Descarrilándome por su sexo parte I.- Reencuentro

Esta es una historia erótica relata la vida de Adolfo un joven adulto que finalmente da rienda suelta a sus hormonas y pierde el control de su vida ordenada por cumplir con su fantasía sexual tener sexo con una chica que había sido su compañera de colegio.

Parte 1 el Reencuentro

Mi nombre es Adolfo y desde que soy adolescente escribo relatos eróticos, donde narro y también fantaseo encuentros con diferentes mujeres que pasaron por mi vida y me atrajeron.

Cuando estaba en la secundaria y tenía 18 años una de mis compañeras de curso me propuso tener relaciones sexuales en su casa, los dos éramos adolescentes quizás yo más inocente que ella en ese entonces es por eso que no acepte la proposición y curiosamente fue que después de ese suceso que empecé a abrir mis ojos con respecto al sexo.

Empecé a escribir relatos eróticos donde Noemí mi compañera de curso y yo vivíamos una historia de pasión claro en el supuesto de que yo hubiera aceptado ir a su casa a desflorarla, pero la realidad dista mucho esos relatos y es más como lo repito nuevamente en ese momento yo ni siquiera tome en cuenta su proposición, ya que estaba enamorado, pero de forma inocente de otra chica.

Pasaron varios años desde que salí de la secundaria y la Universidad, he tenido varias novias, algunas de ellas eran muy “fogosas” como Laura o Pilar ya que ellas eran unas “maestras” haciendo el amor que a veces hasta me dejaban algo agotado, pero jamás he olvide la proposición que Noemí me hizo en el colegio Dicen que la primera vez nunca se olvida, pero olvide mi primera vez, más bien recuerdo como si fuera ayer esa frase lanzada por Noemi “Fito ven a mi casa”.

Hasta antes de Mayo tenía un buen empleo en una institución estatal de mi ciudad, vivía con muchos lujos en la casa de mis padres, fue casi hasta mediados de ese mes donde perdí mi empleo por llegar tarde e incumplir mis labores repetidas veces, producto de los días y noches extenuantes que pasaba junto Noemí, pero eso solo fue el inicio a principios del mes de Julio mis padres me echaron de casa porque se enteraron que por culpa de Noemí perdí el buen empleo que tenía y por consecuencia tire a la borda mi carrera profesional, además de ello no soportaron la idea de que estuviera una relación con una mujer que ya tenía un hijo.

En los meses siguientes me fui de mi casa y me mude con Noemí, embriagado de amor y deseo por ella y por su sexo, perdí el control de la vida ordenada y predecible que tenía, pero conocer a Noemí y su familia también me trajo nuevos desafíos en mi vida, una vez formalizada mi relación con ella me hizo conocer a sus hermanos y no pasaron unas semanas hasta que su hermano mayor me contrató como el administrador de la empresa distribuidora de cerveza que ellos tenían, un próspero negocio familiar que Noemí y sus hermanos habían heredado de su madre ya fallecida. Eran tan grandes las ganancias que Noemi y sus hermanos llevaban una vida despreocupada.

Debo agregar que Noemi y yo nos hemos obsesionado demasiado con el sexo que hay ocasiones que lo hacemos hasta unas 3 veces al día, no pensé que ella continuaría siendo tan “cachonda” como lo era en el colegio que muchas veces por iniciativa de ella hemos tratado de imitar casi todo lo que he escrito en mis relatos eróticos, incluso una vez llegamos a ponernos los uniformes de la secundaria, recordando nuestros años de adolescentes y terminando de hacer el amor con esas vestimentas, también hemos practicado infinidad  juegos sexuales, el sexo oral y algunas veces anal, diría que hemos jugado con nuestros cuerpos desnudos casi al límite, lo que en consecuencia  en algunos meses como es obvio hizo que quedara embarazada nuevamente y por primera vez de mí, pero eso fue una bendición ya que ahora estoy tranquilo administrando el negocio de la distribución de cerveza quizás uno de los negocios más rentables hoy en día. De vez en cuando nos escapamos a su pueblo de origen donde tiene una finca heredada de su madre, diría que esa casa es como nuestro segundo nido de amor, Noemí tiene 33 años yo tengo 30 y hoy estoy a punto de pedirle matrimonio no sin antes escribir una nueva serie de relatos que empieza así:

Había terminado una relación con una chica de la que estaba a punto de pedirle matrimonio, me sentía algo devastado por la forma en que esto había concluido aún pensativo en la oficina uno de mis compañeros me sugirió que fuera a comprar algunos caramelos, para así quitarme lo distraído que estaba en la oficina, de mala manera con mucha flojera salí de la oficina a cumplir con el pedido que me hicieron, proteste por esta no era mi función porque no mandan al conserje me dije entre mis pensamientos.

Entonces fui a buscar los dulces por una zona comercial de mi ciudad, ingrese a un tienda muy grande distribuidos de caramelos, ya dentro de la tienda me encontré con la administradora y  para mi gran sorpresa me encontré con Paola que era dueña de ese comercio, ella fue mi amiga en la secundaria fuimos compañeros de curso desde niños y nos graduamos juntos de la secundaria a parte que vivía cerca de mi casa, pero había perdido todo contacto con ella prácticamente desde que nos graduamos,  a su vez era la prima de la dichosa Noemi algo que no me había dado cuenta antes de ingresar a su negocio.

─Fito!! ─ dijo ella, como me llamaban en la secundaria─, que milagro hace mucho que no te veo ¿y que tal va todo?”

─Bien gracias Pao que lindo encontrarte y a ti tantos años cómo te va ─le contesté y saludé cortésmente.

─Bueno a mi regular por aquí y ese traje ¿dónde andas trabajando?

─Bueno estoy trabajando en la oficina de identificación ─le respondí.

─Vaya que bueno, yo no tuve tanta suerte sabes me embaracé y me case ahora tengo dos hijos y tuve que dedicarme al comercio.

─Bueno eso no es tan malo Pao tienes una familia no es cierto, deberías agradecerlo.

─ ¿Y Fito tú te casaste?

─Pues no la verdad no tuve mucho tiempo para pensar en eso.

─Pero ya estás en edad ¿no? jajaja

─Bueno Pao, pero no me hagas sonrojar jajaja

─ ¿Y que te trae por aquí?

─Quisiera dos cajas de caramelos para la oficina, mis compañeros me enviaron a comprarlas.

─Ok listo entonces te arreglan el pedido en unos momentos ─ decía ella mientras tomaba nota del pedido─, y cuéntame Fito ¿qué carrera estudiaste?

─Estudié administración de tecnología.

─Yo estaba estudiando marketing, pero como te dije tuve que dejarlo ─me habló tomando su bolso.

─Ah bueno ni modo, pero tal vez algún rato puedas retomarlo.

─No he pensado en eso sabes, pero quizás.

─Y tuviste oportunidad de hablar con alguien de la “secu” ─pregunte yo algo intrigado.

─Huummm no la verdad que hace tiempo que no ando en contacto con casi nadie hace tres años me encontré con el lucho, pero de ahí en más nada, salvo mi prima Noemí ¿te acuerdas de ella?

─Bueno no tanto ─le dije disimulando cínicamente, aunque en esos momentos no se me había cruzado por la mente.

─Ayy. No hagas claro te acuerdas estaba con nosotros en un curso, pero luego se aplazó ─insistió ella.

─ Ahora creo que recuerdo algo ─le conteste yo con mucho cinismo.

─Ayy Fito la que quería con vos ¿recuerdas?

─Ah bueno tu prima si ahora empiezo a recordar algo ─conteste casi a regañadientes

─Ayy que Noni estaba tan enamorada de vos tanto que quería perder la virginidad contigo, te acuerdas el día que te lo propuso en el curso y tu seguro pensando en otra, cuánto me arrepiento no haberlos juntado siendo amiga de ambos, ¿acaso no te gustaba?, ¿por que no le aceptaste?

