Desfiguración por amor

Esta es la historia de Escarlet, quien debido a una "pequeña" circunstancia de la vida, está expondrá sus mas profundos deseos y fetiches, a quien se entregara en cuerpo y alma, con el tal de seguir con un amor que, siempre se le fue negado.

DATOS QUE CONSIDERAR: Esta historia es totalmente original por parte mía, contiene Dominación,Fetiches y Sadomaso, cualquier parecido con otra historia puede llegar a ser mera coincidencia, gracias por darte el tiempo de leer mi historia ¡y espero que la disfrutes tanto como yo escribiéndola!

Parte 1.

Empieza mi travesía:

. -Siempre he pensado que a veces, la vida, suele ser injusta en muchos aspectos la verdad, la mayor parte del tiempo solo pienso en querer rendirme y echarme para atrás. No logro comprender, como algunas personas asumen su vida como si todo tratarse de estudiar, buenas notas, trabajar, jubilarse y morir, no siento que haya disfrutado para nada el tiempo de mi vida, claro habrá momentos felices, de risas y otros momentos tristes, sin embargo, no es lo que quiero, no le encuentro un propósito a seguir adelante más que como si fuera sentido del deber.

En fin, he vivido con mis abuelos la mayor parte de mi vida, mis padres se separaron como a mis 5 años, mis abuelos me dan lo que necesito a la hora de seguir estudiando, mis padres me dan dinero siempre que lo necesito, aunque la mayor parte del tiempo suelo derrocharlo en boludeses que me hagan olvidar lo sola que me siento 24/7, y además de poder tener un gato panzón de mascota, que me ha estado acompañando 7 años de su suertuda vida. Este año entre a la Universidad, claro para seguir con el "gran" futuro que me aguarda.

Fui a una escuela de buen ver, o en sí, de buen privilegio, pasé con notas que podrían decirse "decente" no por que fuera floja, porra o inútil, fue más que nada desinterés. Mis amigos solían tratar de motivarme, pero no solía darle importancia, agradecía mucho su esfuerzo, pero, en el fondo ni si quiera yo sabía que era lo que quería o ni mucho menos lo que me faltaba en mi vida. La mayor parte del tiempo, siempre he creído que mis padres tienen la culpa de todos mis problemas mentales, falta de motivación a prácticamente todo, y ni hablar del estrés de mis abuelos por cuidarme, no tienen por qué cuidarme, no soy su hija, sin embargo, me dan lo que necesito.

Tengo una hermanastra, con la que, no hablo por ninguna necesidad, no es algo muy importante pero siempre que me acuerdo la tengo en cuenta.

De mi vida amorosa, es un completo desastre, de los 3 chicos que se me han confesado, 2 les he terminado rechazando, y al tercero le di una oportunidad a lo que parecía que iba surgiendo algo pero, solo termino siendo otro tipo con un fierro caliente queriendo buscar donde apaciguar su falo, fue algo realmente lamentable, era bastante guapo entre las chicas, me resulto una sorpresa que se fijara en mí, no tengo nada de especial solo un cabello de corte melena en un punta al que le tengo bastante cariño y aprecio, de mi físico, tampoco es la gran cosa, tengo una contextura delgada, mido 1.58, tengo unos senos pequeños, pero unas caderas y glúteos de ensueño, bien formados de caminar siempre de ida y vuelta a la escuela, o por lo menos eso es lo que tengo entendido, ya que, el tercer tipo, me dejo muy en claro que, lo que más tenía según sus compañeros, eran unos glúteos bien formados, y que claro siempre me miraban en clases de educación física, me decepciona que solo se fijen en el físico y lo primero en lo que van al ataque una vez tengan la oportunidad es a lo que más le ponga duro su fierro, no los culpo, estoy segura que las hormonas en más de una ocasión nos saca de juicio, y nos llevan a hacer cosas que nunca creíamos capaces de hacer solo por la excitación y pasión del momento, por no decir "todos" la mayor parte de mis compañeros tenía cara de que se masturbaban toda la noche. En mi defensa no negare que alguna que otra vez lo he hecho, desde que conocí el mundo del "cine adulto" y todo gracias a la maldita internet; no negare que todo lo que se pueda llegar a ver en páginas porno te puedan llegar a hacer un depredador sexual si es que no sabes controlarte, por mi parte me alegra no ser una fiera del sexo, sin embargo, he descubierto una fascinación por el mundo del BDSM...

Cuando descubrí el mundo del "cine adulto" me sentía, asqueada e intrigada, fue cuando vi a unos compañeros escondidos en un círculo, al final del salón, la profesora; sabíamos perfectamente que no iba a llegar ese día, y la sala era un desorden en su máxima expresión. Ese día estaba caminando, dando vueltas en el salón para pasar el rato mientras transcurría la hora para irnos, hasta que en un momento veo que están todos los hombres en el suelo viendo algo, pensé que estarían viendo algún partido de futbol, anime o película para pasar el rato, nada más lejos de la realidad. Ahí estaba en la imagen del celular, una mujer morena sacudiendo su cabeza de atrás hacia adelante con un enorme y largo pene en su boca, me quede embobada viendo semejante acto, rápidamente, me hice la boba desviando la mirada, sin embargo no podía dejar de mirar de reojo, era hipnotizante ver como ese largo y grueso pene aparecía y desaparecía dentro de toda su boca y garganta de aquella mujer, en cierto punto vi que se quedó quieta por lo que supuse que el hombre habrá eyaculado dentro de su boca  ya que la agarraba bruscamente del cabello, me sentí muy asqueada ese día, cuando volví a casa y durante toda la noche tenía esa imagen clavada en mi cabeza, supuse que me perseguiría por mucho tiempo hasta que indague en la internet, en ese tiempo era solo una adolescente y nunca creí que lo que sería una simple búsqueda de un video del cine adulto me conduciría a mis más oscuros “Deseos”.

