Descubriendo una aventura - Parte 1
No quise pensar en si no volvería a llamarme, a buscarme, en realidad ese momento no importaba, estaba satisfecha, adolorida, cansada, pero sobre todo feliz sin saber que esta era solo el inicio de una seria de aventuras
Hola que tal esta es nuestra primera historia, esperamos que les guste, escribanos y dejen sus comentarios:
No debo dormir con el pelo mojado, no debo dormir con el pelo mojado me repetía como un mantra un martes por la noche mientras pensaba en la plática que había tenido con mi amiga Alejandra esa tarde, en la cual entre otras cosas, me hizo entre ver su preocupación por mi soltería de ya casi dos años –Fernanda me parece increíble que en casi dos años no te hayas interesado en ningún tipo, eso es alarmante no solo por tu soledad emocional sino por tu soledad vaginal- sentí que no podía dejar de reírme en ese momento, pero en el fondo sabía que tenía razón y definitivamente ya extrañaba lo que era sentir a un hombre dentro de mí, a lo cual después de darle tanta vuelta accedí a su sugerencia de meterme a un sitio web “elchat.com” lo hice, coloque mi nombre y entre a la sala de El Salvador, mi primera impresión fue un tanto alarmante entre tanto desquiciado con user names un tanto descabellados y otros un tanto vulgares, y en lo que yo estaba perpleja leyendo me sale un ventana emergente con el nombre de “Fede”, y es acá donde empieza la verdadera historia, en esa primera conversación logró captar mi atención, no solo por ser de mi misma edad parecía a simple vista un chico amable, educado y confiable y en ciertas cualidades muy diferente a mí y en otras un poco parecido eso me pareció interesante, al final decidimos intercambiar redes sociales para seguir en contacto y pensé que nunca mas sabría de él nuevamente, pero no fue el caso porque seguimos conociéndonos cuando nos vimos en fotos no se me olvida que lo primero que dijo es “me encantan tus labios” y ese simple comentario me hizo sentir una punzada que termine manifestando mordiéndome los labios mientras lo leía
las conversaciones siguieron hasta el punto de un día subir de tono y empezamos a hacernos preguntas de con cuantas personas habíamos estado, que posiciones nos gustaba usar al tener sexo, como besábamos y cosas así a tal punto que los días pasaban y la curiosidad y la calentura subían el primer paso fue enviarnos fotos desnudos conocimos nuestros cuerpos antes de conocernos en persona y cuando tomaba las fotos humedecía tanto que lo único que podía pensar era que deseaba en ese momento que su cuerpo estuviera pegada al mío, sentir su aliento sobre mi cuello, sus labios mordiendo mis pechos y me tocaba pensando que era Fede el que me estaba haciendo sentir eso, por su lado al ver sus fotos, su pene tan erecto sabia que el me deseaba de la misma manera, las ganas subían hasta que un día tomamos la decisión de conocernos y hacerlo – Te parece si nos tomamos un café y vemos una película en la compu y luego vemos que sucede?- me dijo, y aunque temblaba de miedo de pensar que podía ser un asesino y podía haber estado mintiendo, el deseo de hacerlo era sin duda alguna muy sincero y real y ni siquiera sentí cuando le dije
-me parece perfecto.
excelente, te veo a las 5.30 starbucks, después del trabajo, ok?
ok, luego nos vamos a mi casa y vemos la película o algo mas…
-excelente.