─Para serte franco no recuerdo mucho eso, pero tal vez si hubiera aceptado su propuesta no estaría aquí conversando contigo, éramos adolescente podía haber pasado cualquier cosa, pero ahora tu prima ya debe ser casada supongo

─Pues no lo es, sabes ella siempre se acuerda de ti todo el tiempo anda preguntándome si no te vi, aparte que su hijo se llama Adolfo.

─Tal vez es una coincidencia ─Le conteste yo algo sorprendido

─Pues no lo creo lo hizo por ti tontito ─Mientras en ese momento los empleados trajeron mi pedido y lo colocaron al suelo.

─ ¿Y porque no se casó con el padre de su hijo?

─La verdad que es complicado sabes se metió con un chofer de una empresa de transportes y ahí quedo embarazada pero el tipo ese era casado así que la dejó

─Bueno que pena

─Fito debo pedirte un favor, pero no te me vayas a enojar

─Pues dime que es

─Es que hace un tiempo bueno hace dos años murió mi tía la mama de la Noni y ha estado sola desde ese tiempo, es decir viviendo sola, bueno sus hermanos y yo siempre andamos visitando la pero la veo triste, le alegraría mucho la vida…... que tal si nos reunimos tu yo mi esposo y Noemí que dices para recordar los tiempos de Cole ¿que dices?

─Uyy estas de casamentera ¿no?, además ni siquiera me preguntaste si ando con alguien jajaja

─Perdón Fito la verdad yo no quise ser inoportuna ─dijo Paola casi muerta de vergüenza

─No fue chiste tontilla, creerás que hace un tiempo que andaba enamorado, pero me terminaron, no se Pao quisiera tomarme un tiempo con esto.

─Oh cuánto lo siento Fito yo no sabía y pensé que…...

─Bueno tal vez podría ─me dije pensando con mi órgano inferior.

─Ayy Fito si por fis  te prometo que no te arrepentirás ─me contesto llena de alegría

─Ok y cuándo quedamos

─Te parece el viernes en el Faraón a las 6.

─Perdón ¿dónde es eso? ─Pregunte.

─Es en la Avenida de las Américas

─Entonces los busco por ahí

─Si búscanos porfa, y no te olvides plis, que te vaya bien y gracias de nuevo

─No tienes de que agradecerme Pao.

─Chau Fito siempre caballero jaja

─Chau Paulita un placer conversar contigo

─No, el gusto es mío ─Me dijo finalmente despidiéndose

Volví al trabajo algo pensativo toda esa charla que había tenido, no imagine para nada eso ocurriría pero quizás era el destino y no una coincidencia, me sorprendió demasiado lo de Noemi era obvio que a ninguno de los dos se nos olvidó esa frase lanzada por ella en aquel momento en una clase de secundaria “fito ven a mi casa”, En ese instante me atreví a buscarla en el Facebook para enterarme que había sido de su vida, no me demoro mucho encontrarla luego me puse a observar la foto de sus perfil se había hecho algo robusta pero no gorda, recordé que en el cole era algo delgada pero este aumento de peso le había quedado muy bien, su piel canela, cabello negro largo y liso ondulado en las puntas, no había perdido ese toque sexy que tenía es más ahora ella me parecía más sexy, Estaba claro que Noemí no tenía un cuerpo de modelo, ni la belleza de estas mujeres, tampoco era tan voluptuosa, no tenía los senos tan grandes, ni el trasero grande, pero a mi algo me obsesionaba de ella quizás el destino decía que debíamos estar juntos no podía explicarlo científicamente, en la foto tenía una blusa de color roja algo transparente que si le dábamos zoom a la imagen no solo hacía relucir sus pezones sino también mostraba algo de sus senos por lo escotada que era la blusita al parecer ella estaba sin sostén o tal vez llevaba un sostén transparente, esa foto me puso a mil  y mi pene ya formaba un paquete dentro de mi pantalón para calmar mi calentura, me disponía a masturbarme con aquella foto de su perfil, pero lamentablemente mis compañeros de trabajo ingresaron a mi oficina por unos asuntos laborales interrumpiendo mi “faena” y por poco encontrándome infraganti, luego de esa reunión laboral se me quito la calentura.