Aunque eso es un tema para otro momento, ahora acabo de entrar a la Universidad y me estoy dirigiendo a mi primera clase de gastronomía, si, aunque no lo parezca quise buscar una carrera donde no hubieran tantos hombres, no me quería llevar la misma sorpresa que me lleve las otras veces en el mismo curso, grave error, no debí confiarme, obviamente que habrían muchos hombres con ganas de cocinar de esta Universidad de mal prestigio, la lista de matrícula estaban hasta saturadas de personas, por suerte alcance ese día a matricularme, por otro lado,  también hay una gran cantidad de mujeres con las que tal vez me pueda sentir más cómoda, no es que sienta asco ni odio hacia los hombres, simplemente me he llevado malas experiencias que no quiero volver a repetir.

Una vez llegué a la universidad, logre entrar mi salón y por suerte no eran muchas personas las que fueron el primer día, no se me debería hacer extraño, sobre todo en esta U de mal prestigio, al entrar empezaron a pasar la lista para conocernos y saber porque escogimos esta carrera, (¿pasar lista?, no estamos en básica, deberían simplemente decirnos nuestras materias y como iremos pasando el primer semestre, no conocernos… en fin.)

Mientras iban pasando de uno en uno saludando y presentando su nombre, me distraje y me puse a mirar por la ventana, pude ver a un pequeño gorrión llevando pequeñas ramitas a su nido, más allá de eso, me encanta ver lo libres que son al volar, me encantaría poder tener esa libertad a la hora de poder escoger las cosas de mi vida, siempre me he sentido obligada a hacer todo más como una obligación que un deber.

Una vez perdí de vista al pequeño pajarito volví a poner atención a los compañeros que iban pasando voluntariamente, sin embargo, no podía dejar de pensar en que alguien no dejaba de mirarme, así que disimuladamente empecé a mirar a mis alrededores y claramente, 2 tipos atrás de mi a la izquierda no me apartaban la mirada de encima, esto es el colmo, ni siquiera en la U, donde debería haber gente más madura me salvo de estos perversos.

. - ¿Se les perdió algo? (Les dije de forma desagradable y agresiva).

. -Quizás, si ¿Por qué no nos ayudas a encontrarlo? (Dijo uno de los tipos de forma picara mientras sonreía).

. -Oye imbécil, si crees que voy a-

. -Señorita! (interrumpió el profesor), ¿Por qué no pasa a presentarse? Veo que le gusta hablar.

. -Si, claro, sería un gusto… (Dije obviamente, levantándome de mi asiento enojada, caminando al frente de mis compañeros).

Mientras caminaba al frente, me percate que no muchos estaban atentos, otros conversaban despacio, y otros prestaban más atención a sus celulares, así que no sería nada del otro mundo ir a dar mi nombre y fingir mis ganas de ser una gran chef.

. -Mi nombre es Escarlet Torres, entre a estudiar gastronomía, ya que, espero algún día tener mi propia tienda de repostería exitosa y…

Estaba roja de vergüenza mirando al suelo mientras me presentaba y daba una vaga excusa de porque entre a estudiar esta carrera, levanté la mirada para ver de reojo y por suerte nadie estaba poniendo atención a excepción de algunos pocos, no me sorprende la falta de interés.

. -Bien señorita Escarlet, puede tomar asiento.

fui rápidamente a mi asiento mientras miraba a quienes serían mis compañeros y compañeras de clases, cuando estaba a punto de sentarme, me fijé en una mujer en la esquina al fondo sentada que no dejaba de observarme, con una mirada algo lúgubre y una sonrisa algo macabra, suena hasta cliché la verdad, tiene una apariencia bastante intimidante la verdad, y se ve desde lejos que es más alta que yo, pareciera que mide 1.70 y algo.

(¿Qué me mira tanto, tendré algo en mi cabello? Aun que, ahora que lo pienso, ella tiene un cabello liso con sus puntas teñidas de rojo y morado, me pregunto, ¿la dejaran tener el cabello así a la hora de cocinar?)

Procedí a sentarme dejando de verla, sin embargo, aún podía sentir como ella tenía clavado sus ojos en mí.

. -Bien alumnos tienen sus primeros 30 minutos de tiempo libre, aprovechen de conocerse mejor al igual que la Universidad y aprovechar de ir al baño, nos vemos.

Me levante mirando de reojo a ver si la mujer aun me seguía observando, pero no la logre encontrar, por lo que supuse que habrá salido de la sala sin percatarme, agarre de mi mochila y me dispuse a recorrer la Universidad para pasar el rato.

Pude ver que los tipos que me estaban molestando con su mirada me estaban siguiendo, para mi suerte logre perderlos en medio de la multitud de los compañeros de la U, luego de caminar por 10 minutos, llegué a un patio de la Universidad en la que no había nadie, me retire la mochila pegándome a la pared y dejándome caer lentamente hasta sentarme.

Sabía que no dormir por los nervios del primer día en la U me iban a perjudicar, vi la hora y aún quedaban 20 minutos, me dispuse a cerrar los ojos y a descansar la vista, sin percatarme que me relajé de más, hasta que caí en un profundo sueño.

Estaba soñando, la falta constante de sueño me ha hecho tener incontables pesadillas, pude darme cuenta al instante, estaba atada en una silla, en la misma posición en la que me había sentado en el suelo, pude ver una forma a lo lejos acercándose con un objeto que parecía un cuchillo, empecé a entrar en pánico, pero no me podía mover, era casi como estar en una parálisis del sueño, me sentía muy alterada, con la respiración a mil, hasta que empecé a sentir que algo me estaba sacudiendo de atrás a hacia adelante, mientras veía como aquella figura empezó a correr hacia mí, estaba realmente asustada hasta que desperté de un salto, abrazando a la persona que estaba enfrente de mí, tenía mi respiración muy agitada, me abrazo de vuelta y empezó a consolar.

. -Shh... sh... sh... tranquila, ya paso, tuviste un mal sueño, no deberías estar en este patio y mucho menos a esta hora.

Mientras la abrazaba deduje que era una mujer por su voz. Mientras trataba de calmarme me percate de que era tarde.

. - ¿Qué hora es?

. - ¿Acaso importa niña? Las clases ya terminaron y no deberías estar aquí y ni mucho menos durmiendo.

. -Tiene que ser una broma… (me lleve la mano a la cabeza mientras trataba de aguantarme las lágrimas por la desesperación y el estrés, apoye mi cabeza en su hombro para tapar mis quejidos y me percate de su cabello, no podía creerlo, era la chica que no me había dejado de observar en la primera clase)

. -Sh… ya niña, no llores, ya estás bastante grande como para estas cosas de llorar. (dijo mientras acariciaba mi cabeza)

. - ¿Como me encontraste?

