

-Tengo una compañera, más leal, más dulce y más bella. Le demostrare a esta perra, que soy capaz de avanzar sin ella. Que nunca tuvo nada que reclamarme.

-Con perra te refieres a Alexa, ¿Me equivocó?

-¿Hay otra perra en esta habitación?

Por supuesto que sí Clara, por supuesto que hay otra perra en la habitación.

-Francamente no te creo, Clara. No tiene sentido para mí.

Alexa se contenía, la punta de sus pies miraba tímidamente hacia dentro.

-¿No me cree? Ella esta más cerca de lo que usted piensa, Doc.

-¿Donde?

-Los hombres no se enteran de nada. -Blanqueado los ojos.- Es su empleada, Kassia.

-¡Kassia! ¡Ja Ja Ja! Eres graciosisíma Clara. Me estaba preocupando. Ella no es lesbiana, es una chupapollas en toda regla.

-¿¡Como puede tratarla de esa manera!? Kassia merece respeto.-Me exclamó ella.

-Lo siento por mi lenguaje. No hay que juzgar, si a ella le gusta probar el mástil del jefe de vez en cuando.

Clara, se puso de pie y empezó a vociferar.

-¡Kassia!¡KASSIA!

-Sssh, por ese tipo de reacciones acondicione este sitio para minimizar ruidos. La llamare por el intercomunicador. -Presiono el botón con inmensa satisfacción por lo que vendrá.- Kassia, ven de inmediato a mi oficina, necesitamos aclarar algo urgente.

En el consultorio, mi sexy empleada extranjera, nos observó confundida.

-¿Que sucede? -Me preguntó ella.

-Perdoname, se que tienes asuntos más importantes que atender. Clara, me refiero a esta educada chica de pelo oscuro, ¿Es tu pareja?

-¡NO! A mi gusta chupar pollas, que me follen hombres por detrás, como me corresponde. -Era liberador escucharlo de su boca.

Clara estaba atónita, no lo podía creer.

-Kassia, no bromees, estas semanas hemos compartido muchas cosas juntas.

-Lamento que lo hayas malentendido, yo soy una chica heterosexual. Mi jefe también lo es, un semental de hecho. ¿Alexa es que se llama tu pareja? Ella es bisexual, y tu eres solo una alfombra para limpiar mis pies. Es fácil de entender, chica-chico, chica-chica, pero nunca chica-alfombra.

El corazón de Clara estaba rotó. Aunque Kassia no mentía. Es triste que una alfombra se ilusione de semejante modo.

-Kassia...no..Kassia..-Justo cuando se veía a punto de hundirse en el llanto. Reemplazo su letargo por coraje.- ¡Tú, maldita puta desvergonzada! ¿Como te atreves a avergonzarme de esta manera? Me las pagaras. -Avanzó agresivamente con la intención de lastimar a Kassia.

-Caminar al trabajo me pone los ‘Pies Pegajosos’, deben estar sudados y olorosos, un asco. -Clara se paralizó, brazos a los costados, y una mirada tonta en su rostro, Alexa no podía ver con claridad la reacción de Clara.- Tumbate y limpia mis zapatos, luego seguirás con los pies, para que no olvides tu posición.

Ella obedeció, sus rodillas colapsaron contra el suelo, y se hincó para saborear los zapatos de charol de Kassia. Su lengua trazando curvas sobre las manchas de barro. Kassia, le bajo lo short.

-Lindo culo, una lastima que seas solo una simple alfombra. -Introduciendo sus manos entre las piernas de Clara, las saca con una notable humedad.- Muy bien, estas excitada, es de esperar de una zorra libidinosa como tú. Te ves ridícula exigiéndole a personas normales como comportarse, por favor, una alfombra no tiene voluntad. ¿Estoy en lo correcto?

-Una alfombra...-Lamida.-….no tiene..-Lamida.-….voluntad….-Lamida.-

Clara respondía en voz baja, robótica y sumisa.

-Kassia, cambiemos de lugares, siéntate aquí, relajate con tu alfombra. Mientras voy a socializar con Alexa.


Me senté al lado de Alexa, la rodeé por los hombros, acaricie su cabello con mi mano libre. Acercando mi boca a la suya, nos besamos, rodeamos nuestras salivantes lenguas con deseo carnal.

