Descubriendo mi bisexualidad 3
Siguen las aventuras, incorporandose nuevos peronajes, en este relato le meto el puño a Juan y a mí me folla Ana con un consolador, mientras me la chupan
Tercera entrega del relato DESCUBRIENDO MI BISEXUALIDAD
Estuve varios días sin contacto con los panaderos, volví a mi rutina habitual, seguí saliendo con mi Ely, mi novia, el sexo se volvió mucho mas placentero con ella, ya que empecé a experimentar cosas con ella que nunca había practicado, le regalé un consolador, el cual usábamos a menudo, una vez se lo intenté meter en el culo, pero le dolía mucho y desistimos, otro día que estábamos un poco bebidos, me dice hoy estoy súper guarra, quiero que me metas tu polla y el consolador a la vez pero por el coño , por el culo lo he intentado sola y es imposible, fue un polvo espectacular, se corrió tres veces , era la primera vez que lo hacia.
Otro dia que estabamos en el sofá empezó a ponerse mimosa, al poco me sacó la polla del pantalón y empezó a chupármela, como vi. que estaba receptiva , empecé a meterle un dedo en el culo , no protestó y seguí un rato hasta que intenté meterle otro y ahí se rompió la magia, se apartó como si tuviera un resorte maldiciéndome, y diciéndome: “Cabrón que te crees que no me gustaría darte el gusto, pero me escoce, claro tu no sabes lo que es eso, te lo voy a meter yo para que te des cuenta”, yo le dije “bueno estoy dispuesto a ello y a ver que pasa”, entonces me untó un poco de lubricante y me lo metió al mismo tiempo que me la chupaba, viendo que no me quejaba , me metió dos , aquello era un delirio , yo ya estaba a punto de caramelo y ella me decía , “que mamón como te entra, no se como no te duele , ¿te meto otro?”, yo le dije: “ Venga no se que me pasa, pero me está gustando”, metió el tercero y empezó a darme fuerte, en este punto ya no pude aguantar más y me corrí en su boca, ¡¡que gusto mas inmenso!! . Ely, entonces hizo una cosa que jamás pensaría que hiciera, me escupió toda la lefa sobre mi polla y empezó a recogerla nuevamente con su lengua y se la empezó a tragar.
Yo estaba alucinado, fue el mejor polvo que me había pegado con ella, luego estuvimos hablando y ella misma reconoció que también le había encantado y que lo de meterme los dedos en el culo la había dado mucho morbo, que teníamos que repetirlo más. Yo por supuesto estaba encantado y le dije :”Bueno cariño si a ti te gusta, haré el esfuerzo”…
A los dos días de aquello, me llamó por teléfono Juan y me dijo que esa noche había fiesta en su casa, que tenían reservada una sorpresa que me iba a gustar, la verdad era que tenia ganas de volver, recordaba lo sucedido como algo placentero, así que inmediatamente le dije que sí.
Como a las 10 de la noche me presenté en su casa, me recibió Ana, estaba impresionante toda vestida de negro, con una mini de infarto y unas medias y ligeros, los cuales no llegaban a tapar la falda, nos saludamos y pasamos al interior, allí estaba Juan con una mujer que desde lejos no adiviné quien era, cuando me fui acercando me lleve una sorpresa mayúscula, era Maria, una amiga de mi novia. Nos quedamos los dos con los ojos como platos, nos saludamos sin decir palabra como autómatas, por lo visto ella tampoco sabia nada.
¿Qué os parece a los dos la sorpresa?, Solo pude decir,” joder que fuerte”, ella ni habló, entonces estuvimos hablando los dos un rato a solas, y se nos fue quitando el corte inicial prometiendo ambos que sería nuestro gran secreto, ya que ella también tenia novio.
Al rato estábamos los cuatro sentados placidamente tomando unos cubatas charlando de temas se sexo, el ambiente se empezó a caldear, Ana le dijo a Maria ven conmigo, se levantaron y se fueron al dormitorio y allí nos quedamos Juan y yo, que me dice “dejémoslas solas 5 minutos, luego ya nos incorporamos, mientras quiero que me la comas”, “creía que nunca me lo iba a pedir”, le dije. Así que le quité el pantalón y empecé a tragármela, al rato me dijo que me quitara yo el mío y empezó a chupármela quedando los dos en un 69 maravilloso, el estaba debajo y se la tragaba entera al mismo tiempo que me tenia metido 2 dedos en el culo, yo lo imité y viendo la facilidad con la entraba empecé a probar hasta donde llegaba y casi le meto el puño. Fue cuando me dijo “para que me corro y todavía nos quedan esas 2 guarras”.