. -Vi que no habías regresado a las demás clases y me dispuse a buscarte, no te vi por ningún lado, hasta que se me ocurrió buscar en lugares menos explorados y llegue aquí, aunque la Universidad ya debería estar por cerrar.

No soportaba el estrés y desilusión en mi mente y me dispuse a llorar aún más, mientras abrazaba a la desconocida, sin querer soltarme de ella.

. -Dios... niña me vas a dejar empapada de lágrimas, suéltame ahora, me aprietas mucho la espalda.

. -Lo siento. (dije entre sollozos y dejé de abrazarla tan fuerte sin despegar mi cabeza de su hombro, sentía mucha vergüenza, no quería que me viera a la cara toda llena de lágrimas)

. -! Vamos, te dije que me soltaras ¡(Puedo sentir como bruscamente me agarra de los hombros empujándome hacia la pared, pude sentir como mi espalda se golpeaba fuertemente a la pared, para después empezar a sentir un fuerte ardor en mi mejilla, me había proporcionado una fuerte cachetada)

. - ¿! Puedes calmarte¡?

Mi mente estaba en blanco, no dejaba de mirarla a sus ojos mientras trataba de ignorar el fuerte golpe que me acababa de proporcionar, tenía unos ojos bastante hermosos, con unas pestañas que los hacia relucir de manera magnifica, me dejaba hipnotizada. Hasta que empecé a escuchar su voz y volví a la realidad.

. -Eh… oye, lo siento, no creí que fuera a darte un golpe tan fuerte, vaya ojeras las que tienes. (Me decía mientras posaba suavemente sus manos a los costados de mi cara y con la suave yema de sus pulgares acariciaba por debajo de mis parpados, donde se encontraban mis ojeras).

. -Si… suelo tener problemas para dormir, especialmente ayer, ya que hoy era el primer día y pues, no sé, gracias por despertarme, ¿qué horas es?

. -Van a ser las 6, dormiste unas 3 horas y media más el otro tiempo despertándote, etcétera…

. -Está muy oscuro.

. -Si y las calles cerca de la U son muy peligrosas a estas horas.

. - ¿De verdad?

. -Si, créeme, vivo cerca de esta U.

. - (No recuerdo que alguna vez estas calles fueran peligrosas, o sea, sé que no vivo por aquí, pero nunca he escuchado de algún asalto, accidente o cosas por el estilo)

. -Disculpa, ¿cuál es tu nombre?

. -Me llamo Vanessa, y supongo que tú te llamas Escarlet.

. -Si, tu… no dejabas de observarme en la primera clase.

. -Si, supuse que te diste cuenta, hasta que te perdí de vista, te busque durante mucho rato en los tiempos libres hasta que di contigo, y resulta que la niña estaba aquí, durmiendo y al parecer con pesadillas.

. -Si… no he logrado dormir bien últimamente, ahora lo único que quiero es llegar a casa e ir a dormir, mi cuerpo me lo pide agritos.

. -Suerte con eso, a esta hora te habrán asaltado 5 veces antes de poder tomar un bus a tu casa

(No logro asimilar lo que me está diciendo, aparte de que el frio se apodera de mi cuerpo y el sueño después de haber llorado me está matando)

. -Entonces ¿irías al paradero conmigo?

. - ¿Estás loca? A estas horas, ni loca, aunque…

. - ¿Aunque…?

. -No me molestaría tener visitas hoy en mi casa, sobre todo a alguien tan… exótica como tú.

. - (¿De qué está hablando, acaso me está coqueteando y a la vez invitándome a dormir con ella?)

. - ¿Disculpa? Apenas sé cómo te llamas y no me convence para nada lo que dices de lo que ocurre a estas horas.

. - ¿Dudas de mí, niña? Creo que acabas de olvidar quien te despertó en medio de una pesadilla de la cuando despertaste parecía que te fueras a morir, sin contar que además pudiste haberte quedado encerrada todo el fin de semana en esta U.

(Por más que me duela admitirlo, estaba diciendo la verdad, me había despertado de una pesadilla terrible que acababa de temer y ahora me está ofreciendo alojo en su hogar, por gente peligrosa a estas horas)

. -Está bien, te acompañare a tu casa… (dije, no muy convencida, además no creo que a mis abuelos les importe si no llego hoy.)

. -Bien, vámonos de aquí, déjame ayudarte a levantarte.

. -Si, gracias de nuevo…

Antes de que me ayudara a levantarme pude ver su verdadero tamaño y apariencia, vaya si que era alta, lucía una chaqueta y por debajo un vestido largo y negro con unas medias también de color oscuro, no pude distinguir bien el color de estas y unas botas, menuda vestimenta para venir simplemente a la U…

. -Dame tu mano (pude sentir su cálida mano sujetando la mía intentando ayudar a levantarme, una vez de pie me tambaleé y caí de espaldas al muro y ella rápidamente me sujeto) cuidado princesa, no queremos que te vayas a romper el cuello (me decía en broma mientras me sujetaba fuertemente mientras tenía su bello rostro frente al mío, podía sentir su cálida respiración, aparté rápidamente mi mirada cerca de ella, jamás me había sonrojado tanto)

. -Lo siento, estoy muy cansada…

. -Si, ya me di cuenta, no tienes pinta de si quiera haber comido algo, vamos apóyate en mí y vámonos lo antes posible de este lugar.

(Era increíble e inimaginable, apenas nos conocemos y me está cuidando como a una abuelita)

Mientras caminábamos hacia la salida, no pude evitar ver su pálido rostro y esos ojos, tienen un tamaño ideal, ni muy grandes ni muy pequeños, es una mujer bastante hermosa, sin embargo, hay algo que todavía me genera desconfianza en ella, y claro como no hacerlo si apenas la conozco y ya me está llevando a su casa.

. -Bien, costó, pero llegamos a la salida.

. -Lo siento por, esto, apenas nos conocemos y me ayudas como si fuéramos amigas de toda la vida.

