Desconcertado por mi mujer y mi padre y la cosa si

Segunda parte de Desconcertado por mi mujer y mi padre. Sigue la situación creada y mi padre se sigue follando a mi mujer.

Desconcertado por mi mujer y mi padre y la cosa siguió

2ª parte “Desconcertado por mi mujer y mi padre”

Después de lo que había pasado

En ese momento lo único que quería era follármela, desnuda, sintiendo el vello de su coño en mi polla, sus tetas con los pezones duros aun, intente metérsela allí mismo en al pasillo, pero no me dejó, me dijo que su padre nos podía oír y le había dicho que no estaba el en casa. Me subió el pantalón, me dio un beso y al oído me dijo, sal con cuidado, vete a hacer los recados y vuelve a la hora que sueles volver para que padre te oiga llegar.

Cuando volví, apenas habían pasado dos horas, al entrar vi a Marta que apresuradamente, entrando en nuestro dormitorio, se iba metiendo las bragas con el vestido a medio abrochar. Entré tras ella, cerré la puerta y le pregunté que qué hacía, y muy nerviosa medio llorando, me dijo que no había podido resistirse que aun estaba caliente y que cuando volvió a la habitación de mi padre, a llevarle la medicación, él la empezó a tocar de nuevo, a meter la mano bajo el vestido, a meter sus mano bajo las bragas y a acariciar su coño y que la había vuelto a calentar. Yo me enfadé, le recordé que habíamos quedado que si pasaba algo yo estaría presente. Te ha vuelto a follar le pregunté.

Gimió pidiéndome de nuevo perdón a la vez que negaba con la cabeza. No volverá a pasar te contaré todo. No, no me ha follado lo ha intentado pero no se le ha puesto dura. Me ha mandado que me quite las bragas, que me abra le vestido y le enseñara las tetas y que me siente sobre el. Que se la menee para ponérsela dura, se la he estado meneando un rato pero no ha podido. Como no ha podido me ha hecho poner mi coño sobre su boca y ha empezado a comérmelo, mientras sus manos magreaban mis tetas, pellizcandome los pezones hasta hacerme daño. Me decía que era una zorra y después metía su lengua entre mis labios hasta lamer el clítoris, mordisqueandolo después con sus labios. Me decía correte puta correte mira que caliente y mojado tienes el coño. Correte en la boca del padre del cornudo de tu marido.

  • Y te has corrido?, le pregunté,
  • Si mi amor pero no te enfades, estaba muy caliente y sabes que me vuelve loca que me lo comas y tu padre la verdad lo hace muy bien y me ha dado la vuelta y luego me ha estado comiendo el culo también. Metiéndome la lengua por al agujerito y comiéndome el coño hasta que me he corrido.

No pude más y salte llamándole hijo de puta a mi padre y fui a salir del dormitorio para echarle de mi casa, pero Marta se interpuso. No cariño no, recuerda que hemos sido nosotros los que empezamos esta historia. Me puso la mano sobre mi polla y entonces fui consciente de que la tenía muy dura, Ves amor, continuó Marta, también tu te calientas. Entonces comenzó a pasar su mano por encima del pantalón, sobre mi polla, me sentía muy caliente, cerré los ojos imaginando como mi padre le comía el coño. Sentí como me abría la bragueta del pantalón y sacaba mi polla, seguía con los ojos cerrados imaginandoles, notaba la mano de mi mujer subiendo y bajando por mi polla tiesa y dura, Mis manos, a tientas buscaron las tetas de Marta, las apreté con deseo, con rabia, Oí su voz que me decía, si amor apriétalas hazme daño, disfruta. Estaba muy caliente a punto de correrme, le pedí que se bajase las bragas. No mi amor, la oí decir, correte en mi vientre, mancharme , tu padre me dejó irritada, correte sobre mi. Apenas oí eso empecé a correrme, abrí los ojos y vi a mi mujer, que meneandomela aun con mas intensidad, miraba como de mi polla brotaban chorretones de leche que iban a para a su vestido. Luego me miró a la cara y me beso en la boca, yo la apreté contra mi y sentí sus tetas duras, sus pezones clavarse en mi pecho. Metí mi mano bajo el vestido intentando tocar su coño, pero, me recordó que mi padre se lo había dejado irritado. Me volvió a besar y me dijo: Aun no me has contestado si te gustaría que tu padre me folle el culo?. No antes que yo, le contesté. Claro dijo Marta.