-No, no puedo hacerlo, debemos detenernos. Clara esta aquí, no es correcto.

-Has visto que Clara es solo una alfombra.

-¡No! Ella es...ella es….

-Una alfombra. -Insistí.

-No, no, no. Clara es...es….

-Mirame a los ojos, te guiare.

Cruzando las miradas, reafirme esa verdad indiscutible:

-Clara es una alfombra para pisar y nada más. Dilo.

-Clara es..no..Clara es..es…

-Una alfombra.

-Clara es una alfombra.

-….una alfombra para pisar y nada más.

-Clara es una alfombra para pisar.

-Buena chica. Ahora ponte en cuatro, vamos a follar.

Clara reposaba desnuda, boca arriba, masturbándose mientras Kassia restregaba sus pies ensalivados sobre su piel. No le podía dejar toda la diversión a mi empleada.

Alexa se bajo los jeans por los muslos, su coño se develaba desnudo. Hurgue su empapado sexo. Choque mi pelvis contra su culo, palpe su tatuaje: ‘Propiedad Privada’. Metí mi mano entre su camisa, introduje mis dedos bajo su brasier.

-Tienes el brasier puesto, y te ocupaste de no llevar bragas. Eres una guarra total, Alexa. Voy a follarte el culo.

-¡No, por favor! Aquí no, sería muy humillante.

-Estas muy negativa hoy, ‘Pinocho Girl’. ¿Como te sientes, ahora?

-Me siento en paz….-Dijo en un susurro.

-Te gusta estar en trance, ¿No es así? Te gusta que yo posea el control de tu mente, y de tu cuerpo.

-Sí Amo, me gusta ser su esclava sumisa.

-Voy a juguetear con tu culo, te meteré los dedos, y nalgueare tus mejillas. En tu mente se irá haciendo un remolino de ansiedad, hasta que sucumbirás y me rogaras que te folle el culo. Voy a contar hasta tres y no recordaras este dialogo. Uno, tu consciencia es gelatinosa. Dos, no tienes el control, jamas has tenido el control. Tres, despierta Alexa.


Lubrique mi verga con la humedad entre sus piernas. La fui tentando más y más, con mi dedo medio, mi pulgar y a veces restregando groseramente la punta de mi glande en su ano. Llego el momento en que gritaba rogando que la follara, así que hundí mi grueso tallo en su recto de un golpe, me sostuve de sus caderas y la embestí como un caballo a una yegua. Finalmente llene su cuerpo de mi viscoso y blancuzco cariño.

Extraje lentamente mi miembro hinchado de ella.

-Clara, chica-alfombra, ven a limpiar el culo de esta perra. No olvides absorber cada gota de corrida.

Enseguida, se puso a ello. Colocó su cabeza entre las nalgas de Alexa, una mujer delicada realizando sus deberes.

-Me has dejado sin alfombra, tengo los pies cubiertos de baba, no es justo jefe. -Me reclamo mi recepcionista.

-A llegado tu turno de limpiar, despierta Kassia.

Se puso pálida, miró lentamente a su alrededor, procesando lo que veía. Estuvo en trance desde esta mañana, amaneció en trance, preparó su desayuno en trance, y vino a trabajar en trance.

-¿Que esta...que esta pasando? Estoy descalza. Esa chica, ¡Oh por Dios! ¡Exijo una explicación AHORA!

-Ehm, esto es un sueño Kassia, estas soñando. -No tuve mucho animo para elaborar mis excusas.

Sin embargo, ella estaba tan confundida y su mente debía estar dando vuelcos por la surrealista la escena, dejándola en un pozo de dudas. Observó mi cuerpo de arriba a abajo, se restregó los parpados con ambas manos. Estar tanto tiempo en trance siempre causa una gran fragilidad en la noción de realidad en mis victimas.

-No, no es un…no tiene sentido...

-‘Dulce Boca Polaca’. Es hora de trabajar nena.

Su semblante se relajo, busco en el cajón de la mesa a su costado, el tarro de miel estaba allí, lo renovaba cada semana. Se embadurno los labios, la lengua, el paladar.