. -Oh, tranquila, tarde o temprano me devolverás el favor, aunque puede que sea más temprano que tarde…

(no pude poner mucha atención a lo que me decía, el sueño y el cansancio me estaban haciendo cada vez peor)

. -Vamos levántate, mi casa está a la vuelta de esa calle.

(no podía dejar de tambalearme mientras caminaba, no sabía cuánto rato había pasado caminando, estaba perdiendo la conciencia, me estaba quedando dormida mientras caminaba hasta que de repente me desplomé y caí rendida)

Cambio de perspectiva: Vanessa.

. -Genial la niña se acaba de desplomar, justo cuando llegamos, espero que no estés tan pesada, (Procedo a tomar su espalda con una mano y sus piernas con la otra)

. - ¿Dios, que comes?, como puede alguien tan pequeña pesar menos de lo que me imaginaba. (abro la puerta hábilmente, y entro, cerrando la puerta de una patada escuchándose un fuerte portazo, procedo a dejar a Escarlet en uno de mis sillones, prendo las luces y logro contemplar a mi niña).

. -Vaya... bajo la luz blanca sí que eres hermosa, y pensar que por poco casi te me escapas, mi niña, pronto, serás mía y te tendré en disposición a mis pies…

Bien, vamos a registrar mi regalo, está profundamente dormida, pobrecita, con esa falta de sueño será fácil hacerla enloquecer y estar a mi merced, en fin, veamos que traes bajo esta blusa, vaya, que pequeño sostén, tus pequeños limones me dejaran con mucha hambre, veamos que traes debajo de estos jeans, (Empiezo a desabrochar sus ajustados pantalones y los bajo lentamente) vaya, que niña más traviesa tenemos aquí, voy a disfrutar mucho de ti cuando llegue el momento, mi pequeña niña, eres hermosa, que desafortunado por tu familia, que muy pronto solo estarás para mí.

. -Bien en ropa interior debería bastar (la tomo entre mis brazos y procedo a llevarla a mi habitación) que suerte tienes de tener a alguien como yo, mi niña, descansa, que más pronto que nunca, te tendré en la palma de mi mano.

Cambio de perspectiva Escarlet:

Despierto de un salto, en una cama que no es mía, semidesnuda, con mi sujetador y bragas.

. - ¿! AH¡? ¿Qué ocurrió?, ¿dónde estoy…?, (de a poco empiezo a recordar), esa mujer… Vanessa, recuerdo que me estaba cargando a su casa, después me desplome y…

Alguien trata de entrar a la habitación y por instinto me vuelvo a tapar y a hacerme la dormida, mantengo los ojos entre cerrados y veo a una silueta acercándose a mí, mi respiración se acelera cada vez más hasta que escucho de nuevo esa voz femenina.

. -Escarlet, oye, ¿estás despierta? Te escuche dar un pequeño grito, tranquila, soy yo Vanessa.

. -Si... estoy despierta, ¿Qué hora es?

. -Tranquila son las 3:00 am, aun puedes seguir durmiendo.

. -No... o sea, tengo un poco de sueño, pero, me siento algo sucia y con algo de hambre.

. - Oh tranquila, te preparare una sopa y una ducha, por favor, Escarlet, tómalo como un regalo por recién conocernos y un favor por el golpe que te di.

. -Yo... no lo sé, lo siento, no es mi intención molestarte, de verdad, ya me has ayudado bastante con traerme a tu casa y haberme encontrado en el patio de la Universidad.

. - ¿Estás segura de no querer comer nada?

. - Si tranquila, de verdad has hecho bastante por mí.

. - Al menos toma la ducha, no quiero que dejes sucia mi cama, niña.

. - Esta bien… gracias. (dije algo tímida, su presencia me hacía sentir extraña)

Me empiezo a levantar, destapándome de la cama y rápidamente siento una briza helada que recorre mi espalda, hasta que me percato que solo llevo mi sujetador, y mis bragas de encaje puestas, me empiezo a sonrojar y rápidamente vuelvo a taparme.

. - ¿Y mi ropa, me la has quitado mientras dormía?

. -Si y no, o sea, te la quite mientras estabas inconsciente ya que estabas llena de tierra y la coloque en la lavadora, pero tranquila, tengo algo de ropa “cómoda” que puedas colocarte para después de que te duches.

. - Entiendo… gracias, otra vez.

. -Tranquila, espérame unos minutos iré a llenar la tina.

. - Esta bien, gracias, aquí esperare.

La veo retirarse con una amable sonrisa y una mirada muy picarona, ¿qué le ocurre a esta mujer? Algo me dice que me desnudó a propósito y estuvo un buen rato observándome, parece un bicho raro, no lo sé, sin embargo, no puedo dudar de ella, me ayudo en 3 momentos bastantes desesperantes, sin conocerla y ya me trata como si fuera de su familia.

. -Mierda ¿Cuánto he dormido? Me siento aun tan cansada y con sueño… descansare un rato la vista, Vanessa ya debería estar por volver y despertarme…

Después de un rato abro los ojos rápidamente, recordando que en un rato me iría a dar un baño, pero me encontraba atada y amordazada en la cama, trate de liberarme, pero ni si quiera podía moverme, me empiezo a desesperar al ver al fondo una figura acercándose. ¿era Vanessa? No pude le distinguir bien, ya que estaba en un traje de látex, se estaba acercando cada vez más mientras desenfundada una fusta y me empezó a decir:

. -Vaya, vaya, tenemos a una pequeña perrita que se ha escabullido de su casa y sin avisar.

. - ¡Mmpm¡¡Mpmp!

. - Grita todo lo que quieras pequeña zorra, ¡Tal vez unos bueno azotes te enseñen a comportarte!

Pude ver como con una rapidez y brusquedad alzó la fusta y empezó a azotar mi abdomen y senos, sin embargo, había algo que no comprendía muy bien, no sentía dolor, pero la situación me ponía de un ánimo muy raro, empecé a sentir un cosquilleo cerca de mi pubis a la vez que la situación me tenía desesperada y muy agitada, sentía como mi respiración se iba perdiendo a medida que seguía azotándome sin piedad, hasta que escuché un fuerte grito diciéndome Escarlet y desperté.

. - ¡Escarlet, niña, oye despierta!

