Despedida de Soltera ya casada
Mi esposa no había tenido una despedida de soltera como era debido (con stripper) y después de 20 años de casados, me decidí organizarle una para disfrutarla los dos.
Despedida de Soltera ya casada
Mi esposa no había tenido una despedida de soltera como era debido (con stripper) y después de 20 años de casados, me decidí organizarle una para disfrutarla los dos.
Somos una pareja como cualquier otra, tenemos 20 años de casados con un par de hijos adolescentes, actualmente tenemos 45 años de edad y aun contamos con cuerpos que provocan la mirada de hombres y mujeres respectivamente cuando realizamos nuestras actividades cotidianas. En la intimidad afloran las fantasías normales de toda pareja, algunas son compartidas y otras solo en la imaginación. Pongo la mano al fuego si él o ella no han pensado que están follando con otra persona mientras cogen con su pareja; lo que presumo en mi situación es que estoy seguro de que ella y yo si nos contamos dichas fantasías.
Mi esposa, Gabo, fue educada en un entorno muy conservador y por tal motivo sus amistades eran de poca fiesta y muy recatadas cuando nos casamos, por ese motivo las despedidas de soltera que le fueron organizadas en su momento, fueron todas reservadas, en familia y por supuesto sin la presencia de strippers que le pudieran poner una buena follada para celebrar su legítima Despedida de Soltera.
Fue entonces que hace un par de años le comenté que deseaba organizarle su despedida de soltera que nunca había tenido y que toda mujer merecía, somos ya un matrimonio tan sólido que la gran ventaja de amar a la pareja, incluye el tratar de cumplir las fantasías de uno y otro, siempre que haya forma de hacerlo. Debido a esa seguridad, no cambiaría nada el que fuera follada por otro hombre a estas alturas de nuestro matrimonio; a fin de cuentas, era lo mismo saber que la novia había tenido oportunidad de follarse con un stripper antes de la boda o en ese momento a 18 años de casados. La única condición para ello, sería el que estuviera presente para garantizar su seguridad y cachondear el evento, con la intención de no intervenir para que se cumpliese el objetivo final: follar con un desconocido de buenas formas, profesional, dedicado a esa actividad y que contara con una herramienta que fuese del completo agrado para ella.
Le hice saber también que me encantaría verla gozar como nunca; que podría hacer lo que le viniera en gana, sin inhibiciones y convirtiéndose como una cualquiera, toda una gran puta con el permiso de su marido para follar con un desconocido. Esa sería su gran noche y debía aprovecharla al máximo.
Hubiera sido fácil contratar a un scort y llevarla a un hotel o meterla en un antro solo para mujeres, pero quería algo más cachondo y que pudiera presenciar su goce recibiendo la follada de un desconocido.
Fue así que encontré un club sw en la cd de México; llamé para informarme, los jueves permitían la entrada solo a parejas y contrataban a un grupo de 20 strippers (10 H y 10 M) para presentar shows durante la noche y participar en tríos o gangbangs con las parejas que así lo desearan.
Este era el lugar indicado, solicité que me enviaran algunas fotos de los strippers para que ella escogiera con quien desearía revolcarse en su fiesta. La noche que le mostré las fotos y platiqué del lugar, se puso de lo más cachonda, solo en pensar que pudiera follarse a alguno de esos cuerpos; seguro que con más de 5 que observó, se aventaría a tener una buena follada; especialmente con uno de ellos, de nombre "Rodrigo". Acordamos la visita para el jueves de la siguiente semana.
--- Llegó el gran día ---. Gabo había seleccionado para ese evento un vestido con mini falda negro ajustado a su cuerpo con escote pronunciado, zapatos de tacón alto y un conjunto de bra a media copa e hilo dental que no se lo conocía. ¡¡¡ Se veía como toda una gran puta, tan cual fue mi solicitud !!!. En ese mismo momento me la hubiera querido coger; así se lo hice saber, y ella me respondió: " Tú quieres que goce como una puta y mi atuendo debe ir conforme a lo que buscamos, o no???".
Llegamos temprano y nos recibió una de las dueñas del lugar; sabiendo que era la primera vez que los visitábamos, nos dio un recorrido por sus instalaciones así como comentarios del ambiente que se lograba con los visitantes al mismo. Ese día precisamente se contrataban a 20 strippers (10 H y 10M) para que interactuaran con las parejas que quisieran realizar tríos MHM ú HMH.