Nos levantamos, nos terminamos de desnudar y nos fuimos para el dormitorio, al llegar estaban las dos despampanantes, Ana con unas medias negras y tacones y María con un Corsé blanco con liguero y medias a juego , estaban tendidas con la piernas abiertas , una enfrente a la otra y tenían un consolador doble metido en el coño y otro en el culo y se estaban follando mutuamente, cuando nos vieron, Ana me llamó y me dijo “Ven follame la garganta”, se la metí y se la estuvo tragando con la misma maestría de su marido. Juan tampoco perdió el tiempo y se la enchufó en la boca de María que hacia grandes esfuerzos para que le entrara, así estuvimos un rato hasta que Juan tiró de Maria le saco los consoladores, puso a cuatro patas, se colocó un condón y se la metió de golpe en el coño.
Ana por su parte se puso tendida boca arriba en el borde de la cama con los dos consoladores metidos y las piernas en alto , y me dijo venga ponte un condón y métemela en el coño, hice el intento de sacarle el consolador del coño, pero me dijo,” noooo, no lo saques lo quiero también dentro, fóllame así”, empecé a meterla, entraba ajustadísima, pero aún así empecé a darle todo lo duro que pude , Ana gritaba de puro gusto y al poco se corrió apretándome tanto que casi me la corta, así que se la saqué.
Al lado Juan seguía embistiéndole duro al coño de María, la cual gemía y chillaba como una verdadera loba., al verme que había terminado se la sacó y me llamó , le dijo a Maria,” venga que te vamos a hacer una doble, ¿Cuál quieres en el culo?”, esta sin dudarlo un momento me eligió a mi, así que Juan se tumbó, Ana se subió encima y empezó a cabalgarlo, yo me cambié el condón le empuje para poder sacar su culito y se la empecé a meter. Ahora los gemidos se convirtieron en aullidos, ella misma iba incrementando el ritmo a la follada hasta que se corrió, cayendo desfallecida. La dejamos que se fuera al baño y nos quedamos los dos solos. Juan no perdió el tiempo, me quitó el condón y empezó mamármela, al rato se la saco y me dijo:” venga tío que me vas a meter el puño en culo”, me dio un guante y empezó a lubricarse el culo con una crema viscosa , cuando lo tenia preparado se tendió y me dijo:” venga empieza a meter”, yo le metí varios dedos, pero necesitaba más, me cogió el brazo y empezó a meterlo el , no tardó mucho en tenerlo todo dentro, “empieza a follarme con el brazo”, en eso Ana entró y empezó a chuparnos la polla a los dos, me dijo:”venga dale fuerte que le gusta”, empecé un mete saca endiablado, me dolía el brazo y Juan bramando como un cerdo se corrió llenándole la cara a Ana de la tremenda corrida.
Yo era el único que quedaba por correrme, ya se había incorporado Maria al dormitorio y estábamos lo cuatro, Ana me tendió en la cama y ordenó a Maria que la chupara, esta no se hizo de rogar e inmediatamente comenzó con la mamada. Ana salió del dormitorio y al momento volvió con un consolador colocado con un arnés y se puso a untarle lubricante, pensé que era para metérselo a Maria, cuando la veo apuntando a mi ojete, intenté safarme, pero Juan me sujetó con fuerza y me dijo “no te resistas te va a doler al principio pero luego no vas a querer que te la saque, además tienes que ir engrandando el culo, pare que te entre la mi, yo seguía protestando cuando noto que Ana me tenia ya metida la punta , ya solo podía decir Ahhh, me duele, sácala, no me hizo caso y siguió empujando cuando la tenia toda dentro paró un poco para que me acostumbrara, y María siguió con su mamada. Al poco tiempo era yo el que empecé a moverme, ya no me dolía, era una sensación extraña, me estaba gustando. Le dije a Ana que quería cambiar de posición y me puse a cuatro patas , María se colocó debajo y siguió chapándomela , Ana empezó a metermelo cada vez mas rápido, lo sacaba casi entero y luego empujaba hasta el fondo, este tratamiento me estaba volviendo loco y terminé corriéndome en la boca de María, la cual se lo trago todo sin problemas . Me preguntaron.” ¿Qué tal , te ha gustado?” .” No solo me ha gustado , me ha encantado, porque no os habré descubierto antes”, les dije yo.
Después ya mas tranquilos , nos despedimos y quedamos María y yo mañana para tomar un café charlar de todo esto.