Descubriendo mi camino... piloto

El solo esbozo una sonrisa y me dio la mano, yo le correspondí el saludo y……. en ese momento sentí como una descarga eléctrica..........................

Hola a todos los lectores.

Antes de comenzar con este relato, quiero presentarme; mi nombre es Francisco, aunque todos mis amigos de cariño me llaman frank, no sé, se me hace muy anglosajón pero total es su forma de demostrarme su cariño.

Este es la primera vez que escribo una historia y espero hacerlo bien y que a ustedes les guste. La historia que les voy a narrar es lo que a mí me paso, aunque mezclada con “ficción”, sobre todo en algunas partes donde los otros personajes piensan o actúan fuera de contexto principal, esto debido a que exactamente no estoy seguro de que pensaban o hacían, así que más o menos tomando en cuenta mi conocimiento sobre ellos lo escribo.

Bueno sin más aquí les cuento mi historia.

I'm walking on sunshine (whoa oh)

I'm walking on sunshine (whoa oh)

I'm walking on sunshine (whoa oh)

And don't it feel good

And don't it feel good

El sonido de la alarma de mi celular sonaba con esa canción que tanto me gustaba para poder despabilarme y despertar de un solo brinco, ya sé, no es nada calmado para una alarma de despertador, pero a mí me gusta. Eran las 6 am en punto, me tenía que levantar para ir a mi primer día de bachillerato, donde podría iniciar una nueva etapa, después de una época que no me gusto para nada en secundaria, y claro no era para menos, en los 3 años de secundaria fue un sufrimiento total, no encajaba con nadie, todos se metían con migo, era un antisocial y me la pasaba solo todo el día, claro que a mí no me gustaba eso, pero total así era y nunca lo cambie, creo que en el fondo me gustaba estar solo, aunque en mi mente sufría por no tener ningún amigo.

Antes de continuar me quiero presentar, mi nombre es Francisco, tengo 16 años, son un chico bastante alto, de unos 182cm, soy algo delgado, tengo algo de marcada la tableta aunque no mucha, ya que no me llama ninguno de los deportes que se practican en las escuelas de mi pueblo, vamos que a mí me gusta el Futbol Americano, pero como en México está la obsesión del Soccer, pues ni que hacerle, tengo ojos café claros, aunque mi hermana me dice que de repente se me ven algo verdosos, tengo pelo corto color negro, nunca me ha gustado dejarme crecer el pelo, a y soy heterosexual...... o eso pienso.

Ya eran las 6.30 am y yo ya estaba listo para el primer día de clases en el nuevo colegio, estaba decidido a cambiar como era, a ya no ser el antisocial del salón, a hacer amigos y porque no hacerme con una novia. La hora de entrada era a las 7am, así que cuando faltaban 15 minutos partí rumbo a lo que sería una nueva experiencia en mi formación de vida...... Y valla nueva experiencia que me esperaba ese año.

Al llegar al instituto, llegue algo sudado, ya que aquí en Sonora, México, es un infierno en el verano y las clases aunque empezaban a principios de Septiembre, aun se sentía un calor abrumador, y como me quedaba relativamente cerca el instituto decidí irme caminando. Mala elección, llegue sudado y de mal humor.

-valla primer día de clases- pensé yo

A la entrada del instituto había muchos jóvenes, no veía a nadie conocido, aunque vamos, a quien iba a buscar si no tenía ningún amigo de secundaria, así que me decidí a entrar y echar un vistazo a las instalaciones del complejo, no era muy ostentado aquel instituto, era lo que siempre se espera de un instituto de gobierno, algunos salones, medio discentes porque he de decir que la pintura ya se estaba desprendiendo de algunas partes. De repente a eso de las 7.15 sonó la campana.

-Rayos- Pensé -Aun no se en que aula me toco y ya está sonando la campana para entrar a clases-

Pero mi susto se me paso, cuando me di cuenta que él no era para entrar a clases, si no que era para que los nuevos nos reuniéramos en la cancha deportiva, donde habían dispuesto de un sonido, algunas mesas y sillas para las autoridades de la institución y un micrófono. Me dirigí rápidamente hacia la cancha y en unos momentos comenzó a hablar el que parecía ser el director de aquella institución.

-Buenos días Jóvenes, mi nombre es...(Los nombres en este relato están cambiados exceptuando el mío)... González y soy el director de este bachiller. Quiero darles la bienvenida a esta nueva etapa que inician el día de hoy........... bla, bla, bla

La verdad para este punto yo ya no le ponia atención a lo que estaba diciendo y me dedique a observar a mi alrededor para ver quienes serían, junto con migo, los nuevos del plantel, no encontré ninguna chava interesante de las nuevas

-Que decepción, será un curso bastante aburrido- pensé muy decepcionado.

