Delicias Canarias

Aroa después de una sesión continua de sexo llega a la conclusión de que tiene entre sus manos delicias canarias.

Delicias canarias

Hola amigos de todorelatos, me llamo Daniel y este es mi segundo relato el primero "iniciación con un simple masturbador" fue una simple introducción a este mundo de sexo y perversión..

Estoy viviendo junto con mi mujer Aroa desde hace cinco años, yo tengo 30 años y mi físico es resultón porque me gusta hacer ejercicio, mis ojos pardos y mi culo bien duro gracias a los muchos partidos de squash hace que me mantenga en el tema del ligue, mientras mi Aroa tiene 28 añitos y ha descubierto por si misma la diversidad de sexo que ella puede gozar, mide 1.70, morena, pelo rizado, ojos marrones, sus pechos es una golosina muy bien puesta pero lo que realzo siempre es el mismo punto su señor culazo, porque lo tiene duro y respingón, una delicia para el buen amante.

Tras la primera experiencia anal y oral (acabando dentro), mi mujer se transformo no había día que no quisiera follar, no había día que no jugaba con su aparatito masturbador que tanta lujuria le somete, desde ese día va mucho más provocativa por la calle, lo que a mi me enloquece.

Mi fin era tener relaciones liberales y que ella aceptase y poder hacer un intercambio de parejas o trios, eso me ponía a mil, las primeras veces que follabamos cuando el climax alcanzaba su plenitud, le preguntaba si no quería sentir otra polla pero de verdad no el masturbador, negaciones encontré hasta que de repente fue cambiando su idea, me pedía, me rogaba que se lo dijera:

Cariño te gustaría que otro hombre estuviese con nosotros y pudieras tener dos buenas pollas?

Si mi amor, lo quiero, lo quiero

Cariño te complaceré algún día

Ahhhh, si por favor

Todo esto transcurría mientras llegaba el verano y las mujeres nos despierta los sentimientos que tenemos entre las piernas vistiéndose con muy poquita ropa y Aroa no era diferente, su indumentaria consistía en faldas que mas que faldas parecían cinturones y encima que decir con el culazo que tiene se le veía hasta el alma, ella esperaba que yo le dijera algo y yo al contrario deseoso de que los hombres la piropeasen, que era lo que pasaba realmente.

Entre los cambios que estaban habiendo en nuestras vidas, sexo oral, anal y deseos de futuros intercambios, nos fuimos un viernes a la playa, nosotros vivimos en Las Islas Canarias y nuestras playas son fantásticas, y dentro de estas playas hay muchas que son nudistas y era donde últimamente estábamos yendo sin antes no tener problemas con Aroa ya que le daba corte.

Pues, llegamos y no hubo que decirle nada sobre la marcha, me encontré con Aroa en pelota picada, esbocé una sonrisa como pensando lo guarrilla que se estaba haciendo ella, que a mi me encantaba, ese día nos pusimos en la cala mas alejada donde prácticamente no había nadie, pasaron como media hora y nos fuimos a bañar, y entre el jugueteo, el calor y lo buena que esta mi hembra, la cogí y le dije "te voy a meter una delicia canaria", en lo que ella abrió sus piernas y recibió mi polla dura, la embestida duró poco porque los dos estabamos muy excitados, entonces al terminar y salir del mar, nos dimos cuenta que a dos metros de nosotros habían dos toallas vacías, los propietarios no se encontraban, dejamos seguir, me fumé un cigarro y mientras miraba el paisaje que tenía alrededor.

Cuando veo dos figuras acercarse, eran Alex y Sheila, una pareja de alemanes que estaban pasando unas vacaciones en la isla y que hablaban muy bien el español. El era un tipo agradable, simpático, un cuerpo cuidado y con una herramienta que tendría que medir un poco mas que la mía sobre 21 cms pero la mía es un poco mas gruesa, mientras Sheila son de esas rubias coquetas, no era fea ni muy guapa, pero un cuerpo de vicio tirando a maciza con un par de tetas impresionante alrededor de 100-105 y un culo aceptable, claro, si lo comparo con el de mi mujer.