. - ¿¡AH¡? Ah, ah… lo siento, me dormí de nuevo sin querer, me puse a descansar los ojos ya que aún me sentía cansada y luego, y luego me dormí y tuve otra pesadilla…

. - Si, me di cuenta, estabas respirando muy agitada y mírate, estas empapada en sudor.

. - Lo siento, me siento muy cansada aun para ir a darme un baño y peor con mucho sueño.

. -Me imagino niña, yo te daré un baño.

. - ¿Qué? No, tranquila yo puedo ir sola y darme un baño sola.

. -No, estas cansada aun y te puedes dormir en la bañera, no quiero tener a la mañana un cadáver en mi baño.

. -No, per- (me interrumpe antes de que pueda terminar la frase.

. - ¡SH! ¡sin peros! (me hizo callar rápidamente colocando un dedo encima de mis labios, me sentía muy intimidada por Vanessa)

. -Tu cuerpo ha de estar muy estresado para jugarte malas pasadas, créeme, con una ducha te relajaras y tu cuerpo te lo agradecerá, así dormirás más plácidamente y quizás sin tener otra pesadilla.

. - Esta bien, pero vamos rápido, solo quiero dormir, y volver a sentir esa sensación de relajación.

. - Bien, levántate, te espero en el baño.

Vi a Vanessa alejarse de la habitación, pero, por alguna extraña razón, no pude evitar ver menear sus caderas de lado a lado mientras se iba de la habitación.

Me levanté rápidamente por el frio y la falta de ropa, caminé rápidamente atrás de Vanessa siguiéndola hasta el baño, una vez adentro, pude contemplar su lindo baño de color blanco, se sentía muy cómodo estar en presencia de un baño tan blanco y reluciente por lo que parecía mucha limpieza.

. -Bien, desvístete rápido.

. -Si… (lo sentí como una orden y tampoco dudé en quitarme la ropa, estaba demasiado cansada para darle vueltas al asunto así que solo procedí a quitarme rápidamente mis únicas 2 prendas)

. - Bien, ven.

Veo como alza su mano ofreciéndomela y procedo a sujetarla para poder entrar a la tina sin peligro de caerme. El agua estaba tibia, se sentía demasiado bien.

. -Tienes un lindo cabello niña, digo… Escarlet.

. - Gracias, supongo…

Puedo sentir como sus manos me empiezan a lavar la espalda mientras con un pequeño valde recoge agua de la tina y la deja caer sobre mi cabeza a mi espalda, es una sensación bastante agradable y relajante, puedo sentir como sus manos pasan por mi abdomen y rozan mis pequeños senos.

. -Bien tu espalda esta lista y tu cabello también, procederé a lavarte por adelante, si no es tanta molestia.

. -No, tranquila, tu prosigue…

Me sentía como en el paraíso, hace muchísimo tiempo que no me relajaba de tal forma, sus agiles y delicadas manos eran uno de los mejores placeres que había sentido hace mucho tiempo, sabia como tratar mi frágil cuerpo a medida que iba lavándolo y a la vez sentía como masajeaba mis pequeños senos. Sin embargo, a la vez estaba muy descuidada y no pude evitar emitir algún que otro pequeño gemido por este placer y relajación.

. - Mmm…

. - ¿Te sientes mejor?

. - Si... mucho mejor, Vanessa.

. - Me alegra oír eso

Pude sentir como su mano empezó a bajar por mi pubis y lo restregaba suavemente, como si estuviera pidiéndome permiso para proseguir.

. -Tú decides pequeña, quieres que siga ¿” lavándote”?

. - Si, por favor sigue…

. -Pídemelo niña.

sentí que fue muy cortante cuando me dijo que se lo pidiera, sonaba impotente y segura, pero yo ya no aguantaba más las ganas, después de esa rara pesadilla que tuve me había empezado a excitar demasiado, necesitaba estimularme.

. -Si, por favor, Vanessa, hazlo ¡tócame ¡

. - ¿Que? ¿de qué hablas, está enferma mental? Te estoy dando un baño y te aprovechas de mi humildad para que te… ¿Toque?

. - ¿Que…? pero si tu…

. - Cállate, eres una enferma de la que se aprovecha de mi humildad, levántate rápido y sécate con aquella toalla.

. -Yo… lo siento, de verdad no quería…

. - Te dije que te callaras, no pienso hablar con una pervertida, sécate y vístete rápido para que vayas a dormir y mañana te vayas a primera hora de la mañana, te traeré la secadora por mientras que te vistes. (Pude ver como salía rápidamente el baño dando un fuerte portazo a la puerta)

No podía entender que había pasado, juré que ella me había pedido eso, dios, este maldito sueño y estrés de seguro me está haciendo pensar cosas estúpidas, me deje llevar por mis estímulos sexuales y… dios, que estúpida y pervertida que soy, acabo de perder una gran confianza que ella me estaba dando y todo por mi calentura…

Punto de vista de Vanessa:

Después de haber silenciado a Escarlet y dar ese fuerte portazo, Sali rápidamente del baño y proseguí rápidamente a ir a mi habitación, no podía aguantarme la risa y lo bien que todo estaba resultando, pobre de mi niña… tiene un estado mental deplorable y muy manipulable, no se acaba de dar cuenta de lo que pasó y ahora cree que es su culpa después de que la excité, esa falta de sueño le está haciendo muy mal a su salud mental, perfecto para mí. Así cuidare de ella, bajo mi tutela empezara a comprender que no puede depender de otra persona que no sea de mí y mis cuidados.

. -Bien, ¿dónde deje la secadora? aquí estas.

Mientras me dirijo al baño empiezo a escuchar unos pequeños sollozos de mi niña Escarlet y unos balbuceos mientras llora

. - ¡Maldita sea!, ¡Siempre arruino TODO!, ¡Siempre arruino mis amistades!, Tonta! ¡Tonta! ¡TONTA! ¡soy una ENFERMA!

Ooh… mi niña, no digas esas cosas que me rompes el corazón, vamos, que no eres una enferma, eres ¡MI! enferma... y lo mejor está por venir. ¿Mmm… que son esos ruidos que haces mi niña?

Procedo a golpear la puerta y a preguntar.