Pero algo capto mi atención y que hasta a mí me sorprendió, un chavo, que estaba como a 2 metros a mi derecha y un poco hacía en frente. Tenía buen porte, mediría 1.70, piel blanca, pelo color negro aunque más claro que el mío y algo largo y lo que me llamo la atención es que usaba los pantalones más debajo de la cintura………. Espera, ¿Por qué me estoy fijando en un chavo?, eso sí que me dejo desconcentrado y pensativo. Con todo esto no me había dado cuenta que el director había dejado de hablar y le había cedido el micrófono a una mujer, la cual no oí quien era, ni qué cargo ostentaba

-Muy bien Jóvenes yo los iré nombrando y les diré en que aula fueron asignados para que pasen a cada una de ellas y tomen el asiento que más prefieran- Dijo la mujer

Cuando oí esto, ahora si comencé a poner atención a lo que decía la mujer. Uno a uno nos fueron nombrando y nos dividen en los diferentes cursos que había en el instituto, aunque claro ya cada quien habíamos elegido en que especialidad queríamos estar en los próximos 3 años y solo nos nombraban para asignarnos un aula. Había 3 especialidades, Contabilidad, Físico Matemático y algo de ganado y siembra, aunque nunca me pude aprender que nombre era jejejeje.

Yo solo estaba esperando a que me nombraran para poderme ir a mi aula, porque para ese momento ya estaba haciendo un calor del demonio y nosotros en la cancha debajo de los rayos del sol, claro también estaba al pendiente por si nombraban al chavo que hace unos momentos no dejaba de mirar…………

-pero en qué demonios estoy pensando?, este día sí que me levante raro.

Mi nombre salió primero, para mi decepción, ya que no sabría cuál era el nombre de aquel Joven que capto mi atención, pero bueno, chance y así me olvidaba de él, que la verdad ya para ese momento estaba algo confundido. Llegue a mi aula, que era 1ro “C” y era el de los contadores, que fue el que elegí, ¿Por qué elegí esa especialidad?, la verdad no sé, solo se me ocurrió y ya estaba, al llegar percate que aún eran pocos los que ya estaban en esa aula, así que me fui al que sería mi asiento por el resto del año, elegí el último de una de las esquinas

-Y eso que este año dejaría de ser el antisocial- Pensé

Al sentarme y dejar mis cosas bajo este, sentí que alguien me observaba, cuando volteo, me di cuenta que era una joven, no estaba mal, pero la verdad no era de mis gustos, era morena, de 1.50 metros aproximadamente, cabello largo color negro, unos ojos grandes y cafeces que denotaban que algo estaba pensando y ese algo me involucraba a mí por lo que podía ver, eso sí con unos senos algo grandes.

Cuando menos pensé la chava se acercó a mí y me saludo

-Hola mi nombre es Myriam, y ¿el tulló?

-Hola Myriam, mucho gusto, yo soy Francisco.

-Mucho gusto Francisco, ¿eres de aquí del pueblo?

-Así es, aquí nací

-En serio, y ¿Por qué nunca te había visto?

-Bueno es que la verdad no salgo mucho, así que es raro verme en la calle de parranda o algo así.

-A ya…..

En eso fue interrumpida por una voz, algo chillante que gritaba su nombre desde la puerta

-U me habla mi amiga, te dejo, platicamos más tarde ¿sí?

-Claro, más tarde será.

Valla pues no había comenzado tan mal ese día, por lo menos ya había congeniado con una chica y quien sabe, tal vez si de tanto tratarla se convertiría en algo más.

Pasaba el tiempo y entraban más compañeros, a cada uno lo observaba para ver quienes serían los posibles nuevos amigos que tendría, si claro me animaba a hablar con ellos, fue en ese momento cuando al voltear a la puerta para ver quien sería el próximo en entrar, me quede helado al verlo, ahí estaba el chico que hace rato había capturado mi atención y por quien había sentido confusión y no sabía por qué, para mi sorpresa y sin pensarlo se fue a sentar directo al sitio al lado del mío, lo peor del caso es que como éramos muchos y las aulas no eran muy grandes, las filas de asientos estaban algo juntas, por lo que al sentarse el chico pude oler su aroma, era dulce, rica, olía a hombre mesclado con un poco de sudor, al oler aquello me di cuenta que mi miembro comenzó a despertar y cada vez a ponerse más duro, a los que inmediatamente trate de esconderlo para que nadie lo notara, pero para mí mala suerte o buena, el chico comenzó a hablarme

-Hola- Dijo con una voz algo grabe y con una sonrisa en su rostro.