Me dio espacio para sentarme. Follar a Alexa luego de ese gran día de consultas, fue agotador. Una buena mamada viscosa es justo lo que necesitaba.


Allí estaban ellas: Alexa sonriendo, su par de duros pezones al aire, estampado en labial sobre sus enormes tetas: ‘Perra Desechable’, unas medias veladas rosa oscuro y un corbatín negro. Clara a su lado en el futón, con las piernas abiertas, ambos pies sobre el sillón, una flecha en labial señala hacia su monte de venus, sobre la flecha esta plasmado: ‘Me gusta la leche fresca’, unas borlas violetas cuelgan de sus senos, su cabello sujetó.

-Esta es nuestra ultima terapia. Clara y Alexa, ha sido un honor ser el profesional a cargo de su caso. Se separaron por un tiempo, han experimentado un aire nuevo en sus vidas. Y hoy es momento de decidir, si continuar o dar un paso al costado y tomar rumbos distintos. ¿Que piensan? Empieza Alexa.

-Doctor, no puedo con esto. Debo decírselo, necesito confesar. -Con firmeza, decidida a hacerlo.

-De acuerdo, confiesa Alexa.

-Clara, el Doctor y yo, ambos, nosotros…...nosotros follamos. Él me uso como su deposito de semen, taladró cada uno de mis agujeros, estuvimos….

-¡Basta Alexa! Ya lo pesque. -Exclamó calmadamente Clara.- Ahora escuchame a mí, he comprendido, se que te he tratado mal. Los humanos cometemos errores. Solo no vuelvas a hacerlo, ¿Vale? Borrón y cuenta nueva. Dejemos lo pasado en el pasado.

Alexa se sacudió incomoda en su lugar.

-No puedo Clara, la necesito. Necesito su polla. No sé como explicarlo...simplemente lo necesito.

-¡ALEXA! -Clara estaba indignada. No una indignación adulta, sino una indignación típica de una niña cuando no le cumplen su capricho.

Erá el momento de intervenir.

-Clara, también tienes algo para confesar.

-¿¡Yo!? ¡Ustedes dos son los que se encamaron!

Chasquido

-Recuerda Clara, tienes que confesar. Te voy a dar una pista: Tony.

Chasquido

-Tony….él y Alexa….yo… -La notó atareada, desubicada. Mascando las palabras.

-Voy a proponerte un ejercicio mental, Clara. Eres una buena chica ¿No?

-Soy una buena chica. -Quedando con la boca entreabierta, forzándose a evitar que un hilillo de saliva resbale por las comisuras.

-Solo imagina, es una sugerencia que te hago. Imagina, Tony viene a tu casa. ¿Lo tienes?

-...Lo...tengo…. -Sus piernas se agitan nerviosamente.

-Él posa sus manos en tu culo y te penetra.

-….Él me…..penetra...penetra….-Su mirada se desvía.

-Él te da una buena cogida de culo.

-….me da una buena cogida…..

-Y te encanta.

-Me encanta. -Se relame los labios.

-Eso es. Un gran ejercicio mental. ¿Podrías dejar tus manos quietas un segundo?

-¡No es lo que parece! ¡Yo! ¡Yo! A mi me gustan las mujeres. Solo las mujeres.

Clara levanta las manos, un brillo leve cubre la punta de sus dedos, recientemente estaban jugando deliciosamente en su coño. Debí quedarme callado, y dejarla disfrutar de su fantasía, pero la sesión necesitaba continuar. Mis horarios son estrictos.

-¡Clara, te gustaba Tony! Por eso estabas celándome. Esto es el colmo.

Las críticas de Alexa me parecen justas. ¿Que erá eso de estarla celando?

-Yo..no sé...puedo explicarlo….yo….ehm..-Clara se estaba quedando sin ideas.

-Ese es el problema contigo Clara. -Vuelvo a intervenir.- Buscas explicaciones donde no las hay. Piensas que debes controlarlo todo, cuando en realidad serías plenamente dichosa si te dejaras guiar. Alexa seria una buena Ama, para una esclava de clóset como tú. Te lo digo con todo el estima que te tengo, Clara.