. - ¿Terminaste de vestirte? No quiero entrar y que haya una desnuda pervertida en mi baño. (Sabia como esas palabras la harían quebrarse por dentro)

. -Si… estoy vestida, pasa.

. -Bien.

Pasé lentamente al baño y pude ver como se secaba sus lágrimas mientras se tapaba la cara dándome la espalda.

. - Que te ocurre, ¿el gato te comió la lengua?

. - No… por favor, deja la secadora y retírate…

. - ¿Me estas echando de mi propio baño? Primero mírame a la cara antes de dirigirme la palabra. ¡APRESURATE! ¿no viste la hora?

Dejo el secador a un lado y camino rápidamente hacia ella y procedo a quitarle bruscamente sus manos de su rostro, lo que vi me estaba dejando loca, y en el buen sentido.

. -Niña, que le paso a tu cara y sobre todo a tu ojo (que pregunta más idiota, claramente esos sonidos eran por que se golpeó a sí misma, no creí que tuviera tanta fuerza para hacerse daño hasta dejarse moretones, oh claro, su cuerpo es frágil, no es que tenga fuerza)

. - ¿Te caíste?

. - Si… esto, me caí con la humedad cuando Sali de la tina.

Oh mi corazón, me lo dejas a mil mi niña, esto va a ser mejor de lo que esperaba, te vez tan hermosa con esos moretones y ni hablar de tu ojo, no podía evitar sentir un placer por verla así.

. - Ah… aparte de pervertida, idiota.

. - Si… lo sé, soy… una enferma mental.

Dios, no podía creerlo acaba de decir enfrente mío que era una enferma mental, mi niña, habrá mejores momentos para humillarse ante mí, pero por ahora, estas entrando a un abismo del que no podrás salir…

. -Bien, sequemos rápido tu cabello para que vayas a dormir, voltéate rápido.

. - Si, lo siento.

Conecté la secadora y procedí a secar el cabello de Escarlet, puede que parezca algo irónico, pero, podía escuchar los lamentos de Escarlet mientras le secaba su cabello, pobrecita, cree que no la voy a escuchar por el ruido de la secadora, estuve un buen rato secando su cabello ya que, por el frio este se estaba demorando más de lo normal en secarse, y cuando ya estaba casi por terminar veo como mi niña se empieza a tambalear y sus quejidos ya estaban terminando de cesar, así que procedo a apagar la secadora y a desconectarla.

. - Shh… ¿tienes sueño Escarlet?

. - Si… solo quiero ir a dormir.

. - Claro niña, ven, vamos.

Procedo a voltearla y finjo sorpresa y algo de preocupación al verla llorar.

. - ¿Por qué lloras Escarlet?

Me empieza a ver confundida mientras secaba sus lágrimas con cuidado.

. - ¿Te duele mucho ese ojo que te golpeaste?

. - Yo… si, me duele mucho mi ojo.

. - Oh… ven tranquila, tu ojo ya sanará. (Le dije mientras procedía a abrazarla y a consolarla dándole caricias en su cabeza.)

Pobrecita mi niña, de seguro no ha de entender por qué la estoy tratando tan bien sabiendo lo que paso, debe estar muy confundida y sobre todo por el sueño que le abruma tanto su pobre cabecita, ingenua.

. - Ven, vamos a la habitación para que duermas.

. – Gracias, Vanessa.

Mientras iba delante de ella sosteniéndola de la mano, no podía evitar dibujar una sonrisa en mi rostro, no se ha percatado de nada de lo que le está pasando. Una vez llegamos a la habitación la acosté y la acomodé para después acostarme al lado de ella y proporcionarle esa seguridad que tanto ha de necesitar.

. - ¿Te sientes cómoda? Si quieres dormir sola házmelo saber y me retiro.

. -No, por favor, quédate, no quiero volver a tener otra pesadilla y que no estés ahí para despertarme.

Jajaja, ¿y quién crees que soy? ¿Tu mamá? Pobre de mi niña, no sabes en lo que te estas metiendo y apenas llevamos unas horas conociéndonos y quieres que te siga cuidando.

. -Está bien, me quedare y estaré atenta para que duermas tranquila.

. -Gracias…

Gracias, fueron sus últimas palabras antes de caer profundamente dormida. Faltaban solamente un par de horas para que empezara a amanecer, perfecto para planear mi siguiente movimiento, procedí a levantarme una vez que Escarlet se durmió y fui a buscar un reloj para programarlo una vez estuviera amanecido, pobrecita, cuanto dormirás ¿40 minutos? Jaja, menos yo diría. Una vez transcurrido 35 minutos, puse mi plan en marcha, levante mi pollera, agarre a Escarlet y la coloque encima de mi pecho abriendo su boca y colocándola encima de pezón para aparentar que lo estaba chupando, agarre su mano izquierda y la coloque debajo de mis bragas por encima de mi pubis, vaya sorpresa te vas a llevar mi niña…

Puntos de vista de Escarlet:

Me estaba despertando por un fuerte sonido chirriante, me sentía agotada como si no hubiera dormido absolutamente nada, pero al abrir los ojos observe a mi alrededor que había bastante luz y ya debería estar amaneciendo, por lo que supuse que dormí toda la madrugada, sin embargo eso no fue lo que más me impacto, casi me da un infarto ahí mismo cuando vi la cara de Vanessa, enojada, estaba hecha una furia, no podía creerme ni meterme en la cabeza que estaba succionando uno de sus pezones mientras la manoseaba en su parte intima, me quede paralizada, no sabía qué hacer, hasta que vi como la palma de Vanessa ascendía y rápidamente bajaba dejándome un fuerte ardor en la mejilla.

. - ¡¿Qué crees que estás haciendo, mujer pervertida?!

. - ¡Yo, no lo sé! Creo que mi falta de sueño me está haciendo tener comportamientos de sonámbulo, dios, créeme que no estaba consciente de lo que estaba haciendo, ¡te lo juro!

. - sí, claro, debería llevarte a la policía por pervertida y aprovechada.

. -No, por favor, mira me has ayudado bastante, ¡permíteme devolverte el favor!