-Ho…..Hola- Carajo, ¿Por qué estaba tartamudeando?

-Me llamo Jesús, ¿Y tú?

-Soy Francisco, mucho gusto Jesús.

-A pues el gusto es mío Frank. ¿Frank? Nadie me había llamado así nunca.

-¿Te gusta el soccer?- pregunto sin mas

-La verdad no, me gusta más el Futbol americano.

-O!, bueno no a todo el mundo le gustan las mismas cosas

Seguimos hablando de cosas sin sentido por un rato más y cuanto más lo hacíamos me daba cuenta que algo raro estaba sintiendo por él, no podía explicarlo y la verdad cada vez estaba más confundido en mi cabeza, ya no hallaba que hacer, estaba nervioso, sudaba, me temblaban las manos y para colmo mi amigo, que se le ocurrió ponerse duro, no bajaba nada. Creo que Jesús lo noto porque me pregunto

-¿Te pasa algo?

-No nada, estoy bien

-¿Seguro?, porque parece que estas temblando

-Sí, seguro no es nada

Carajo Francisco contrólate, pensé para mis adentros.

Las horas pasaban y las clases también, ese primer día los profesores solo nos hacían que nos presentáramos ante ellos y nos explicaban de qué tratarían las clases de cada uno. Esa fue la rutina de todo el día. A la hora del descanso, yo Salí casi corriendo hacia los baños, al entrar no había nadie, Perfecto, pensé, entre me pare frente al lavabo y me enjuague la cara, me vi al espejo y dije en voz alta

-Ya cálmate Francisco, ¿Qué es esto que te esta pasan….

En eso abren la puerta de los baños y es el, Jesús

-Hey Frank, ¿Qué te pasa?, desde hace rato noto que estas como enfermo.

La verdad no hallaba que hacer o decirle, a lo que mi inútil cerebro solo pudo decir

-No te preocupes, es solo que creo que me callo mal el desayuno, pero ya me siento un poco mejor, iré a comprarme una botella de agua y con eso seguro se me quita.

Acto seguido Salí disparado de los baños solo pude escuchar como Jesús me gritaba

-Oye espera te acompaño!!

Yo quería seguir caminando y no esperarlo, pero como por acto reflejo mi cuerpo se detuvo y no siguió su paso, Maldita sea- Pensé. Nos fuimos a la cafetería y yo pedí un agua, quería tranquilizarme, pero al tenerlo cerca de mí la verdad es que no podía.

Las clases continuaron sin ninguna novedad. Ya a la hora de salida, por estaría solo con mis pensamientos durante el camino a mi casa, o eso pensaba, ya que sin darme cuenta tenia a Jesús a un lado mío acompañarme.

-Hacia dónde vives Frank?

-Vivo cerca del molino viejo

-A sí que te tienes que ir por esta calle derecho ¿verdad?

-A si es, bueno te dejo, me voy a mi casa ya

-No espérate, yo vivo a 3 cuadras de aquí y me tengo que ir por la misma calle, te acompaño.

Y ahora que hacia?, ya le había dicho por dónde me iba y no me podía arrepentir, no si la suerte me acompaña a donde voy. Bueno total que de malo puede pasar.

Durante el camino íbamos hablando de todo, de la escuela, carros, mujeres, amigos, en una de esas y sin previo aviso me pregunto algo que me sorprendió.

-Oye Frank, ¿te puedo hacer una pregunta?

-Si claro, adelante

-Tu tienes muchos amigos?

-La verdad no, de hecho por el momento no tengo ninguno

-Entonces…….. ¿Quieres ser mi amigo?, digo veo que nos caimos bien, por lo menos tu a mi si.

Pense demasiado la respuesta, por un lado si quería tener amigos, esa fue la meta que me propuse para este año, pero por otro lado estaba confundido por lo que me hacia sentir ese chavo que acababa de conocer, al final mi parte subconciente me gano y conteste

-Claro Jesus, por que no, parece que nos llevamos bien.

El solo esbozo una sonrisa y me dio la mano, yo le correspondi el saludo y……. en ese momento sentí como una descarga eléctrica crusaba todo mi cuerpo, desde la cabeza, pasando por mi espalda y hasta la punta de mis pies, ahora si estaba mas confundido que antes………

Bueno queridos lectores, hasta aquí llega el primer capitulo de esta historia que espero les guste, claro seguire escribiendo mas capítulos si ustedes quieren. En este primer capitulo solo fue la introducción, y por lo cual no hubo nada de MORBO, ya en los demás las cosas comenzaran a ponerse mas subidas de tono.

Les agradecería sus comentarios para poder mejorar la escritura, la forma de expresarme y claro si les gusto el relato.

Saludos y cuídense

Frank