Entonces he de decir que no nos conociamos de nada, como habíamos traído las palas empezamos a jugar con el bamboleo del cuerpo de Aroa y de vez en cuando miraba para la pareja y Alex no despegaba vista de mi mujer, lo que intentaba yo era que mi erección que por momentos era ostensible no me fuera hacer ningún feo, decidí terminar la partida e ir a darme un buen baño, en lo que Alex decidió ir hasta Aroa y decirle si quería jugar con él, mi mujer no se lo pensó ni un momento y cuando llegué me encontré a los dos jugando, yo la sonreí y me fui a la toalla, entonces cuando me iba a echar un cigarro llega Sheila y me pregunta si le dejo fuego para ella, yo le enciendo el cigarrillo, se presenta, y se sienta en la toalla de Aroa, ahora el extrañado soy yo.

No te habrás mosqueado porque Alex jugara con tu mujer

Para nada Aroa ya es mayorcita, para hacer y deshacer lo que quiera

Empezamos a hablar y a contarnos nuestras vidas hasta que:

Me pongo a jugar con alguien y tu ya intentas olvidarte de mí

Se hace un silencio –

Ja ja ja- empezó a reirse Aroa- Hola que tal, soy Aroa y tú

Soy Sheila y él es mi marido Alex y estamos pasando unas lindas vacaciones en vuestra tierra.

Ya te digo – dije yo

¿Te animas y echamos unas palas? – me dijo Alex

No tienes nada que hacer – le desafié

Toda la tarde estuvimos hablando, charlando, riendo, lo pasamos fenomenal, hasta que terminando el día Alex y yo nos fuimos a bañar y cuando estamos solos me dice:

Perdona Dani te podría ser sincero?

Si hombre como no

Tu mujer esta para comer con pan, que nalgas tan exuberantes tiene

Joder, creía que ibas a ser sincero, pero no tanto, de todas manera, dejame decirte que tu tienes una macizorra, que está para lamer y lamer todo el día

Claro, realmente hemos venido aquí para probar el tema swinger

Ah, intercambios?

Sí y cuando os vimos ….. tu ya me entiendes

Sí, por supuesto a mi me pasa un poco lo tuyo estoy deseoso de tener ese tipo de relaciones pero no sabía como

Vale que te parece esta noche, quedamos a cenar a ver si surge algo

Perfecto

Salimos del mar, le comentamos a las chica lo de la cena les pareció muy bien y nos despedimos, tras darnos los números del móvil.

Yendo para casa le interrogaba a mi mujer que le había parecido la pareja, ella me decía que muy bien, muy simpático, y entre que ella me hablaba yo le pase un dedo por su raja y comprobé que estaba mojada:

Pero Aroa, estás cachonda

Bueno, si, un poquito

Te dislumbró el paquete de Alex

Está buenisimo, pero lo peor no fue eso hubo algo de Sheila que me calentaba de sobremanera

Joder, mira con la niña

¿Quieres que esta noche probemos algo?

No se, dejalo pasar, ya se vera

Yo, por mis adentros decía "esta noche sexo del bueno"

Por la noche nos llamamos y quedamos en un lindo restaurante para poder cenar, yo me puse cómodo con unos pantalones fresquitos, una camisa suelta y unos nauticos, mientras mi mujer iba espectacular, se alizó los pelos, se puso una de esas faldas que por un milimetro no se le veía el tanga de hilos y una camisa vaporosa que dejaba a la intuición del huésped sus bellos pechos, junto con unas sandalias de aguja.

Cuando llegamos al restaurante por casi me da un telele, Alex iba muy cordial, pero es que Sheila iba majestuosa, aparte de las sandalias de aguja, que es un poco mi fetiche, llevaban un pantalón de lycra que se pegaba por todo esos muslos, dejando bien marcado su culo y su raja y un top finísimo que se notaba esos pezones oscuro a tres mil leguas, nos dimos los besos oportunos y me di cuenta que el de Alex y Aroa fue muy cerca de la comisura de los labios, cenamos muy bien, hablamos de diversos temas y también porque no del sexo, todo con unas buenas copas de vino de la tierra y al finalizar unos licores, que nos subieron todavía más el tono.