Gabo le preguntó si esa noche se encontraba Rodrigo, su respuesta fue afirmativa y mandó llamarle para que fuésemos presentados antes del show. Desde el saludo, Rodrigo mostró también un gran entusiasmo en poder atenderla, era evidente que le gustaron las formas de mi esposa y comentó que sería todo un placer atenderla para hacer realidad nuestro deseo. Comenté cuál era nuestro objetivo esa noche "La Despedida de Soltera". Nos pasaron a una mesa para empezar con nuestra aventura.
Iniciamos con unos tequilitas y mi esposa ya estaba completamente cachonda solo en pensar lo que vendría para ella esa noche. Después de un par de tequilas, inició el show de los strippers mostrando sus cuerpos dedicados al gym; brazos, pectorales, abdomen, espaldas, nalgas y piernas trabajadas. Pasaban a las mesas para provocar la excitación de las damas acercándose a ellas y permitiendo el toqueteo. Rodrigo puso especial interés en mi esposa, sabiéndose que era el escogido por ella esa noche; le bailó en su asiento, tomaba sus manos para que le acariciara su pecho y abdomen; en un momento se puso de frente, puso su pierna izquierda en el descanso del asiento poniendo muy cerca de su cara la herramienta que portaba entre las piernas. Mi esposa cumplía con su papel gozando de su "Despedida de Soltera"; acariciaba sus muslos, nalgas y tranca de lo que sería su próximo amante.
Para mí era una experiencia extraordinariamente candente; veía el gozo de mi mujer, mi excitación era similar a la que ella sentía; ambos estábamos muy cachondos y en espera de consumar nuestra aventura.
Rodrigo regresó a su show para terminarlo. En ese momento me acerqué a ella para ver que tan cachonda estaba metiendo mi mano entre sus piernas y constatando que estaba mojada y muy caliente, no hizo falta su respuesta. Proseguí, "¿quieres que te de una buena cogida tu nuevo amante?": ella respondió de inmediato que "Sí, que ya no aguantaba".
Una vez que los strippers terminaron su show; nos invitaron a pasar a la habitación donde Rodrigo nos alcanzaría después de algunos minutos.
En cuanto llegó volvió a echarle flores a Gabo, diciéndole que era una señora con un cuerpazo, que le encantaba follarse a mujeres en los 40s porque siempre le ensañaban algo debido a su experiencia en el arte de follar.
Aprovechando la música que se escuchaba afuera por el show de ahora las damas strippers, empezó a bailarle nuevamente quitándose la ropa poco a poco sólo dejándose un slip muy ajustado que permitía ver la erección del gran pene que poseía. Gabo acarició nuevamente ese cuerpo, pasando sus manos por su pecho, abdomen, muslos por fuera y por dentro, hasta llegar a sobar su tranca y bolas.
Volteó a verme preguntándome si me gustaba verla así con un extraño, agradeciéndome la gran follada que se iba a echar enfrente de mí. Regresó su mirada a Rodrigo diciéndole: "Cariño, es evidente que te gustan mis caricias" sobando su verga de arriba abajo, apretando y pasando su uñas por sus bolas aún sobre su slip "Seguramente te gustará esto también", incluyó ahora también su boca al masaje de verga que le hacía, pasando su lengua por todo el largo de aquella tranca dando pequeñas mordidas en su punta. Rodrigo estaba excitado y dijo: "Mamita, que rico me haces, estoy ansioso por mamar y follar tu conchita".
Después de algunos minutos, ahora fue ella la que le pidió a Rodrigo que se sentara en la cama y le empezó a bailar; centró uno de sus muslos entre sus piernas para sentarse sobre él y frotar su concha de adelante hacia atrás, bajó su vestido y bra lo suficiente para mostrar sus hermosos pezones erectos por la excitación pidiéndole a Rodrigo que se los empezara a mamar, con una mano jaló de la nuca a su amante hacia sus pechos y con la otra acariciaba su verga, seguía bailando y frotando su concha contra el muslo de él; empezaban a escucharse los gemidos de ambos.
Era una escena extraordinariamente cachonda, mi amada esposa pasando a ser la stripper, toda una puta deseosa de sexo y Rodrigo recibiendo placer como si él hubiese contratado el servicio para que se lo follaran.
