Despues de hablar contigo

La imaginacion puede llegar ser el arma sensual mas poderosa

Después de hablar contigo.

Me levante de la silla de mi escritorio y me quite la blusa despacio, mire al espejo que tengo en mi cuarto y me quite la orquilla que me sujeta el flequillo y alborote un poco mi pelo, tan rebelde como siempre. Desabroche mi pantalón y lo deje caer al suelo, cogi mis toallas y me dirigí al cuarto de baño que esta justo al lado de la puerta de mi habitación, a llegar abrí el grifo del agua caliente y cerré la puerta con pestillo quería disfrutar de ese momento sin que nada ni nadie lo estropeara. Volví a mirarme en el espejo del cuarto de baño, y empecé a perderme en mi mirada, cerré por un momento los ojos y note como tus manos empezaron a acariciarme el cuello tan suavemente como había imaginado otras veces, sentía como iban acariciándome llegando hasta los hombros, tu cuerpo empezó a pegarse al mío mientras tus manos seguían su curso perdiéndose por mis costados y llegando hasta el filo de mis culotes y jugando con ellos… Abrí por un momento los ojos mirándome de nuevo en el empañado espejo del baño, note tu presencia como un borrón en el espejo, allí estabas con esa mirada penetrante que hace que sonroje, con esas manos que hacen que tirite mientras me ibas desabrochando el sujetador  separando los tirantes de mis hombros y dejándolo caer al suelo.

Vuelvo a cerrar los ojos y me dejo llevar por tu presencia, empiezo a notar tus dedos jugar con mis pezones, bajan despacio por mi vientre  y 4 de tus dedos se cuelan dentro de mi culote casi rozando mi sexo mi cuerpo reacciona y mis pulmones sueltan un leve gemido mientras noto como tus dedos tiran del culote hacia abajo, dejándolos caer al suelo, dejándome desnuda entre tus brazos, notando tu respiración pausada en mi cuello y sintiendo la mía acelerada al notar tus manos recorrerme.

Sujete tus manos para que no dejaran de acariciarme y casi a tientas busque la ducha, el agua ya estaba a la temperatura que a mi me gusta no muy caliente, casi fría, note al meter el pie y sentir el agua como mis pezones se erguían un poco mas, tus manos  al recorrerme notaron ese cambio en mis pezones y desencadenó un delicioso gemido de tus entrañas que hicieron que mi sexo se mojara aun mas, tus dedos acudieron en busca de mis flujos mientras me iba acercando al agua que caía e iba recorriéndome entera casi igual que tus manos que iban desde mis boca donde me dejabas jugar con tus dedos lamiéndolos, mordiéndolos y chupándolos, bajaban despacio por mis pechos deteniéndose en los pezones y dándome deliciosos pellizcos que hacían que se pusieran duros contrastando con el frescor del agua que iba cayendo sobre mi, para después pasar por mi vientre y seguir así el recorrido que llevaba el agua hasta desembocar en todo mi coño rasurado al completo donde me acariciabas con la mano abierta y jugando con mi clítoris con la palma de tu mano mientras tus dedos  recorren entera mi entrepierna haciéndome suspirar mientras el agua cae sobre mi cara. Levanto mi pierna derecha y la apoyo en el borde la bañera dejándote el camino libre para satisfacer todos mis deseos, tus manos acceden rápidamente por mi coño acariciándolo mas frenéticamente, tus manos se pierden por mi cuerpo no quieren dejar ni un solo rincón sin acariciar, mi deseo aumenta al mismo tiempo en que tus manos se pierden por mi vagina metiendo uno de tus dedos del tirón, haciéndome gemir y casi obligándome a apoyarme en las mojadas paredes de mi ducha, deseaba sentirme así de sucumbida, así de embriagada, así de invadida por tus manos…

Noto como sacas el dedo y metes otro mas ahora tus manos no reparan en mis pechos, ni en mis costados, ni en mi piel solo pueden acaparar mi sexo haciéndome tiritar de placer a la vez k una de tus manos se encarga de mi vagina, metiendo y sacando los dedos, buscando mis puntos erógenos y la otra de mi clítoris, jugando con él recorriéndolo en círculos, pellizcándolo suavemente con tus dedos, no puedo remediar gemir y suspirar a duras penas mientras el agua gorgotea por mi garganta, mientras el calor de mi interior se hace mas palpable, mientras muerdo mis labios para ahogar un gemido mucho mas fuerte, mientras voy llegando poco a poco a ese orgasmo tan deseado por los dos, mientras no paro de gemir, mientras voy dejándome llevar por tus manos…

Al terminar de recibir este orgasmo que me has brindado termino de ducharme abro la cortina de la ducha y salgo de la bañera, me apoyo en el lavabo con mi toalla envolviendo mi cuerpo y mi pelo mojado a un lado de mi cuello, me miro al espejo y apoyo una de mis manos en el espejo, sin querer me sale una sonrisa y una mirada de lascivia, mientras que de mis labios sale un susurro, casi imperceptible aunque seguramente lo habrás escuchado a pesar de la distancia…..

Gracias”