. - Umm… está bien, mira, debo salir y realizar unas compras, me demorare un par de horas, por mientras que no estoy en casa, hazme el favor de barrerla mientras vuelvo, ya que como puedes ver, esta casa es algo grande y no he tenido tiempo para limpiarla, hazme ese favor mientras vuelvo y pensare si acepto tu disculpa.

. - Entiendo, haré mi mejor esfuerzo en dejar bien limpia esta casa.

. - Okey, la escoba está al lado de la cocina, me iré a vestir y terminar de arreglar en el baño.

. - Entiendo, gracias.

Me sentía tan agobiada y agotada, siento que no duermo, mientras Vanessa se levantaba y se dirigía al baño no pude evitar volver a mirar sus prominentes caderas menearse de un lado otro, era hipnotizante. Una vez que se marchó me levanté y comencé a refregarme uno de mis ojos, me dolía bastante, no quiero imaginarme como me habrá quedado después de esa caída, ¿o fue un golpe que me di…? No logro recordar, mi cabeza me está jugando muy malos ratos.

Decidí no ponerle atención al dolor, así que fui con este pequeño pijama que ya tenía puesto, me dispuse a barrer primero lo que pareció ser la cocina. Mientras estaba terminando de barrerla escuché ha Vanessa dar un grito.

. - ¡Vuelvo en tres horas!

Escuché el sonido de un motor partir después de que salió de la casa, así que supuse que ya estaba marchándose en su vehículo. Sali de la cocina dispuesta a seguir barriendo, pero me empecé a sentir cansada de nuevo y colapsé apoyándome en la pared, sentía como si hubiera corrido en gimnasia, ¿cómo podía estar tan casada? sí solo barrí la cocina, me dirigí al baño a lavarme la cara, cuando me dispongo a mirarme en el espejo, no podía creerlo, tenía el ojo completamente morado y en el rostro con algún que otro moretón, no le quise dar más vueltas y me dispuse a lavarme la cara para poder despejarme.

. - Bien, eso me despejara la cabeza un rato.

Me dispuse a salir del baño y, aun así, el cansancio se volvía a apoderar de mi cuerpo, mi cuerpo me pedía a gritos que me detuviera y me fuera a descansar, caí rendida al helado suelo, me acomode un poco y empecé a cerrar los ojos. Estoy segura de que despertare antes que vuelva y una vez descansada barreré toda la casa en menos de un santiamén, procedí a cerrar los ojos y a relajarme, me daba lo mismo lo helado que estuviera el suelo, solo me importaba dormir.

Al cabo de unas horas me desperté en la cama descansada, tuve algún que otro sueño extraño, pero nada que me dejara como la otra vez, menos mal.

. - ¿Qué hora es…?

Empecé a mirar a todas partes, desesperada buscando algún reloj o mi teléfono para saber la hora, cuando de repente entra Vanessa a la habitación.

. - ¿Cómo dormiste? zorra durmiente.

. - ¿Qué hora es, cuanto dormí?

. - Lo suficiente me imagino, desde que llegue de las compras y después de disponerme a limpiar cada rincón de esta casa, me imagino que has dormido lo suficiente, son las 1:00 PM, has dormido unas 5-6 horas aprox, así que bien, puedes irte de mi casa.

. - Entiendo… de verdad lo siento por los problemas que te ocasioné, te devolveré el favor en otro momento.

. - No me importa, vístete con tu ropa que te he dejado ¡LIMPIA! ahí al lado.

. -Si… gracias.

. – Apúrate, tengo cosas que hacer y me haces perder tiempo valioso.

Y procedió a retirarse de la habitación rápidamente, me quité el pijama rápidamente y me dispuse a vestirme. Una vez lista salí de la habitación rápidamente y vi a Vanessa sentada en un sillón con las piernas cruzadas. Me pregunté, ¿Qué cosas tendría que hacer una chica universitaria? Que muy probablemente, estuviera mantenida por sus padres.

. -Te llamé un taxi para que te vayas segura a tu casa, y así también te vayas rápido de la mía.

. - Gracias, pero… no tengo suficiente dinero para pagar un taxi

Pude ver como fruncia más el ceño y hacía una mueca de desprecio con su boca.

. - No me importa, te daré dinero, pero lárgate.

. - Gracias de nuevo, no olvidare este favor que me hiciste.

Recojo el dinero que me ofreció y me dispongo a salir por la puerta, hasta que siento como se levanta y rápidamente camina hacia mí, volteo mi cabeza para ver como su mano se acerca a mi mejilla y a mi ojo morado, siento como coloca suavemente la yema de sus dedos en mi rostro, delicadamente siento como me comienza a acariciar mi herida, la observo hipnotizada por sus ojos que penetraban en mis moretones hasta que rompe el silencio sus palabras.

. -Ven, déjame colocarte una pomada, lamento si no te coloque antes, es que, olvide que la compré a esa hora que volví, me sentí enojada y algo angustiada al verte en el suelo durmiendo, así que te lleve a la cama y enojada me dispuse a limpiar mi casa.

. -Entiendo…

. -Si, más vale que entiendas que este el ultimo favor que te hago, acompáñame.

Me agarra de la mano y me lleva hacia el sillón indicándome que me siente y espere mientras va a buscar la pomada. Y mientras se dirigía al baño no pude otra vez evitar ver como contoneaba sus caderas de lado a lado, empecé a sentir un cosquilleo y algo de calor, no podía despegar mis ojos de sus circunferencias, me puse a pensar ¿cómo será su trasero debajo de esa ropa ceñida? Mierda ¿en que estoy pensando? Pude verla como venía devuelta con un pequeño kit de primeros auxilios.

. -Bien, quédate quieta mientras coloco la pomada.

Me agarro la cabeza y la puso en respaldo del sillón, mientras ella se subía y se ponía de rodillas, colocando sus piernas a los costados y apoyándose encima de mí, para estar a más altura y colocar cómodamente la pomada en mi rostro, se sentía como el paraíso, sus manos son una verdadera obra de arte, es tan delicada a la hora de pasar sus manos por mi cuerpo, y su cuerpo junto al mío me generaba extraños sentimientos, sus cálidos muslos sobre mis piernas, podía sentir su redondo trasero aplastar mis rodillas, hasta que me dirigió la palabra y rompió el momento, procediendo a bajarse de mí, rompió con todo el momento que ojalas no hubiera terminado.

