Demasiado tímida para oponerme (41)

Demasiado tímida para oponerme (41)

Por Bajos Instintos 4

bajosinstintos4@hotmail.com

La imprevista y repentina desaparición de Julia N. ha causado estupefacción en los más diversos medios. Se están haciendo todas las especulaciones posibles: secuestro extorsivo, secuestro simple, secuestro seguido de violación, huída con un amante, incluso asesinato.

De secuestro extorsivo, aparentemente no se trata, ya que sus familiares no han recibido comunicación alguna de parte de los posibles raptores. La hipótesis de secuestro simple y secuestro seguido de violación, parecen más razonables. La mayoría de sus lectores apoyaron esas posibilidades, con el comentario de "¿por qué no se me ocurrió a mí?". La idea de una huída con un hipotético amante, fue rechazada de plano, un poco porque Julia era o es una mujer de probada fidelidad a su esposo, y otro poco por celos de parte de sus lectores que se mostraron indignados ante la idea, tildándola de injusta. En cuanto al asesinato, también fue rechazado de plano, considerando que hubiera sido un desperdicio.

El licenciado Luis Luis ha propuesto la hipótesis de que Julia se esté escondiendo bajo la apariencia de la actriz porno Tiffany Towers, y quiere contactar a la señorita Towers con el objeto de palparla. Se le ha dicho que la señora Julia es mucho más joven que la conocida estrella, aunque pudiera ser que tuvieran algún parecido. Pero el licenciado Luis Luis insiste en que, de poder contactar a miss Towers, le parecería imprescindible palparla. "Por las dudas", agrega. De cualquier modo se agradecerá a los lectores el envío de fotos o videos de la eminente actriz, ya que no se ha descartado completamente la hipótesis que la involucra. El mismo requerimiento se hace con respecto a otras actrices cuya belleza las haga susceptibles de una identificación positiva con la señora Julia.

El médico forense, al ser notificado del tema y la fama de la señora Julia, lamentó no poder acceder a su cuerpo para un cuidadoso exámen. Esta opinión ha tenido un consenso general entre todos aquellos que han seguido los relatos testimoniales de la inexplicablemente desaparecida dama.

El ministro de Justicia ha decidido intervenir en el caso, para lo cual pidió una colección impresa de los relatos de la serie "Demasiado tímida para oponerme" en los cuales nuestra heroína narra su incansable gesta en pro de la fidelidad femenina, y de la educación de los jóvenes para prevenirlos de los peligros de la lujuria. Pero después de un tiempo más que razonable para que los haya leído, se niega a devolverlos, alegando que los tiempos de la Justicia son lentos.

Su feligresa de quince años, también conocida como "Danielita", ha quedado desolada. "¿Ahora qué haré, qué haré?" se pregunta llena de lágrimas. Afortunadamente, su novio, los amigos de este, e incluso el padre, el hermanito, y algunos vecinos, están dispuestos a hacerle compañía y brindarle consuelo.

Con respecto a la Liga Confesional Femenina, de la cual Julia era su principal representante, la Iglesia aseveró desconocer su existencia. Pero el Padre Gonzalo, confesor de Julia, cree que sería una institución de imprescindible fundación, y se propuso para entrevistar candidatas.

Se convocó al conocido catedrático de la Lengua Española, Alfonso T. Cruz, para un examen estilístico de los relatos de Julia N. en busca de alguna pista, pero finalmente declinó la tarea con una valiente declaración que revela su condición de hombre probo: "No puedo analizar los escritos de esa serie de relatos. Me distraigo por el contenido, y termino masturbándome." Ojalá fueran muchos los académicos con una integridad como la suya.

Y esta es una observación dirigida muy especialmente a los funcionarios policiales y a los muchos jurisconsultos, psicólogos y médicos, que luego de conseguir los relatos fotocopiados, partieron rumbo a sus lugares, sin que se haya vuelto a saber de ellos.

Su amado esposo, Armando N., ha quedado desolado, como también sus compañeros de trabajo y familiares. Pero el afecto despertado por Julia no se detiene ahí. Su inexplicable desaparición ha afectado al encargado de su edificio, al doctor Martínez y sus hijos, en cuyo consultorio Julia desempeñaba un trabajo como recepcionista "Nadie recibía como ella" se lamenta el médico. También el plomero de su barrio expresó su pesar a los periodistas "Tenía las mejores cañerías que he conocido..."

Y así innumerables comentarios de conocidos que expresan su pena y desconcierto por la inesperada ausencia de una mujer que ha hecho sentir a todos cuantos la rodeaban, su afecto, sensibilidad, compasión y espíritu solidario. Sin que su espectacular y sensual belleza se interpusiera en su espíritu de ayuda al prójimo, sino todo lo contrario.

"Ella no podía ver a alguien necesitado, sin acudir en su socorro y aliviar su necesidad" es el comentario que resume el sentir general, y que por razones de espacio no podemos consignar aquí caso por caso.

Frente al revuelo causado por tan inesperado como brusco acontecimiento, sólo podemos estar al aguardo de noticias positivas que dejen este momento de cruel incertidumbre convertido en un recuerdo olvidable.

Entretanto rendimos el homenaje a una mujer cuya heroica lucha contra la infidelidad femenina dejará una huella imborrable en la memoria de cuantos la conocieron, aunque sólo fuera a través de sus escritos testimoniales.

En esta búsqueda intensiva de la comunidad, agradeceremos a los lectores el envío de noticias sobre el posible paradero de nuestra dama, incluyendo el envío de fotos de cualquier candidata que pareciera digna de una identificación positiva.

Y un último mensaje: ¡JULIA, DONDEQUIERA QUE ESTÉS, DANOS AUNQUE SEA UN INDICIO DE QUE ESTÁS BIEN Y DISFRUTANDO DE LA VIDA! ¡NOSOTROS, TUS AMIGOS Y ADMIRADORES, TE ESPERAMOS CON LA ESPERANZA DE PODER SEGUIR DÁNDOTE Y DÁNDOTE TODO NUESTRO APOYO!

Si tienes algún aporte que hacer a esta búsqueda no dudes en escribirnos a bajosinstintos4@hotmail.com , enviándonos fotos o cualquier otro elemento informativo que tengas.

Para los talleres virtuales de narrativa erótica no vaciles en escribirnos a la misma dirección, solicitándonos información.