Me asomé a la habitación de mi padre, dormía plácidamente,que hijo puta, pensé. Cerré la puerta y me volví. Al pasar por nuestro dormitorio Marta se estaba cambiando el vestido que le había manchado, estaba con las tetas al aire, aun con los pezones duros, la braguita metida en su culo, me quedé mirándola, que buena está, pensé.

Al día siguiente, cuando llegué de trabajar, Marta estaba en la cocina medio sollozando, le pregunté que qué le pasaba, Me dijo que nada, que no le pasaba nada, no me lo quería decir. Después de insistir comenzó a a contarme pero primero me hizo prometer que no me enfadaría que no le dijese nada a mi padre. No quería pero al final acepte y le prometí que no haría nada.

Entre sollozos me empezó a contar que mi padre la había intentado violar, pero que ella había tenido cierta culpa. Que él le pidió que le enseñara las tetas y ella lo hizo. Le pregunté, por qué? Y le recordé que había prometido no hacer nada si yo no estaba. Me dijo que creía que así le calmaría. Que cuando entró en su habitación estaba con la polla al aire meneandosela, que le dijo que la estaba preparando para clavársela en el culo. Continuó que agarrándola del brazo intentó tumbarla, y que ella se resistió entonces que le dijo enseñame las tetas para que me haga una paja. Cariño y yo creí que era lo mejor y me abrí el vestido y se las enseñe, me decía Marta sollozando. Y tu padre mientras me llamaba puta y zorra se la empezó a menear aun más. Y cuando creía que se iba a correr, estaba jadeando y el capullo salia una y otra vez, me cogió del muslo y sin darme tiempo me tumbó boca abajo en la cama. Forcejeé con él y le amenazaba con decírtelo todo pero como es tan fuerte se colocó encima mio y empezó a subirme la falda del vestido, y quería bajarme las bragas para follarme el culo, pero yo no le dejaba, me las rompió y al final se corrió frotando su polla contra mi culo.

No lo podía soportar y dije que iba a ir y romperle la cara, pero Marta me recordó que se lo había prometido y que fuimos nosotros los que encendimos la mecha. Fui a donde mi padre me saludó como si nada. También yo aunque con mala gana y tragándome el enfado.

Esa noche folle a Marta como un loco como si fuese la ultima vez. Le pedí que se pusiese la bragas que le había roto mi padre, no quería pero se lo rogué. Cuando se las puso vi que el cabrón se las había arrancado casi. Se acercó a la cama, me lancé a comerle las tetas, tenía los pezones duros muy duros, se los mordisqueé. La tumbé boca abajo, las bragas las tenía casi arrancadas, se las terminé de arrancar, Le levanté el culo y puse mi polla sobre su agujero. Que vas a hacer, me preguntó Marta asustada, sabía lo que iba a hacer. No amor, me suplicaba, me vas a hacer mucho daño, me vas a romper el culo, así no..Sabía que la iba a hacer daño, estaba muy excitado la tenía muy dura y gorda. MI padre aun la tiene mas gorda y si no te lo romperá él, le contesté. No te prometo que no, suplicaba, que no le dejaré. Pero yo estaba muy caliente, sentía mi polla a punto de reventar, la cogí por la caderas y comencé a apretar mi polla contra su culo, notando como lo iba abriendo, marta ahogaba en la almohada el grito de dolor. El culo virgen, estrecho de mi mujer, oprimía mi polla dentro de él. Apenas un par de embestidas y comencé a correrme, mientras Marta sollozaba con su cara hundida en la almohada, su culo se inundaba de chorretones de mi leche.