Nunca olvidare que lo conocí un miércoles 4 de junio, era un día gris y llovía, estaba un poco nerviosa, pensaba mil cosas, pero aun así estaba decidida a verlo, a correr el riesgo, a por un momento dejar de ser yo y por una vez no ir a lo seguro, aun a sabiendas que podía verlo solo esa noche, tener sexo con él y probablemente no volver a saber nada de él nunca más, arriesgarme al hecho de usarnos mutuamente, llego la hora de la cita, llevaba un suéter a rayas beige con azul marino y unos jeans ajustados azules, andaba el cabello un poco revuelto por el clima, pero aun así creo que me quedaba sexy, entre al café y estaba en la segunda planta y justo me sentaba y lo vi entrar por la planta baja con una camisa café a rayas y unos jeans un tanto ajustados también y lo primero que pensé “wow es alto”, e inmediatamente me gusto, porque yo también lo soy, no había terminado de sentarse cuando me dijo:
- Lo siento, pero a mi mamá se le quedo el carro y debo ir a recogerla – y lo único que pensé en ese momento es que buscaba una excusa para safarse, pero obviamente no se lo dije
- Ahhh está bien no te preocupes no hay ningún problema, otro día será
- Lo siento de verdad pero me acaba de llamar, pero te paso dejando a tu casa, ok?
- Ok
Cuando llegamos a su auto me abrió la puerta del coche y siempre he tenido cierta debilidad por los caballeros asi que ese fue un punto a su favor; mientras íbamos en el trafico rumbo a mi casa estaba tenso, por lo de su madre supe que no era mentira cuando ella le llamo y también se escuchaba un tanto agobiada, y yo estaba tan nerviosa, pero el rompió el hielo y puso su mano en mi pierna y empezó a acariciarla, en ese momento sentí como mis entrañas se retorcían y así fue una y otra vez hasta que el camino termino y me dejo en mi casa y pensé que la cita había terminado, entre a mi habitación y por un momento pensé que simplemente las cosas quizá no debían pasar, cene y saque todo pensamiento negativo de mi cabeza, busque una película y puse “x-man days of future past”, cuando de repente leo un mensaje en el whatsapp que decía:
- Todavía quiere verme hoy?
- Como salió con lo de su mamá?
- Bien, el auto ya está en el taller y ella en casa, entonces quiere verme?
- No le parece que es un poco tarde?
- Puedo llegar unas dos o tres horas..si gusta?
- Bueno está bien, vente
- Ok, llego en 20 min
- Tenga cuidado
Y así sentí una gran alegría, sabía que le había gustado y que me deseaba, que deseaba tenerme, no me había desvestido así que andaba igual como andaba por la tarde, y de repente llego, abrí la puerta y por dentro temblaba de emoción y de miedo, se había cambiado la camisa por una camiseta sport y los zapatos casuales por unas zapatillas deportivas se miraba más relajado que por la tarde, entramos nos acostamos y yo tenía mi computadora en la cama y empezamos a hablar de la película que yo ya había empezado a ver y él no entendía porque ya llevaba como 40 minutos, y de repente su mano inquieta empezó a rozar la orilla entre mi pantalón y la blusa y sentí como pequeñas corrientes eléctricas empezaron a llenar mi espalda y seguíamos hablando hasta que de repensé me vio a los ojos y me dijo –eres bonita- y lo único que paso por mi mente fue decir –“gracias”- me sentí un tanto torpe, pero solo sonrió y de repente rozo sus labios en los míos y me beso.