Luego de un rato, ella lo incorporó, ambos ahora de pié, ella aún vestida, le dio la espalda para que Rodrigo la abrazara por detrás, empezó a abrir su vestido dejando su dorso descubierto que luego terminó este a los pies de Gabo; las manos de él se apoderaron de sus senos, amasándolos suavemente y jugueteando de vez en vez con sus pezones, le besaba el cuello y la oreja, (sabía que mi esposa había querido provocar esos besos, por eso escogió esa postura de inicio, ya que me ha comentado que su cuello, nuca y orejas son como otro clítoris en ella, que le provoca gran excitación); él desabrochó en uno de sus movimientos el bra y seguía con sus caricias desde atrás; mientras que ella seguía acariciando su verga ahora ya metiendo la mano también bajo el slip para masturbarle y sentir el calos en su palma. Le pide que use una de sus manos para acariciar su concha, Rodrigo metió su mano bajo la tanga y empezó a frotar utilizando su dedo medio para introducirlo en la vagina mientras que los otros dos acariciaban sus labios, bajó a la mitad de sus muslos la tanguita y siguió con el masaje.
Ahí estaba mi esposa en una escena para mí muy erótica, completamente desnuda sólo con su tanga a la mitad de sus muslos y en tacones altos, recibiendo dedo y gozando de una buena verga, mostrando su esbelto cuerpo, arqueando la espalda, gimiendo, con sus pezones erectos disfrutando a plenitud.
Gabo termina por sacarse su tanguita, se voltea para ponerse frente a Rodrigo y le pregunta: "¿te gusto?, ¿quieres follarme?, él responde: "seguro preciosa", sellan su diálogo con un beso apasionado. Ella se inca para bajar el slip de Rodrigo para conocer de frente la polla que tanto ha estado acariciando, "Guauuu cariño, parece que te ha gustado mi jugueteo"; mostraba una verga completamente erecta y excitada de por lo menos 22 cms y seguro más ancha que la mía, "mmm veremos que tanto te gusta con mi boca", empezó una mamada de infarto a la par de seguirle masturbando con una de sus manos, aquella verga llenaba por completo su boca y nunca alcanzó a tragarla entera debido a sus dimensiones; él con sus manos en la nuca de Gabo manejaba el ritmo de la follada en su boca, "¿te gusta mamarme la verga preciosa?, lo estás haciendo de maravilla, es una de las mejores mamadas que he recibido en mi vida". Yo le creí ya que en verdad es muy buena mamando y follando, es toda una gran puta cuando su excitación es extrema.
En ocasiones jugueteaba con aquella verga sobre sus pechos, se daba pequeños golpes en sus pezones, hacía círculos alrededor de cada uno de ellos para después volver a lamer la tranca desde los huevos a la punta, le daba pequeños lengüetazos en la cabeza, luego le chupaba y terminaba por desaparecerla casi por completo dentro de su boca.
"Rodrigo, ya necesito sentirte dentro de mí, fóllame ya", se incorporó para recostarse en la cama, le abrió las piernas y pasaba sus dedos por su concha, mostrándosela a su amante llena de sus jugos y totalmente deseosa por recibir placer. Rodrigo se introdujo entre ellas para besar el interior de sus muslos subiendo poco a poco hasta llagar a su concha y empezársela a mamar, pasaba su lengua de arriba abajo, chupaba su clítoris y combinaba el jugueteo de su lengua con sus dedos, acariciando nuevamente sus labios e introduciendo de vez en vez uno y hasta dos de sus dedos. Ella acariciaba su cabeza empujándola hacia su concha para provocar mayor frotación; ya ella gemía de placer sin recato, se arqueaba y levantaba su pelvis para facilitar a su amante la entrada de dedos y lengua en su concha.
"AHHH!!!, sigue así cabrón, que rico me la estás mamando no tardo me vengo, asiii, me vengo, ahhh!!!". " Méteme la verga enfrente de mi marido, necesito ya tú verga dentro de mí, dame una buena cogida".