-¿Esclava? ¿¡QUE CARAJOS ESTA INSINUANDO!?

-Descubrí varias cosas en estas terapias. Detalles sutiles de sus psiques. Por ejemplo tu atracción secreta por Tony, y lo buena que era cabalgando la polla Alexa, si es tan buena manejando una polla, controlar una esclava como tú en comparación no es difícil.

-¿Por que debería ser la esclava de Alexa? Eso no tiene sentido.

-Tienes una severa obsesión por los pies, los tres sabemos de tu relación con Kassia.

-¿¡Ustedes lo sabían!? -Clara se ruboriza.

-Lo sabemos todo sobre tí. Todos tus fetiches y pasiones secretas. ¿Creíste que estas sesiones de hipnosis eran para mejorar su intimidad? Un consultorio sin prestigio profesional, inexistente en las guías telefónicas, que exige nulos datos clínicos. ¿Captas lo absurdo que eso suena? Nuestro objetivo siempre fue sacar tu lado más sumiso, convertirte en una esclava obediente.

Clara se veía estupefacta, la información la golpeó de repente.

-Déjense de bromas, yo nunca. Escuchen bien: ¡Nunca voy a ser la sumisa de la relación!

-Te voy a dar una oportunidad. Echale un vistazo a los pies de Alexa.

-¿Por..por..q..que? ¿Para que? -Tartamudeando, evadiendo la situación.

-Alexa, ayudame.

Ella jala a Clara del cabello, obligándola a mirar sus piernas, sus pies.

-¡Suéltame! -Alexa la suelta.- No veo nada extraño. ¿Debería suceder algo? Ja!

-Muy bien, has probado tu punto. Deja de mirarlos. -Sus ojos se mantienen enfocados en los pies de Alexa.- He dicho que dejes de mirarlos. -Aún sigue concentrada en los pies.- Ah, entiendo lo que sucede. Encargate Alexa, ya has tenido bastante practica.

Alexa se retira la media derecha, Clara comienza a babear. Vuelve a sujetarla del pelo, con más fuerza.

-Al suelo, donde perteneces.

-Sí, señora. Lo que usted diga. -Clara acatá la orden con diligencia.

La acomoda para que crucen miradas, Alexa la observa desde arriba.

-¿Que piensas acerca de que yo me acueste con otras personas?

-No..no es correcto...-Balbuceando.

Alexa la intimida con el ceño fruncido.

-¿Quien eres tu para indicarme lo que es correcto o incorrecto? ¿¡EH!?

-…..n...nN..y….-Intenta decir algo, pero no le salen las palabras o al menos no alcanzo a escucharlas.

-Abre la boca zorra estúpida.

Clara obedece, no podía ser de otra manera. Alexa le escupe en la boca, revuelve su propia saliva con sus dedos, introduciéndoselos hasta generarle arcadas. Repite esto varias veces, escupir, revolver, hundir los dedos. Cada cierto tiempo le daba un beso con lengua, profundo y forzado.

-¿Quien eres? O mejor ¿Que eres? -Reitera su cuestionamiento Alexa.

Clara con el rostro ensalivado, respirando a bocados.

-Ahg….ah..sh...¡Soy tu esclava!….. ¡TU ESCLAVA!….¡Esclava! -Lagrimas salen de sus ojos.

-Perfecto, te mereces probar mis pies puta.

-Gracias, señora.

-Ama Alexa.

-Gracias, Ama Alexa.

Clara lamé primero los dedos chicos, luego el pulgar. Va bajando con el reverso de la lengua hacia el tobillo por la planta. Regresa con la lengua, y tragá el mayor porcentaje de pie que cabe en su boca.

Me paro, camino hacia ellas. Desato mi cinturón y dejo que mi pantalón caiga por su propio peso.

-Alexa, me harías el honor.

-Por supuesto, Doctor.

Alexa se come mi venosa polla con placer, a la vez que acaricia mi escroto. Tomó su nuca y la empujo más al fondo, follar su linda carita es un manjar. Cuando mi palo esta duro como el marfil, le pregunto:

-¿Puedo correrme en el coño de Clara?

-¡Claro! Esa perra necesita una buena dosis de leche fresca.