Llegó el viernes y toda la semana andaba pensando en eso en el trabajo andaba muy aturdido con ese reencuentro, desde la mañana me vestí para la ocasión una camisa un pantalón de tela y mi chaqueta, salí del trabajo apurado ya era tarde y no quería llegar atrasado, en el camino llamé a mis padres para decirles que estaba saliendo con unos amigos luego del trabajo, me dirigí en mi automóvil al local donde habíamos quedado. Aparque en un rincón de la calle y apague el motor, en ese instante me puse a pensar dentro del auto sobre lo que estaba a punto de hacer era obvio que luego de este encuentro mi vida cambiaría radicalmente por aquel capricho, deseo y fantasía, pero sería para bien o para mal pero luego recordé todo lo que me paso con mi ex novia y termine de envalentonarse, diciéndome a mí mismo que no tenia nada que perder, me baje del coche rápidamente e ingrese al local repente la Pao me llamó y me pregunto si está llegando le respondí que ya estaba ahí, subí al segundo piso del local por un pasillo allí estaban varias mesas, mucha gente alrededor familias y amigos compartiendo en el fondo divisé a Paola con su marido y claro su prima juntas leían el menú y supongo que opinaban acerca de qué pedir.

─Como están buenas noches ─me presente yo, ellas se pararon para saludarme primero Noemi,

─Fito tanto tiempo vaya te ves muy bien jaja ─exclamo Noemi en tono meloso dándome un beso en la mejilla.

─Tú también te vez hermosa ─le dije yo.

Ella solo se limitó a sonreír y se sentó llevaba con unos jeans ajustados azules y una blusa leopardo ploma con punto negros.

─Fito te presento a mi esposo Alfredo ─Me dijo Paola

─Hola mucho gusto ─le dije yo dándole un apretón de manos y saludando también a Paola, nos sentamos los cuatro Noemi a mi lado y Pao con su esposo.

─Fito te parece bien el pollo dorado ─me pregunto.

─Claro lo que ustedes quieran.

─Y Fito por qué no trajiste a tu esposa ─me pregunto Noemi con tono alegre.

─Pues Noemi no soy casado y es más tampoco tengo novia ─le respondí sonriendo

─Ay tu que va, no te creo nada ─me contestó burlándose de mí

─Pues siendo sincero estaba en una relación con alguien pero me engaño con su amor”

─ohh vaya lo siento tanto ─dijo ella poniéndose seria.

─Si el amor a veces, pero a veces nos da la posibilidad de encontrar nuestra alma gemela, como a nosotros ¿verdad cielo?  ─le dijo Alfredo a Paola.

─Si amor ─respondió Paola tomándole de la mano

─Bueno me alegro por ustedes ¿y hace cuánto tiempo se conocieron? ─pregunte.

─Hace 6 años ya ─respondió Paola.

─Que bien me alegra que Pao haya conocido un buen hombre, ya que ella fue mi Amiga y compañera de curso desde que éramos niños y siempre la vi como una hermana.”

─Ayy el Fito tan galán ─interrumpió Noemi en plan de molestarme y como burlándose

Entonces nos reímos todos, nos pusimos a hablar de todo un poco mientras comíamos hablamos del colegio, la vida después del colegio, comidas locales y otras tonterías, yo me estaba aburriendo mucho hasta que Noemí se levantó de la mesa y nos dijo a todos que iba al baño mostrando su trasero al retirarse de la mesa desperté de mi letargo incluso mi pene se movió algo, estaba jodidamente atraído por ella, pensé un instante ese rico culo debe ser mío, un momento después Pao y Alfredo se pusieron a bailar y yo me quedé solo con Noemí la charla estaba aburrida pero en unos instantes ella me dijo:

─Fito quiero confesarte mi secreto ─me dijo titubeando y nerviosa─ ,pero no te enojes, he soñado con esto todos los días quedarnos solos para decirte que estaba enamorada de ti en el cole, que en el cole que he llorado todos los días por ti idiota porque tu no me hacías caso ─me insinuó casi entre lágrimas.