Rodrigo se puso el condón, mismo que no terminó de cubrir por completo semejante tranca, empezó a subir con besos desde su vulva al estómago y después a los pechos, se trenzaron en un cálido beso entrelazando sus lengua; se colocó entre sus piernas y apuntó su verga hinchada hacia la concha de Gabo, con la punta frotó un poco el clítoris y labios para lograr mayor lubricación y la ensartó metiendo en principio un tercio de su tranca para no lastimarla y dejar que su dilatación fuera de poco en poco, veía como la entrada de su concha apenas podía recibir el ancho de aquella verga y gemía pidiendo a Rodrigo que no parara. No tardó mucho cuando Rodrigo utilizó su mismo peso para clavarle por completo, vi como los huevos de Rodrigo chocaron en la vagina, contemplando una estocada hasta el fondo de su ser, Gabo dio un grito de placer por recibir la que venía deseando gozar desde que le mostré las fotos para que escogiera al stripper en su "Despedida de Soltera".
El ritmo subió hasta convertirse en una follada frenética, Rodrigo realizando sus mejores embestidas mientras que mi esposa abrazaba con sus piernas y brazos el cuerpo de su amante para lograr la mayor penetración posible, ambos jadeando, gimiendo, ella pidiendo más verga ardiente: "UUUMMM AAAHHH!!!, que rico, dame más verga, así, así, así, métemela hasta adentro AAAYYY!!! Cabrón que ricooo!!!.". "te gusta sentir mi verga, tú concha está ardiendo y estrecha, que rico follas amor".
Gabo no tardó en llegar a otro orgasmo tan delicioso que llegó con pequeñas convulsiones y arqueaba hasta los pies aún con tacones altos que hacían de esa escena algo muy cachondo a mi vista.
Aún así, mi esposa seguía caliente y necesitada de más verga, Rodrigo se la sacó, se incorporó y le volvió a meter la tranca en la boca. "Ahora ponte en cuatro patas que te voy a follar por atrás". Ella hizo caso de inmediato abriendo con sus manos las nalgas para dejar ver su conchita completamente abierta, mojada y roja de haber recibido la enorme herramienta de su amante. Él volvió a apuntar y dejó ir su verga completa y de un solo empujón; ella sólo de sentirla nuevamente volvió con sus gemidos, gritos y palabrotas a Rodrigo, volteó hacia mí y me pidió que me acercara para mamármela mientras recibía la follada por detrás.
Ese no era el plan original, pero supe que ella quería agradecerme de alguna forma la oportunidad que le di en follarse a un desconocido frente a mí y sentirse como toda una puta deseosa de verga. Me acomodé frente a ella y succionó mi miembro aprovechando las embestidas que Rodrigo ahora le daba desde atrás, la tomé de la nuca y no tardé mucho en llenarle la boca de leche ya que me encontraba realmente excitado desde que empezó nuestra aventura y no había querido descargar mis huevos hasta el momento preciso. Los vacié en 3 ó 4 chisguetazos cargados de semen, ella tragó la gran mayoría y lo que se derramó por su barbilla lo tomó con sus dedos para llevárselo a la boca entre jadeos y gemidos producto del placer en recibir dos vergas candentes al mismo tiempo.
Rodrigo por su parte ya estaba a punto, la agarraba de su cabello y hombro para empujarle hasta los huevos su tranca, logrando que ella llegara a un nuevo orgasmo entre gritos y pidiendo que se descargara también en su boca, que aún quería tragar más leche. Rodrigo se la sacó, sentó a Gabo a la orilla de la cama y derramó en su boca, rostro y tetas como medio litro de leche candente entre bufidos de él como si fuera un toro de lidia. Ella tragó lo que pudo y lamió nuevamente la verga de Rodrigo hasta dejársela limpia y seca.
Los dos se abrazaron para dar término a tan grandiosa follada, Rodrigo se retiró más que satisfecho. Nosotros nos aseamos, vestimos y regresamos al salón bar, donde aquello ya estaba convertido en un bacanal, una orgía en un ambiente muy candente organizado por ese club sw. Se veían algunos cuerpos bellos, otros no tanto, y se identificaban parejas intercambiando amantes, tríos y demás. Después de un par de tragos más, nos volvimos a calentar y quisimos participar sólo dejándonos ver, mi esposa bajo mis pantalones para sacar mi verga, se subió el vestido y me montó de frente para follar, ella aún tenía aliento de verga por la sesión anterior, estuvimos como 15 minutos hasta lograr otro orgasmo de ambos entre los gemidos del ambiente. Decidimos terminar por ese día, comentando que tendríamos que regresar para participar como swingers en una de esas fiestas. Ese día lo recordaremos para siempre, su despedida de soltera tardía fue el mejor de los regalos que le he hecho jamás.
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