¿Destino o casualidad?

Esta es la primera parte de bastantes, en las que Lara una jóven cuenta su día a día con su supuesto "alma gemela" a quien conoce por destino o casualidad...

¡Hola a todos! Este es mi primer relato aunque tengo unos cuantos en mente, espero que os guste y no seáis muy duros a la hora de comentar.

Bueno sin más demora... aquí os dejo el relato.

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Mi nombre es Lara, tengo 15 años y bueno, soy una chica no muy femenina pero tampoco llego a ser la típica marimacho, simplemente, me gustan las sudaderas, camisetas anchas, unas vans o converse... Me gusta llevar mi pelo largo a la altura de los hombros (más o menos) es castaño, rizado y llevo flequillo de lado y suelo ir despeinada. Mi físico creo que es bueno debido a las horas que dedico a jugar al baloncesto, sólo como hobby. Mido 1,64; tengo bastantes caderas pero al llevar camisetas anchas no se notan.

Bueno dejaré de hablar de mí y os contaré como conocí a mi alma gemela...

Mis amigos siempre dicen que soy muy despistada, y más cuando voy escuchando música con mis cascos (auriculares tipo DJ). Hoy es jueves, por fin se va a acabar la semana, llevo una semana de mierda se podría decir, mi mejor amiga se enfada conmigo por algo que yo no he echo, un buen amigo lleva dos semanas sin hablarme porque se me declaró pero le dije que lo sentía mucho pero no sentía lo mismo, mis calificaciones cada vez van a peor (y pensar que yo era una alumna de notables...) bueno y más cosas pero no os quiero aburrir.

Como iba contando, voy por la calle mirando el Twitter en mi móvil y con mis auriculares puestos escuchando a todo volumen al grupo "t.A.T.u." hace bastante frío casi no siento mi nariz; recibo una nueva notificación cuando de pronto... ¡Choco contra alguien!

  • Desconocida: ¿¡Pero que haces mocosa de mierda!? - escucho sin levantar la vista, me encuentro en el suelo, me duele bastante el tobillo.

  • Yo: Podías preguntar que tal me encuentro, ¡imbécil! - pronuncio al rato; mientras levanto la vista, era una chica preciosa... me quede en shock.

Era morena, pelo liso con flequillo recto, unos ojos hermosos de color verde; me quedé mirando a esos ojos y me perdí en ellos. Durante bastante tiempo.

  • Desconocida: ¡Ey! ¿Estás ahí? - me habla la chica mientras mueve su mano enfrente de mi cara.

  • Yo: Ah... si... si... Estoy aquí. ¿Podrías ayudarme a levantar y ahora hablamos? - dije algo desconcertada.

  • Desconocida: Si, claro. - me decía mientras extendía su mano para ayudarme a levantar.

  • Yo: Auch... me duele el tobillo - dije con voz bastante dolorida.

Pero al mirarla a los ojos pude notar cierta preocupación, esa soberbia con la que me habló al principio se había esfumado.

  • Desconocida: Ven que te ayudo a sentarte en ese banco de allí. - me contestó

Pasó su brazo por debajo de los míos, en ese momento sentí una extraña sensación, se podría decir que me sentía a gusto así con ella... Al fin llegamos al banco, me senté como pude y se separó de mí pero se sentó cerca de mí.

  • Yo: Muchas gracias por ayudarme - le agradecí.

  • Desconocida: No me las des, y bien. ¿Qué tobillo te duele? - me preguntó con un tono de voz demasiado tierno.

  • Yo: Este, el izquierdo. - le señalé.

La chica rápidamente se agacho y se puso de rodillas mientras cogía mi tobillo y lo movía.

  • Desconocida: Cuando te duela avisa - me dijo mientras nos mirábamos a los ojos.

  • Yo: Auch auch! Ahí me duele mucho - dije con cierto tono de llorera.

  • Desconocida: Siento decirte que es un esguince, lo siento. - me dijo tristemente.

  • Yo: Ey, ey, ey. No te pongas triste, que la del dolor soy yo jajaja - le dije sonriendo

  • Desconocida: jejeje Es que me siento mal y pensar que te he tratado mal. ¿Hay algo que pueda hacer por ti? - preguntó curiosamente

  • Yo: Sí, decirme tu nombre, por cierto yo me llamo Lara - le dije brindándole otra sonrisa.

  • Desconocida: Bonito nombre... Mi nombre es Julie - me dijo mostrándome su perfecta sonrisa.

  • Yo: Precioso nombre, aunque no tanto como tú... - dije sin darme cuenta, en fin, pensé en voz alta.

  • Julie: Jejeje muchas gracias, tu tampoco te quedas atrás. - me contestó, en ese momento sentí esas típicas mariposas en el estómago.

  • Yo: Por curiosidad, ¿cuántos años tienes? - le pregunté para poder seguir con esta conversación, no me quería separar de ella.

  • Julie: Ey preciosa, por qué no seguimos con la conversación en ese bar de allí, es que me estoy quedando helada - me dijo con cierto tono suplicante.

No me podía creer lo que acababa de oír, me acaba de llamar preciosa aunque seguramente llamaría a sus amigas así también. Y otra cosa que me rondaba la cabeza, por qué siento mariposas en el estómago. La acabo de conocer, pero si ella me dejara la conocería más.

  • Julie: Eooo ¿estás ahí? - me preguntó otra vez moviendo su mano en frente de mi cara.

  • Yo: Sí, si, aquí estoy. ¡Vamos al bar! Invito yo - dije sin pensarlo dos veces.

Me levanté pero me puse a cojear, me dolía bastante, ella debió darse cuenta y me extendió su mano para apoyarme en ella. Le di la mano e intentaba no cargarme mucho pero no podía caminar si no lo hacía.

Llegamos al bar y nos sentamos en una mesa bastante alejada, al cabo de unos minutos llegó el camarero preguntando que qué queríamos.

Yo pedí un chocolate bien calentito y ella pidió un café.

  • Yo: Bueno, ¿y cuántos años tienes Julie? - le pregunté para seguir con la conversación.

  • Julie: Tengo 19, ¿y tu? - me preguntó con una sonrisa.

  • Yo: Woow, pues... Yo tengo 15 - le contesté.

  • Julie: ¿¡En serio!? Pareces de mi edad o así - me dijo con gran incredulidad.

Continuamos la conversación por varias horas aunque me parecieron tan solo unos minutos. Conseguí averiguar de ella que estudia medicina, por algo sabía que tenía un esguince en el tobillo, también averigüé bueno me contó que lo había dejado hace poco con su novio porque vivían lejos, que vivía sola en esta ciudad y que no conocía a mucha gente solo a sus compañeros... Me encantó pasar la tarde con ella. Nos despedimos con dos besos ya nos habíamos distanciado cuando me di cuenta de que no tenía su numero de móvil.

Me giré y vi que estaba bastante lejos pero salí corriendo tras ella.

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Bueno y hasta aquí el relato por hoy. Espero que os haya gustado y también me gustaría que me dejarais en los comentarios si debería también escribir la historia desde el punto de vista de Julie o solo desde el punto de vista de Lara.

Muchas gracias por leer.

PD: intentaré subir la continuación lo más rápido posible.