Aún con mi polla dentro de su culo, caí sobre el cuerpo de mi mujer. Comencé a besarle el cuello mientras la oía decirme, - Por qué? , por qué lo has hecho así?, porque me has violado?. No sabía que decir, entre que la idea de que fuese mi padre el que desvirgase el culo de mi mujer y el calentón la verdad había perdido el control y la había follado el culo como un bestia.

Sollozando me pedía que se la saque que le dolía mucho el culo. Con cuidado se la fui sacando. Me pidió que la dejase sola. Dormí en otra cama. la mañana me levanté temprano,me vestí y marche a la oficina.

Estaba arrepentido sabía que no había hecho bien, que no tenía que haberla follado el culo de esa manera. Aún no era la hora era muy pronto pero decidí salir antes de la oficina y comprar un ramo de flores para Marta. Yo se que a esa hora ve un programa de televisión, así que entre en silencio para sorprenderla, quería pedirla perdón. Nada más entrar oí su voz en la habitación de mi padre, me acerqué sigilosamente. Marta estaba a horcajadas sobre mi padre, tenía su enorme polla, no había visto nunca una polla tan gorda como aquella, cogida con su mano , se inclinaba sobre ella y la mamaba una y otra vez. Luego se la pasaba por la punta de sus pezones, metiendola entre sus tetas. En eso la oí que le decía a mi padre. - Quiero que me rompas el coño como me rompió el cabrón de tu hijo el culo anoche. Mi padre se reía, la sobaba las tetas, le metía sus dedos en el coño cayéndosele la baba. Marta le sacó los dedos de su coño y cogiéndole la polla la dirigió a su coño y cayó sobre ella clavándosela de un golpe. Y era ella la que le gritaba cabrón, hijo puta follame, follame. Les estaba viendo y calentando, le veía a mi padre agarrarla de las tetas, pellizcarselas, babear y ella cabalgando sobre el. Fóllame le decía ganate mi culo cabrón.

Me había puesto muy caliente, tenía la polla dura muy dura, no sabía que hacer si entrar y armar el escándalo, si hacerme una paja que era lo que más me apetecía o marchar para que no me viesen. Decidí marcharme, cuando salía le oía decir a mi mujer – Correte! Correte! Llename el coño de leche.

Volví a la hora de siempre. Marta estaba preparando la cena en la cocina. Me dijo - Llevale la cena a tu padre no quiero que me sobe el culo, es un cerdo.

No dije nada, cogí la bandeja y le llevé la cena como si no hubiese visto nada.

Nos acostamos sin más. Marta se quedó enseguida dormida. Estará agotada la muy puta pensé. Estaba muy cabreado pero por otra parte estaba muy caliente, Tenía la polla muy dura. Recordaba a a mi mujer cabalgar,, gritando, con las tetas bailando ante la cara baboseando de mi padre. Destapé la cama hacía mucho calor. Marta dormía de espaldas a mi, con su braga metida entre sus nalgas. Aun tendrá la leche de mi padre en su coño pensaba. Estaba muy caliente mi polla estaba muy dura, me quité el calzoncillo y me la empecé a menear. Miraba el culo de Marta con su braguita metida entre sus rajas. Empecé a tocarle. Se movió. Acerqué mi polla a su culo, aparté un poco sus bragas, quería metérsela. No hora no, dijo medio dormida, y se puso bien la braga. Metí entonces la polla entre sus muslos y empecé a pajearme entre ellos como si la estuviese follando, notaba los labios que sobresalían de la braga acariciar mi polla. Empecé anotar que Marta también se movía. No pude aguantar y me corrí. Me corrí entre sus muslos. Marta giró la cabeza, me miró, y dijo : Me calientas y te corres así, sin esperar?. Yo me di la media vuelta y no le contesté. Al fin y al cabo ella tampoco me había esperado cuando lo hacia con mi padre.