Deliciosa tarde.
Un encuentro casual con un desconocido que se sintio atraido por mi escote mientras conducia, me hizo pasar una tarde deliciosa y dispuestos a repetirla una y mil veces.
Un día conducía de regreso a casa después de un día largo en la universidad, vivo aproximadamente a unos 40 minutos de ella, ese día desde que lo comencé me sentía caliente. Tengo senos grandes de talla 34D, una cintura marcada y buen trasero.
Cuando manejaba de regreso pude observar que mas de un hombre me volteaba a ver y no precisamente a los ojos, si no al escote, y era aun más notorio cuando únicamente me alcanzaban para ver y los más aventados para hacerme señas, cuando decidí jugar el juego de ellos, pero cambiando de victima, supe que sería muy sencillo lograr algo con aquellos que se notaban interesados. En un semáforo ocupe el lugar junto a una troca grande y muy lujosa, el conductor era un hombre grande de aproximadamente 45 años, al cual mire fijamente cuando noto mi mirada me vio y simplemente le sonreí, el semáforo cambio y arranque, el tardo un poco más, pero con una troca como esa no le fue difícil alcanzarme, cuando me alcanzo me hizo algunas señas, yo simplemente acelere más, nuevamente me alcanzo y las señas continuaban, me pidió que me orillara en la carretera, dude aproximadamente por unos 5 minutos, pero al final me decidí a orillarme, iba solo, pensé en no bajarme del vehículo solo la ventanilla y poner los seguros, de esa enorme troca se bajo un hombre de estatura media de 1.75 aproximadamente vaquero, vestía una camisa, unos jeans vaqueros y claro unas botas vaqueras. Se acercó a mi y me dijo:
-Hola hermosa, por que no te parabas, que haces tan solita?- Dijo mientras se recargaba en la ventana del vehículo.
-Hola pues vengo de la escuela.
Acto seguido nos presentamos y me pidió mi numero de teléfono, él me dijo que estaba casado que si no tenía problemas con ello, a lo que le conteste que no, el quedo de marcarme para vernos después.
Con el tiempo me marcaba, había ocasiones que durábamos hablando hasta 3 horas, me conto un poco de él y yo trataba de decirle lo menos posible de mi, las platicas se tornaron muy calientes hasta tener sexo telefónico, aun desconfiaba mucho, con el tiempo seguimos hablando hasta que un día concretamos la cita, yo le dije que desconfiaba mucho de ir con el, acordamos un trato, nos veríamos en un lugar donde yo quisiera, el iría a la hora acordada y que yo buscara un hotel donde me sintiera cómoda, días anteriores lo busque elegí uno a las orillas de la ciudad nos vimos en el centro y la dinámica se repitió, únicamente me estacione y no me baje, ese día me puse ropa interior sexi pequeña muy pequeña de abajo y un sujetador a juego con encaje negro semi-transparente unos tacones altos, una falda corta de tela y una camisa de vestir a juego.
Me vio, platicamos un rato tome confianza y bajé del vehículo, cuando me vio de pie me hizo dar un par de vueltas para verme bien y empezó a abrazarme, rosando mi trasero, cuando estuvimos de frente me abrazo y me pego bien a él, y me dio un beso muy caliente, mi boca estaba lo suficientemente preparada para ese tipo de besos que te calientan y te hacen querer tener sexo después de ellos.
Al término del beso me propuso ir a comer, le dije que tenía ganas de comerme otra cosa… Por lo que ambos estuvimos de acuerdo y después de estarnos cachondeando por un rato donde lo mas tentador era meter sus dedos entre mi escote o buscar pellizcar mis pezones, era lo que mas deseábamos, me dijo que nos fuéramos a donde planee y que él me iba a seguir en su troca.
Llegamos al lugar, pago la entrada, pedimos una habitación al fondo, pues no queríamos estar en la entrada donde pudiesen ver su troca o mi carro. Era un Motel lujoso la habitación tenía jacuzzi, un porche para dos autos y cochera eléctrica, una cama matrimonial, el lugar era muy grande.
Aparcamos en el lugar, cada quien bajo de su vehículo, el fue directo a cerrar la cochera, yo estaba bajando mi bolsa, cerré y nos vimos en las escaleras para subir al segundo piso, me coloque en el primer escalón y el estaba tras de mi, me hizo voltear, estábamos frente a frente ahí nos comenzamos a besar de nuevo, la calentura era más que inminente, empezó a tocarme descaradamente me desabrocho la camisa y le encanto el sujetador ya que tenia mis senos casi a la altura de su rostro, después empezó a meterme mano debajo de mi falda, acariciando mis piernas hasta llegar a mi vagina donde noto que llevaba puesta una tanga de encaje, se deleito tocándome mi trasero, dándome nalgadas, apretándolas entre sus manos.