De ahí decidimos irnos a un pub, donde había buena música y un ambiente agradable, no llevábamos cinco minutos cuando Alex sacó a bailar a mi mujer, como me puse al verles bailar sus dos figuras se unieron al unísolo mientas Sheila me hablaba cada vez mas cerca del oido, en una de estas que hablaba con ella miré haber que estaban haciendo los tortolitos y no los veía, entonces cogí a Sheila y la llevé a bailar, literalmente me estaba comiendo con los ojos pero mi interes prioritario era saber que estaba haciendo Aroa, cuando llego a la parte más oscura de la pista y los veo besandose y acariciandose como si la vida de ellos fuera a terminarse, yo me puse cachondo a mas no poder, ni una pisca de celos (bueno, un poquito si), pero veía la escena ella aprisionada por esos brazos del teutón y yo con una pedazo de rubia sin igual, en eso llega Alex y Aroa, tras vernos mutuamente lo que estabamos haciendo y decidimos irnos a un sitio mas tranquilo, al apartamento de ellos.

Llegamos y sin remediar aspecto cada pareja se empiezan a desnudar, ellos tenían un salón muy amplio pues en ese habitáculo Alex empezó a lamer a Aroa mientras escuchaba sus gemidos yo le quité el pantalón a Sheila y su coño estaba rasuradito como el de mi mujer lo único era un pequeño triangulito de cortesía. Entonces me puse entre sus piernas y le comí todo el clítoris y sus labios que delicia de mujer:

Sigue Dani me encanta – mientras me arañaba la espalda

Sí, te gusta, no voy a para

Dejame comertela, para que sepas como se lame un helado como el tuyo

Siiiiii – era una fricción entre mi polla y su boca que me dejaba extasiado

Mientras la otra pareja estaba a un metro nuestro y Sheila cada vez se acercaba más a mi mujer, hasta que le empieza a tocar un pecho, ella se da cuenta y deja a Alex y va directa a ella, se dan un beso que solo recordarlo me estremezco, se colocan en posición de 69 y empiezan a gozar a restregarse sus pechos, Sheila al ver el precioso culo de mi mujer empieza a lamerle el ano y Alex va a la comoda y saca un instrumento a doble banda ella lo coge y empieza metiendoselo por el coño a Aroa y cuando está muy mojado se lo introduce por el ano, Aroa no sabe que hacer, grita , gime, serie de sensaciones se apodera de ella.

En ese momento decidimos coger la situación los hombres, cogemos cada unos a la chica del acompañante y a cuatro patas al unísolo empieza un saca y mete, Sheila se estremece de las embestidas que le meto mientras Aroa mientras esta siendo follada está cogiendo los huevos de Alex, haciendo que él descargue un gran chorro de leche, mi mujer se la saca, se da la vuelta y empieza a lamersela para limpiar cualquier tipo de resto de semen, cuando esto al fin termina, le pone el coño en la cara de Sheila para que esta se lo coma mientras yo la culeo por detrás, Alex reacciona se pone por debajo de su mujer y se la mete por el coño, que sensación mas estupenda le tenemos los dos agujeros bien tapados y no para de comerle el coño a mi mujer, mientras Aroa dice:

Cuando me toca a mi?

Ahora mi amor- en eso que Sheila pega un grito de placer y llega a no se que orgasmo, salimos de ahí cogemos a Aroa y la enfundamos ahora soy yo quien se la folla por el coño y Alex la culea

Que cariño, rico?

Si mi amor, no pareis

Que dilatado tiene el culo la muy puta – dice alex

Siiiii, siiii, no pareis – así estuvimos hasta que los dos estuvimos a punto de corrernos, las sacamos y se la metimos a cada una en la boca hasta que nos corrimos y se lo tragaron todito

Nos quedamos acostado y alex nos replico los exquisitos que son las delicias canarias.

A las dos horas después de recuperarnos y dar otro repaso, nos despedimos, nos fuimos a casa no antes de darnos nuestras direcciones.

Esta solo fue la primera vez que intercambiamos placeres, algo realmente maravilloso, los siguientes encuentros pertenecen a próximas veces amigos

NOTA: Les agradecería que me pudiesen enviar sus impresiones, gracias.