Descubrir a mi hijo espiándome (3)

¡Ana!,.-¡ana!! Tráeme el albornoz”,. - Era mi esposo”, Había terminado de ducharse y nosotros intentábamos dejar de abrazarnos, yo acariciaba su cara, su pelo y todo su cuerpo, era para mi lo mas lindo que había en el mundo.

Estábamos abrazados y el tiempo se nos paso sin darnos apenas cuenta, las caricias y los besos entre los dos se repetían sin apenas descansar, ninguno de los dos hacíamos nada por separarnos, estábamos abrazados y desnudos por completo, uno frente al otro, sus manos no dejaban de acariciar mi espalda bajando de vez encunado hasta tocar mi culo.

¡Ana!,.-¡ana!! Tráeme el albornoz",. - Era mi esposo", Había terminado de ducharse y nosotros intentábamos dejar de abrazarnos, yo acariciaba su cara, su pelo y todo su cuerpo, era para mi lo mas lindo que había en el mundo.

Me di cuenta de que algo le ocurría, le veía un poco serio y le pregunte. ¿Por qué éstas serio, cariño?

¿Éstas arrepentido? No mama, no es eso,

¿Entonces dime que te pasa? ¿Qué es?

Es porque…. no he podido hacerlo. ¡Me partió el corazón..!!

¡No mi amor!, no, no te tienes que preocuparte por eso, es normal hijo, seguramente yo tampoco supe hacerlo bien la primera vez, no te preocupes cariño, nadie lo hace bien la primera vez!!. - tienes toda tu vida para hacerlo bien, veras como lo consigues, yo te ensañare a conseguirlo. Le solté, tuve que salir, mi esposo me reclamaba las toallas para secarse.

¡Oye cariño!, as decidido si vas a salir?. – si volveré sobre la hora de la comida. Eran las 10 de la mañana de un domingo. Teníamos toda la mañana para estar juntos.

Nada mas despedirse mi esposo, fui a por mi hijo, - Abrí la puerta de su habitación, - Sal cariño, papa se marcho y no vendrá hasta la hora de la comida.

Una vez en la cocina, se sentó en la misma silla donde momentos antes yo apoye mis manos quedando a cuatro patas mientras mi esposo me bombeaba.

Oye cariño, tienes que desayunar, estarás muy agotado, tienes que reponerte, - Si mama, pero no tengo ganas, - no importa ya te preparo el desayuno y te lo tomas sin ganas, ¿de acuerdo?, mientras yo me ducho.

Le serví el desayuno y rápidamente me dirigí al baño.

No pasarían ni quince minutos cuando termine de ducharme y al correr la mampara de la bañera me lo encontré simulando estar lavándose las manos, pero me di cuenta y sabía que empezaría a meterme mano. Se acerco hasta mi y no pude controlar el deseo de darle un beso, mi intención era dárselo en la mejilla pero el no dudo en buscar mi boca y,..la encontró, ¡claro que la encontró!!. Oye cariño para,..para, tranquilo, dúchate mientras yo salgo a comprar vale?. Tuve que dejarlo viendo como su bulto crecía y crecía cada vez mas, - escucha cariño he pensado que mientras tu te duchas, yo me acercaré al centro comercial para comprarle a tu padre un tarrito de miel que ya se le acabo.

(Lo que yo pretendia era darle un poco mas de tiempo)

.Me dirigí a mi habitación para vestirme y me sequío vino detrás de mi sin hacerme caso alguno.- Pero donde vas!! - Dúchate pronto por favor así cuando yo venga tendremos mas tiempo, - ¡si mama pero es que así no puedo salir!! – es que mira… no se me baja. ¡MADRE MIA!! – Pero como es posible hijo, - ¡no se mama pero es que me duele un poco, y no se me baja. – ¡haber déjame ver! , me sorprendió la dureza que mantenía su enorme verga y sobre todo, me extraño el dolor que decía que tenia desde hacia un ratito.

En seguida pensé que lo que tenía era la necesidad de correrse de nuevo. Entonces decidí aplazar la compra de la miel para mas tarde y, dejarme ser suya, pues yo lo deseaba mas que el, y decidí complacerle.

Ven cariño ven, veras como se te quitara, ¿Quieres que lo hagamos aquí?, - ven échate, en la cama, yo me pondré encima.

Note que no se quitaba la mano de su verga, y me comento que seguía doliéndole, entonces mi mano volvió a palpar su verga y era tremenda la dureza que mi mano percibía, le note cada vez mas preocupado y, seguía sin echarse en la cama, "

esto me empezo a preocupar un poco mas"

¿cariño es mucho lo que te duele?

