Demonios en la oficina.
El deseo atrapado en la cotidianidad
Hay días en que la normalidad se difumina lentamente ante un mínimo estimulo que la haga cambiar.
Día lunes,llegando a mi oficina muy temprano después de un fin de semana de sexo contigo como siempre sin barreras ni tabúes. Nos despedimos soñando con el futuro reencuentro que jamas sabíamos cuando se daría de nuevo.La noche del domingo a solas me pareció tan vacía esta vez, quede con ganas de ti y de seguir sintiendo como me haces tener mil orgasmos diferentes cada vez que estamos juntos.Siempre quiero mas, pero esta vez mas era realmente mas .
Me siento en mi escritorio a tratar de ordenar mi agenda , veo todos mis pendientes y decido servirme una taza de café bien cargado para darle play a mi rol como profesional.Frente a mi, montones de papeles indican que esta semana sera ruda pero productiva y una gran hoja de Excel me saluda invitándome a sumergirme en ese laberinto de formulas de las que dependo.Empiezan a llover emails y conversaciones con clientes y proveedores.Mi jefe demanda mi presencia mas veces de las acostumbradas.
Miro el reloj y apenas son las 10.15 am.
Voy por mi segundo café de la mañana y siento que entra un mensaje a mi celular.Eres tu,preguntándome como estoy. Sonrío como lo haría un beduino ante el descubrimiento de un oasis en plena travesía. Te respondo que estoy bien, y pensando mucho en lo que vivimos este fin
de semana.
Me envías otro mensaje diciéndome que disfrutaste cada momento y que quisieras repetirlos ya ,que aun tienes grabado el olor de mi vagina y que en este momento quisieras lamerla y chuparla como si de una fruta paradisíaca se tratara.Suspiro añorando tus destrezas para conmigo,pero no puedo quedarme allí, debo trabajar.
De vuelta en mi escritorio trato de borrar la imagen de tu cabeza entre mis piernas explorando incesante mi clítoris,abriendo mis labios con tus dedos para meterme tu lengua inquieta y hacerla vibrar para arrancarme un orgasmo como solo tu sabes hacerlo.
Frente al teclado de mi computadora evito pensarte, pero mi vagina ardiente pareciera tener vida propia y continua humedeciéndose poco a poco de mis jugos calientes como un elixir que empieza a manar evocando tu lengua vivaz en ella.
Aprieto mis muslos , cruzo mis piernas buscando fuerza para controlarme pero surte efecto contrario y esa presión me agrada tanto que empiezo a realizarla ritmicamente, aun no se si de manera consciente... o no.
Te escribo diciéndote que no dejo de pensar en tu falo, en esa cabeza roja y brillante que calza perfectamente en mi cuca y que desearía chupar ahora hasta lograr sacarte toda la leche que puedes darme.Al escribirte siento como mis pechos se ponen duros y mis pezones arden como si pudiesen explotar en cualquier momento.Me imagino tu boca besándolos y mordiéndolos como si quisieras arrancármelos con tus dientes.
Continuo apretando mis muslos y siento como mi cuca empieza a expulsar mis jugos sin vergüenza como si de una mini cascada de lujuria se tratara dejándome muy húmeda y presta para ser penetrada.Decido enviarte un mensaje diciéndote lo mojada que me tiene el recordarte.
En mi mente hay retazos tuyos pegados con pasión y deseo,imágenes morbosas y censurables por otros mas no por mi pervertida interna que has amaestrado y que pasea orgullosa a tu lado. Casi de inmediato me respondes indicándome como podrías saciar tu sed con toda el agua que expulsa mi vagina ante tu presencia.
Siento que debo detenerme,debo concentrarme en mi trabajo,pero mi vagina que actúa por su cuenta continua mojada y pulsante, puedo sentir como exige ser atendida.Me levanto y me dirijo al baño con la intención de refrescarme un poco la cara que debía tener enrojecida por el deseo de que me cogieras a larga distancia.
En el baño, mis demonios internos empiezan a elucubrar en mi contra dejando afuera en la silla de mi escritorio a la profesional y encerrando en el baño a la hembra en un eterno celo en la que me has convertido.
