Despertando cachondo y caliente
La vecina tragaba mi polla cada vez más rápido y cada vez yo estaba más cachondo que me corrí en su boca y ella quería más acción. Se dio la vuelta y se sentó sobre mi polla y empezó a cabalgar muy rápido, se dejaba llevar por los insultos que le decía. Cada vez que le decía zorra o puta...
Estaba desnudo en mi cama cuando mi vecina pelirroja entro en mi habitación. Ella era delgada, sexy y muy morbosa
Se acerco a unas esposas eróticas que tenia colgadas en la pared, las cogió juguetonamente y me las puso y se desnudó. Se sentó en mi cara y me dijo:
- Comémelo -
Yo empecé a comérselo de arriba abajo, muy despacio y haciendo círculos rápidos que la hacían jadear como una perra en celo y se a balanceaba al ritmo de mis lamidas. Estuvimos así un poco más hasta que cambió de posición para hacerme una mamada y comerle el culo y el coño en un 69 que a los dos nos pondría tan cachondo que acabaría metíendosela y follaríamos como locos durante horas.
Ella se metió mi polla que estaba tiesa ya despacio en su boca y dio una larga y lenta chupada que me hizo vibrar de placer se la tragaba entera y la dejaba chorreando con su saliva y en pocos segundos se la tragaba entera otra vez.
La vecina tragaba mi polla cada vez más rápido y cada vez yo estaba más cachondo que me corrí en su boca y ella quería más acción. Se dio la vuelta y se sentó sobre mi polla y empezó a cabalgar muy rápido, se dejaba llevar por los insultos que le decía. Cada vez que le decía zorra o puta, ella se calentaba más y más y cabalgaba más rápido y me bofeteaba la cara pidíendome más.
Despúes se dio la vuelta y se la metió por el culo hasta el fondo y empezó a moverlo despacio y otras veces rápido. La chica bajaba rápido y se quedaba unos segundos con toda metida en su culo para finalmente subir lentamente para dilatarse el culo y si estuvo un buen rato hasta que corrió como una guarra y se bajó de la cama y me quitó las esposas y me dijo follame como tú sabes, cabrón.
Me levanté de cama aún con la polla dura y la agarrare del cuello y la empotré contra una pared y se la clavé en su coño y empecé a bombear fuerte mientras ella rodeaba mi culo con sus piernas y yo movía mis caderas cada vez más rápido hasta que me corrí en sus tetas y cara y después me la chupó un poco más bañada en leche. Cuando me la puso dura otra vez, le di la vuelta y cogí las esposas y se las puse a una barra metálica y le comí de una sola vez el culo y el coño y cuando quedó ben limpio y abierto se la metí y me la follé hasta que me corrí en su culo y espalda. La solté y se fue a su casa y yo me metí en la ducha mientras me hacia una paja pensando en ella.