─Me quedé callado y sorprendido un rato y luego conteste ─Noni yo te he deseado desde el día que me dijiste que vayamos a tu casa, ahora estas muy hermosa y quisiera que me des otra oportunidad le dije tomándole de la mano y acariciándola sonreímos al final mirándonos con complicidad mientras veía como Pao y Alfredo nos miraban desde la pista de baile, nosotros tratamos de disimularlo.

Así pasó la tarde entre chistes conversaciones casi aburridas, con miradas llenas de complicidad por parte de los dos, llegó la hora de despedirnos Pao y su esposo se despidieron de nosotros y nos dejaron solos. Le pregunte a Noemí si quería que la llevara ella aceptó encantada entonces nos subimos a mi auto pequeño y fuimos con dirección a su casa, callados nos dirigíamos al lugar, entonces en el camino Noni saca su celular y me dice:

─Perdón un mensaje debe ser de mi hermana es que está cuidando a mi hijo.

─Ah ¿y dónde vive tu hermana? ─le pregunté.

─En la otra cuadra

Llegamos a la casa de su hermana me estacione a un lado, cuando estábamos a punto de despedirnos pensaba que perdía mi oportunidad, pero ella me miró fijamente a los ojos y yo a los suyos, entonces acercamos nuestros labios y empezamos a besarnos con pasión saciando finalmente ese deseo mutuo de nuestros cuerpos que nos habíamos guardado por años, nuestra lenguas se enrolaban como si estuvieran haciendo el amor ahí, mientras nos tratábamos de abrazar incómodamente en mi auto, luego de unos minutos nos separamos, encendí el auto y  conducía con dirección a su casa mientras ella me indicaba con señas dónde era y  al mismo tiempo llamaba por su teléfono móvil inventando una excusa su hermana para que se quede cuidando a su hijo en ese intermedio llegamos y estacione el auto.

─Y entonces quieres entrar y compensarme todos estos años ─Me pregunto de una manera muy lasciva.

─ahora serás mía ─le respondí yo riéndome, abrió la puerta de su casa con la llave que traía en la mano caminábamos por un pasillo rumbo a su living.

─ ¿y desde hace cuando  vives aquí? ─Pregunté yo con el paquete casi erecto que ya no lo podía disimular

─Desde hace 3 años ¿te gusta?

─Bonito lugar, pero lo que más me gusta es esto

Y me acerqué a ella compulsivamente y apretujándola contra la puerta de su sala empecé a besarla, ella respondía a mis besos y de un instante para otro nos estábamos comiendo los labios, nos besábamos con mucho deseo, nos besábamos como adolescentes inmaduros, pero a la vez muy experimentados, yo la apretujaba contra la puerta de su sala, mientras la besaba y la abrazaba.

─Me gustas mucho Noni desde el Cole.

─Y tonto porque no me lo dijiste, vos también me gustas mucho.

Entonces sin que ella me diera permiso yo empecé a deshacerle los botones negros y pequeños de su blusa leopardo ploma con punto negros, lo hacía con mucha suavidad mientras aun le besaba el cuello y ella acariciaba el mío abrazándome ,poco a poco su blusa se abría ofreciéndome un panorama de su ombligo desnudo,  yo me agaché para besarlo mientras ella acariciaba mi cabello luego seguí desabotonando su blusa hasta que por fin llegaba a su escote y mi manos se confundían con su sostén, luego como dando pausa a nuestro éxtasis pasional ella me decía.

─oye ya entra ­─Me decía riéndose lascivamente.

Abrió la puerta de su sala y con la blusa abierta ingresaba dentro de ese salón, el living era una sala rectangular pintada de color crema suave alrededor tenía colgados varios adornos como cuadros, a un rincón estaba su equipo de sonido y una mesa comedor, su sofá y sus sillones estaban casi donde la puerta alrededor de un televisor, en el suelo algunos juguetes que su hijo había dejado.