Comienzo a tocarme los senos por encima de mi ropa mientras trato de olfatear tu perfume perdido en mi memoria.Desabrocho mi blusa y comienzo a tocarme los senos tirando suavemente pero firme de mis pezones duros que esperaban tu boca.Apoyo mi espalda contra la pared fria tratando de buscar de nuevo el control que no se si perdi o si juega a las escondidas pero esta hembra primitiva es mas grande que cualquier pudor y miedo.
Meto mi mano entre mi panty de encaje azul claro y mi vulva rosada pudiendo sentir toda mi humedad,tomo un poco de mis jugos con mis dedos y me los llevo a la boca chupando mi propio sabor. Abro mis piernas y me apoyo firmemente en mis tacones negros mientras escupo mis dedos y los vuelvo a llevar a mi clítoris donde comienzo un suave masaje circular como si fuese una gitana que quisiera conocer el futuro en una pequeña bola de cristal.
Empiezo a recordarte, a rememorar tu boca posada como un colibrí en mi vagina convertida en una flor de delicioso néctar. Me meto dos dedos tratando de evocar los tuyos que eficientemente entran y salen de mi en un rítmico afán y acuden directo a mi punto G donde se detienen a rascarlo como si fuese un gatito jugando con un estambre.
Mi respiración se entrecorta ante la imagen mental de tu huevo en mi boca...me fascina mamartelo y lo sabes.Tratando de materializarte me chupo los dedos de mi mano buscando esa sensación de tenerlo en mi lengua.Tu delicioso pene es mi adicción, sentirlo como roza mi paladar, sentir como vibra al lamer tus bolas,sostenerlo mientras expulsas liquido preseminal para ser recogido por mi lengua que lo ansia, y luego sentir tu leche caliente y deliciosa recorriendo mi garganta como veneno dulce hasta desaparecer en mi interior dejándome su sabor único, me hace pensar que eres mio aunque se que es una quimera.
Continuo en mi labor buscando ese orgasmo que necesito, metiéndome ahora tres dedos profunda y rápidamente en mi cuca imaginando como me follas sin piedad hasta que no puedo mas y te pido por favor que me dejes descansar,petición que solo logra excitarte mas para continuar demostrando tu instinto de macho salvaje.
Siento como viene el momento esperado mientras me froto el clítoris con una mano y con la otra me penetro evocando tus movimientos pélvicos rítmicos e imponentes. Muerdo mis labios tratando de controlar mis gemidos de placer y mis grititos orgasmicos diciéndote lo puta que soy contigo.
Siento que muero por unos segundos,sin respiración ni latidos del corazón. No escucho nada, no veo nada, soy una vagina que se contrae en un orgasmo dejando tras de si un chorro de sensaciones convertidas en un liquido que sale sin cesar de ella.
El olor de mi sexo invade el recinto como un perfume particular que (se) te atrae como un insecto a la luz.Respiro, deseando que estuvieses a mi lado para consentirme como siempre después de que haces lo que te da la gana conmigo.
Debo recuperarme,los demonios avergonzados de su mal comportamiento se repliegan y esconden acechantes esperando un signo de mi próximo momento de debilidad. Rápidamente reacomodo mi ropa, me veo al espejo y me reprocho haber dejado el control a esos bichitos,los regaño y les digo que estarán encerrados hasta que me de la gana a mi,de ahora en adelante tengo el control sobre ellos y permanecerán en claustro .
Trato de disimular mi estupor, seco mi frente y arreglo mi cabello ,salgo del baño en búsqueda de la profesional que soy y la encuentro avergonzada, sentadita justo donde los demonios la habían dejado.
Respiro profundo y me coloco de nuevo frente a mi computadora donde observo un mail tuyo diciéndome que no aguantas y que debes verme pronto,que esta noche tendremos una de nuestras citas de cybersexo pues a pesar de haber pasado un fin de semana increíble, me extrañas tanto que necesitas un poco mas de mi.
Justo en ese momento escucho reír a mis demonios pues saben que tu propuesta jamas podrá ser ignorada por mi ya que solo tu tienes la llave de su carcel y que esta noche de nuevo saldrán a divertirse.