Ambos nos echamos a reír. Clara dejo de lamer a Alexa, para reclamar sus derechos.

-No lo permitiré, nadie me ha…..

-Te gustan los ‘Pies Pegajosos’, una polla pegajosa no es un gran cambio. Ponte de espaldas en el sillón con las piernas abiertas. Es hora que despiertes Clara.

Ella no entendía lo que acababa de suceder, el hiato alteró su percepción. Y ya era demasiado tarde.

-No...no… -Introduje mi polla en su carnoso y ajustado coño-…..mmmmnn…..Oh joder..esto es...esto es..bueno….

Perfore su coño unas cuantas veces más, las borlas en sus pequeñas tetas daban graciosos giros con mis embestidas, la soplada de polla de Alexa, me dejo listo para acabar. Termine en su interior, y paulatinamente extraje mi verga embadurnada de sus jugos.

-¿Como te sientes Clara? ¿Obediente, sumisa? Sin decisión alguna sobre tus acciones o lo que hacen contigo. Con mi leche espesa en tu interior.

-...Maravillosamente...-Clara por fin estaba sonriendo, con fragilidad en su mirada, y saliva bordeando sus labios, escurriendo por el tatuaje de serpiente en su cuello.

-Alexa limpiarías a tu esclava.

Sin necesidad de respuesta, besó las piernas de Clara, y limpió a lamidas el semen que borboteaba por el coño de Clara.


Allí estaban: Alexa sonriendo, Clara a su lado en el futón, con las piernas abiertas, ambos pies sobre el sillón. Ambas despeinadas y desnudas, con sus collares de esclavas.

-Esta es nuestra ultima terapia. Clara, Alexa, ha sido un honor ser...ehm….-Saco un papelillo-recordatorio del bolsillo de mi camisa.- el p-r-o-f-e-s-i-o-n-a-l a cargo de….saben olvídenlo. -Arrugo el papelillo.- Son dos muñecas sexuales, dense la mano y realicen las paces.

-Te perdono Alexa. -Dice Clara, sosteniendo con firmeza la mano de Alexa.

-Te perdono Clara. -Procedé a darle un abrazo.

Muy tierno, ¿No?

-¿Ven lo fácil que era? Ahora no sean frívolas, dense un beso.

Unicamente se rozan los labios.

-Por favor. Más pasión, como en los videos pornográficos, saben lo que quiero ver y lo que ustedes pueden dar de sí mismas.

Alexa tomá la iniciativa, agarra el mentón de Clara, y la guiá hacia su boca abierta. Retuercen sus lenguas, se enredan como dos cables de tensión. Clara la estimula con su mano en los pezones. Alexa palmotea su culo. Saco mi cámara del trípode y me acerco a ellas, para tener un mejor cuadro de imagen.

-Vamos Clara, sé que quieres probar esas tetas ¿Alexa que tal chupa esta zorra?

Clara desliza su lengua de la boca de su amante, hasta su pezón izquierdo y succiona.

-Mmnn...bien...chupa, muy bien.

Aprecio la escena de dos chicas enroscándose, amándose.

-Glorioso nenas, ahora un 69, para los espectadores.

Tardan un rato en acomodarse, Alexa esta abajo de Clara. Conectan sus bocas a sus respectivos coños. Amaso el trasero de Clara, es más firme que el de Alexa, lo cual es muy satisfactorio.

Regreso al sillón.

Clara se ayuda con los dedos, Alexa hace lo mismo a la vez que explora el perineo de Clara. Se corren unas cuantas veces y las pongo a dormir, sudorosas y excitadas.


Allí estaban: Alexa sonriendo,con su camisa rosa delgada, un oso blanco estampado en medio, deformado por sus enormes tetas, los jeans rotos por las bastas, en sandalias violetas con flores decorativas. Clara a su lado en el futón, de piernas cruzadas, short corto y negro, una camisa ombliguera, dejando libres sus hombros, el cabello sujetó.

En sus sus vaginas de putas lascivas están unos vibradores ovalados a máxima potencia. No pueden notarlos más allá de un efecto subliminal.

-¿Que piensan sobre volver a formar una pareja?

-No me parece rentable, Alexa es bisexual. Y dudo que pueda dejar su adicción a la polla.