Me senté en su sofá y tomándole de las manos suavemente hice que se sentara a mi lado, de repente me abalance sobre ella de nuevo, impetuosamente nos estábamos besando con ardor en su sofá, mi lengua jugueteaba dentro de su boca mientras la besaba, mordía con mis labios sus labios carnosos, al besarla ella me abrazaba de mi espalda, pronto  yo fui bajando mis besos por su cuello.

─Ay!!! dios ay si que rico besas. ─Me congratulaba ella.

Mientras yo sin decir nada bajaba mis manos hacia su pubis que estaba cubierto por ese pantalón vaquero azul casi de inmediato le desabotone los  botones del cierre de su pantalón y al hacerlo logré por fin divisar el calzoncito blanco de tela que llevaba, luego mientras aun le besaba el cuello metí mi mano suavemente dentro  su calzón y con un dedo empecé a sobarle los labios vaginales, ella sensible a mi tacto al sentir placer me acariciaba la espalda rodeándome con sus brazos y apretándome con sus uñas como pidiendo que continuara y exhalando gemidos suaves.

Entonces de nuevo me acerque mis labios a los suyos y nos besamos una vez más esta vez con más fuerza su vagina estaba húmeda por la excitación que lubricaba mis dedos, mientras tanto ella no se quedaba atrás y empezaba a desabotonar los botones de mi camisa con mucha agilidad que unos segundos más tarde terminó la labor y empezó a quitármela,  ayudándole en su labor yo me la quite dejando mi torso desnudo, al mismo tiempo ella se incorporaba en algo y se deshacía de su blusa tirándola al suelo, mostrandome su  sostén de encaje de color blanco , su piel canela resaltaba al corpiño, acerque mis labios a sus senos cubiertos por su sostén  y empecé a besar alrededor de estos con mucha suavidad,  mientras ella me acariciaba el cabello con sus dos manos.

De unos momentos no resistía más mi excitación y empecé la labor de quitarle su pantalón, poniendo una mis manos en su cintura y tratando de bajarlo, ella sin perder tiempo me ayudo a quitar esa prenda con sus dos manos, mientras aún nos besábamos logramos bajar esa molesta prenda hasta sus rodillas  ya casi desnuda puso sus dos manos alrededor de su cintura y se bajó el calzón como entregándose a mí de una vez por todas, ahora yo tenía un lindo panorama de sus pubis que estaba cubierto de vello púbico negro rizado y abundante entonces yo me agache dirigiéndome con mi cabeza a su pubis cuando por fin pude observar la entrada de su vulva era de color marrón oscuro sus labios vaginales resaltan en su vulva eran de un color más oscuro en medio de esos labios resaltaba el color rosa que era la entrada al paraíso de su sexo, entonces yo al ver esto acerque mis labios hacia sus labios vaginales primero besándolos como si de sus boca se tratara luego trate de meter mi lengua abriéndome campo suavemente entre sus labios mientras ella empezaba a gemir y retorcerse de placer

─Ayy si dios, que rico, que rico, ufh ufh, si papito házmelo así , ay dios mío.

─Ahh, Ahh, Ahh ─repetía constantemente indicando que sentía un placer inmenso.

Mientras yo disfrutaba de su sexo chupándolo, a la sazón de unos momentos yo me puse de rodillas en el sofá y me baje el pantalón hasta las rodillas saqué la cajetilla de condones mientras ella me miraba atenta a lo que haría, me puse un condón a mi pene que estaba a mil y me acerque a ella ayudado con mis manos para que mi sexo coincidiera con el suyo y por fin poseyéndola como tanto había imaginado en mi vida, estábamos teniendo sexo mientras yo empujaba fuertemente y con pasión dentro ella y al mismo tiempo nos besábamos infrecuentemente mientras ella solo atinaba a decir.

─Si papi, si cielo, que rico, eso, eso méteme ayy, ayy, si, si, si, ─se retorcía ella de placer─, quiero ir  a mi cuarto mi amor.