. -Ahora te colocare una gaza para que no te entre tierra por el viento y se te vaya a quedar pegada por la pomada.

Pude sentir sus cálidas manos colocando delicadamente la gaza en mi ojo, mientras que con unas tijeras le daba forma a la gaza para después terminar de colocarla.

. - Listo, ahora desaparece de mi vista.

. -Si, muchas gracias. (me levanté rápidamente y le di un abrazo)

. - Puedes largarte, ¿¡YA!?

Podía sentir su rechazo, la solté, recogí mi mochila, y rápidamente salí de su casa tratando de aguantar mis ganas de llorar, ahí vi al taxista algo enojado por la espera y procedí a subirme rápidamente al taxi.

. - ¿A dónde se dirige señorita?

. - Voy al comercial de regalos anónimos

. - Okey señorita.

Cuando el taxi partió volteé y di una última mirada a la casa de Vanessa, la cual por cierto sí que era bastante grande por afuera, mientras llegaba al local que quedaba cerca de mi casa me percate de que no traía conmigo mi teléfono, ahora no tendré con quien comunicarme hasta que lo recupere y/o Vanessa me lo entregue en la Universidad.

Una vez llegado al local que quedaba a 2 calles de mi casa y de haberle pagado al taxista que por suerte no me cobro mucho.

Después de caminar por un par de minutos llegué a mi casa y ahí pude ver el auto de mi madre, me dispuse a entrar rápidamente y vi a mi madre sola adentro almorzando en el comedor de la casa, por suerte si llevaba mis llaves en mi mochila.

. – Hola hija ¿después de la Uni te fuiste a quedar donde tu novio que no respondías el celular y recién llegas?

Un ¿hola, hija? ¿Eso es todo? Ni siquiera se dignó en mirarme a la cara al dirigirme la palabra, o a preguntar como estoy si quiera, después de tantos meses sin vernos, vienes aquí a almorzar como si nada.

. -No, sabes que no tengo ningún novio, además, tuve un pequeño accidente y una amiga me llevo a su casa y pase ahí la noche mientras me recuperaba.

. - Ah, ya veo, eso explica tus moretones y el parche en el ojo, tus abuelos fueron a comprar al supermercado hace unos 30 minutos así que ya deberían estar de vuelta en un rato.

. - Okey, iré a mi habitación a descansar, no me molestes mientras descanso.

. - Bueno, ah una cosa más, tu papá me aviso que te ha transferido algo de dinero a tu cuenta bancaria, para que tengas dinero este mes, ya que tu no le respondías el teléfono.

. – Okey, gracias.

Me dirigí rápidamente a mi habitación al segundo piso de la casa, para cambiarme la ropa y colocarme el pijama y acostarme rápidamente a pensar en todo lo que me había pasado. Que día más raro el que acabo de tener, primero conozco a una chica el primer Dia de la U y… ¿después que pasó? Estoy segura de que hubo momentos en los Vanessa me trataba mal y otros en los que me trataba bien ¿o solo es mi falta de sueño la que me juega malos ratos…?

¿O quizás ella tiene algún problema de personalidad? No lo creo, me ayudo bastante, me llevo a su casa, me atendió y me dio lo necesario para reincorporarme después de haberme dormido en el patio de la U, de seguro fui yo la imbécil que hizo cosas mientras dormía, no le daré más vueltas al asunto, Vanessa es una buena persona y listo, tenía sus razones para echarme de su casa. Empecé a darme vueltas por la cama, no podía dejar de pensar en ella, en sus ojos, su cabello, sus cuidadosas manos cuando me acariciaba, hasta que de repente se me vino la imagen de sus caderas y su redondo trasero a mi cabeza, no podía evitarlo, me estaba comenzando a excitar, y para mi suerte que mi habitación está alejada de cualquiera que me pudiera escuchar, así que procedí a bajar mi mano a mi entrepierna y a juguetear con mi entrepierna, estaba toda mojada y aún más recordando cuando desperté y tenía su pezón en mi boca, me estaba volviendo loca masturbándome, más ese otro maldito sueño que tuve en el que vi a Vanessa en una especie de traje de gimp, no podía quitarme de la cabeza esa escena cuando me daba con la fusta.

. - ¡AY, SI!  ¡Dios Vanessa castígame como la puta pervertida que soy!

Mierda, menos mal alcance a taparme la boca, cuando estuve a punto de correrme preferí quitarme la mano de encima, no quería dejar sucio y mojada la cama, me miré los dedos, tenían un fuerte olor y estaban viscosos. Procedí a levantarme para lavarme las manos, no podía dejar de pensar en lo que acababa de hacer mientras me lavaba las manos.

. - Si… definitivamente yo fui la que se comportó pervertida con Vanessa, mañana aprovechando que es domingo regresare a su casa para disculparme.

. - ¿¡Hija, estas bien!? Te escuche gritar, voy arriba a verte.

. - ¡Si, estoy bien, no te preocupes!

Claro ahora ven a hacerte la interesada, justo en el mejor momento vienes a preocuparte de tu hija.

. - Hija, ¿qué es ese olor?

. - Es… la orina del gato (lo siento bebe gatito panzón, esta vez tendrás que cubrirme.)

. - ¿Y por qué gritaste, te caíste, paso algo?

. - No, es que, pise la orina del gato y grite del asco que me provocó.

. - Esta bien, limpia y bajas al baño a lavarte los pies.

. - Tranquila mamá, ya limpié, y me lavé el pie.

. -Bueno hija, tus abuelos deben estar por llegar así que los iré a esperar al patio para ayudarlos a entrar sus compras.

. - Bueno mamá, yo estaré en mi notebook, no me molesten mientras veo mis estudios.

Que excusa más mala, ayer fue mi primer día y para peor lo perdí por mi fuerte falta de sueño, menos mal mañana es domingo, así que iré a disculparme con Vanessa, recuperare mi teléfono, y también le preguntare que pasaron en las clases que no estuve y así me pondré al día con los estudios.

Me quede toda la tarde escuchando música y viendo videos, no me sentía motivaba, como siempre, estaba aburrida, solo quería que fuera de noche para irme a dormir e ir mañana a la casa de Vanessa.