Estaba más que extasiada de placer, en las escaleras me estaba retorciendo de gusto, comencé a gemir y más cuando acaricio mis pezones por encima del sujetador, llevándoselos a la boca y mordiéndolos suavemente.
Decidí que ya no podía estar más de pie, por lo que lo aparte de mí y le suplique que subiéramos, estaba demasiado caliente, como para estar toqueteándonos únicamente quería algo más. Cuando entramos a la habitación entre yo primero después el detrás de mi, cuando cerro la puerta me senté en un pequeño sillón a los pies de la cama, cruzando las piernas, puso el seguro en la puerta y me acompaño, se sentó a un lado mio, aun con la camisa abierta, comenzó a tocarme con sus dedos el contorno que sobresalía de mi seo en el sujetador, mientras hacia esto me lance a besar boca, me encanto como besa ese hombre, tan caliente y excitante.
Me pare de ese asiento, frente a él, comencé a quitarme la camisa, luego le di la espalda, baje el cierre de la falda, me incline a 90º dándole una visión de mi trasero, baje mi falda y deje al descubierto mi trasero con una tanga que nada cubría, cuando hice esto, el me dio una nalgada que me hizo gritar un poco de dolor y mas de placer, después de ello me puse de pie y frente a él, abrió sus piernas y me dispuse a poner un pie a un costado de su pierna, mostrándole el frente de mi tanga y mi vagina, el cual casi de inmediato empezó a acariciar buscando mi clítoris logrando excitarme aún más…
Después baje mi pierna y me dispuse a desabrocharle el pantalón, pude notar que su erección era mas que obvia, moví un poco la trusa que llevaba puesta color negro dejando al descubierto su pene, grande a mi parecer, aproximadamente unos 25 cm ambas manos no alcanzaban a cubrirlo en su totalidad, mientras lo masturbaba con mis manos me tomo de la cabeza y me hizo inclinarme hasta llegar a su miembro, únicamente voltee a verlo y reí, acerque mi lengua a la punta de su pene, y comencé a lamerla.
Le di unos cuantos besos y me dispuse a meterla toda de un solo golpe a mi boca, claro no logro entrar toda, pero si lo hice gemir de placer al escucharlo gozar.
-Mi reina, que bien lo haces, métetela todita…
Me decía mientras levantaba la vista y lo veía con su pene en mi boca. Con una de mis manos me dispuse a tomar sus testículos que aun estaban presos en la ropa interior, duramos unos 10 minutos, me sorprendió que no terminara aun, por lo que me senté en sus piernas frente a él, tenia las piernas abiertas así que su pene quedo en la entrada de mi vagina donde no hacia mas que frotarme a él.
Mientras estábamos así me desabrocho mi sostén dejando mis senos libres, con mis pezones erectos buscando placer, se limito a pellizcarlos con sus manos y a lamerlos con su boca… mientras estaba así, una de sus manos llego a mi trasero, dándome nalgadas que hacían que me pegara mas por placer, mientras hacia esto comenzó a recorrer mi tanga con sus dedos, cuando sentí un jalón que me provoco algo de dolor en mi vagina, me arranco la tanga de un solo golpe, como estaba sentada, me tomo del trasero, se levanto y me llevo a la cama donde me dejo caer ya completamente desnuda, empecé a jugar con mi vagina y mis dedos, mientras se desnudaba.
La cama era alta, mientras estaba acostada y ya desnudos los dos me jalo de las piernas colocándome en la orilla de la cama levantando mis piernas para ponerlas en sus hombros:
-Te va a gustar mi verga ya lo veras, no vas a querer que te la saque…
Dicho esto se puso de pie en la orilla de la cama y coloco la cabeza de su pene en la entrada de mi vagina y despacito empezó a empujar hacia adentro, cuando tenia una parte dentro de mi, se dejo ir, la metió toda de un solo golpe haciéndome gritar en esta posición me empezó a acariciar mis pechos golpeándolos levemente haciendo que mis pezones reaccionaran mientras estaba en la gloria, me dedique a retorcerme de placer y gusto…
Estaba acariciándome mi clítoris mientras me daban unas embestidas deliciosas, no soportaba no gemir de placer, era un extasis total, cuando mi orgasmo estaba llegando, me dijo algo que me asusto pero me calentó aun más:
-Como mi puta que eres y serás toma mi leche… quiero que te embaraces de mi…
Después de decir eso únicamente acelere el ritmo de mis dedos acariciando mi clítoris logrando un orgasmo mas que delicioso… con el cual quede mas que rendida, no paso un minuto mientras me seguía penetrando sentí unos chorros de semen inundar mi vagina.
No temí por sus palabras puesto que me cuido, y en esos días termine mi ciclo menstrual por lo que me encanto, siempre me ha gustado tener sexo sin protección, me encanta el olor a semen en mi vagina…
Esta es la primera parte de una tarde muy deliciosa, espero que me den su opinión, me despido diciéndoles que es una historia verídica.
Besos U’