Yo estaba dispuesta a dejarme penetrar, pero

–si tu quieres lo dejamos y esperamos,- ¿te parece bien? Volví a tocarle de nuevo y comprobé durante unos minutos que su rigidez no cesaba.

Pensé que lo mejor era vestirme y salir a comprar la miel para mi esposo,

quizás serian los nervios, pensé yo.

Después de unos 45 minutos mas o menos, regrese y no podía creerlo seguía con su pene rígido, y le note bastante preocupado. ¡Dios mió..!!- que esta ocurriendo?. – esto no es normal,

"pensé yo"

¿te sigue doliendo mucho cariño? – "si mama me duele un poco mas que antes de marcharte". – Madre mía!!- pensé yo!. – ¡que podemos hacer, que vamos a decir a su padre cuando llegue!!. Ven cariño, quizás después de ducharte se te quite. Se metió en la ducha y pude observar que su pene seguía tieso a pesar de la ducha de agua fría. Dios mio!!. – esto me empezó a preocupar mas de la cuenta, ¿Por qué no se le baja? ¿Por qué me decía que le dalia?. Trataba de disimular mi preocupación para no ponerle nervioso, pero yo estaba muy preocupada, las ganas que tenia se me fueron poco a poco.

Trate de tranquilizarle. Tu no te preocupes cielo, le diremos a tu padre que no te levantaste por este motivo, a tu edad puede ocurrir esto, tu tranquilo, no te sientas nervioso, ¿te sigue doliendo? Si, es un dolor continuo y bastante molesto. Me sentía muy mal y muy preocupada, entonces decidí llevarle al medico de urgencias. Disimule ante el, no tener importancia pero que seria mejor ir al medico. Se vistió y tapando con su cazadora su enorme bulto tomamos un taxi hasta la clínica.

Una vez dentro en el despacho del doctor le izo bajarse los pantalones, el medico no dijo nada se limito a tocar y a continuación le pregunto: ¿desde cuando has notado esta erección? – pues hace poco mas de una hora".- esta bien súbete los pantalones.

No es nada importante, - ¿te as masturbado antes de tener la erección?.- PUESSS,- si doctor si. Esta bien, y as estado o sentido nervioso por alguna razón, o algo que te preocupe?, -PUESSS, ¿Sabe una cosa doctor?, - que el esta enfadado con su chica y yo le he notado muy pensativo desde ayer. Muy bien no se preocupe es PRIAPISMO, cuando llegues a casa que se ponga unos paños con agua tibia durante unos 15 minutos y no te toques en unos días, seguramente te bajara, pero sino, no te preocupes, seguro que para mañana te habrá desaparecido, sino fuera así y el dolor aumentara vienes de nuevo a verme. Si pero doctor…… no se preocupe señora, no es nada malo, puede ocurrirle a cualquiera.

Salimos de la clínica y fuimos a toda prisa a casa.

Bueno ya as visto que no es nada grave hijo, ¿estas mas tranquilo? Te sigue doliendo?.- si un poco. Tienes que estar acostado para cuando venga tu padre, le diremos que son los síntomas de la gripe, y que te duele mucho la cabeza, ¿de acuerdo? Si mama, yo prefiero que sea así.

Dos días después, todo volvió a la normalidad, y ninguno de los dos pudimos retener por más tiempo el deseo de realizar nuestro mayor sueño.

Una noche antes de acostarse mi hijo, yo empecé a recoger la mesa como de costumbre, y cuando me dirigí a la cocina vi. ha mi hijo que me seguía detrás de mi con unos platos en la mano, cuando entramos en la cocina, se acerco y me dijo en voz baja, - mama!. ¿Vas a coger esta noche con papa?, - ¿por que me lo dices hijo? Por qué esta noche si tu quieres cuando termines de hacerlo con papa y vayas al baño te puedes pasar a mi habitación y así podemos hacerlo, ya tengo muchas ganas de que me dejes – ¡pero como te atreves!!, cariño tu padre nos puede escuchar, - puedes venir después de que se duerma,- estoy con ganas de hacerlo, - ¿te espero vale? - la idea era muy arriesgada, pues yo tenía que esperar a que mi esposo se durmiera después de follarme, "

cosa que era muy probable

," y luego correr el riesgo de que pudiera despertarse y descubrirnos, pero… me gusto, si mi esposo se dormía, podíamos conseguirlo y….!de acuerdo!!!, - pero tenemos que tener mucho cuidado que no nos oiga, tu deja la puerta de tu habitación abierta y no te muevas hasta que yo entre. No termine de decirle mi respuesta cuando me planto un beso en toda mi boca. – ¡Que atrevido!!- "

Dije para mí"

Habíamos terminado de de recoger la mesa y mi hijo, como de costumbre nos dio las buenas noches antes de acostarse. Mi excitación subía cada vez mas deprisa, y deseaba con ganas sentirme penetrada por mi hijo.