Trataba de levantarse del sofá yo intuía lo que quería hacer y me replegué mientras ella se levantaba con una sonrisa pícara, y escapaba de mis garras tratando de que yo la siguiera rápidamente, ahí nos sacamos lo que nos sobraba de ropa  y ella me condujo a sus escaleras alfombradas que salían de un lado de su living estas eran en espiral entonces yo con el pene excitado la seguí por detrás como un perro en celo, entonces mientras ella subía las gradas la cogí de su cintura lo que hizo que ella se pusiera de rodillas mostrando su bello culo y sin pensarlo dos veces la embestí con fuerza lo estábamos haciendo ahí en las escaleras apasionadamente mientras yo metía y sacaba mi pene de su vagina afanosamente ella gemía al son de mis embestidas y trataba de zafarse de mi

─Ayyy Dios mío que rico que rico me lo metes, así, así mi amor métemelo, que rico tu pichi bebé.

─Bomboncito no te voy a soltar te lo voy a hacer aquí hasta correrme en vos

─¿Te corres rico papi?, si, si, así como me lo metes, ay Dios mío ,seguí así mi amor

Como animales en celo estábamos haciendo el amor en las escaleras de su casa yo empujaba mi pene contra ella agarrado de su cintura mientras ella gemía ardientemente de unos instantes  sentía que me venía dentro de ella al mismo tiempo ella tenía un orgasmo cuando ella exhalaba un grito de placer yo eyacule dentro de su vagina por instinto saque mi pene de su cueva cuando vi mi pene salir el condón estaba lleno de semen nos habíamos corrido al mismo tiempo,  parecíamos el uno para el otro en ese instante ella se dio la vuelta nos abrazamos y nos besamos ardientemente como felicitándonos mutuamente.

Luego ella me tomó de la mano y muy acaramelados subimos a su dormitorio, las paredes de este tenían el mismo tono de color de su living, su cama era de madera y tenía un tono oscuro de café una colcha color rosa cubría la misma alrededor había dos armarios una cómoda que estaba cubierta por perfumes y cremas. Algunas prendas de vestir de Noemí estaban en el suelo otras en un sillón la habitación parecía algo desordenada, pero eso no importaba en lo más mínimo ella se subía a la cama yo aun con el pene excitado me quité el condón usado lo até y lo tiré al suelo. había dejado los otros condones del bolsillo de mi pantalón, pero usar preservativo poco o no nada nos importaba a ambos en ese instante, me subí a su cama encima de ella ahí nuevamente nos estábamos besando abrazados sin decirnos nada mientras ella me abrazaba el torso ayudado con mi mano nuevamente dirigí mi pene hacia su dulce vagina y metí parte de mi glande dentro de ella, mientras ella separaba las piernas y me abrazaba con ellas a mis las nalgas entonces yo empecé a encularla con fuerza, mientras ella gemía descontroladamente nuestros movimientos hacían que su cama rechinara .

─Ayy si mi amor que rico, métemelo así, te quiero dentro

─Te gusta esto mi bebita

─Si mucho ─jadeaba ella.

─¿Mucho?

─Si, si, si soy tu yegua

─Si eres mi yegüita hermosa, desde hoy hasta siempre te voy a encular todos los días mi amor

─Si papito, si así, culeame así soy tu bebita

─Mamita que rico te mueves, sigues siendo cachonda mi amor como cuando eras flaquita en el cole, te hubiera desflorado.

─Si soy cachonda para ti mi potro, si cogeme asi asi asi eso mi amor, te hubiera descartuchado, me corro por Dios Ahhgg

entonces yo saque mi pene sabiendo que me venía y eyacule encima de su vello púbico cubriéndolo con mi semen, increíblemente casi nos vinimos al mismo tiempo era como una sincronía total venirnos juntos nunca había sentido eso con nadie solo con Noni.

Nos quedamos así echados en la cama lado a lado por unos minutos yo estaba exhausto de haber hecho el amor con una verdadera amazona del sexo y me quede algo fatigado daban las 10:30 de la noche exhaustos nos cobijamos en la cama nos besamos cariñosamente, Noemi estaba satisfecha y somnolienta como yo, apoyo su cabeza en mi pecho y dormimos juntos aquella noche como marido y mujer sin decirnos nada. Continuara….