Descubriendo como soy realmente ... 2ª parte

Pasaron los días después de aquel encuentro, y debo confesar que llegue a masturbarme recordando como aquel chico de color hizo conmigo lo que quiso, llegando hasta a insultarme y escupirme y que lejos de ofrecer resistencia acepte mi rol de complacerle, lo que provoco en mí una excitación que nunca había sentido llegando a tener un orgasmo que jamás olvidare.

Pese el recuerdo de aquella aventura , regrese a mi rutina, donde mi vida giraba en torno a mi trabajo y a la soledad de mi casa ,eso sumado al intenso calor del verano que bajaba aún más mis ánimos … al menos podía combatir al el calor vistiendo con poca ropa, como casi siempre una camiseta de tirantes y bragas , una de las, pocas ventajas que tenía mi soledad era el poder vestir así en casa… mientras me preparaba la cena sonó el timbre de la puerta, me acerque a la mirilla y allí estaba él, el corazón se me acelero y me quede bloqueada, hasta que volvió a tocar el timbre mientras miraba hacia los lados, no sé si fue instinto o un acto reflejo, pero al escuchar ese segundo timbre entreabrí la puerta…

María - ¿Qué quieres?

Él - ¡hola chica hermosa, necesito tu ayuda!, ¡no te molestaremos mucho¡

María - ¿molestaremos?

Ahí fue cuando me percate de la presencia de otro chico más, imagino que del grupo aquel que estaba sentado en el banco cuando decidí comprar el bolso.

Él - sí, somos mi amigo y yo, estábamos en el puesto vendiendo pero apareció la policía, a algunos los cogieron, pero él y yo escapamos… no tenemos papeles y no queremos volver a nuestro país, por favor, déjanos escondernos en tu casa 2 ó 3 horas y nos marchamos después, no te molestaremos, de verdad…

Lo note realmente necesitado de ayuda, vi su cara de preocupación y eso hizo que abriese más la puerta hasta ver como en su cara se dibujaba una sonrisilla y sus ojos me miraban de pies a cabeza, con todo lo que estaba pasando olvide que solo llevaba la camiseta de tirantes y las bragas, dije un rápido esperad y cerré la puerta, me puse un pijama y les abrí…

María -pasad y poneros cómodos, iba a cenar e imagino que tendréis hambre, ¿no?

Él -sí sí claro, gracias hermosa, por cierto, me llamo Selle y mi amigo Adair, perdónalo porque lleva poco en España y no sabe el idioma

María -no te preocupes, yo me llamo María

El hecho de acercarse y que me diera dos besos hizo que todo lo de aquella noche volviese a mi recuerdo….

María - bueno, sentaos y os traigo algo de comer

Los deje allí en el salón mientras hablaban entre ellos en su lengua natal….pusieron la televisión y escuche como reían fuerte

Selle - Ey María, ¡tienes una play station! ¿tú juegas?

María - no, no….es de las pocas cosas que dejo mi ex y no se atrevió a recoger, podéis jugar si queréis.

Selle - gracias María, eres una mujer muy amable y hermosa.

María - ¡y tu un pelota!, anda vamos a cenar y luego jugáis a la play antes de iros.

La cena paso pronto, y el amigo de Selle se apresuró a conectar la consola mientras él se ofrecía a lavar los platos, la verdad es que sentaba bien volver a tener compañía en casa, aproveche que estaban entretenidos para ir a mi cuarto a coger el móvil que deje cargando y descubrí  que tenía un mensaje de Selle de hacía unos minutos, había aprovechado mientras cenábamos para enviármelo.

Mensaje de texto - te quiero dar las gracias por todo, quiero saborear tu coño hasta que te corras  -

Al leerlo me quede paralizada y mi corazón empezó a latir más rápido todavía cuando sentí dos manos agarrando mis pechos desde atrás, un gran bulto presionando mi culo y un susurro a la altura de mi oreja….

Selle - ¿Has leído mi mensaje putita blanca?

María - yo…. (Es lo único que conseguí decir…)

Selle - estas deseando ser mi putita blanca, vi lo duro que estaban tus pezones cuando abriste la puerta, sé que quieres polla negra en tu coño, que te gusta mi polla…di que eres mi puta…dilo y disfrutaras como nunca…dilo…eres mi putita?

La pregunta fue acompañada de sus manos apretando más mis tetas y su bulto aún más duro que antes pegado a mí.

María - yo…no…

Selle -no pienses puta, ¡Dilo!

María -dios, ¡sí!

Selle- sí, ¿qué? , ¡Dilo bien!

María -¡soy tu puta!

Al oír mi respuesta me giro y me besó, yo sentía como sus manos prácticamente desgarraban mi ropa y el sujetador, lo suficiente para que mis tetas asomaran entre los girones de la camiseta y su lengua pasara de mi boca a mis tetas…

Selle –me gustan tus tetas de zorra ¡grandes!, tetas de una blanquita muy puta.

Cada insulto, cada humillación que recibía por su parte hacía que me pusiera más cachonda, él lo sabía…sentía mis pezones tan duros que llegaban a doler, dolor que calmaba él con su lengua y sus labios mientras aprovechaba para quitarme el pantalón del pijama que llevaba y mis bragas, me empujo contra la cama y agarro mis piernas con fuerzas separándolas, me miro a los ojos y sonrió.

Selle - menuda puta…estas ya mojada blanquita.