Seguimos jugando un poco hasta que él cerro la computadora que sin más ni que paso al piso, los besos siguieron subiendo de tono y pasaron a ser más apasionados, con lengua y uno de mis placeres favoritos mordidas, mordidas de las cuales hasta el momento se queja, pero en el fondo se que le excitan, estábamos tan cerca que sentí como su erección crecía en mi, pero me sentía un tanto nerviosa y solo dije –apago la luz?- asintió la apague y entonces me deje ser, me puse encima de él y podía sentir su pene que topaba con mi pantalón, empezó a besar mi cuello y ese es uno de mis puntos débiles, me excito me tenia húmeda lo podía sentir, me saco la blusa y el bra y así mis pechos estaban al descubierto expuestos a sus traviesas y torturadoras manos empezó a apretarlas a tocar los pezones y sentía contracciones en mi clítoris, coloco sus labios en ellos y entonces si sentía como me retorcía al morderlos al chuparlos, por Dios eso fue riquísimo! Le saque la camisa, y ambos nos quitamos los pantalones y la ropa interior, y quedamos así totalmente desnudos yo sobre él me miro a los ojos y le pregunte que pensaba y me dijo
- Te deseo
- Me tienes aquí en tus brazos
- Todavía no te tengo como yo quiero
Sonreí , y en ese momento empecé a moverme de atrás hacia adelante para que su pene sintiera la humedad, y tuviese la sensación que iba entrar en cualquier momento, pero no lo dejaba entrar, me fascino al ver su expresión cada vez que sentía que ya iba entrar, estaba extasiada, hasta que de repente me tomo por las caderas para sujetarme y mantenerme quieta y entonces entro sin piedad ni detenimiento alguno, a lo salvaje como queriendo decir “aquí no vamos a seguir jugando”, sentí dolor un dolor similar al de la primera vez, quizá por tanto tiempo sin hacerlo, pero a la vez tan placentero, tan rico, tan intenso, que me encantó, recuerdo que pronuncie un chillido de dolor y entre dientes le dije “salvaje”, pero en ningún momento le pedí que se detuviese, empezó a embestirme, a golpearme una y otra vez, mas fuerte, esperaba un momento y volvía a hacerlo, y la sensación era tan fuerte, que quería gemir más fuerte, y no sé si fue adrede o por pura maldad, pero ahogo mis gemidos besándome de una forma casi a modo de anhelo, de deseo, como queriendo decir “eres mía en este momento y no te vas a ir”, y si aunque me la llevo de mujer no dominada, en ese momento al besarlo de esa manera tácitamente le dije “acepto ser tuya y no me estoy yendo a ninguna parte”, fue una sensación nueva, tantas emociones juntas.
Por una parte el morbo de estar con un desconocido, de dejarse llevar por la lujuria del momento y sentir esa sensación exquisita que alguien te está llenando y a la vez destrozando por dentro, y peor aun que te esta fascinando, luego me quite de sobre él y se puso sobre mi, con mis piernas en sus hombros empezó lentamente a penetrarme y sentí que me estaba castigando porque lo hacía con malicia para provocarme, para que la expectación me crease mas deseo y como cualquier movimiento era imprevisible, de repente lo hizo fuerte una y otra vez y entonces sabia que ya no podía contener mas, una sensación conocida empezó a recorrer mi cuerpo como un calor incontrolable, seguía haciéndolo más rápido hasta que me deje correr y mi cuerpo era solo espasmos y sensaciones, fue algo delicioso, un tanto repuesta de tan rico orgasmo, me puse sobre él nuevamente con la intensión de retribuirle lo que en ese momento me había hecho sentir y coloque suavemente mi boca sobre su pene, empecé a saborearlo, sabia a mi...y eso me provoco una sensación de excitación de solo pensarlo, luego deje las cortesías de lado y empecé a chupar a sentirlo, a que entrara todo hasta mi garganta y no podía ver su cara en ese momento, pero su cuerpo y sus gemidos me hacían saber que lo estaba disfrutando, que no quería que parara, y no solo él, a mí también me encantaba sentirlo allí en ese espacio tan reducido, presionarlo con los labios y sentir sus venas saltadas, me encanto mamarlo hasta sentir su piel eriza.
luego comencé a masturbarlo con la mano para intercambiar movimientos, y en ese momento su cuerpo se tenso sus muslos se contrajeron y sabía que iba acabar, hecho que me termino de confirmar el sentir su semen caliente deslizando por mis manos…y entonces estábamos allí, tendidos en la cama un par de desconocidos desnudos, que en ese momento estaban más que satisfechos de lo que había sucedido, sin decir falsas promesas y sin cruzar mayor palabra…hablamos después un par de minutos quizá, ya era tarde y al día siguiente había que ir a trabajar, lo despedí en la puerta de mi casa con un casto y pequeño beso en los labios…se machó y regrese a mi cama y no quise pensar en si no volvería a llamarme, a buscarme, en realidad ese momento no importaba, estaba satisfecha, adolorida, cansada, pero sobre todo feliz…que solo me deje hundir en los brazos de Morfeo después de una noche tan emocionante…sin saber que esta era solo el inicio de una seria de aventuras que se avecinaban…