-Y tu Alexa ¿Que opinas?

-Concuerdo con Clara, no puedo dejar la polla. Y además Clara es una dictadora en la relación.

-Si les digo que hacen una hermosa pareja. Que son un dúo candente. ¿Les parece, adecuado?

-¡Somos candentes! -Gritan ambas, emocionadas, agarradas de las manos.

-Tal vez podrían intentarlo, de nuevo. Desde cero.

-Yo podría. -Afirma Clara.- Unas cuantas vergas en la relación no debe afectarme.

-Y yo puedo someterte a tí sexualmente, cada vez que te comportes de forma molesta. -Añade Alexa.

Clara la observa suspicazmente.

-Ja! ¿Vas a somet...Ah..mmn

Alexa se le anticipa e introduce su mano debajo de los shorts a Clara, mientras le besa el cuello. Clara tiembla, sus ojos están apunto de rodar hacia atrás.

Les interrumpo:

-Bueno chicas, hablemos de mi paga de hoy.

Se detienen asombradas, buscan sus carteras alrededor.

-Doc, juraría que traje mi cartera, pero no la encuentro.

-Yo tampoco la veo. ¿Podemos fijar el pago otro día? ¿Mañana?

-No, lo siento hermosas. Deben pagarme antes de salir por la puerta.

Se quedan pensando, nerviosas. Sus culos se balancean en el asiento por el efecto de los vibradores.

-Hagamos un trato, ¿Que tal si son mis prostitutas por esta noche?

Clara le susurra al oído a Alexa, Alexa le devuelve el mensaje. Cuchichean hasta tomar una decisión.

-Lo haremos. -Dice Alexa.

-¿Te parece degradante, Clara?

-No, es un trabajo más. Un trueque entre dos personas.

-Además estamos muy cachondas, una follada nos vendría de perlas.

Clara le da una mirada mortal a Alexa, ella esta tan igual de cachonda, pero no se le debe mostrar ‘necesidad’ al cliente.

-Genial, sería mejor verlas de rodillas. Las putas no tienen permitido sentarse en el futón, dejan manchado de semen los asientos y eso es problemático para el aseo luego….

-¡Oh, claro! Disculpe, Doc.

A mi izquierda se arrodilla Clara.

A mi derecha, Alexa.

Dos prostitutas lesbianas a mis pies, deseosas y cachondas.

-Comiencen, sean creativas.

Alexa, desató uno de mis zapatos y Clara la imitó. Luego retiraron mis medias. Clara olfateo mi zapato y arrugo el rostro.

-Ha sido una larga jornada, ¿No es así, Doc?

-Sí, bastante. Por eso unos servicios sexuales antes de regresar a casa me vienen de maravilla. -Presiono el intercomunicador.- Kassia, diles a los de la próxima sesión que aplazamos, asegúrales que tendrán un asesoramiento gratuito adicional por los inconvenientes.

-Anotado, jefe.

Clara besa mi pie de arriba a abajo, chupa mi pulgar, estirando su mejilla desde el interior. Alexa esta ocupada con mi talón derecho.

-Esto es muy degradante. -Comenta Clara.- Pero me gusta, me hace sentir más femenina, más sumisa.

Realmente mi erección subió a tope con sus palabras, si puedo hacer a una lesbiana frígida anti-prostitución, mi puta personal y sentirse bien consigo misma siendo sumisa y femenina para su Amo. Entonces he realizado una gran labor social.

Alexa masajéa la extensión de mi pie y acota:

-Me encantan los pies grandes, son tan masculinos.

Siguen entre besos, caricias y lamidas. El bulto en mis pantalones ya constituye una montaña monstruosa.

Ellas se percatan y me los bajan, Alexa desabrochándome el cinturón y Clara jalándolo de las bastas. Ven mi robusto tallo al aire y se aproximan a contemplarlo, a adorarlo. Clara se encarga de mis bolas, en tanto que Alexa se atraganta con mi polla.

Aquí señoras y señores, queda demostrado que dos cabezas son mejores que una.