Yo espere unos minutos viendo la televisión junto a mi esposo y deseando irnos a la cama lo antes posible para terminar con el y esperar que se durmiera. La idea de mi hijo me había puesto bastante calentita. Imaginar con el deseo que me esperaba en su habitación para follarme me excito tanto que ardía en deseos de empezar con mi esposo.

Durante unos minutos me mostré insinuante con mi esposo que no tardo en levantarse y dirigirse al baño, poco después entre yo. Al salir del baño mi hijo tubo el valor de salir hasta el pasillo y pedirme que dejara la puerta de mi habitación abierta para poder vernos mientras cojia con mi esposo, en voz baja le dije que no, que se estuviera quieto sin tocarse, pues podía correrse antes de hacerlo con migo y yo no quería eso.

Cerré la puerta de mi habitación y me metí en la cama. Mi esposo, no tardo, en empezar a sobar mi panocha metiéndome alguno de sus dedos, poco después se dio la media vuelta y se monto en cima encontrando mis piernas totalmente abiertas y esperando que acercará su verga hasta mi raja, empezó a bombear durante unos minutos y después me pidió que me pusiera a cuatro patas, al cambiarme de postura, mi esposo saco su verga de mi coño y la sensación de vació que sentí me provocaron mis dos primeros orgasmos.

Conteniendo mis gemidos me imaginaba que era mi hijo quien me estaba cogiendo mientras ya a cuatro patas sentía con fuerza los empujones de mi esposo que aceleraba el ritmo, enseguida me di cuenta como su leche subía por su verga y me inundaba mi ansiosa y ardiente panocha.

Con la verga de mi esposo todavía dentro de mi, me sentía mas en celo que nunca y la espera de que mi esposo quedara dormido, hacia que mi coño sintiera pequeños orgasmos, notando como su verga se desinflaba poco a poco.

Ahora solo tenía que esperar a que se durmiera. No quise ir al baño para estar segura de que se había quedado dormido. Poco después me levante con la seguridad de que se había quedado dormido.

Cerré la puerta despacio y fui hasta la habitación de mi hijo sin lavarme, no quise hacerlo porque mi coño estaba inundado y sentir como chorreaba por entre mis piernas era una sensación que me gustaba, además pensé que mi hijo me penetraría mejor.

Nada mas entrar le vi con su verga entre las manos, y enseguida se acerco para abrazarme, una de sus manos fue directamente a mi coño, empezó a manosearlo,…. – ¡mama esta muy mojado!!- ¡si cariño esta un poco mojado!, se pone así cuando tiene muchas ganas, "

respondí yo

". Sentía deseos de chuparle su verga y sentir su enorme capullo dentro de mi boca, pero temía que se corriera como las veces anteriores.

¡Escucha cariño!, ¡quiero decirte algo!, ¡tienes que escucharme!, aparte su mano de mi coño: Ahora yo me tumbare en la cama boca arriba, ¿de acuerdo? Y tu harás todo despacio y como yo te lo diga,¿de acuerdo? Y cuando notes que te viene me la sacas y esperas un poco, ¿de acuerdo? Me tumbe en la cama boca arriba dejando mis piernas totalmente abiertas y ligeramente dobladas, el se subió a la cama y de rodillas frente a mi se acerco hasta poner su verga en la misma puerta de mi coño, le pedí que se inclinara hacia mi al tiempo que con la ayuda de mi mano apunte su durísima verga hasta encontrar la raja de mi coño.-¡Ahora empuja! pero, muy despacio, y déjala dentro sin moverte, el enorme capullo de su verga se fue metiendo hasta que se hundió y mis piernas rodearon su cintura quedándonos los dos sin movernos,….no te muevas nada cariño!!,…cuando notes que te viene sácala!

Sin que el se diera cuenta de mi tremenda excitación, busque su boca y deje que mi lengua buscara la suya, y en ese mismo instante sentí que su respiración anunciaba el final, y el comienzo de una relación entre nosotros que desde ese mismo momento yo, deseaba repetir hasta la saciedad.

Quiero dar las gracias a todas las personas que me han mandado sus correos especialmente a Berta, y que desde aquí, la animo a que escriba todas las cosas tan bonitas y excitantes que ella a vivido.