Acerco su boca a mi coño y sentí su saliva caer sobre mí y como su lengua separaba mis labios y empezaba a jugar con mi clítoris, de mi boca solo salían gemidos, ese negro me estaba follando con la lengua.

Yo mordía mis labios para evitar hacer mucho ruido, sabía que su amigo estaba distraído en la otra habitación y no quería que lo que estaba pasando saliera de mi dormitorio, mis pensamientos se cortaron cuando sentí sus dedos penetrarme y follarme con ellos mientras alternaba su lengua, de mis tetas a mi boca.

Selle - Prueba tu coño de puta…

Era cierto, sus besos sabían a mí y más cuando sacó sus dedos de mi coño  haciéndomelos chupar como si fueran su polla… fue ahí donde me di cuenta que hiciera lo que hiciera, por muy pervertido que fuera, yo tomaría mi rol de puta sumisa y me dejaría hacer.

No tardó en sacar su polla y como ya era su costumbre tirar de mis pezones para guiarme hacia él, o más bien, hasta su polla que empecé a chupar como si la vida me fuese en ello, primero su punta hasta que estuvo lo bastante mojada para empezar a follar mi boca, dejándome sin respiración.

Las primeras arcadas no tardaron en llegar, él siguió hasta que sacó su polla de golpe, un hilo de saliva unía su polla a mi boca, me era imposible apartar mi mirada de su polla, casi me ahogaba con ella, pero la deseaba…

Selle - ¿tienes ganas de polla verdad blanquita? ¿Tienes ganas de polla negra?

María - ¡sí joder!, quiero tu polla negra

Su respuesta fue agarrar mi pelo y escupirme a la cara…

Selle -¡háblame bien puta! eres mía y tienes que tratarme con respeto, ¿entendido?

MARÍA- perdóname, no quería molestarte…

Selle -prepara tu coño de puta blanca, ponte como lo que eres, una perra deseosa de polla…

No termino su frase cuando me coloque en el suelo a cuatro patas tal y como me follo aquella noche…pero esta vez no me obligo a adoptar esa postura, fui yo misma la que pego la cara al  suelo, sintiendo el frio suelo en mis pezones mientras exhibía mi culo en pompa para que hiciese conmigo lo que deseara… ¡Click! gire un poco mi cabeza para ver que era ese sonido… acababa de sacarme una foto en esa posición…

María -no me saques foto….aahhh

Su polla no me dejo terminar la frase, empezó a taladrar mi coño tan fuerte y rápido que no podía reprimir mis gemidos. Sus manos agarraban mis caderas y cada envite hacía que mi cuerpo se levantara, golpeando mis tetas sobre contra el suelo.

María - me corroooo…

¡Plas!, un fuerte cachete en mi culo me indicaba que no hablara, mientras, él no bajaba aquel ritmo frenético…me quede sin fuerzas y mi cuerpo era como el de una muñeca sin vida siendo follada por aquel salvaje, aminoro el ritmo, le oí reír y decir algo que no conseguí entender …de repente ¡otra voz le respondió ¡

Mire hacia la puerta y allí estaba su amigo, móvil en mano grabándolo todo¡¡¡

María -hijo de p…

Selle - calla zorra, ¡te di lo que te prometí! placer…a todas mis zorras las trato como lo que son, tu misma has dicho que eres mi puta ¡ compórtate como lo que eres ¡

Mientras hablaba su amigo no perdía el tiempo y saco su polla para ponerla a escasos centímetros de mi cara, él volvió a acelerar su ritmo que hizo que abriese mi boca para gemir fuerte y que su amigo apagara mi voz metiendo su polla en mi boca , ensartada por mi boca y mi coño por sus pollas solo me quedaba disfrutar….al poco note como la polla de su amigo empezaba a latir y ensancharse en mi boca, intente que la sacara pero fui inútil, los primeros chorros de semen fueron directamente a mi estómago, el resto inundaron mi boca y una vez fuera de mi boca, limpio su polla en mi cara entre risas y comentarios de los dos…

Selle – jajaja, mi amigo dice que le perdones, estuvo tocándosela un rato desde que le envié tu foto de zorra a cuatro patas…

Fue por ese el motivo de la foto, avisar a su amigo de que me tenía a su merced…

Selle - ahora zorra llega mi turno, escupe o traga la corrida de mi amigo…conociendo lo puta que eres la tragaras, pero es mi turno y te quiero bañada en mi semen y que me limpies después.

María -si…

Me arrodille ante su polla mientras tragaba los restos de semen de su amigo, cogí su polla y empecé a pajearlo con mis tetas, hasta que empezó a gruñir y de su polla salió a borbotones su semen…

Selle -si putaaa, restriegate mi leche por tu cuerpo de zorra… ¡así estarás más blanquita aun!

Su leche estaba por toda mi cara, pelo y cuello resbalando hasta mis tetas, por inercia empecé a chupársela, limpiando y exprimiendo cada gota de semen….paso un rato donde el silencio se adueñó de la habitación..

Selle - te has portado muy bien puta blanca….te has ganado un descanso, ahora vete a lavarte y acuéstate en tu sofá que ya es tarde, mi amigo y yo necesitamos descansar y tu cama es comoda, así que no rechistes y hazlo rápido perra, mañana hablaremos.

Su voz imperativa, hizo que me levantase sin rechistar, llena de su semen y andando despacio, dolorida y casi sin fuerzas hasta el baño….era suya… y él lo sabía muy bien.

Espero que os guste mi historia porque de vosotros depende si queréis saber cómo siguió mi relación con Selle.