Van intercalándose, Clara arrastra los labios extendidos por mi piel, ambas deslizan sus cabezas, lado a lado de mi tallo. Buscándose, tocándose la punta de las lenguas, con mi polla en medio conectándolas. Suben, suben y suben hasta juntar sus labios húmedos y luego bajan. Alexa llega hasta mi perineo y escala con una lamida lenta hacia mis bolas. Clara ahora se come mi verga, degustándola.

Siento su nariz contra mi vientre, las clases que le he brindado han surtido efecto, me corro en su garganta. Mi espesa esencia, es lo suficientemente abundante como para que Clara comparta con Alexa.

¿Acaso no es maravilloso el amor?

Me sorprendo cuando Clara arruga el entrecejo mientras se relame los labios, se estampa su propia mano en la frente. Y dice:

-¡Alexa! Le dejamos las carteras a la secretaría.

Alexa desliza su dedo indice sobre el labio inferior para limpiarse el semen. Lo junta con el pulgar y observa el hilillo denso formarse y romperse frente a sus ojos.

-Creo que podemos pagarle Doc. -Me dice ella, con un amplía sonrisa pícara.

Visitas de control terapéutico:

Al otro día de esa consulta, tuve que cerrar el local. Nada relacionado con ellas, aún así me parece irónico, sentí que estaba en la cima, pero en realidad solo estaba en una cueva de reposo.

Me consideraba un profesional en mi campo, así que realice visitas de control unas semanas después. Debía revisar que mi tratamiento continuará surtiendo efecto.

-Hola Doc, ¿A que se debe su visita? -Me dice Clara reposando el cuerpo contra el marco de la puerta.-

-¿Alexa está?

-No, ella llega a la no….

-‘Modo Clovis.’

Sabía que a ciertas horas Alexa estaba trabajando. Por lo cual aprovechaba para jugar con Clara un rato, entre los juegos teatrales que “interpretamos”, estuvieron:

*Ella creyó que mi semen era crema para manos, y sus manos necesitaban bastante crema.

*Mi pene es una sonda y ella tiene duendes invasores en el vientre. El paso lógico consistía en introducir mi “sonda” en su cavidad para verificar las intenciones de los duendes.

*Ella es la empleada de la casa y yo soy su patrón. Debía sacar provecho de las habilidades de Clara para la limpieza.

*Soy un robot que busca conquistar el mundo, y la única manera de salvar a la humanidad, se explica por sí misma.

Y mi favorito:

*Ella necesita evitar ser follada para salvar a la Federación Intergaláctica, pero falla vergonzosamente.

Con Alexa fui menos exigente, por sus voluminosos atributos ya me sentía lo suficientemente estimulado, chasqueaba los dedos y realizaba un estriptis en cualquier sitio: La calle, un restaurante o la sala de estar.

-¿Por que vinimos a una biblioteca? -Se pregunta ella.

-Para ver el Show.

-¿Cual Show?

-El tuyo.

Chasquido

La bibliotecaria es amiga mía, la biblioteca es pequeña y poco conocida. Cierra el local, mientras Alexa me rodea con sus brazos por la espalda, presiona sus tetas contra mí. Besa mi cuello. Abre mi bragueta y acaricia mi polla con sus dedos.

Se levantá, alzá los brazos y mueve las piernas, su cuerpo se agitá, sus tetas rebotan en al aire. Regresa caminando a gatas hasta debajo de mi mesa. Me quito los pantalones, Alexa se desliza rozando mi cuerpo, esta encima de mis piernas, menea su culo sobre mi erección.

La guío al pasillo de libros clásicos y la empotro como es debido.

Mi amiga bibliotecaria, posee pelo castaño, ojos verdes y lindas curvas. Es bien arreglada, con gafas y de baja estatura. Cuando yo termino, limpiá el lugar. Lleva a Alexa aún en trance a una habitación privada, se sienta frente a Alexa que se recuesta en el piso junto algunos dildos. La bibliotecaria tomá el libro de ‘Refuerzos y Sugestiones’, con él condiciona y refuerza la hipnosis en mi linda esclava.

Sigo llevando a algunas chicas allí, es tan efectivo el método que usualmente con solo introducir ‘Chupar’ en una frase comadreja terminan babeando, rogando internamente por un poco de amor oral.